Parte 6/8 💔
Omnisciente. (Ósea yo)
Todas las miradas se posaban en la bruja quien seguía pasando con suma urgencia las páginas del enorme libro a sus pies, esperando que les dijera una solución rápida y eficiente para salvar a su familia y amigos respectivamente. Finalmente después de llegar a las páginas finales del libro, la bruja sonrió orgullosa de su hallazgo.
—¡Lo encontré! —dijo para enseguida organizar a toda la familia y no cometer error alguno pues al más mínimo falló, sus hermanas no saldrían vivas de esta jugada. Debían ser sumamente cautelosos con cada movimiento que hicieran y evitar cualquier riesgo tanto para las hermanas como para los chicos incluida Linn.
Al otro lado de la ciudad se encontraban ellos, Aria había averiguado la ubicación exacta de su paradero comunicándose inmediatamente con Lea y así llegarán a su ayuda. Sabía perfectamente que su hermana y ella estaban en peligro esta vez, lo peor de todo era que el amor de su vida y el de su hermana estaban involucrados también, eso era como un puñal en su corazón pues no quería que ninguno cercano a ella saliera lastimado incluso si ella daba su vida; sabía con totalidad que su hermana no lo permitiría, estando ambas en el mismo dilema una por la otra, su mente trabajaba el doble por encontrar la manera de salir de ahí y dar fin a todo de una maldita vez. ¿Qué acaso no merecían estar en paz? ¿Vivirían toda la eternidad "luchando"? La hora acordada por Vasile para procesar el hechizo se acercaba y con él, su muerte lo hacía, nunca se perdonaría si a Baekhyun le sucediese algo frente a ella sin haberlo evitado.
Linn se lamentaba el haber recibido esa magia por parte de su padre y a la vez que lo maldecía por condenar a sus nietas de tan cruel manera, ellas no merecían tener esa habilidad y estar en peligro toda su larga vida, pues al haber más seres sobrenaturales cualquiera iría tras ellas. No quería ser parte de eso, quería que sus sobrinas salieran sin ningún rasguño, incluso si ella moría primero se aseguraría de que ambas estuvieran en paz finalmente. Al contrario, ella no poseía fuerza como sus sobrinas, era simplemente una bruja que utiliza la magia pero fuera de ella, no era buena para escapar.
____.
Seguía atada tanto de pies como de brazos con estas horribles cadenas, varias veces intente soltarme pero de alguna u otra manera las cadenas se ceñian cada vez más teniéndome prácticamente inmóvil y eso me frustraba de cierto modo. Yo soy la única que debe estar aquí y no mi hermana, ni mucho menos Baekhyun y Sehun, ellos no tienen porque sufrir.
Vasile entró con Emil tras él como siempre lo seguía, se colocó en el centro dirigido a nosotras.
—El tiempo se acaba. Tic tac tic tac —imitó el sonido de un reloj. —¿Algo que decir antes de...tú sabes? —preguntó.
—¡Pudrete! —dije moviéndome desesperada.
Vasile solo sonrió sin mostrar sus dientes y miró a Emil quien con tan solo un asentimiento por parte de su jefe se dirigió hacia Linn.
—¡Aléjate de ella! —rugió Aria pero al igual que yo las cadenas no la dejaron moverse demasiado.
—No le haremos nada, en cuanto haga todo lo que le pida —lo último lo dijo viéndola. —¿No es cierto, Linn?
Ella asintió. —Haré lo que quieras pero a ellos no los lastimes, por favor —suplicó volteando a vernos.
—Yo no lo haré —se calló un momento. —Tú lo harás —la tocó con su dedo señalándola. —Estoy completamente seguro de que conoces el hechizo de la inmortalidad, así como lo que necesitas.
—¡No! Me niego a hacerlo —se negó rotundamente Linn lo que enfureció a Vasile.
—¡Hazlo! Si no quiso por las buenas, es hora de hacerlo por las malas —Emil asintió aventando a Linn al piso para después detenerse frente a Sehun. Otro vampiro estaba con Baekhyun. —¡Hora del show! —ordenó y ellos comenzaron a golpearlos.
Gritaba a mas no poder, Aria hacia lo mismo.
—¡Espera...! —grité y Vasile levantó la mano haciendo que los demás se detuvieran.
—¿Si? —se acercó levantando su vista pues al estar colgada era más alta.
—Lo..lo hará. —susurre mientras agachaba mi cabeza.
—¿Disculpa? ¿Qué dijiste? —sabía que si me había escuchado solo quería que lo dijera de nuevo.
