Aunque vengan mil, te seguiré eligiendo a ti.
Creo que me desmayaré en cuestión de segundos.
Sé que a veces digo que no me gustan las personas cursis, que me empalagan sus cursilerías pero ahora me derrito frente a él.
Nunca nadie me ha pedido una cita y mucho menos de esta manera tan romántica.
El pulso se me acelera de manera desenfrenada y tengo miedo de morir de un infarto.
Una enorme sonrisa se dibuja en mis labios sin poder evitarlo.
-Sii! -exclamo y él sonríe abiertamente. Agarro la rosa negra que me está extendiendo.
Él se levanta y planta un tierno beso en mi mejilla.
-Hoy a las siete? -pregunta en voz baja. Asiento y vuelve a sonreír.
-Yos? -una voz chillona me desprende de los ojos de Jaden. Volteo a ver a Maqui.
-Maqui! -exclamo con una sonrisa, ella solo se frota los ojos -Porqué ya estás despierta?
Ella no me mira, sus ojos están clavados en Jaden.
-Se estaban besando? -pregunta sonriendo y despertando completamente.
Jaden se tensa a mi lado y yo doy un paso hacia ella.
-No digas estupideces, ven aquí princesa -le digo y ella corre hacia mí con sus brazos extendidos. La cargo sosteniéndola con mi cintura.
Jaden levanta una ceja.
-Cómo te llamas? -pregunta Maqui.
Él aclara su voz antes de responder.
-Jaden Syre -espeta y ella frunce el ceño.
-No vas a preguntar mi nombre?
Jaden se encoge de hombros.
-Jaden... -digo en todo de advertencia.
-Es broma -espeta y rápidamente me arrebata a Maqui de los brazos y la hace girar por los aires.
-Jaden! Jaden! -grita ella sin parar de reír.
Sonrío al verlos tan tiernos juntos.
-Sé que te llamas Maqui, preciosa -dice Jaden cuando finalmente deja de hacerla girar.
-Eres muy guapo -dice ella y yo me ruborizo.
Él se percata de eso y sonríe hacia mi dirección.
-Creo que alguien está celosa -espeta y yo lo golpeo en el hombro.
Él baja a Maqui y antes de despedirse le susurra algo al oído, ella emite una risita y se va corriendo a su habitación.
-Qué le has dicho? -pregunto levantando una ceja.
-Yo? Absolutamente nada.
Pongo los ojos en blanco y él sonríe.
Se acerca a mí para besar mis labios antes de irse pero me aparto rápidamente y lo empujo fuera de la casa.
-A las siete -espeto y le doy un leve beso en la mejilla antes de cerrar la puerta.
Ahora tendré que soportar todo el día esta sonrisa imborrable.
(...)
Solo faltan cinco minutos para las siete.
Cinco minutos!!!
Creo que tendré un ataque de ansiedad! Moriré por los nervios y al final ni siquiera iré a la cita porque estaré en la morgue.
Debo calmarme. Qué me está pasando? Yo no soy así.
Los chicos no me emocionan y no me derriten los ojos de nadie y mucho menos me estremecen las cursilerías.
Pero debo admitir que este no es cualquier chico, no son cualquier ojos y cuando son sus labios los que pronuncian cursilerías, son lo más hermoso en este mundo.
Escucho leves golpes en la puerta de la habitación y me apresuro en abrirla.
-Wow, Yoselyn, estás muy bonita! -exclama Georlia y yo le sonrío.
Me he puesto un vestido negro que me llega hasta por encima de las rodillas, es holgados en la pollera y ajustado en el pecho, me lo he puesto con mis converse favoritos y he dejado mi cabello como está. Nada nuevo.
-Gracias -respondo.
-Él está esperándote en la sala.
Siento un nudo en el estómago inmediatamente.
Bajo a la sala junto con Georlia mientras mi corazón se acelera cada vez más.
Y entonces lo veo.
Está guapísimo. Me quedó petrificada unos segundos observándolo.
Lleva sus jeans, una camisa negra remangada hasta los codos y el cabello algo alborotado, justo como me encanta.
Me deslumbra con una enorme sonrisa he inmediatamente me lleno de confianza.
Bajo los escalones hasta él y rápidamente me roba un beso de los labios.
Me ruborizo y volteo a ver a Georlia quien está sonriendo abiertamente.
Maqui seguramente está durmiendo, aunque aún es temprano.
-Me he quedado ciego -espeta.
Frunzo el ceño.
-Porqué?
-Porque la luz más radiante del todas las galaxias está frente a mis ojos -contesta guiñándome un ojo.
No puedo evitar soltar una carcajada.
Nos dirigimos a la puerta y Georlia camina tras nosotros. Cuando finalmente estoy lista para irme, me despido de él.
-Cuídala -espeta Georlia.
Jaden se pone serio y sostiene mi mano.
