Write about us.

By imaph0enix

134K 6.1K 591

Él no buscaba el amor… ¿Y qué si un día llega alguien? ¿Y qué pasa si no es lo que esperaba? ¿Será lo suficie... More

Write about us.
Capítulo Uno.
Capítulo Dos.
Capítulo Tres.
aviso
Capítulo Cuatro.
Capítulo Cinco.
ñiñiñi no me odien porfa
Capítulo Seis.
Capítulo Siete.
Capítulo Ocho.
Capítulo Nueve.
Capítulo Diez.
Capítulo Once.
<3
Capítulo Doce.
Capítulo Trece.
Año Nuevo ♡
Capítulo Catorce.
Capítulo Quince.
Capítulo Dieciséis.
Capítulo Diecisiete.
Capítulo Dieciocho.
Capítulo Diecinueve.
Capítulo Veinte.
Capítulo Veintiuno.
URGENTE
Capítulo Veintidós.
Capítulo Veintitrés.
Capítulo Veinticuatro.
♡ Preguntas ♡
Capítulo Veinticinco.
Capítulo Veintiséis.
Capítulo Veintisiete.
Capítulo Veintiocho.
Personajes ♡
Capítulo Veintinueve.
Capítulo Treinta.
Capítulo Treinta y uno.
Capítulo Treinta y dos.
Capítulo Treinta y tres.
Capítulo Treinta y cuatro.
Promocionando.
Capítulo Treinta y cinco.
Capítulo Treinta y seis.
No es capítulo.
Capítulo Treinta y siete.
Capítulo Treinta y nueve.
Capítulo Cuarenta.
Capítulo Cuarenta y uno.
Capítulo Cuarenta y dos.
Capítulo Cuarenta y tres.
Capítulo Cuarenta y cuatro.
Capítulo Cuarenta y Cinco.
Epílogo.
Nota de autora.

Capítulo Treinta y ocho.

1.4K 86 34
By imaph0enix

Primero que nada: Los extrañé mucho :(.

Y pues nada, aquí tienen este capítulo, yo creo que fue el más díficil que he escrito en todo este tiempo porque me dolió como no tienen idea, y perdonenme por no haber subido en tanto tiempo pero simplemente estaba bloqueada :( En fin, espero que les guste y que no me odien tanto... Les mando un beso y no se olviden de comentar y votar. Voy a intentar subir el próximo capítulo lo más pronto posible

Seis meses después.

Los hospitales no eran algo que le agradara mucho a Niall, sin embargo tenía que estar ahí justo en este momento. Llevaban esperando un poco más de tres horas, pero simplemente no había noticias, ni buenas ni malas. El doctor le había dicho a Joseph que el parto podía complicarse, debido a que el cuerpo de Zoey no estaba adaptándose al cambio y tendrían que hacer una operación para sacar al bebé. Se suponía que Abril era un mes bueno para el mundo, estaba la primavera, dulces, pascua, vacaciones. Pero los chicos no podían dejar de estar asustados por la vida de Zoey, o del bebé.

Liam se acercó hacia Niall con dos cafés en las manos y le entregó uno a Niall, tomando asiento justo a su lado. Niall le sonrió ligeramente y después de darle un trago a su café, se recostó en el hombro de Liam. Zoey llevaba ya 12 horas en trabajo de parto, cuando el doctor decidió que sería mejor hacer una cesárea. Joseph estaba más que asustado y los chicos habían decidido que sería bueno ir a apoyarlo por si cualquier cosa salía mal.

Harry y Louis se apretaban las manos para evitar pasar la frustración a sus caras y hacer que Joseph tuviera un poco más de miedo.  Era algo complicado, realmente. Porque no sabes que decir y no puedes hacer promesas cuando no sabes lo que podría pasar.

Niall vio a Zayn levantarse de su incómodo asiento y se dio cuenta que Joseph acababa de llegar a la sala de espera con cara pálida e impactado.

-Es una niña… - fue lo único que murmuró y después se soltó en llanto.

-Eso es… genial. ¿Qué  pasa?- preguntó Zayn mientras lo abrazaba por los hombros. Los demás también se levantaron para prestar atención a su amigo.

