Eran aproximadamente las cinco de la tarde cuando Jimin decidió llamar a Jungkook.
-Mocoso-dijo apenas entro la llamada.
-Hola enano, ¿qué necesitas?
Jimin suspiro un momento.- A las siete y media te paso a buscar, mejor que estés listo, no quiero esperarte.- y sin escuchar respuesta alguna, corto.
Jungkook, quien se encontraba en su departamento, quedo mirando su teléfono anonadado.
-¿Pero qué le pasa? ¿Pasarme a buscar?- se preguntó, pero luego de pensar unos minutos recordó que era sábado-. Oh, hoy es lo de Tae...no tengo porque ponerme nervioso, además vamos con Hoseok Hyung...- al terminar de decir esto, decidió ir a tomar una ducha y elegir lo que se pondría en la noche.
Opto por una remera de mangas cortas, un buzo rojo y unos jeans negros. Jimin por su lado eligió un suéter gris y unos jeans azules.
Las horas pasaron rápidamente, lo único que no pasaba eran los nervios de Jungkook, los cuales iban incrementando. Él podía darse cuenta de que cada vez estaba más consiente de Jimin.
Se oyó golpear la puerta, Jimin ya había llegado. Jungkook corrió rápidamente hacia unos de sus espejos y se peino un poco, luego se colocó perfume y fue a abrir.
-¿Por qué tardaste tanto?
-Estaba poniéndome el buzo-mintió.
-¿Qué es ese olor? ¿Te pusiste perfume?-preguntó, mientras se acercaba y olía el cuello del menor.
-Estas muy cerca- dijo Jungkook, empujándolo suavemente. El menor sabía que podía llegar a ruborizarse si lo tenía tan cerca, y es algo que no quería para nada.
-Como sea, vamos- dijo, empezando a caminar por el pasillo.
Jungkook al ver a Jimin, se percato de algo.
-¿Y Hoseok hyung?
-Ya está con Tae, vamos nosotros dos solos. ¿Por qué? ¿Te intimido?
-No...solo quería saber- respondió, tratando de ocultar su sonrisa.
Ambos bajaron por el ascensor hasta la puerta de entrada.
-Un momento... ¿Cómo iremos? Hyung se llevo su auto ¿no?
-Espera aquí un segundo, voy a buscar nuestra limusina.
-¿De verdad?
Jimin lo miro serio, y luego se rió.
-Claro que si.
Jungkook espero unos minutos en la entrada.
-Aquí esta- dijo Jimin, quien traía una bicicleta de color negra.
-Wow, es un limusina de edición limitada ¿no?- dijo con sarcasmo.
-Claro que sí, lo mejor para el pequeño príncipe conejo.
-Muy gracioso-dijo agarrando el manubrio.
-¿Qué haces?
-Voy a manejarla, ¿qué esperas? Dudo mucho que tú vayas a hacerlo.
-No, no lo harás. Yo la voy a manejar. ¿Recuerdas que aún te quedan unas horas siendo mi esclavo? bueno, que no manejes es una orden.
-Ya lo había olvidado, pero bueno, si insistes, toda tuya- dijo mientras soltaba la bicicleta.
-Bien, ahora siéntate.
-Espera, espera, acabo de notarlo, pero esto no tiene asiento trasero. ¿Dónde esperas que me siente?
-Sobre mis piernas, ¿no es obvio?
-No será cómodo, estaré moviéndome en todo el viaje, además de que te pesare. Vayamos en taxi.
-Es una orden.
-Pero...
-Hazme caso.
-Pero que testarudo- protestó-. Bien, acércate a la pequeña pared de allá, así puedo subir.
Jimin pedaleo hasta el lugar indicado, en el cual Jungkook estaba parado.
-Sube.
-¡Ya va!- exclamó, para luego sentarse sobre las piernas de Jimin- Esto es incomodo...y vergonzoso-se quejó.
-Agárrate del manubrio para no caerte.
Una vez que se acomodaron, comenzó a andar, pero cuando estaban a mitad de camino el mayor comenzó a sentir frió.
-Hay mucho viento, me congelo-comentó Jimin.
