Mire desde la cama como Hanna terminaba de peinar su cabello, fue inevitable fruncir el ceño y chasquear mi lengua provocando que ella me viera.
-No te arreglas por historia ¿Cierto, Hann? -Ella volcó sus ojos y esbozo una sonrisita tonta.
-Es por Cameron. -Confezo soltando un suspiro. - La verdad es que el es muy lindo.
-Lo es.
Hanna dejo de ponerse sus aretes y volteo a verme con su rostro ilegible, yo baje mi mirada al suelo e hice un mohín.
- ¿Tambien te parece lindo? -Asenti con mis labios fruncidos sin levantar mi mirada, ella gruñó.
De cualquier manera no se porque Hanna se preocupaba tanto, yo no era competencia para ella.
Ella era la mejor siempre, la capitana de las porristas, la más inteligente, la popular.
Yo simplemente era: La hermana aburrida de Hanna Sellers.
-Esta bien si te gusta. -Me encogí de hombros. - No se resistirá a tus encantos.
-No está bien Blair. -La rubia negó con desaprobación y se sentó a mi lado. - Escuchame, si te gusta o por lo menos te parece lindo yo te prometo no meterme con él.
Achine mis ojos y ladee mi cabeza. - ¿Cual es el truco?
-Queda terminantemente prohibido para las dos, coquetear y sobre todo besar a Cameron Olsen.
-Esta bien. -Accedi después de unos minutos.- confió en ti Hanna,tu nunca rompes las promesas.
-Tú tampoco lo haces, Blair.
Entonces, el abrazo que nos estábamos dando fue interrumpido porque alguien abrió la puerta bruscamente, y en solo centésimos pudimos ver el cuerpo de nuestros primos en la habitación.
Los miramos atónitas, ellos habían estado en Seattle durante hace ya más de un año.
- ¡Blake, Jace! -Chillé empujando a Hanna y corriendo a los brazos de los hermanos Haider.
Sabia que en cualquier momento lloraría.
-Si lloras yo también lo haré y no quiero hacerlo, Blair. -Dijo Jace sin dejar de abrazarme.
-No puedo creer que estén aquí.
-La sorpresa nos salio bien. -Le dijo Blake a su hermano.
-Jamas vuelvan a irse, por favor. -Suplico Hanna como una niña y ese fue el último detalle que faltaba para que nuestras lágrimas aparecieran.
-No lo haremos, volvimos y esta vez es definitivo.
-Ya somos mayores de edad. -Comenzo a explicar Jason.- Usher nos dijo que podía darnos empleo en Dante's y nos alcanzara con el sueldo de ambos para mantener el departamento, nuestros padres accedieron a ayudarnos los primeros meses.
Esa había sido la mejor noticia del mundo, era mejor que ganar la lotería o tener diez IPhones. La magia del momento fue interrumpida por un chillido de Hanna, todos volteamos a verla.
-Tengo que estar en la casa de los Olsen desde hace cinco minutos.
-¿Quienes son los Olsen?
-Los nuevos vecinos, remplazan a los Jones.
-¡Al fin murieron! -Festejo Blake.
-No murieron, idiota. -Dije rodando mis ojos.
Hanna soltó un gruñido y empujo a Blake haciendo que este se tambaleara, fruncio su ceño y acomodo su gorrito de lana.
-Existen los modales ¿Sabes, prima?
- ¡A la mierda con tus malditos modales!
Hanna salio rápidamente de la habitación olvidándose por completo de la presencia de mis primos en el lugar, los tres nos encontrábamos mirando hacia la puerta con el ceño fruncido.
-Eso fue tan extraño... -Comento Jace.
-Es Hanna....
-Cierto.
El resto de la tarde había decidido pasármela con mis primos, a pesar de que Cameron me había dicho sobre empezar clases de batería no seria capaz de cambiar a Blake y a Jace por él.
No cambiaría una tarde con mis primos ni por un millón de dólares.
Aunque pesándolo bien.... Un millón es mucho dinero.
¡Podria comprar muchas guitarras!
-Entonces, así es como mi relación más larga llego a su fin. -Termino de contarme Blake.