-Es preciosa pero, Zoey… - sollozó y James intentó calmarlo. – Zoey perdió mucha sangre y me pidieron que saliera de ahí. No quería… yo… - sollozaba mientras los demás guardaban silencio. Era dolorosa la escena. El inicio de una vida y probablemente el final de otra. Los chicos intentaban mantenerse fuertes por su amigo, pero realmente, los estaba matando.

-Joe, si hay algo que podamos hacer por ustedes, dinos amigo… - dijo Niall mientras sentía que Liam le apretaba la mano. Joe simplemente asintió agradecido.

Diez minutos.

Veinte minutos.

Cuarenta minutos.

Hora y media.

Dos horas y cuarto, y finalmente, el doctor salió con noticias. Todos se levantaron de sus lugares, pero dándole espacio a Joe para hablar con el Doctor.

-Buenas noticias – el doctor sonrió y pudo escucharse en la sala de espera un suspiro de alivio al unísono. – Pudimos mantener estable a la paciente hasta que cerramos la herida y justo ahora está recibiendo una donación de sangre, está muy agotada, pero está consciente y dice que quiere verle. – Joe asintió, claramente aliviado y acompañó al doctor a la sala donde Zoey se estaba recuperando.

-Gracias a Dios, - dijo Marie abrazando a Zayn por los hombros. Niall suspiró y sintió los brazos de Liam rodeándolo por la cintura. Le devolvió el abrazo y se aferró a él por un par de minutos.

Unas horas después, pudieron entrar a conocer a la pequeña Alexis. Era una pequeña bolita hinchada, llena de vida y con precioso cabello pelirrojo. Zoey estaba profundamente dormida y Joe estaba a su lado acariciando su brazo. Era adorable.

Fue el turno de Harry de cargar a la pequeña bebé, entonces James se la entregó y Harry la tomó delicadamente entre sus brazos. Inmediatamente una sonrisa iluminó su cara y miró a Louis con esa misma sonrisa. 

-Es tan hermosa,- Murmuró Harry mordiéndose el labio inferior. Louis sabía perfectamente que estaba reteniendo las lágrimas.

-Lo es, ¿no es cierto? - James dijo también sonriendo hacia la recién nacida. Louis volvió a sonreír ampliamente y un ligero toque en la puerta los distrajo a todos.

El doctor se asomo con una sonrisa en el rostro al mirar a toda la gente que estaba ahí por la bebé, después miró su carpeta y seguido el reloj que reposaba en su muñeca, se aclaró la garganta y susurró

-Lo lamento mucho, la hora de visitas ya terminó...

Todos asintieron y se despidieron de la pareja, acordando que irían a comer a algún restaurante ya que llevaban en el hospital todo el día. Cada quien se fue en sus respectivos carros y se encontraron en un restaurante sencillo de comida rápida. 

Las comidas así eran bastante divertidas, de hecho, casi no podían comer por tanta risa, era como estar en familia, realmente. Todos sentados en una enorme mesa. Niall, por supuesto, a un lado de Liam, con sus manos entrelazadas al comer. Era adorable. Un año y medio había pasado demasiado rápido, parecía apenas ayer cuando se atoraron en un elevador y todo comenzó. 

-¿Pueden creer que ya somos prácticamente tíos?- preguntó Charles después de darle un largo trago a su refresco.

-Es increíble, - dijo Niall sonriendo, porque, de verdad se sentía parte de ellos, eran como una gran familia de diferentes padres. -Y bien, ¿Quién sigue? - preguntó bromeando, y entonces hubo un pequeño silencio, seguido por Louis aclarándose la garganta.

Niall miró hacia Zayn, quien miró hacia Liam, quien miró hacia Mark y entonces fue Mark el que habló

-¿Algo que quieran decirnos? ¿Harry? ¿Louis? - Harry solamente sonrió nerviosamente y se inclinó hacia su esposo tímidamente.

-Umm, bueno... - susurró colocando una de sus manos en la rodilla de Louis - Lou y yo...

-Queremos adoptar. -dijo Louis de pronto y Harry suspiró, seguido de una sonrisa. 

Hubo un silencio corto, que inmediatamente se convirtió en gritos alegres y vitoreos, también estaban aplaudiendo algunos. Estaban muy emocionados. 

-Apenas estamos investigando, pero estamos decididos. - concluyó Harry y fue entonces que Niall sintió un pequeño dolor en su estómago, seguramente era emoción, así que lo ignoró por completo.