—Dije que lo hará. —aseguré en tono alto. Linn me volteó a ver negando repetidamente. —Hará el hechizo, pero déjalos en paz. Ellos no tienen que estar aquí, me tienes a mí haz lo que quieras y también deja libre a mi hermana —tragué saliva.
—¿Qué? ¡No! Ni de coña te dejaré ____, estamos en esto juntas. ¡Hazlo! —Aria me dio una mirada de "Te apoyo".
—Ya las oíste, comienza con tu trabajo —ordenó a lo que Linn nos volvió a ver entonces ambas le asentimos dando nuestro consentimiento.
Linn se posicionó al centro donde había una gran mesa, todo lo que era necesario para el hechizo estaba ahí, cuencos llenos de sustancias raras a excepción de tres.
—Necesito su sangre...—susurró pero Emil la escuchó. Con ayuda de un soporte, cortó con una daga mi mano izquierda para que de ella saliera mi sangre llenando el cuenco para enseguida hacer lo mismo con Aria solo que la mano derecha. —Y la tuya —le dijo a Vasile quien no tuvo problema y rápidamente mordió su muñeca.
Prosiguió con el hechizo y cada que pronunciaba el conjuro sentía como mi cuerpo se debilitaba, cerré los ojos por el dolor que sentía, era como si me estuvieran quemando. Trataba de no gritar soportando lo más que pudiera.
Omnisciente.
El conjuro estaba funcionando, las hermanas se debilitaban más y más hasta sentirse incapaces de mover un solo músculo, su color de ojos desaparecía; el rojo que antes había en ellos ahora no existía más, el café claro tomaba su lugar haciéndolas parecer como humanas nuevamente, Vasile, en cambio, sentía como su cuerpo producía otra nueva sensación. Pero a la mitad del conjuro algo pasó, Linn se detuvo y las hermanas sentían como el dolor cesaba.
Fuera, los Salvatore habían llegado y con ellos Chanyeol quien tras insistir múltiples veces terminó convenciendo de que lo dejarán ir con ellos, debía salvar a sus amigos a como diera lugar; no era fuerte en comparación con ellos pero serviría como distracción. Se introdujeron silenciosamente dentro de la cabaña haciendo que unas que otras tablas rechinaran de lo viejas que estaban, Lea interrumpió el conjuro que anteriormente citaba Linn más a fuerza que de voluntad propia, obligada por Vasile quiso continuar pero notó por medio de Lea que no lo hiciera e impidiera el conjuro, apoyada por Lea entre las dos brujas citaron otras palabras que Vasile no pudo entender dando a entender que seguía el conjuro cuando en realidad estaban haciendo lo contrario, revertian el conjuro.
—¿Qué está pasando? ¿Qué hiciste? —Vasile le dio una bofetada a Linn quien por el impacto cayó al suelo mientras su labio sangraba.
—Lo que debí hacer desde un principio —dijo ella desde el piso. —Nunca lastimaría a mi familia —hizo que Vasile se enfureciera y la golpeará.
(MÚSICA MAESTRO 🔊PONGAN LA CANCIÓN DE MULTIMEDIA Y SIGAN LEYENDO ⤵⤵)
Fue entonces cuando los Salvatore entraron abriendo de golpe la gran puerta de madera que al chocar con la pared hizo un estruendo previniendo a todos los presentes.
—¿Qué...? ¡No! ¡Ataquen! —ordenó furioso. De todo el lugar aparecieron vampiros los cuales se lanzaron sobre los hermanos.
Uno de ellos trato de atacar a Lea quien ayudaba a Linn a levantarse del piso, Lea hizo un movimiento con su mano haciendo que de los ojos y nariz del vampiro saliera sangre le había provocado que su cerebro explotará. Chanyeol entró valiente pero al toparse con un vampiro y éste le mostró sus colmillos se arrepintió y salió corriendo refugiándose detrás de su novia.
—¡Ah no, con él no te metas idiota! —dijo la vampira yéndose encima del contrario y acabando con él para volver con Chanyeol.
—¡Cariño, ahí están! —señaló por entre todas las capas negras que se divisaban a lo lejos a Baekhyun y Sehun tirados aún con las sillas.
Se escabulló entre todos los puñetazos, mordidas y patadas que se lanzaban hasta llegar donde ellos y con ayuda de Blair lograron soltarlos. Pero como habían sido golpeados estaban débiles por lo que se quedaron en un rincón lejos del desorden.
Vasile por su parte estaba que echaba chispas del enojo, se dirigió a donde estaban las hermanas aún atadas y quiso clavar una daga en el pecho de la mayor, a unos centímetros de lograrlo una mano lo detuvo impidiendo que cometiera su objetivo. Era Damon, uno de los hermanos.
