Apartamento 402

Por Lu_RoAs

453K 58.4K 43.4K

Es la primera vez de Jungkook lejos de casa, en una ciudad tan grande como Seúl y en un apartamento sin muebl... Más

Antes de leer.
Prólogo.-
1.- De clases y exnovios.
2.- Kim Aerum.
3.- Asociación de Vecinos.
4.- Vergüenza.
5.- Omisiones.
6.- Ladrón.
7.- En la noche.
8.- Blanco.
9.- Tangas y tríos.
10.- Comité extraordinario.
11.- Cambios.
12.- Huir.
13.- Pelea de perros.
ESPECIAL: Yoongi, no...
14.- La zorra.
15.- Celebración.
16.- Resaca.
16.2.- Alguien, por favor, mátelo.
Extra: Que nadie lo sepa nunca.-
17.- Recomendaciones.
18.- Interrupciones.
19.- Mamá se queda.
Extra: Los Jeon.-
20.- Luchando por los derechos de Jungkookcienta.
21.- Hoseok en Master chef.
Extra: ¡Corazón roto a la vista!
22.- Pelea de gatas.
22.2.- ¿Y Jungkook?
Extra: ¡Emiala!
Pregunta, pregunta.
Respuestas, respuestas I
24.- Sad, Jk.
Respuestas, respuestas II.
25.- Memoria selectiva.
26.- Primer paso...
27.- Novios, así como... ¿Novios?
28.- De misiones y tacitas de azúcar.
29.- Decálogo del buen novio.
30.- Amiga, me di cuenta.
31.- Lluvia de penes.
32.- JK, el virgen.
Pre Especial: Un infalibe plan.-
Juanito Peréz
33.- Una broma.

23.- Madura, Jungkook. Madura.

7.8K 1.1K 1.1K
Por Lu_RoAs

Pensé que nunca podría actualizar con los días tan horribles que he tenido. 

En fin, aquí les dejo... ojalá les guste. 


Una abuelita le había comprado un helado.

Porque al parecer, las adorables abuelitas se compadecían de los universitarios que lloraban en el parque porque el amor de sus amores, el crush de sus crushes, el futuro padre de sus tres hijos y el abuelo de sus nietos; había elegido a una rubia demasiado delgada como para ser normal como esposa.

Al parecer, las adorables abuelitas comprendían lo que era que el hombre que amabas con ferviente pasión desde la más tierna adolescencia, se casara con alguien que no eras tú.

Comprendían lo doloroso que era descubrir las mentiras de los fanfics donde él te veía entre la multitud de un concierto, te hacía llamar tras bastidores y terminaban casándose a los dos días con una fiesta que salía en todas las revistas de famosos y por lo que, los paparazzis comenzaban a acosarte y él terminaba por salir a defenderte, declarando su amor al mundo entero antes de decir que tendrían una camada entera de hijos.

Ellas comprendían, sabían lo duro que era asumir que había amores que no estaban hechos para vivirse, que estaban destinados a quedarse en las diferentes listas de reproducción con sus canciones, sus entrevistas, sus peleas con paparazzis e incluso de su risa.

Jungkook nunca podría superarlo.

Con Taeyang había sido fácil... la esposa de Taeyang era una cosa bonita con la que Jungkook incluso habría estado dispuesto de hacer un trío siempre y cuando pudiese lamer chocolate derretido directamente del abdomen de Taeyang. No, su matrimonio no había dolido tanto porque él se veía tan feliz.

Y porque la colegiala de Jungkook le dijo que estaba bien, que ellos todavía tendrían a Justin.

Debió de haberle hecho caso al emo, él siempre supo que Justin no iría a Corea a hacer un concierto y tampoco se enamoraría de él entre la multitud. No cuando seguramente Justin creía eso de que todos los coreanos se parecían. No cuando las boletas para conciertos eran demasiado costosas y a él sólo le alcanzaba para el boleto más barato, ese donde sólo habría visto a Justin como una manchita en la distancia.

Su amor había sido creado para no ser vivido y Jungkook debía asumirlo.

