Emily
Algo sorpresivo sucedió en la penúltima semana de vacaciones. Matteo organizó un viaje a casa de mis padres. ¿Recuerdan que dijo que pasarían años para las presentaciones formales? Bueno, al parecer un mes fue más que suficiente. Dice que quiere agradecerle personalmente a mi padre por lo que hizo.
Además invitó a Noah, Emma y Liam. Dice que ya habló con Eric y que él habló con mis padres para que nos reciban.
— No creo que sea una buena idea mi amor, mi hermana estará sobre ti y Paul estará cerca, y ya no quiero más problemas — le digo luego de que me informó que saldremos mañana por la mañana.
Ya es de tarde, no tengo mucho tiempo para hacer las maletas pero tampoco llevaré tantas cosas. Los últimos rayos de sol se cuelan por la ventana así que me acerco a abrir las cortinas para que se ilumine nuestra sala.
Los chicos no quisieron volver a vivir a su casa luego de lo que pasó con su padre allí, así que mientras su nueva casa está lista viven en un departamento en el centro, pero Matteo pasa más tiempo aquí en mi casa que allí.
— Tu hermana no me molestará, ella y yo ya nos hemos entendido.
— ¿En qué momento de la vida sucedió eso? — junto mis cejas intentando pensar y no se me ocurre nada.
— El día de tu cumpleaños, ella y yo tuvimos una conversación bastante seria y un poco emotiva.
Me río muy fuerte pero él se mantiene serio.
— ¿Tú y Elizabeth? ¿Emotiva? Sí, sí, claro, claro.
— De verdad. Olivia le dijo que es una acosadora y ella se sintió mal, porque está enamorada de Liam.
— Ella se enamora de todo lo que tenga un pene y unos buenos abdominales, no la tomes en serio.
Matteo se mantiene sin ni una pequeña sonrisa, él está hablando muy en serio así que dejo de reír.
— Yo le creo, lucía muy sincera, no quedaba ni rastro de la mala copia de Regina George que suele mostrar.
Vuelvo a reír, es increíble que él haya visto esa película, si hasta me lo puedo imaginar.
Entonces mi cerebro hace todas las conexiones.
— ¡Por eso lo llevas a Liam! Quieres ayudarla…
— Bueno, yo creo que a él también le gusta.
— ¡Claro que le gusta! ¡Pero no pueden estar juntos! Ella no es… — me detengo a mitad de la frase, Matteo me mira y sus ojos verdes me empujan a que piense un poco lo que estoy diciendo — ¡La mierda! Soy el Noah de su historia…
— Eras, ya no lo serás.
Tiene razón, no me interpondré en lo que Liam decida jamás. Y si ella le hace daño entonces estaré allí para abrazarlo como él lo hizo conmigo.
— ¿Por qué la ayudas? — Matteo se encoje de hombros — No, dímelo. Porque organizas un super viaje solo por ayudar a mi hermana, y eso es raro.
— Es que siento que ella ocupa mi lugar en esta historia. Que es mejor de lo que puede mostrar — hace una pausa y me mira a los ojos —. Además no lo hago por ella, lo hago por ti.
Mis cejas se juntan en confusión.
— ¿Por mí?
— Es que tu hermana es la única traba que tienes en la vida, eso te mantiene lejos de tu familia y siento que tal vez si te entendieras con ella serías más feliz, y yo quiero que seas feliz.
Él es tan lindo, lo amo tanto, me duele tanto guardarle este secreto…
— Te amo, eres lo mejor que me ha pasado en la vida — rodea mi cintura con sus manos y junta nuestros cuerpos.
— Que poética — se burla con una sonrisa de lado.
Ruedo mis ojos alejándome de él y dándome la vuelta.
— Ya, te haces el duro pero sin mí no sabes ni dónde estás parado.
Vuelve a tomarme por la cintura y en un giro hace que nuestros cuerpos vuelvan a estar pegados, nuestras narices se rozan, y él sonríe.
— Te equivocas, puedo sobrevivir perfectamente sin ti, pero no quiero hacerlo, todo es más bonito contigo.
— ¡Ja! ¿Quién es el poético ahora? — suelta mi cintura y da un paso hacia atrás.
— Si te burlas no te volveré a decir algo bonito en mi vida, y sabes que es verdad.
Tomo su rostro en mis manos y lo veo con ternura.
— Lo siento, ven aquí chico duro, yo sé cómo ablandarte — junto nuestros labios en un beso bastante intenso, pero nos separamos cuando sentimos la puerta.
Es Liam.
Creo que necesito hablar con él.
Matteo lo entiende así que se va a mi habitación a esperarme allí.
— ¿Pasa algo? — pregunta con sus ojos cansados, viene de pasar el día en el hogar.
— Sí, tú y yo tendríamos que hablar de algo — se deja caer en el sofá y me mira curioso.