Después de felicitarlos y comer un poco más, Niall sintió que su estómago explotaría. Por esto odiaba la comida chatarra y rápida, era lo peor. Liam y él se fueron de ahí y un poco después, se fueron los demás. Harry y Louis se fueron a su departamento con una gran sonrisa en el rostro.

Entraron tambaleándose de felicidad y de emoción por haber obtenido la aprobación de sus mejores amigos, se besaron en la entrada, después en la cocina y en la sala, hasta que por último llegaron a su habitación, pero sus sonrisas eran tan grandes que simplemente sus besos ya no eran besos, sino risas.

Al día siguiente, no perdieron más tiempo y fueron al centro de adopciones. Querían que fuera recién nacido, y ofrecían pagar todos los gastos que la mamá necesitara. Se registraron y respondieron unas cuantas preguntas como: ¿cuánto tiempo llevan juntos? ¿Están casados? ¿Tienen más hijos? ¿Dónde viven? entre otras. Era emocionante y a la vez, estaban muy nerviosos, porque acababan de entrar en la lista de espera de otras muchas parejas que querían un bebé. 

Esperaron una semana, y la encargada de los asuntos sociales y legales de adopción, fue a revisar su vivienda. Todo tenía que ser apropiado para un niño o una niña. Harry y Louis no presionaron. Eran pacientes al respecto y aunque la duda los matara, se quedarían callados hasta no saber algo sobre alguien que los quisiera como padres para su hijo. Claro, todo esto lo mantuvieron en secreto, no querían que los chicos supieran que lo estaban haciendo ya.

Por otro lado, Niall y Liam estaban mejor que nunca, el dinero les llegaba muy bien y no tenían adeudos, y eso era lo de menos, estaban extremadamente felices el uno con el otro, Niall amaba el café que Liam le preparaba en las mañanas y Liam simplemente amaba a Niall, cada aspecto de él, con todo su corazón. Y se lo demostraban cada día.

Claro, las peleas, como con cualquier pareja, seguían, algunas más fuertes que otras y otras, literalmente, por tonterías. Pero las superaban rápido y seguían adelante como la hermosa pareja que eran.

-Mierda, - Niall susurró mientras se doblaba de dolor en el piso del baño de su oficina. Los dolores de estomago iban y venían, pero unos simples analgésicos los calmaban, entonces eso hacía Niall. Tomaba analgésicos y ya. Suspiró mientras se sostenía de la taza, y una vez más, vomitó. Lo único que salió de su estómago eran jugos gástricos, ya que no había almorzado nada gracias al mismo dolor. Tosió silenciosamente y cuando terminó, se levantó con las piernas temblorosas, y se dirigió hacia el lavabo, evitando a toda costa ver su reflejo. Se enjuagó la boca un par de veces y de su pantalón sacó las pequeñas pastillas. Se tomó dos. Volvió a enjuagarse la boca y al intentar caminar solo un paso, volvió a caer al piso por el estúpido dolor. -Maldita sea. - maldijo y esperó unos minutos a que la pastilla hiciera su maravilloso efecto.

Cuando por fin sintió un alivio, salió del baño, tomó sus cosas de su escritorio y salió de su oficina, avisándole a Heidi que no volvería hasta mañana. Tomó su celular y rápidamente acomodó una cita con el Doctor West. Ventajas de ser famoso, pensó cuando le dieron la cita casi inmediatamente para dentro de 10 minutos. Llamó a Liam.

-Hola bebé

-Li, hola amor, ¿estás ocupado? - puso el celular en el portavasos y salió del estacionamiento

-No, para nada ¿por?

-Tengo una cita con el señor Darren, voy a tardar un poco, tal vez no pueda pasar por ti para ir a comer ¿no importa? -No, no le estaba mintiendo. O bueno, tal vez sí, pero era una mentira piadosa. Para no preocuparlo. Conocía a Liam y sabía que si lo preocupaba mientras estaba en la editorial, no podía concentrarse. No sería egoísta.

-No importa Ni, lo sabes. Es tu trabajo. Suerte. - Niall sonrió, porque realmente tenía al mejor novio del universo a su lado.

-Te amo, gracias.

-Te amo. - Y colgó

Niall llegó al hospital y subió rápidamente hacia el consultorio del Dr. West, que ya lo esperaba. Le hizo la típica revisión y Niall le contó sobre sus dolores y vómitos constantes. El Doctor, le revisó pero simplemente no encontró ninguna infección estomacal. 