.- A mí la vida no me quiere, Ae – ssi... no me quiere – se queja mientras atraviesa el portal del edificio con Aerum sentado en su cadera y sostenido con uno de sus brazos – Primero Taeyang se casa, luego todos excepto Seungri se van para el servicio militar, los Super Ancianos lanzan nuevas canciones sin estar completos porque las fans son unas locas obsesivas, ¿quién las entiende, Ae – ssi? ¡Necesitaba oír a Sungmin en ese disco!

Y es que era cierto... ¿cómo la SM malvada se había atrevido a mandar al sótano a Sungmin? ¿Acaso no volverían a estar juntos nunca más? El chino los había abandonado, el otro se había ido para ser actor y Jungkook seguía sin haberlo visto en un solo programa desde entonces, el Kagin había hecho su desmadre y ni el servicio militar lo había corregido.

¡Jungkook había sobrevivido al servicio militar, por Dios!

¿Qué haría para seguir viviendo sí no tenía a Super Junior ahora que la mayoría de Big Bang andaba en la milicia? Su colegiala interior necesitaba ver parejas gays que alimentara su discurso de auto convencimiento, que hablaran del amor que ella, el emo y él querían vivir.

Porque no había nada más real que el EunHae... Jungkook quería un amor como el de ellos.

¡Viva el EunHae!

Es lo que reza el cartel que mece su colegiala en alto, recordando aquella época en la que no había parejas heterosexuales a la vista, época en la que el Jungkook de 15 o 16 años podía soñar con ser el amor de la vida de alguno de sus idols. Y si no soy yo, lo será su compañero, sólo hay que ver cómo lo mira. Si eso no es amor, no sé lo que es.

Su emo siempre se había abstenido de opinar, predicando la religión de: el amor no existe, nadie va amarte porque todos son unos hipócritas en este mundo y es mejor que dejes de soñar que alguno de esos hombres prefabricados se dignara a mirarte. Eso mezclado con una buena adicción al esmalte de uñas negro, casi hacían de su adolescencia un periodo mucho más difícil de lo que ya había sido.

A lo mejor debía volver a pintarse las uñas de negro.

.- ¿Qué le he hecho yo a Dios, Aerum? – sigue quejándose mientras cierra de una patada la puerta tras ellos, observando como el adorable de Aerum mancha sus mejillas con el helado de menta que la adorable abuelita le regaló para que dejara de llorar – Ahora he perdido a Justin y tu papá, Aerum... ¡Tu papá no quiere darme contra la pared!

No es que Aerum entendiese la frase, ni siquiera la clara connotación sexual con la que Jungkook hablaba, pero el niño si giró a mirarlo, con su precioso y redondito rostro en dirección al de su Baba Goo, sus enormes ojos mirándolo en espera de que Jungkook siguiese hablando porque bueno... Aerum le gustaba mucho escucharlo hablar.

Era como un tomatito parlanchín, sobre todo cuando hablaba de su Baba y él contra la pared, sobre la mesa, en la ducha, tras un arbusto y en la playa.

.- ¿Qué hago, Ae – ssi? Tu papá necesita de mí tanto como yo necesito de él, nos iluminamos la vida mutuamente, fuimos hechos para estar juntos, Dios nos creó en un molde tomados de la mano, no podemos luchar contra el plan divino... ya perdí a Taeyang, a Justin... con GDragon nunca tuve oportunidad... ¡¿Qué hago, Aerum?!

¿La respuesta de Aerum? Alzar su manito donde sostenía el cono de color gracioso y ponerlo contra los bonitos labios de Baba Goo...

Jungkook le miro, la colegiala y el emo teniendo una junta de emergencia para definir qué debían de hacer para que Kim Taehyung dejara de verlo como el hermanito menor al que había adoptado al ver que no tenía ni siquiera con que lavar su ropa en un apartamento demasiado caro que vacío.

¡Ponte falda! Gritó la colegiala.

Muéstrale la composición que hiciste para clase, dejándole ver tu alma adolorida por su amor y necesitada de su afecto; fue lo que razonó el emo.

Sin embargo, Aerum era quien tenía razón.