-Con mi vida -responde antes de salir.
Pongo los ojos en blanco aunque no puedo evitar sonreír ante aquel cliché.
La motocicleta de Jaden está aparcada justo frente a la casa.
-Lo siento -espeta y yo frunzo el ceño -No sabía que traerías vestido.
Mierda! Sabía que hice todo mal.
-Soy una estúpida -susurro.
-No! -exclama Jaden. -Estás preciosa!
Me ruborizo nuevamente.
Porqué estoy tan nerviosa?!
Subo a su moto sin ningún problema, el vestido no es tan corto como para que se me vean las bragas.
Él no deja de sonreír y empieza a resultarme bastante sospechoso.
-A dónde iremos? -pregunto curiosa.
-Es una sorpresa.
Me sujeto con fuerza rodeando el cuerpo de Jaden mientras acelera y nos perdemos en la oscuridad de la noche.
Cada vez estoy más perdida, y me sorprendo al ver que entramos entre los árboles. Estamos en el bosque.
Porqué? Acaso no podía ser un bonito restaurante? O su casa?! O quizás la vereda de algún puesto de comida rápida?
Mi indignación se extingue al distinguir luces en el medio del bosque.
Él aparca la motocicleta un poco antes y caminamos hacia las luces.
Me quedo boquiabierta al ver la escena.
“El bosque está muchísimo mejor"
Hay una mesa redonda con un hermoso mantel blanco y unos cubiertos en la mesa junto con unos platos tapados con algo de metal. Por los árboles que están alrededores hay luces, focos para ser exactos, millones de ellos en lis arboles que nos rodean, haciendo un circulo grande en el que nos encontramos en en centro. Es demasiado hermoso. Un pequeño camper se encuentra a un lado, no tan apartado de la mesa.
-No lo puedo creer -susurro.
-Pues créelo -espeta agarrándome de la mano y guiándome hasta tomar asiento.
Ahora que me fijo solo hay una cuchara a lado de cada plato.
“Juro que si es sopa te mataré"
Él se apresura en abrir la tapa metálica de ambos.
-Es budín de fresas -se ruboriza -No sé si te guste, pero sé lo mucho que amas los postres... Y las fresas.
Cómo sabe eso?!
Oh Santo Cielo! Es tan adorable!!!
Comemos en silencio y lo pillo un par de veces observándome babeando, hipotéticamente hablando.
-Porqué me miras así? -pregunto.
-Tu belleza me deslumbra -espeta.
Ya hemos comido todo y ahora solo conversamos y reímos un poco.
-Serás tan tierno toda la noche? -le pregunto levantando las cejas.
El ríe antes de contestar.
-Creo que no -responde en un tono seductor que hace que todo mi cuerpo tiemble enseguida.
Oh por Dios! Extraña su temperamento irregular!
-Ah, no? -lo provoco -Y si no serás tierno, que serás?
Él sonríe mientras niega con la cabeza. Al instante se levanta y me tiende una mano.
-Por favor, no me digas que quieres bailar sin música, porque juro que voy a golpearte -espeto en broma.
Él sonríe aún más.
-Bueno, si querías sexo solo lo hubieras dicho -responde el muy cínico.
-Jaden! -lo regaño y el sonríe.
-Es broma -se defiende y besa mi frente.
-Bailar está bien -respondo rápidamente aceptando su mano.
Al levantarme hace un raro movimiento atrayéndome hacia él y mis manos terminan sobre su pecho, rápidamente aprovecha la situación para rodear mi cintura con sus brazos.
Nos movemos ligeramente en el mismo eje.
-Eres la chica más preciosa que he conocido -espeta con su rostro muy cerca del mío.
Frunzo el ceño con desaprobación.
Él lo piensa un segundo antes de volver a hablar.
-Eres la chica más inteligente que he conocido.
Y morí de un infarto, mentalmente. Quise gritar de alegría, pero en vez de eso, fundí mía labios con los de él.
Mi intención solo fue darle un tierno beso, pero inmediatamente él sostiene mi nuca para que no me separe de él.
Fundimos con fuego de deseo nuestros labios y todo el cuerpo me empieza a quemar. Siento cosquillas en mi vientre que van bajando lentamente.
De repente me encuentro incapaz de alejarme de él. Solo quiero tenerlo más cerca de mí, quiero sentir su cuerpo, sentirlo a él y sentir su amor.
Hundo mis dedos en su cabello de la manera que sé que lo vuelve loco, el beso se intensifica rápidamente.
Nos separamos solo un segundo para tomar aire.
-Eres preciosa -espeta jadeando.
Una de sus manos baja a mi pierna y empieza a trazar pequeños círculos en él. Me estremezco totalmente bajo sus manos.
Reclamo sus labios como si fueran míos y muerdo con fuerza su labio inferior.
-Eres mío Jaden Syre -susurro.