-¿Qué más sientes, Niall? - le preguntó el doctor tratando de averiguar qué es lo que tenía su paciente.

-Aparte del dolor extremo, me he sentido muy cansado... - El doctor asintió y apuntó en su bloc de notas con una letra ilegible. Niall no sabía cómo podían entender eso. -¿Qué tengo? 

-No estoy muy seguro, Niall. - se acomodó los lentes -Voy a necesitar que vayas con otro doctor, un gastroenterólogo... Porque esto no es una simple infección por comida o algo así. - Niall asintió y miró como el doctor escribía una indicación en un pequeño papel. - Tienes que bajar dos niveles y tendrás que ir con la doctora Boer, ella va a revisarte - Niall volvió a asentir y recibió el pequeño papel en sus manos, se despidió del doctor y salió del consultorio. 

Bajó los dos niveles que le había indicado y entró al consultorio de la doctora, que rápidamente se presentó como Amanda Boer, Niall estrechó su mano y se sentó donde la doctora le indicó. Le contó exactamente lo mismo que le había dicho al doctor, la inflamación en su estómago, el dolor, el vómito y la dificultad que tenía para comer. La doctora asintió pacientemente y escuchó con atención todo lo que Niall estaba diciendo. 

Después de eso, le pidió que se acostara en la pequeña camilla y le levantó la camisa ligeramente para revisarlo. Tocó en partes específicas del estómago de Niall, haciéndole un poco de cosquillas, para ser honestos, y después le pidió que bajara otro nivel para tomarse una radiografía. Una hora después, Niall regresó al consultorio de la doctora con un gran sobre amarillo entre sus manos y tomó asiento en la silla frente al escritorio. La doctora sacó la radiografía del sobre y la colocó sobre una placa blanca que estaba en su pared, apagó las luces y encendió la luz blanca que salía de esa placa. Colocó la radiografía en la placa y miró con atención hacia ésta. Niall solamente imitaba sus miradas, porque sinceramente, no tenía idea de lo que estaba pasando. La doctora tomó un plumón y circuló algunas partes de la radiografía. Se quitó los lentes y encendió las luces. 

-No se ve muy bien que digamos, pero necesito que vengas mañana para estar seguros. 

-¿Mañana? ¿No podría darme unas pastillas para el dolor y ya? - preguntó Niall fastidiado.

-Me temo que no, Niall. Hay algo en tu estómago y no estoy muy segura de que es, así que necesito que vengas mañana para realizar una endoscopía superior y entonces ver que hacer contigo... - Niall suspiró y asintió resignado, salió del consultorio después de despedirse de la doctora y se encaminó hacia su auto. Digamos que la idea de un tubo metido desde su garganta a su estómago no le complacía demasiado. 

Liam lo esperaba con la cena servida, y ¿cómo rayos le iba a decir Niall que no podía comer? así que se acercó a él, se sentó en sus piernas y rodeó su cuello con sus brazos. Se inclinó y juntó sus narices, cerrando los ojos e intentando que el constante dolor desapareciera de alguna manera. Se acercó hacia los labios de Liam, sintiendo como la pequeña barba que comenzaba a brotar le rozaba sus propios labios. Sonrió y finalmente, juntó sus labios en un pequeño beso, que se fue convirtiendo en un beso un poco más apasionado y profundo. Si le preguntaran a Niall, que cual es su sensación favorita, él respondería que era esta. Sentir los labios de Liam sobre los suyos. Porque por más que el tiempo pasara, cada beso era tan diferente, pero tan, tan familiar a la vez. Besó a Liam y succionó un poco su labio inferior, ganándose una pequeña risa de parte del castaño. 

-Esto es adorable, Li. - dijo mirando la mesa acomodada y la comida lista para servirse. - Pero comí con Darren... - mintió y rápidamente se arrepintió al ver la mirada de Liam bajar hacia el suelo. - De hecho, tengo todavía un poco de hambre, así que sírveme de tu deliciosa comida sin carne - Le sonrió ampliamente y Liam le devolvió la sonrisa.

-Muy buena idea, - murmuró y comenzó a servir la comida.