.- ¡Eres un genio, Ae – ssi! Te comparé unos zapatitos de charol como recompensa por esto, sólo tengo que robarle algo de dinero a mamá de su bolso e iremos de compras, te lo prometo, Aerum... cree en Baba Goo – dejó un beso sobre la sucia mejilla del niño, manchándose con el mismo helado de menta que la adorable abuelita le había regalado – Debo ser sincero con Baba, decirle las cosas de frente y admitir que, a veces y sólo a veces, me comporto un poco infantil... ¡me confesaré con TaeTae!

.- ¡Felicidades! Ojalá tengan mucho sexo.

El gritito de Jungkook fácilmente podía confundirse como el de una niña de cinco años que se asusta cuando su papá le salta por la espalda y provoca que el delicioso helado que ha estado comiendo cayese al suelo sin compasión.

Jungkook grita, Aerum deja caer el helado y Hoseok sólo sonríe como maniático con extra de su dosis de azúcar.

.- ¡Hobi hyung! No vuelvas a hacer eso, sufro de un corazón demasiado sensible para este mundo.

.- Lo siento, Jungkookie... Es que estoy muy emocionado por su cena de ésta noche, hice un gran trabajo cocinando – Hoseok alza sus manos al aire, riéndose todavía con la boca abierta y Jungkook no puede evitar preguntarse qué pasaría sí se traga una mosca, ¿se enfermaría o la mosca seguiría viviendo en su estómago?

¿Las moscas podían vivir en estómagos? Esa era una buena pregunta para hacerle a su doctor la próxima vez que fuese a consulta, a lo mejor y le daba una paleta extra.

El doctor Choi siempre le daba una paleta cuando Jungkook se portaba bien y seguramente premiaría su innegable inteligencia y curiosidad por el mundo animal. Además, seguramente Google le diría que tenía cáncer sí preguntaba qué pasaba si se comía la mosca. Más fiable era el doctor Choi.

Jungkook sacudió su cabeza, luego pensaría en eso.

Ahora tenía cosas más importantes que hacer.

.- No importa, hyung – afianzó el agarre de Aerum contra su cadera – Debo ir a ver a TaeTae y dejar que Aerum tome un baño de con espuma de rosas.

.- Pero, Kookie... ¿Y mi pago?

Hoseok le estira la mano, esperando sus galletas y sus monedas por tan magnífico trabajo realizado con la pasta, Jungkook sólo choca las cinco con él.

.- Te pagaré luego de ver tu trabajo y asegurarme que a Tae le gustó, hyung. ¡Soy un comensal con gustos exquisitos!

Hoseok (que ahora que Jungkook lo miraba mejor, lucía como un pato enojado, debido a la forma de sus labios) le miró indignado, llevándose incluso una mano al pecho para hacer énfasis en lo dramático de su gesto: .- Eso no puede ser cierto cuando dijiste que podías vivir comiendo sólo ramen por el resto de tu vida con tal de no tener que lavar la ropa a mano.

.- El ramen fue la primer comida inventada por Dios, hyung.

.- ¡Claro que no!

.- Por supuesto que sí, Dios la creo para que nos fuese fácil alimentarnos – Jungkook no duda de eso, incluso si la colegiala y el emo sí lo hacen – Es por eso que hay tantas variedades, con sabores y texturas distintas. ¡Dios hizo un gran trabajo con el ramen!

Hoseok, o alias el nuevo pato (además con su cabello tan vistoso, sí que podía confundirse con un pato si iban a un lago y se sentaba cerca, incluso y podía conseguirse una pata con la cual tener patitos. Lo que, a opinión de Jungkook, sería muy, muy tierno), negó con la cabeza sin estar muy convencido, pero tampoco podía ir contra su lógica, Jungkook sabía que era infalible.

.- Igual, no puedes ir al apartamento – le soltó entonces el nuevo pato – Taehyung está muy ocupado.

Oh, ese tonito no le gustó nada.

No cuando había llegado a ver tantas novelas con su mamá que la colegiala se había hecho una experta en detectar lo que ese tono podía significar. Jungkook era experto en culebrones emocionales, ¡no había nadie en el mundo más dramático que él!