Él hace un sonido raro con la garganta mientras asiente.
Está extasiado?
Besa mis mejillas y lentamente va bajando por mi cuello.
-Dime si quieres que me detenga -espeta con la respiración agitada.
Niego con la cabeza mientras él se acerca a mis pechos.
La cabeza me da vueltas y siento unas repentinas punzadas de deseo.
De repente se detiene y una gemido sale de mis labios a modo de reclamo.
Él sonríe y rápidamente me besa en los labios, de repente me carga en sus brazos y yo suelto un grito de sorpresa.
Me lleva en el camper y me acuesta adentro, él queda encima mío.
No me he dado cuenta de que el vestido se me ha subido hasta la cintura y mis bragas quedan al aire libre.
Él sujeta mi vestido y me observa como esperando mi autorización. Asiento rápidamente y me saca el vestido por arriba. Luego él desabrocha su camisa e inmediatamente se me hace agua en la boca.
Santo, Santo, Santísimo Cielo!
Es demasiado perfecto e instintivamente me cubro el cuerpo con los brazos.
El frunce el ceño.
-Qué ocurre? -pregunta.
Desvío la mirada de la suya apenada.
-Es que... -respiro hondo tratando en vano de calmar mi agitada respiración -Yo soy gorda y además... Emm, pues tengo tantas cicatrices...
Él besa mis labios interrumpiéndome.
-No estás gorda -responde -Y si lo estuvieras, eso no me importaría, son solo etiquetas. -yo seguía sin poder mirarlo a los ojos -Yos, amo cada una de tus cicatrices, son parte de ti, y yo amo absolutamente todo de ti. Son marcas de lucha, de una guerra que al final terminarás ganando.
No pude evitar volver a mirarlo a los ojos después de eso.
-Te amo, Jaden.
Saqué mis manos de mi cuerpo y acaricié su definido torso.
-Quiero esto -susurré -Estoy lista.
Eso fue suficiente para que él volviera a besar mi cuello.
Me besaba con locura, con deseo excesivo y eso me volvía loca, porque sabía que él me deseaba tal y como yo era.
Con un ágil movimiento desprendió mis sostén y me lo quitó. Nuestros torsos chocaron y millones de chispas recorrieron todo mi cuerpo logrando que me estremeciera aún más.
Él se apartó un segundo y se bajó los jeans junto con el bóxer.
Quedé boquiabierta, y traté todo lo que pude de parecer que no me importaba.
-Pervertida -susurro mientras sonreía.
Sonreí también y lo golpeé ligeramente en el hombro.
Volvió a besarme en los labios y cuando bajó a mi cuello, aprovechó para bajarme las bragas.
Unas imágenes de Will pasaron por mi mente, pero me obligué a mí misma en no pensar en eso. Ya pasó, y ahora tengo a alguien que me hará feliz, alguien me ayudará a superar todo el pasado.
Salgo de mi pequeño ensimismo y veo que Jaden tiene una pequeña bolsa metálica entre sus dedos y la desgarra con sus dientes.
Que tonta soy, es un condón.
Río por mi estupidez.
Él se lo coloca rápidamente y baja todo su cuerpo sobre el mío, sin hacer fuerza.
-Segura que quieres hacer esto? -me pregunta. Su voz está desesperada y podría jurar que está rezando por una respuesta positiva.
Sonrió y asiento.
-Te quiero a ti.
Y en un segundo puedo sentir todo su cuerpo.
Esto es lo máximo que dos personas pueden llegar a acercarse y estoy feliz porque es él el único que pudo lograr conquistar mi alma.
Cierro los ojos con fuerza ante el dolor.
-Tranquila -susurra en mi oído.
Asiento e instintivamente una de mis manos acaricia su rostro.
Abro los ojos y descubro que me está mirando con preocupación.
-Es la primera vez que haces esto? -me pregunta.
Asiento y sus ojos se intensifican aún más.
Besa mi frente que tanta ternura que las burbujas en mi estómago empiezan a aumentar.
Él se queda quieto un segundo observándome con sus hermosos ojos.
El dolor sigue latente pero al tenerlo tan cerca de mí, no me importa mucho.
Lentamente sostiene la mano que tenía en su mejilla y entrelaza nuestros dedos, lleva mi mano hasta sus labios y la besa.
-Te amo tanto -susurra.
Pone nuestras manos entrelazadas a un costado y se niega a soltarme.
Sonrío.
-Te amo tanto -susurro también.
Y me dejo embriagar por cada centímetro de su cuerpo.
Holaa! Cómo están?
Les gustó el capítulo de hoy? Jajaja... ♥
Es el más largo, creo.
ESTOY FELIZ POR YOS Y JADEN!
Quiero enviar un saludo a MariiChavesMadrigal Una de mis fieles lectoras! Gracias por todo el apoyo! Te quiero! ♥