Y verdaderamente, estaba delicioso, todo, pero cada bocado era un poco de dolor para Niall, el cual disimulaba perfectamente. Comían en un silencio cómodo, disfrutando simplemente la presencia del otro, lanzándose miradas cómplices y sonrisas coquetas. Parecían adolescentes cortejando. No hombres de casi  25 años. Era divertido.

-

Niall despertó y como siempre, fue a la cocina, donde su café lo esperaba junto con su hermoso novio recién levantado, pero por primera vez, Niall no quería tomarse su café, prefirió decir que ya era tarde y que se lo tomaría en la oficina, cosa que, por supuesto, no haría. Se despidieron con un dulce beso sabor café y galletas y tomaron caminos separados.

Llegó a su oficina, de nuevo, doblado de dolor y las horas esperando su cita con la doctora fueron aún más dolorosas. Ya se había tomado más de tres pastillas para el dolor y ninguna le había servido, además, su estómago estaba tan inflamado que tuvo que desabrocharse el botón del pantalón. Odiaba esto, no sabía que es lo que estaba pasando.

Finalmente, llegó la hora de la cita, así que fue al hospital, y al llegar, hicieron que se pusiera una bata color verde menta y lo acostaron en una camilla. Lo último que Niall recuerda, es tres personas a su alrededor, incluyendo la doctora Boer y contar hasta el número siete.

Despertó un poco adolorido de la garganta y sorprendentemente, el dolor del estómago no estaba. Intentó levantarse pero una mano delgada apoyada en su pecho lo detuvo.

-Woah, no tan rápido. La anestesia sigue en tu cuerpo y puedes marearte. No quiero que vomites otra vez. - Era la voz de la doctora. Niall cerró los ojos nuevamente y después de un par de minutos, pudo enderezarse. - Hola - saludó la doctora y Niall asintió

-¿Qué es lo que hicieron? Me duele la garganta como el infierno... 

-Bien, te explico: Te hicimos una endoscopía superior. - Niall estaba seguro que su cara delataba el hecho de que no sabía a qué rayos se refería - En pocas palabras, metimos un tubo flexible con una cámara desde tu garganta hasta tu estómago para poder ver bien lo que tienes. Vimos unas áreas anormales, entonces tomamos unas muestras del tejido y las mandamos a un laboratorio, que de hecho, tendrá los resultados en mínimo tres días, máximo una semana.

-¿Y todavía no saben qué me pasa?

-Tengo una vaga idea, pero no podemos hacer conclusiones desde ahora... - Niall asintió. - Sé que el dolor no te ha dejado comer, entonces necesito que compres suero líquido y te lo tomes a pequeños tragos, también... - comenzó a escribir en una hoja, - ...necesito que compres estas pastillas, van a calmar tu dolor, son más eficientes que las que has estado tomando. Esto es hasta que encontremos realmente lo que tienes, ¿está bien? - Niall tragó y asintió.

 -

Louis timbró nerviosamente en la pequeña casa, revisando por segunda vez que el número apuntado en la palma de su mano, Harry le sonrió y deslizó su mano para entrelazarla con la mano temblorosa de Louis. 

-¿Qué pasa si no le gustamos? - susurró y justo después, se abrió la puerta, dejando ver a una señora que inmediatamente sonrió y les permitió pasar. 

-Tiff, están aquí. - dijo la señora, que se acababa de presentar como la madre de Tiffanny, Zara. - Por favor, siéntense. ¿Les ofrezco algo de tomar?

-Gracias, solo agua, por favor. - contestó Harry de parte de los dos y Zara asintió. 

Louis miró hacia las escaleras, y se fijó en la adolescente que bajaba por ellas, sosteniendo entre sus manos su vientre, con una amplia sonrisa y ojeras debajo de los ojos. Ambos se levantaron, dispuestos a ayudarla, pero la chica se negó.

-Tú debes ser Tiffanny - Tiffanny asintió soltando una pequeña risa

-No sé si me delatan los ojos o el enorme vientre de 4 meses que cargo conmigo. - Harry se rió junto con ella, después Louis los imitó. 

-Soy Harry, y él es mi esposo, - Tiffanny los interrumpió

-Louis, ¿verdad? - Louis asintió y Zara llegó con dos vasos llenos de agua, se sentó a un lado de su hija y les sonrió - He estado leyendo sobre ustedes, su historia es... wow. Es decir, es impresionante todo el tiempo que han estado juntos y lo que han hecho para demostrar su amor, se me hace algo de admirar, en serio. - Harry asintió agradecido.