-Te jodes por querer venir en bicicleta.
-Abrázame- ordenó Jimin-No puedes desobedecer.
Jungkook revoleo un poco los ojos, pero sin quejarse, como pudo se dio media vuelta y lo abrazo. El más joven realmente estaba aliviado de que sea una carretera vacía, porque en esos momentos estaba completamente avergonzado.
-¿Mejor?-preguntó Jungkook, quien miraba la parte de atrás de la carretera.
-Mucho mejor, además hueles muy bien...me gusta tu perfume, aunque me distrae, me dan ganas de morderte- dijo de forma sincera.
-¡Deja de ser así! Solo ladras-dijo, moviéndose bruscamente, haciendo mover la bicicleta.
-Tonto, si te mueves así nos vas a tirar, quédate quieto. Ya veremos luego si solo ladro- dijo, sin quitar su vista del frente.
-¡Bien!- respondió, haciéndose el ofendido.
[...]
Eran las ocho y cuarto cuando por fin llegaron a la casa de Taehyung.
-¡Tae!- gritó Jungkook mientras golpeaba la puerta.
-Hola chicos, pasen, ¿Qué tal el viaje?
-Bien, un poco frió- comentó Jungkook.
-¿Frió?- preguntó Hoseok.
-Es que vinimos en bici- respondió Jimin-. Toma, ponla en tu patio- dijo entregándole la bicicleta a Taehyung.
-Pero...esto no tiene asiento trasero...- dijo sonriendo.
-No preguntes- dijeron ambos a unisonó, haciendo reír a sus amigos.
-Lo importante es que llegaron- dijo Hoseok-. Bien, iré a llamar a las pizzas, ustedes vayan a sentarse.
Jimin se sentó de un lado del sillón y Jungkook del otro.
-No es como si te fuese a comer si te sientas al lado mío.
-¿Por qué me sentaría al lado tuyo teniendo todo el sillón libre?
-Porque cuando se apagan las luces los fantasmas prefieren a las personas que están solas en las esquinas del sillón.
-Cállate...los fantasmas no existen- dijo Jungkook dudando; realmente era un miedoso, pero no iba a admitirlo.
-Como tú quieras- dijo Jimin, levantándose del sillón, yendo hacia la cocina, dejando solo a Jungkook.
-¡Tae! ¡Jimin me está haciendo bullying psicológico!
Y al decir esto, las luces se apagaron.
-Esto no es gracioso Jimin.
-¿Quién es Jimin?- se escuchó preguntar en su oído.
Jungkook comenzó a gritar, entonces las luces se prendieron, ahí pudo ver a Jimin a pocos centímetros de él, y a Taehyung riéndose desde el interruptor.
-¡¡Idiotas!!- gritó, mientras comenzaba a pegarle al mayor.
Jimin lo tomo de las muñecas y se sentó al lado de él.
-No te preocupes, yo te cuidare del cuco- dijo riéndose.
Jungkook le pego una vez más, y después se quedo mirando hacia el suelo.
-Hey Kook, mira, ¿qué es eso?-dijo Jimin señalando el techo.
-Yo no veo nada.
-Justo ahí.
Después de decir eso, Jimin rápidamente saco su celular y tomo una selfie.
-¿Qué haces?
-Nada, solo quería una foto- dijo tranquilo.
Jungkook se limito a observarlo.
-En una hora traerán las pizzas- dijo Hoseok, sentándose en la esquina del sillón.
-¿Quieren cerveza?- preguntó Taehyung.
-Te ayudo a traer- dijo Jungkook, mientras se paraba del sillón.
-Bien.
Luego de un par de tragos, se paso la hora. Eran cerca de las nueve y media cuando por fin trajeron las pizzas.
-¿Cuándo pondrán la película?- preguntó Jimin, mientras comía su porción.
-Mejor cuando terminemos de comer. No quiero que revoleen nada-dijo Taehyung.
Tal y como dijo, al terminar colocaron la película de terror.
-Iré a apagar las luces- comentó Hoseok.
-¿Es necesario?-preguntó Jungkook.