—A ella no la tocas, imbécil —amenazó éste con suficiente antelación.
—Están demasiado débiles, no podrán conmigo —se soltó del agarre de Damon para enseguida clavar la daga en su estómago haciendo que retrocediera unos pasos.
Luchó contra Vasile pero éste logró romperle el cuello a Damon, por suerte reviviria en unos momentos, fue hasta donde estaban Chanyeol y ellos, Blair le hizo frente pero Vasile solo la lanzó como si de una muñeca se tratase.
—No me estorbes niño, y muévete —advirtió pero Chanyeol se mantuvo firme en su posición protegiendo a sus amigos. Dos vampiros más llegaron a su lado.
—¡No! —dijo firme el muchacho, por dentro estaba que moría del miedo.
—Si así lo quieres —Vasile se encogió de hombros y junto a los otros dos se llevaron a los chicos al centro de la mesa para enseguida gritar y hacer que todos se callarán. —¡Alto!
La pelea cesó al oírlo, hasta las hermanas pusieron atención aún estando débiles hasta para mantener sus párpados abiertos, Blair despertó e iba a ir por su novio pero se detuvo al oír a Vasile decir:
—Un paso más y los asesinó —advirtió colocando sus uñas en el cuello de Chanyeol.
Nadie decía nada por lo que siguió hablando:
—Quiero que todos se queden quietos o los tres se mueren ¿Oyeron? —gritó.
—¡Nunca obtendrás lo que quieres! —habló en un hilo de voz Linn.
—¡Pero claro que lo haré con o sin tu ayuda! —respondió aún tomando a Chanyeol.
Silenciosamente Damon despertó y siendo cauteloso se deshizo de los dos vampiros a su lado, en ese momento Chanyeol sacó fuerza para safarse y correr con Blair, lastimosamente Sehun y Baekhyun no tuvieron la misma suerte, Vasile tomó a Sehun aún débil por los golpes que recibió y se giró quedando frente a ____.
—Mira lo que has causado pequeña ___, tu novio a punto de morir por tu culpa ¿No te parece egoísta de tu parte? Ha estado en peligro estando a tu lado y aún así lo dejaste, muy mal ____ ahora serás testigo de su muerte por tu causa —la chica se movía desesperada.
Sehun, por su parte, sabía que haría lo que fuera por ella. Con la simple mirada le decía lo mucho que la amaba y lo que estaba dispuesto a dar, lágrimas caían por sus mejillas despidiéndose de ella y con sus labios susurró un "Te amo" dirigido a su novia, a su bonita como él la llamaba diario, ____ se movía queriendo salir de esas cadenas que la apretaban. No quería ver a su alma gemela morir de esa manera y menos por su culpa, Sehun había traído felicidad a su vida desde que lo conoció, la hizo sentir de otra manera, cada que estaba con él se sentía como en otra galaxia. Sehun cerró los ojos, esperando el momento.
—Despidete de tu amor —iba a hacerlo, se acercaba cada vez más, cuando estaba lo más cerca un estruendo lo distrajo.
____ había gritado haciendo que todos voltearan, el polvo envolvió a todos y una vez se disipó notaron que en la piedra donde debía estar, no había nada. Las cadenas colgaban a la mitad, se había soltado. Aria tampoco estaba, nadie supo cuando salió. Vasile volteaba inquieto, sin entender lo que estaba ocurriendo cuando una bola de fuego lo ataca alejándolo de Sehun.
—¿Qué...?—no pudo ni hablar cuando alguien lo toma por el cuello levantándolo en el aire, sus pies no tocaban el piso por ahora.
—No soy tan débil como pensabas ¿no? Te mostraré que soy mucho más fuerte —amenazó ____.
Varios vampiros intentaron irse contra ella, aún con una sola mano libre pues con la otra sujetaba a Vasile logro derrotarlos a todos, definitivamente era poderosa y muy fuerte.
—Te enseñaré que con él nadie se mete y menos si estoy viva —sonrió orgullosa. Abrió la ventana que estaba cerca con ayuda del aire y puso una mano del vampiro directo a los rayos de Sol.
—¡Ahh! —se quejó. Su mano comenzó a tornarse de un tono oscuro, quemándose.
—¿Eso dolió? Lo siento, creí que eras inmune al Sol —se carcajeó. —¡Hasta nunca, espero que el infierno te sienta bien! —dijo para ponerlo al Sol aún tomándolo del cuello, Vasile inmediatamente se quemó quedando en cenizas.