— ¿Frijolito? — suelto una pequeña risa, ese es su código para hablar del bebé, pero rápidamente niego con la cabeza.
— Mi hermana.
— ¿Qué te ha hecho ahora? — suelta el aire de sus pulmones con frustración y rasca sus ojos.
— Nada, es sobre ti, y sobre ella, es que no sé cómo decirlo.
Él no dice nada, nunca hemos hablado de esto porque los dos nos estábamos haciendo los tontos. Él sabe que no puede mentirme, y yo no quería aceptar que esta es la realidad.
— Yo sé que ella te gusta — él abre la boca para contradecirme pero lo interrumpo —. No lo niegues, yo sé que te ha gustado desde antes de que ellos se mudaran.
— Me gustaba cuando era más pequeño, pero no me gusta en lo que se transformó ahora.
— No, tú no quieres que ella te guste porque me ha hecho cosas malas, no por lo que ella es. Eres como Noah, te gusta esa clase de chica que se lleva el mundo por delante sin importarle nada, yo lo he sabido desde siempre y tú sabes que es así.
Liam evita mi mirada y suspira.
— Bueno, supongamos que tienes razón ¿Qué con eso?
— Que te olvides de mí, mi historia con ella no tiene que interferir en tu vida. Yo no he sido una santa, yo también le he hecho cosas malas, tú lo sabes, y resolveré mis asuntos con ella como pueda. Pero tú, no tienes que estar en medio, eres libre de acercarte a ella sin culpa, si hay alguien en este mundo que puede descongelar su corazón, ese eres tú.
— No lo sé Em, no es tan fácil, creo que prefiero que las cosas se queden así.
— Lo que decidas, siempre nos tendrás — su mano viaja a mi estómago y sonríe con dulzura.
Él será el padrino, ya lo he decidido, si Matteo no está de acuerdo que se joda.
Al otro día a las siete de la mañana estamos todos en la camioneta de Liam, es la más amplia y así vamos en un solo vehículo.
— No conduciré, es demasiado temprano, solo dormiré todo el camino — protesta Matteo rascando sus ojos, me costó mucho sacarlo de la cama.
— Yo lo haré, no seas dramático, solo es una hora hasta allí — se burla Noah que es el único que no bosteza ni se queja.
Ni siquiera ha encendido el motor y Matteo ya está durmiendo. Desearía tener su poder, no estoy durmiendo muy bien últimamente, el secreto que guardo me tortura noche y día.
— No estés nervioso, todo estará bien — le digo a Liam y Emma se voltea rápidamente.
— ¿Por qué estaría nervioso? — sus ojos curiosos van de Liam a mí una y otra vez.
— A él le gusta mi hermana — lo delato sin dudar.
— ¡Se lo dijiste! — exclama Noah sorprendido.
— ¿Tú lo sabías? — Emma y yo hablamos a la vez.
Noah muerde su labio inferior y bufa.
— Claro que lo sé, soy su mejor amigo, y él no me guarda secretos a diferencia de otras — sus ojos viajan a mí y le doy un pequeño golpe en el hombro.
— Ya, no hagan drama, solo dije que es linda, nada más — Noah y yo nos reímos, hasta que finalmente Liam también lo hace.
Mis padres nos esperan con mucha ansiedad, y no dudan ni un segundo en estrujarme entre los dos en cuanto cruzo la puerta. Estoy nerviosa, quiero que conozcan a Matteo, pero también sé que él no es muy sociable y eso me pone nerviosa, no sé cómo irá todo.
— Mi bebé, estás tan bonita, parece que hace años que no te veo — mi madre se emociona y sonrío, la he extrañado mucho, desde que tengo a este pequeño frijolito en mi panza he pensado mucho en ella.
— Lo siento — murmuro y es verdad.
Los chicos se han quedado un paso por detrás, Liam es el primero en acercarse, mis padres lo abrazan como si fuera su hijo, ellos lo quieren mucho, saben cuánto me cuida.
— Emily dice que saliste muy bien en tu segundo año en la universidad — le dice mi padre palmeando su hombro.
— Así es, tuve un promedio perfecto y adelanté cuatro asignaturas del próximo año. Espero poder graduarme este mismo año, señor.
— ¿Señor? ¡Vamos Liam! Te dicho mil veces que me llames Eugenio.
Los ojos de mi madre miran curiosos a mis espaldas, está ansiosa por llegar al momento que está esperando desde que le dije a mi padre que estoy con Matteo.
— Ven — murmuro dándome media vuelta y estirando mi mano hacia él.
Matteo luce completamente tranquilo, yo siento que mi corazón se sube hasta mi garganta. Toma mi mano y da un par de pasos hacia adelante para pararse a mi lado.
— Él es Matteo, es mi novio — listo, lo dije, todos lo sabemos pero todos estaban esperando que lo diga —. Ellos son mis padres, Eugenio y Julia.