.- ¿Con quién está ocupado?

Que no diga Hanna, que no diga Hanna, que no diga Hanna...

El nuevo pato sonrío, mostrándole todos sus dientes como si fuese un caballo (al parecer Hoseok era bueno imitando animales): .- Con Hanna.

La colegiala chilló, indignada y sacando unas tijeras, dispuesta a pelear y Jungkook también.

Taehyung era SU hombre, así el mayor todavía no lo supiese.

Jungkook ya lo había apartado del mercado, incluso puso de estado sentimental en todas sus redes sociales que estaban casados, viviendo una vida color de rosas con pajaritos cantando todas las mañanas. Felices y con un hijo. ¡Ni él ni Aerum estaban pintados en la pared para que anduviese metiendo mujeres en el apartamento! ¡Sobre su cadáver y el de Aerum!

Y entonces dejó a Hoseok, el pato o caballo o como sea que le pusiese de sobrenombre más tarde, hablando sólo en el pasillo.

Hizo todo el ejercicio que no había hecho en los meses que llevaba en Seúl, recordando esa época en Busan en la que corría maratones para ganarse cupones de comida gratis. Se subió los cuatro pisos saltándose las escales de dos en dos, con un niño de cinco años en brazos y demasiado molesto como para pensar en los riesgos.

Al final, era demasiado cool como para caerse. Eso sólo le pasaba a gente sin suerte ni gracia, como Jimin.

El apartamento estaba en silencio cuando entraron, la puerta no había sido forzada ni la clave bloqueada. Un olor poco agradable salía de la cocina, pero no había rastros de la enemiga mortal de Jungkook (ni siquiera recordó que su madre debía de andar por ahí), sin embargo, no podía cantar victoria. Así que dejó a Aerum en el suelo y se pegó a la pared que daba a las habitaciones.

.- No hagas ruido, Ae – ssi – le indicó con un gesto, llevándose el dedo a los labios – Vamos a atrapar al ofrecido de TaeTae... así que Shhh...

Aerum sonrió, llevándose el dedo a los labios, imitándolo. Lo mismo hizo cuando Jungkook avanzó arrastrando los pies, su espalda completamente pegada a la pared y sus ojos entrecerrados como había visto que hacia un espía en una película rusa que había visto una noche en internet y que no tenía subtítulos.

No sabía ruso, así que no entendió nada más que era de espías.

Pero la esencia estaba ahí, así que cuando llegó a la puerta del cuarto de Aerum, le indicó al niño que entrara y cerrara; un gesto simple que Ae – ssi entendía de todas las veces que habían jugado escondite y ambos le habían hecho trampa a Taehyung.

Era una misión para un hombre solitario, debía avanzar solo.

Dos pasos, tres pasos... silencio.

La puerta estaba entreabierta, por lo que se armó de valor y siguiendo la escena dramatizada por la colegiala (el emo había decidido que estaba demasiado triste como para participar), Jungkook empujó la puerta y con sus manos armó la forma de una pistola, apuntando a lo que sea que hubiese en el interior.

.- ¡Así quería verte, desgraciado!

Taehyung estaba acostado en la cama, mirándolo con sorpresa mientras su mano quedaba en el aire, prueba del delito.

La mano con la que había estado dibujándose abdominales con un marcador.

Y solo...

.- ¿Kookie?

No te confíes, puede estar escondida bajo la cama. ¡Esa perra es astuta!

La colegiala tenía razón, así que avanzó hasta el closet y lo abrió, pero no había nada. Tampoco bajo la cama, ni detrás de la silla llena de ropa sucia, también se asomó por la ventana, pero o la chica era mejor que Iron man y había desaparecido o nunca había saltado por ahí.

¿Hoseok le había mentido?

.-¡Hey, Kookie! – la voz de Taehyung le distrajo, viendo la enorme y brillante sonrisa del mayor, esa sonrisa que acaba con el hambre en el mundo, que imponía la paz mundial, que embarazaba al mundo entero y con la que Jungkook soñaba - ¿No estabas en clase?

Oh, así que ahí es donde debía de estar.

