Todo estaba planeado, su cita sería a las 21 horas, por lo que tenia 12 horas para que saliera perfectamente: primero tendría que esperar a Konohamaru que vinera a su casa para que la limpiará, para que mientras él, comprará detalles que habría en su cita, después se arreglaría y lo demás los dos se encargaría. Sí, todo tendría que salir bien, y eso no era opción para Naruto.
Entre esos pensamientos, lo volvió a la realidad un par de golpes en su puerta, a lo que se dispuso a averiguar quien los hacia en la entrada principal de su departamento.
-Konohamaru, llegas tarde-dijo el rubio serio.
-Buenos días también para ti, Naruto-bufó.
-Bueno pasa rapidos que hay muchas cosas que debes hacer-hizo que lo siguiera.
-Relajate Naruto, todo va salir bien-le dijo al ver qie estaba tenso. -Después de todo, soy un ninja, esto es pan comido-le mencionó con tono de orgullo.
-Necesito que recojas y acomodes todo, limpies lo que hace falta, tires lo que ya no sirve y sobre todo recojas mi habitación-recalcó la ultima petición.
-Creo que exageras, ni que fuera a enfrentar a Madara-aseguro divertido.
-Peor aún-esbozó una sonrisa, para guiarlo a su recamara, mostrandosela al momento de abrir la puerta.
-¡¿pero qué?!-dijo impactado. -¡¿cómo puedes dormir en un lugar tan repugnante?! Esto esta peor que el ambiente de la 4ta guerra mundial ninja!-dijo aún perplejo.
-Bueno, como sea, te encargo mi hogar ¿esta bien?-decía poniendose su chaqueta color negra, alistamdose para salir.
-¡¿pero Naruto, cómo rayos quieres que...?!
-Gracias Konohamaru, nos vemos-interrimpió al chico y salió de su departamento.
-¡Maldición! Ya se me hacia raro la buena paga que me ofrecía ese...
EN EL MERCADO DE KONOHA
Estaba el rubio buscando lo mejor para su cita, siendo detalloso, esa era una de las virtudes que a Sakura le gustaba de él, aveces se lo decía. Por eso con suma concentración buscaba con la vista cualquier idea de producto adecuada para la ocasión. Sí el chico había madurado, y era serio cuando se lo proponia...
"Ohh justo lo que necesito" se dice en sus pensamientos mientras ve algo que lo
convense: una sex chop (tienda de sexo). Sonrié y decide entrar.
EN EL DEPARTAMEMTO DE SAKURA
Se encontraba la chica, en su habitación, mirandose al espejo, en pijama aún, aún estaba pensando si era adecuado todavia ir a la cita con su amado, la culpa la consumia por completo, tenia unas enormes ganas de decirle que sería padre de su hijo, pero ella lo único que queria era que alcanzara la felicidad que tento se merecía. Suspiró y decidió a ir a escojer de una vez por todas que se pondría para esta noche.
-Con que estas saliendo con Naruto ¿eh Sakurita?-dijo recargada en la puerta de la habitación de su amiga.
-¡Ino!-respondió sorprendida al verla. -El que te diera las llaves de mi casa, no significa que puedas entrar cuando quieras sin mi consetimiento.
-Si claro, como sea-dijo sentandose en su cama, rodando los ojos. -Pero aún no me has contado como te fue con Naruto, o mejor dicho, ¡NO ME CONTASTE QUE TENIAS ALGO CON ÉL! SE SUPONE QUE SOMOS AMIGAS-le gritó a la pelirosa.
-No te pongas así, que si mal no recuerdo, últimamente has estado muy ocupada-se excusó, haciendo sonrojar a su amiga.
-Bueno, bueno, esta bien supongo que estamos a mano-dijo rápidamente antes de que prosigiera con mas.
-Por cierto ¿has visto a Sai?-preguntó curiosa.
-¡¿a-a Sai-i?!-trago en seco. -Claro que lo he-e visto-decía entre risas traviesas y algo de picardía.
-¡¿no me dijas que....?!
EN EL MERCADO DE KONOHA.
"Seguro y esto funcionará" pensaba un rubio saliendo de una tienda erótica. ¿qué que habia comprado? Con unos cuantos productos que le servirian para este mes.
-¡ehi! ¡Naruto!-la voz de aquella persona, hizo centrarse ella..
-Kiba ¿que tal?-le saludó.
-¿qué haces saliendo de una tienda de sexo?-preguntó en forma de burla. -Que bo te han dicho que en estos puesto venden cosas para personas con parejas, o no me dijas que-hizo una pausa con una carcajada. -¡te compraste algun consuelo!