-Gracias, - dijo Louis. 

-Pero bien, dejemos de ser cursis, - la adorable chica rió - Veamos, ¿cuáles eran las preguntas de rutina? Oh, claro... ahora recuerdo.

Y entonces Tiffanny hizo preguntas, y Harry y Louis las respondieron a la perfección. Tiffanny tenía solo 16 años, ella y su -ahora ex novio- claramente, no se habían cuidado y siendo sinceros, ninguno de los dos tenía el dinero ni la madurez para cuidar a un pobre bebé. Así que junto con su mamá, después de mucho tiempo pesándolo, había decidido darlo en adopción. Entonces estaba haciendo eso, obviamente, Louis y Harry no eran los únicos en la lista de espera, pero tenían algo de esperanza, porque la chica tenía una extraña fascinación por los hombres homosexuales. Eso claramente les daba una ventaja. 

-¿Hay algo más que quieras saber, Tiffanny? -preguntó Harry apretando la mano de Louis entre la suya.

-No, de hecho... Creo que tengo todo lo que necesito. - Sonrió ampliamente hacia la pareja y estos le sonrieron de vuelta. - Me sorprende que son los únicos que realmente han llenado todos mis requisitos... - susurró hacia su mamá y Louis no pudo evitar escuchar, así que apretó la mano de Harry aún más entre la suya. 

Al despedirse, acordaron verse en una semana más, para que finalmente les diera los resultados de si los quería como padres de su hijo o no.

-

-¿Qué prefieres, ver morir a la persona que más amas en el mundo, o, morir sin poder despedirte de nadie? - preguntó Liam mientras estaban acostados en el piso de su sala, por muy infantil que sonara, habían armado un fuerte, con sábanas y almohadas, simplemente porque podían hacerlo. Así que ahora ahí estaban, acostados en el suelo, con una sábana encima de sus desnudos cuerpos y con las manos y piernas entrelazadas

-Morir sin despedirme de nadie, -contestó Niall honestamente.

-Pero, piénsalo, mueres sin decirle nada al amor de tu vida, y lo lastimarías, y si lo ves morir, tú sufrirías, pero sería mejor sufrir tú a que sufra él ¿no? - Niall lo pensó un poco y sacudió la cabeza. 

-Entonces tienes razón, supongo que prefiero sufrir yo... ¿Preferirías tener dedos en vez de dientes, o cabello en lugar de dedos? - Es un juego que habían inventado, tenían que escoger una opción a fuerza, no había opción de decir "paso" o "eso nunca pasaría" simplemente tenían que elegir.

-Dedos en lugar de dientes. Sin duda.

-Eugh, eres raro, escritor. -se burló y se acercó a besar su mejilla. Liam sonrió hacia abajo, mirando los profundos ojos de Niall y suspiró

-¿Qué prefieres, dejar el queso, o el sexo oral para siempre? - Niall soltó una carcajada, literalmente y golpeó ligeramente el brazo de Liam.

-Eso es como la muerte. Pero obviamente dejaría el queso, no puedo vivir sin tus increíblemente buenos orales... - Liam rodó los ojos y abrazó más a Niall. - ¿Qué prefieres, cambiar de sexo cada que estornudas o no poder decir la diferencia entre un muffin y un bebé? - Liam comenzó a reír incontrolablemente y una vez que pudo calmarse, suspiró y sacudió la cabeza

-Dios, amor, dame un poco de eso que estás fumando, ¿cómo diablos se te ocurrió eso?

-Ja, ja, gracioso - se rió, - ahora contesta.

-Cambiar de sexo cada que estornude, definitivamente.

-Bien, solo intenta no estornudar cuando estemos teniendo sexo, eso sería demasiado incómodo. - volvieron a reír incontrolablemente y volvió a ser el turno de Liam.

 -¿Qué prefieres, aprenderte todo el diccionario de memoria y cada que alguien diga una palabra tener que decir la definición exacta, o no hablar nunca más? 

-Lo del diccionario. No podría dejar de hablar...

-Serías insoportable... - se rió - pero te imagino y a la vez serías muy adorable.

-Tú eres insoportablemente cursi

-Lo sé.