Ya decía él que algo se le olvidaba.

Pero es que había declarado la revolución por sus derechos y de paso, quiso dar un paseo con Aerum. No era culpa suya, era culpa de la Universidad por crear semestres flexibles que los estudiantes como él, vagos y distraídos, aprovechaban para olvidarse por meses de que estudiaban una carrera universitaria.

Por supuesto, estando su madre ahí, Jungkook había tenido que volver a clases con regularidad. No es que se hubiese perdido de mucho, realmente. Más allá del hecho de que ninguno de sus compañeros lo distinguía (y él a ellos tampoco. Ni siquiera había llegado a ponerles apodos para reconocerlos, como con sus vecinos), Jimin lo había tenido al tanto de las cosas importantes: tareas, chismes, tareas y más chismes.

Aunque claro, había algunos cursos a los que Jungkook deseaba no volver nunca más, jamás de los jamases. Tales como las estúpidas e innecesarias matemáticas en inglés (las cuales seguía sin entender para qué necesitaba) y la clase de iniciación musical.

Es que de solo recordar la forma en como Lee Hunseol había hablado de su precioso Aerum, Jungkook quería coger su larga y sedosa cabellera, raparla hasta dejarlo calvo y luego echarle limón al ritmo de una canción de rock. Claro que él no era nada resentido, lo que le recordaba... Hoseok había dicho que Hanna estaba ahí, pero en dónde.

.- ¿Dónde está la bruja veinteañera? – le preguntó al mayor, tratando de no distraerse con su hermosura.

Taehyung se acomodó mejor, semi sentándose en la cama y bajándose al fin la camiseta, escondiendo sus nuevos y sexys abdominales: .- ¿Bruja veinteañera?

.- Hanna...

.- Oh, Hanna ni siquiera tiene veinte años todavía, Kookie...

No te distraigas en sus labios, en su mentón, en sus clavículas, ni siquiera en sus perfectas y torneadas piernas; la colegiala le chasqueó, recordándole que lo importante era encontrar a la bruja pelinegra que osaba llamarlo niño cuando Jungkook era un hombre hecho y derecho. La bruja que amenazaba con quitarle la atención de SU hombre.

La bruja veinte... oh...

.- ¿No?

Taehyung se rió, palmeando el lado de la cama donde había espacio suficiente para que Jungkook se recostase: .- Tiene tu edad, pronto cumplirá veinte... quería llevar a Aerum a Daegu por su próximo cumpleaños, le harán una fiesta o algo así y ella quiere que nuestro Ae – ssi esté en las fotos.

.- ¿Se lo llevará? – la tristeza era en serio, ¿qué haría Jungkook sin Aerum? Se deprimiría, dejaría de comer, de bañarse... bueno, no, era incapaz de dejar de comer porque la comida era un regalo divino y de bañarse, eso sí podía dejarlo.

Taehyung lo jaló cuando se sentó ligeramente, empujándolo a que se recostase en su pecho y se pegase a su costado: .- Le dije que lo hablaría primero contigo.

La colegiala entró en coma... el emo también... Jungkook casi le sigue...

.- ¿P-por qué?

.- Eres la otra persona que está a cargo de él, Kook – los dedos largos de Tae acariciaron su cabello, el que no se había lavado hace dos semanas – Creo que tu opinión también es importante sí queremos que esto funcione.

Que esto funcione, ¿qué significaba eso?

¡Jungkook no entendía el idioma de Taehyung! ¡¿Acaso había comenzado a hablar ruso?

.- Como sea, hablémoslo con ella cuando regrese – cortó el tema Taehyung, dejando que Jungkook se acomodase completamente contra su pecho, su mejilla abullonada contra su pectoral – Quería saber cómo estabas con lo de Bieber, Kookie.

Claro, échale sal en la herida, maldito.

¡Jungkook incluso lo había olvidado! Más concentrado en cazar a la bruja, alias Hana, para demostrarle como Taehyung le elegía a él, cual combate romano en el que el emperador favorecía a uno de sus gladiadores a vivir y el otro, lo condenaba a morir. Por supuesto, Jungkook era el que sobrevivía.