-¡claro que no!-decía avergonzadamente molesto. -¡yo no tengo necesidad como ciertas personas que conozco!
-¡¿qué insinuas?!-dice molesto.
-Me encantaría explicarte las mas de 20 razones que el porqué estas solo, pero ahora estoy muy ocupado con mi 'cita'-recalcó la última palabra, para seguir con su camino.
-Idiota-susrró enojado, también siguiendo con su camino. -Yo no estoy solo-hablaba solo. -Es decir yo tengo a Hinata... bueno como amiga, pero la tengo, aunque las cosas pueden cambiar, después de todo, si Naruto lo esta intentando, yo también-dijo decidido dirigiendo a otro lugar del que tenía planeado.
EN EL HOGAR DE SAKURA
"Por fin Ino se fue" pensaba apurada, "rayos, apenas y me dió tiempo de arreglarme" dijo mirandose al espejo; llevaba un vestido elegante no escotado, que le llegaba a la mitad de la pierna; algo ajustado de color rojo y unos botines de color negros con poco tacón, al.estilo natural (osease nada de maquillaje) porque al pensar de ella no lo necesitaba, ya que sus labios tenia un color natural y sus ojos eran resaltantes a favor del color de ojos; con el cabello suelto, acomodado de un lado.
La hora ya habia llegado, pronto Naruto estaría por recojerla a su primer intento de convenserla del mes, la chica estaba nerviosa muy nerviosa; pero debía de ser fuerte, ya que tenía que recordar que esto lo hacía por él. Suspiro se miro de nuevo al espejo y por inercia toco su abdomen al recordar su posición como proxima madre. Del susto provocado por el ruido del timbre, salió de trance y se acomodó el vestido y recordó su plan que consistia en: salir con a donde seguramente la llevaría a comer ramen, después quiza a dar un paseo, despedida y listo.
-Hola Naruto-sonrió al abrir la puerta.
-Buenas noches, Sakura-chan-dijo recorriendola completamente con la mirada. -Te vez hermosa siempre, pero esta vez te luciste.
-Gracias Naruto-dijo saliendo de su hogar cerrando la puerta. -¿nos vamos?
-Claro-dijo sigiendola.
5 MINUTOS DESPUÉS
Ya habían llegado a una zona centrica de Konoha donde fueron a paso lento, hasta llegar al famoso restauran favorito del chico., donde se encontraban palticando y a la vez comiendo, hasta que...
-¡Sakura!-exclamó una voz al parecer con mucha emoción, haciendo voltear a ambos.
-¿lee?-dijo la chica, identificado al dueño del llamado.
-¿qué quieres cejotas?-mencionó el rubio, para que se diera cuenta de que era la compañía de Sakura.
-Ohh, hola Naruto ¿interrumpo algo?-se sentó junto a ellos.
-Pues...-
-No mucho-interrumpió a su compañero de equipo, amablemente.
-Bueno, entonces no les molestará que les haga compañía-dijo con mucha confianza.
-No para nada-respondió rápidamente la chica.
-Ya que-bufó con molestia.
-Bien, ¿y cómo has estado Sakura?-preguntó prestando mucha atención a la joven.
-Se la ha pasado de maravilla-respondió Naruto por ella. -Fue uno de sus mejores días.
-¿y tú, cómo lo sabes?-cuestionó extrañado el joven.
-Facíl, por que yo le hice sentir felicidad y mas cuando lo hicimos-dijo guiñandó el ojo a Sakura.
-¡¿cómo?!-decía exaltado.
-Lo que Naruto quiere decir es que... -por un movimiento ' no calculado' tiró la salsa de soya en los pantalones de cierto chico.
-¡oh, pero que tonta!-dijo 'arrepentida'. -En verdad lo lamento Lee.
-Descuida-le dedicó una sonrisa. -Ahora vengo, voy a limpiarme.
-Esta bien-esbozó una sonrisa que desapareció al momento de irse el chico al baño, para ver a Naruto molesta.
-¡wow Sakura-chan!-dijo sonriente. -A mi no se me hubiera ocurrido que pudieras hacer eso solo por mi.
-No lo hice por ti, idiota-susurró molesta. -¡¿en qué rayos estabas pensando al momento de decirle sobre nosotros?!
-Bueno, justamente en eso, hay que demostrarle que tu eres mía y yo soy tuyo ¿no lo crees?-mencionó seguro.
-¡pero no por eso puedes decirle a todo mundo que lo hicimos!-levamntó la voz haciendo que todos voltearán a su dirección.
-No, ya no-rió, mientras que la chica se ruborizaba al máximo.
-Naruto ¡tú...