-Fueron tres semanas eternas....
-Pero valieron la pena, ella me daba hamburguesas gratis en Mc Donals.
-Veamos si entendí ¿Saliste con una chica sólo por la comida?
-Sip.
-¿Y cómo se lo tomo?
-Pues, me dijo que era una mierda y para intentar arreglarla le dije "¡Fuiste mi relación más larga, animo!"
- ¿Animo? ¿Es en serio, Blake?
-Si...
Solté un suspiro de cansancio al darme cuenta de que Blake seguía siendo un caso perdido, para ser sincera el era bastante apuesto, su cabello era largo casi hasta los hombros, siempre lo cubría con algo. Y a pesar de que era un holgazán, esos días de gimnasio le favorecían bastante.
En cambio, Jace era más tímido al principio, su cabello era corto y no tenia tantos músculos como Blake, aún así Jason tenía su encanto además de su increíble talento para el canto, tenía una voz que enamoraría a más de una y estoy segura de que ya lo había hecho.
Estábamos en el jardín admirado la piscina, el día daba para nadar un rato pero supuestamente cuando Hanna volviera iríamos a la playa.
-Y ¿Qué tal tu vida amorosa, Blair? -Pregunto Jace. Amaba como hablaba Jace, su voz era suave y transmitía tranquilidad.
Solté una risa sonora burlandome de su pregunta.
¿Vida amorosa? ¿Yo?
-Lo de siempre. -Me encogí de hombros.- Ósea, nada. ¿Y tú, Jace?
-Bueno el otro día me regalaron un pez...
-Apuesto que ya murió. -Jace me miro mal.
-De hecho, lo tuvo en una bolsa por cinco horas, pobre pequeño.
-¡Jace! -Chillé.- Eso es algo que me esperaría de, Blake.
-¡Oye!
Volvi a reír y esta vez apoye mi cabeza en el brazo de Blake, Jace se sumo a mi risa mientras el mayor se cruzaba de brazos y mostraba furia en su rostro.
-¡He vuelto! -Los gritos de Hanna interrumpieron, como era de costumbre los ojos de todos se fijaron en ella. -No lloren, mamá ya esta aquí.
-Genial entonces, mamá, lavame los calzones. -Reimos por el comentario de Blake, salvo Hanna quien soltó un quejido asqueada.
- ¿Como te fue con los Olsen? -Pregunte con una ceja alzada.
-Bien, ya terminamos el trabajo. Y por cierto, Cameron pregunto por ti.-Frunci el labio mientras ahora ella, levantaba las cejas y se cruzaba de brazos.
-Oh si, el va a darme clases de batería.-Respondi despreocupada.
-Al fin conseguiste profesor. -Por mis adentros estaba agradeciéndole a Jace, asentí y me levante de mi lugar para ir a buscar limonada.
-Recuerda nuestro pacto, Blair.
-Lo sé, lo sé.
-¿De que diablos están hablando? ¡Las mujeres son tan complicadas! -Chillo Blake.
-A ambas nos parece atractivo el nuevo vecino. -Hanna se encogió de hombros. - No nos gusta, solo es algo físico.
-Por Dios, ese cabrón no lleva aquí ni un día. -Se quejó Jace poniendo los ojos en blanco.
-¿Celoso, primito? -Me burle, sus mejillas se tornaron de un tono carmesí
¿Debia preocuparme por ello?
-Iremos a la playa. -Le dijo Blake a Hanna interrumpiendo la tensión del momento.- Pueden invitar a esos, Olsen.
-Le mandare un mensaje a Skyler.
-¿Por qué no simplemente, cruzas la calle? -Jace achino sus ojos.
-Callate, Jason.
Levantamos todo lo que habíamos llevado para entrar a la casa, Blake y Jace quedaron en pasar por su departamento antes de ir a la playa.
-Skyler dijo que irían, por favor gorilas, comportense.
Ni bien ese comentario salio de la boca de Hanna, me prepare psicológicamente para lo que sería reaccionar a un Cameron Olsen sin remera.
Voten y comenten *O* próximamente, trailer de la historia :)