Eso era tan obvio.

.- Estoy bien, hyung – le mintió, se mintió, le mintió a la colegiala y al emo, que recién despertaban del coma – Siempre he sabido que Justin era un alma demasiado rebelde e inestable para mí... Aún tengo a Jiyong hyung.

Taehyung asintió, muy serio: .- Supongo, no creo que GDragon se case.

.- Es porque es drogadicto, ¿verdad?* - Jungkook alzó su carita, mirándolo con los ojos entrecerrados por la afirmación.

.- Ah...

.- No importa, hyung – respondió de inmediato, volviendo a descansar su cabeza contra el pecho de Taehyung - A GDragon le gustan japonesas y anoréxicas. Yo no soy japonés, aunque podría ser anore...

.- No, no, no... – la mano que acariciaba su cabello tomó su mentón, obligándolo a mirar al hermoso adonis del amor de su vida - Tú estás bien, así como estás... Eres tan bonito, Kookie.

Muero, muero... la colegiala cayó al suelo, alzando una mano pidiendo ayuda.

Un respirador, un respirador; pidió en vano el emo.

.- Hyung...

.- Además, si Justin nunca se divorcia y Taeyang... – Tae sacudió su cabeza, con una sonrisa penosa - Ah, no, no le deseemos el mal a Taeyang, él es un alma de Dios... – se corrigió - El caso es que, si al final todos tres se casan, yo siempre, Jungkook, siempre voy a estar para ti.

Entonces su colegiala murió y el emo la tomó en brazos, sin reaccionar.

Era casi como un dorama...

Pero entonces si lo fuera, lo siguiente que pasaría en un dorama es que a alguno de los dos les daría cáncer o la familia millonaria de Taehyung intervendría para que él se casara con una raquítica modelo y heredase la compañía que estaba a punto de la quiebra.

Aunque eso quería decir que al final, Jungkook se casaría con él, tendrían una mansión y muchas joyas que presumir.

.- T-Tae...

.- Escucha, Kookie... – los ojos del mayor lucían tan serios, ¿estaría a punto de decirle que tenía cáncer o que era realmente un heredero? Jungkook no sabía sí quería escucharlo - Sé que no nos conocemos hace mucho, pero ya vivimos juntos y hemos pasado por muchas cosas... Yo...

.- ¡Volvimos!

El gritó resonó por todo el apartamento, Jungkook parpadeó confundido y Taehyung se echó hacia atrás, golpeando su cabeza contra el cabezal de la cama.

.- Mierda.

Holi, holi...

¿Cómo están? ¿Qué tal empezaron el año? 

Yo todavía no sé sí lo empecé bien o mal, quiero creer que bien. En fin... me costó escribir el capítulo por razones externas que me interrumpían y ponían de mal humor. Pero hice mi mayor esfuerzo y espero que les gustará, de todo corazón que sí

Cuéntenme qué les parece... *Se esconde tras una piedra, super insegura*

Gracias. 

*Mención al comentario de xxWOOxCHANxx en el especial de Corazón roto. Tome tu idea, gracias. 

Pd1. Les invitó a que se pasen por mi nueva historia "Passing by..." que no tiene comedia pero le he puesto ilusión. 

Edit: 18/02/19

Seguir leyendo

También te gustarán

180K 10.2K 17
El maldito NTR pocas veces hace justicia por los protagonistas que tienen ver a sus seres queridos siendo poseidos por otras personas, pero ¿Qué suce...
66K 3.4K 49
Juanjo Bona y Martin Urrutia se conocen en el casting de Operación Triunfo, ¿Dónde les llevará la experiencia?// Historia de los agapornis, lo mas fi...
63.9K 5.4K 18
"No, claro que no, es obvio que no me gusta Bradley, el es mi enemigo y... Maldito idiota, sal de mi mente, haces que mi corazón se acelere." Max es...
169K 14.3K 35
|𝐀𝐑𝐓𝐈𝐒𝐓𝐒 𝐋𝐎𝐕𝐄| «El amor es el arte de crear por la sensación misma, sin esperar nada a cambio,más allá del placer mismo del acto creativo...