— Hola muchacho, bienvenido a la familia — dice mi padre palmeando su espalda.
Eso es demasiado, llevo un mes saliendo con él y ya lo hacen parte de la familia, pero bueno, mis padres son así, solo quieren vernos felices. Además, para mi padre saber que Matteo gasta su dinero en el hogar significó mucho.
Matteo les da una sonrisa completamente encantadora, él sabe perfectamente como caer bien, es encantador por naturaleza, fui una tonta al subestimarlo.
— Gracias señor, quería agradecerle personalmente por la ayuda que me dio.
— Llámame Eugenio, y no es nada, lo que tú has hecho por mi hija es mucho más que eso, y mira, si hasta la has traído a casa luego de seis meses.
— No lo crea, ella estaba muy feliz de venir. Lo que sucede es que ahora somos dos al frente del hogar, ella pasa mucho tiempo allí y desempeña muchas tareas.
Mi padre lo toma por el hombro y se lo lleva lentamente.
— Me gustaría que me contaras más sobre el hogar, Emily solo lo mencionó pero ¿Cómo funciona?
No me preocupa que ellos hablen a solas, mi padre es muy agradable y ubicado, así que me quedo con mi mamá.
— ¡Míralo! Si no me dejó ni decir una palabra — se queja meneando la cabeza.
— Tendrás tiempo de hablar con él, aunque las palabras no son lo suyo.
Mi madre se fija en Noah por primera vez desde que llegó y se acerca a él para abrazarlo.
— ¡Como has crecido! Siempre tan serio, sonríe un poco. ¿Quién es la bella chica que te acompaña?
Noah sonríe con confianza.
— ¿Cómo estás Julia? Ella es Emma, es mi novia.
— Y también es mi mejor amiga — digo yo.
La verdad es que este último mes me he pasado la mitad de mis días con ella, más de una vez estuve a punto de contarle sobre el bebé, pero me detuve por esta tonta promesa que tiene con Noah de no mentirse.
Nos entendemos a la perfección, sin falsedades, sin hipocresías, sabemos lo que somos y nos queremos así.
Al igual que con Noah y Liam, pero sinceramente nunca pensé que podía formar ese tipo de amistad con una chica.
— Hola — saluda Emma con simpatía.
— Siéntanse en su casa — dice mi madre pero es interrumpida por alguien bajando las escaleras.
¿Uno de mis hermanos? No, el idiota de Paul.
— Buenos días, no estaba enterado de la reunión familiar — mi madre se ve un poco molesta, ellos no quieren a Paul, pero siempre aceptarán lo que sus hijos decidan.
Liam se ve molesto, Noah también, Emma aún sonríe, como si estuviera planeando algo en su retorcida cabeza.
Me voy sin saludar, si mi hermana está enamorada de Liam como dice Matteo tendrá que terminar con este infeliz.
Eric debe dormir aun, él nunca se levanta temprano, pero seguro Ethan está en el jardín del fondo, él desayuna allí en soledad todas las mañanas.
— Hola idiota — digo con una sonrisa y él se sobresalta.
—Ah, eres tú — dice sin mucha emoción.
¿Ustedes creen que a Matteo no le agradan las palabras? Eso es porque no conocen a Ethan, creo que no he tenido una conversación con él de más de cinco minutos en años.
Lo envuelvo con mis brazos y él se resiste un poco.
— Yo también te he extrañado. Sobre todo nuestras muy interesantes conversaciones.
— Ajá, sal, no seas fastidiosa. La última vez que te vi me trataste mal.
Eso fue en mi cumpleaños, cuando él quiso intimidar a Matteo.
— Lo siento bebito, sabes que te amo.
No me pone atención, sus ojos se posan en Emma, que sale al jardín a buscarme, conozco esa mirada, no es algo bueno.
— ¿Quién es ella?
— ¡No! ¡Ni lo sueñes! Es la novia de Noah, si te haces el chico irresistible solo te pateará en las pelotas, a ella no le importa nada.
— Ya veremos… — murmura con una sonrisa.
Alerta de problemas, le dije a Matteo que esto no era buena idea.
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Buenos días gente bella ❤️
Hoy les traigo un bonito y tierno capítulo, pero lamento informarles que es el último feliz. El capítulo de mañana se llama "Problemas" y es donde nuestra segunda cuota de drama comienza.
¿Qué sucederá?
Dejen sus apuestas aquí.
¿Qué piensan de Liam y Elizabeth? Si me preguntan a mí, yo creo que nuestro bebé más amado se merece más que esto.
El capítulo de hoy está dedicado a ArtFearless nuevamente, porque también ganó el trivia. Bien hecho bella ❤️
Síganme en Instagram, allí me gusta burlarme de ustedes, digo, jugar con ustedes.
@ineskyblue
Los quiero ♥️
Besos, mil besitos 💋