-Y así te amo.

-Lo sé.

-

Harry abrió la puerta de su departamento con una amplia sonrisa en el rostro, hoy era el día en el que Tiffanny tomaría una decisión. 

-Tiffanny, pasa, adelante.- Tiffanny asintió y entró al pequeño y acogedor departamento. 

-Huele muy bien... 

-Oh eso, Louis está cocinando... Es raro en él, pero cuando lo hace, es delicioso... - dijo Harry orgulloso de su esposo. Tiffanny tomó asiento en la sala, justo frente a Harry, y mientras esperaban a Louis, tomó entre sus manos una foto enmarcada de Harry  y Louis el día de su boda. 

-Son adorables, - dijo la chica y Harry le sonrió en agradecimiento. Dos minutos después, Louis se asomó desde la cocina, quitándose el delantal del pecho y se acercó a la sala para saludar a Tiffanny y sentarse a un lado de Harry. 

-¿Cómo has estado? ¿Tienes hambre? - le preguntó, algo ansioso, a decir verdad.

-Muy bien, y sí, tengo algo de hambre pero... Primero lo primero - les sonrió y ambos le devolvieron la sonrisa nerviosos. - He tomado la decisión...

-

Niall estaba temblando, literalmente, temblando de nervios mientras esperaba en los incómodos asientos afuera del consultorio de la doctora Boer. Había pasado una semana ya, y por la llamada telefónica que la doctora le había hecho hacía una hora, las cosas no sonaban muy bien. Niall sentía nervios y dolor en el estúpido estómago. No había podido comer bien en toda la semana. Liam, por suerte, no se había dado cuenta de nada, y eso le quitaba a Niall un gran peso de encima. 

-¿Niall? -escuchó la voz de la doctora llamándolo, así que volteó rápidamente e intentó sonreír hacia ella, pero le salió más como una mueca de dolor y de confusión. Se levantó de su lugar y caminó hacia la doctora. La saludó y entraron juntos al consultorio. Se sentó justo frente a ella y entrelazó sus manos para intentar que dejaran de temblar.

Era algo con los hospitales, Niall estaba seguro. Los odiaba con toda su alma, lo ponían nervioso, tan nervioso al grado de sudar y de sentirse realmente enfermo. Probablemente solo era una estúpida infección, solamente algo que le cayó mal y él estaba malinterpretando las cosas. No había tantas señales de que fuera algo realmente malo. Respiró una, dos veces e intentó calmarse.

-¿Cómo estás?

-He estado bien, todo bien de hecho. Casi se me ha olvidado el dolor. -mintió. Tal vez mentir le ayudaría a dejar de pensar en todo eso.

-Es bueno oírlo. - la doctora sonrió y le entregó a Niall un sobre, seguido de una tarjeta, con un nombre "Alberto Gallagher" -Me temo que tu caso ya no depende de mí. Yo solamente soy gastroenteróloga... Tienes que llevarle tu expediente médico y el decidirá lo que va a hacer contigo, me refiero a, cual será tu tratamiento. Es un muy buen doctor, lo siento mucho Niall - Niall frunció el ceño y se fijo en la tarjeta con más atención.

La garganta se le secó y por alguna razón, dejó de temblar, aunque era lo único que debería estar haciendo. 

-¿Oncología? - preguntó con la voz seca. 

-Está justo en el cuarto piso, el consultorio de Alberto es el tercero después del elevador.

-No. Lo sé. Pero, ¿oncología? - volvió su vista a la doctora -¿No es eso un doctor de cáncer?

La doctora asintió. 

Continue Reading

You'll Also Like

2K 233 6
Louis es un estudiante de veterinaria que trabaja como cuidador de animales en un zoológico. Harry es un chico al que le gusta dibujar y que quiere e...
830K 87.8K 136
1era y 2da temporada ♥️ Sinopsis: En donde Jimin es un Omega mimado y Jungkook un Alfa amargado, los dos se casan por sus propias conveniencias. ⚠️...
420K 67K 30
Park Jimin, un padre soltero. Por culpa de una estafa termina viviendo con un completo extraño. Min Yoongi, un hombre solitario que guarda un triste...
329K 31K 67
Freen, una CEO de renombre, se ve atrapada en una red de decisiones impuestas por su familia. Obligada a casarse con Rebecca, una joven que llegó a s...