PENSÉ QUE YA LO HABIA SUBIDO EL CAPÍTULO, PERDÓN
Maratón ³|⁴.
— Te ves adorable y jodidamente sexy cuando estás a la defensiva — me habla al oído causando escalofríos por toda mi espina dorsal.
— Miau — le guiñó un ojo y le sonrió coquetamente.
— Me vas a venir matando — reí ante su comentario.
— Ya en serio tengo que ir a clase, nos vemos luego — me despido de el con un beso en la mejilla y el gruñe — ¿Que pasa?
— Lo hiciste mal...
— ¿Que hice m—
Sus labios pronto me interrumpen besando los míos, siento de nuevo la corriente eléctrica y esta se intensifica cuando siento que su lengua delinea mi labio, abro mi boca permitiendo el paso y el sonríe en medio del beso, una mano suya va hacia mi cintura y la otra en mi mejilla acercándome más a el, suspiro y el sonríe por mi acción, me muerde el labio y siento mis piernas temblar al sentir como mi lengua toca algo extraño, poco a poco me voy dando cuenta que es su arete de su lengua. Maldición, se siente increíble, juego con el varias veces dándole vuelta y murmura algo que no soy capaz de entender.
— Esta prohibido esa clase de afecto en la zona de estudio jóvenes — la dura voz de un hombre me hace separar de golpe, mirando asustada viendo como un maestro nos ve desafiante.
— Perdoné, mi culpa — dice Sam antes de que pudiera hablar — Iba a decírtelo pero no creo que me hayas entendido — dice y reaccionó que eso iba a decir cuando nos estábamos besando.
— A sus salones, ahora, debieron entrar hace mucho
— ¿Que te pasó en el rostro? — pregunte rápidamente al ver a Ethan. Su rostro estaba golpeado, su ojo morado y labio hinchado.
— Me peleé con un imbécil —gruñe enojado sentándose en la banca. Estábamos en deportes y el por lo que veo se saltó la clase ya qué tiene su mochila aún puesta.
— ¿Con quien?
— No sé, simplemente se me abalanzó a mí y no me dio oportunidad de golpearlo como quisiera, lo hubiera dejado destrozado.
— Estamos hablando de su rostro ¿verdad? — pregunto confundida. El me mira raro y después se ríe.
— ¡Que guarra mi amiga! Claro que sí mal pensada.
— Interprete mal, mi culpa.
— He creado un demonio, en fin, lo hubiera dejado destrozado pero no se pudo.
— Qué mal.
— Creo qué ya sé quien era — dice después de unos minutos de silencio — Creo que era novio de uno de con los qué me acosté, pero no se cual de todos.
— Que puta eres — me río carcajadas — te van a contagiar de algo.
— La vida es todo un riesgo mi amiga.
— No creo qué a Noah le gustase que seas así si fueran pareja.
— No me lo recuerdes, no se que hacer, no sé si podría cambiar solo por el.
— Arriésgate.
— Hoy hablaré con el pero si me manda a la mierda te culpare a tí — me mira entrecerrando los ojos — y te robaré a tu chico.
Mi chico.
Qué bien se oye eso.
— ¿Espera qué? ¿me robarás a Sam? — el asiente — no creo que el le vaya a ese lado. Me tiene a mi.
— Tengo mis maneras de convencer — baila sus cejas hacia arriba y abajo y lo comprendo.
— ¡Ugh, que asco! —le aviento un empaque vacío de unos chocolates y el los esquiva.
— Ni asco, te asombraría al oír como gritan, serían como actores porno — se ríe de su propio comentario y yo hago una mueca.
— ¿Eres el activo? — no se por qué me ha entrado la cotilla de la curiosidad.
— No el pasivo — dice sarcásticamente — ¡claro que soy el activo! Aunque aveces si soy versátil, por qué cuando entra si du...
— ¡Mucha información, gracias! — lo interrumpo enseguida.
— De lo qué te pierdes, te podría dar consejos.
— No gracias — le sonrió falsamente y el sonríe mostrando su blanca dentadura.
— ¿Has terminado? — me pregunta Sam en cuanto terminó de cerrar la puerta con un candado la puerta de mi empleo.
— Listo, ya podemos irnos — verifique que estuviese bien cerrado después de eso ya pude caminar a lado de Sam que me esperaba ansiosamente. Hoy tuve que cerrar yo, le comenté a Sam y se ofreció a venir por mí ya qué era muy tarde mi salida, 12:37 de la noche.
Estaba frío pero eso ya no fue problema cuando entre al carro y Sam puso la calefacción.
— ¿Puedo poner música? —pregunto señalando el radio y el asiente.
— Siéntete libre de hacer lo que quieras. — dice dándome una rápida mirada antes de volver a poner la vista en la solitaria calle.
La canción de trumpets suena rápidamente y me volteo hacia la ventana mirando hacia fuera.
Siento como mi teléfono vibra y veo que es un mensaje de Ethan.
» ¿Que haces? « que pregunta tan más...
» Estoy en el carro con Sam, ya vamos para allá « escribo rápidamente y se lo envío.
» Genial, te espero «
— ¿Algún novio? — me pregunta Sam sacándome de mis pensamientos y voltearlo a ver.
— Ya quisiera — respondo divertida.
— ¿Ah sí? — yo asiento — me estoy aburriendo, di algo.
— Algo.
El suelta una risita y me mira rápidamente — Ya veo por qué no tienes novio.
— Eso dolió.
— Un día estaba oyendo qué mis padres discutían sobre un error y me quedé pensando qué—...
— ¿Hablaban de tí? — interrumpí intentando ocultar mi risa pero me fue imposible cuando vi su rostro.
— ¡Era un chiste que te iba a contar pero tenías que decir tus tonterías! Me arruinaste mi chiste.
— Es un don — chasquie mi lengua mientras le guiñaba el ojo y el reía.
Corto pero es necesario que sea así por qué si no tendría que cambiar algunas cosas de el otro capítulo.
Nueva historia, podrán encontrarla en mi perfil, thanks babys.
Por cierto, en el siguiente capítulo todo el drama de intensifica y todo lo bueno comienza ya.