-Puedes abrazarme si tienes miedo- dijo Taehyung, el cual se encontraba al lado.
Jimin lo miro de forma celosa, y este se dio cuenta. Seguido de eso, se paro para ir al baño, y al volver, se sentó en medio del menor y de Taehyung, el cual se rió. Jungkook lo miro unos segundos, pero no dijo nada.
-Ya no puedes abrazar a Tae. ¿Qué harás?
-Tengo esto- dijo, mientras agarraba un almohadón.
-No, no lo tienes- dijo, revoleándolo lejos.
-Estén callados, pondré play-dijo Taehyung, mientras abrazaba a su novio.
Una vez empezada la película, casi todos la veían atentamente, digo casi todos, por el hecho de que Jimin permanecía viendo a Jungkook, quien por momentos le daba una que otra mirada al mayor.
-¡¡Aah!!-gritaron todos excepto Jimin, el cual no estaba prestando atención.
Jungkook pensó que en ese mismo momento el mayor comenzaría a burlarse, pero en vez de eso, simplemente lo vio sonreír al televisor.
Luego de algunos sustos, Jungkook estaba a punto de convertirse en una bola gigante, tenía los pies sobre el sillón y se abrazaba a sus rodillas. Estaba a punto de cerrar sus ojos cuando de repente sintió un pequeño golpe en uno de sus muslos, haciéndolo sobresaltar. Por consiguiente dirigió su mirada hacia aquel lugar, viendo que era la mano de Jimin la cual le daba golpecitos.
Jungkook no entendía que era lo que el mayor pretendía, por lo que decidió verle a la cara. Sus miradas se encontraron, así que avergonzado aparto la vista hacia abajo, ahí noto que la mano de Jimin se abrió.
-Dame tu mano- susurro.
Jungkook lo dudo un segundo, pero luego tomo la mano de Jimin, la cual se encontraba cálida.
Siguieron tomados de la mano hasta que la película termino, cuando Hoseok prendió las luces, Jungkook se paró y se fue al baño.
-Jimin, iremos a traer unas cervezas y algún postre, ya venimos- dijo Taehyung.
-Ok, los espero.
Una vez en la cocina, Taehyung y Hoseok pusieron la pastilla dentro de una de las botellas, después agarraron unos postres de chocolate y los llevaron al comedor.
-Esta es para ti, y esta para Kookie- dijo Taehyung, entregándole las botellas.
-Gracias- dijeron ambos.
Jungkook empezó a tomar sin parar, Jimin al ver esto le quito la botella.
-Estas tomando muy rápido- comentó.
-Jimin déjalo, es su botella- dijo Taehyung, ansioso.
-Ahora es mía- dijo, para luego beber lo que quedaba del contenido.
-Espero que no lo destroce...- susurro Taehyung a Hoseok.
-¿De qué hablan?-preguntó Jimin.
-Eh, nada, que nos vamos a dormir. ¿Ustedes que harán? Prepare la habitación de invitados por si se quedaban.
-¿Juntos?
-Pero si en el hotel ya durmieron juntos, ¿qué tiene?
-¿En serio?- preguntó Taehyung sonriendo.
-¡Hoseok hyung!- se quejó Jungkook.
-Ups, se me salió- dijo, mientras se escapaba con Taehyung.
-¿Vamos a dormir?-preguntó Jimin.
-Está bien. Es la puerta del fondo- señalo-. Ahora voy, antes tomare agua- comentó mientras se iba-. ¿Por qué tendré tanto calor en un día de frió? ¿Sera fiebre?- se decía a sí mismo.
-Pensé que era el único- comentó Jimin, quien apareció en la cocina sin su suéter, solo con su remera blanca.- Dame agua esclavo.
-Ten...disfruta tu última orden, en diez minutos serán las doce y ya no tendrás poder sobre mí.- dijo Jungkook con una sonrisa triunfante.
-Entonces tengo que aprovecharlos- comentó mientras tomaba la muñeca de Jungkook, para luego arrastrarle hacia la habitación.
[...]
¡La intriga ataca de nuevo! (?)
En el próximo capítulo se viene lo interesante (? (-u-)