Chanyeol llegó al instituto tarde, como acostumbraba estos días. Odiaba fumar pero últimamente necesitaba un paquete de cigarrillos por día, era lo único que le mantenía con vida. Apagó el cuarto cigarro que se fumó esa mañana contra la fachada del instituto, se colgó la mochila de un hombro y entró suspirando. Los pasillos estaban vacíos y al parecer la clase de matemáticas ya había comenzado, dio un segundo suspiro y subió a la azotea tirándose sobre el suelo contemplando el cielo; las nubes se movían velozmente y el viento balanceaba el pelo de Chanyeol, este no pudo evitar maldecir en voz alta.
—¡Joder! —gritó incorporándose y golpeando su mochila.
Chanyeol estaba irritado y molesto consigo mismo, había conseguido su principal objetivo; hacer que Baek se enamorara de él y que sufriera por su amor. Pero Chanyeol no podía evitar sentirse de esa manera, así de irritado.
No veía a Baekhyun desde el día del lago, desde que le empujó al agua para ver como este se hundía. Ahora el bajo estaba encerrado en una mierda de cárcel apartado de él, rodeado de tíos locos, quizás más peligrosos que él mismo. Chanyeol estaba preocupado. Chanyeol estaba desesperado. Chanyeol estaba confuso. Chanyeol sin saber cómo o por qué se había vuelto a enamorar de Baekhyun como años atrás y eso no estaba entre sus planes.
—Eh, con que estabas aquí. —Chanyeol giró su enorme cuerpo para ver como Kris caminaba hacia él con el pantalón caído como siempre.
—Eres tú... —dijo desanimado.
—Ahh, que efusividad. ¿Acaso esperabas a tu amigo loco ese?
Chanyeol se levantó del suelo a la velocidad de la luz y elevó el cuerpo de Kris como si fuera una pluma, mientras clavaba una fría y odiosa mirada en la cara del rubio.
—Como vuelvas a llamar a Baekhyun loco... te juro que te mato. —Kris tragó grueso, no estaba acostumbrado a que alguien elevara su cuerpo de metro ochenta y ocho.
—Joder, como estamos hoy, eh... —Chanyeol le soltó de la camisa y se introdujo las manos en los bolsillos.
—Déjate de bromas, no estoy de humor —murmuró Chanyeol, Kris rodo los ojos.
—Quizás un poco de sexo te venga bien.
Chanyeol no se pensó dos veces la insinuación de Kris y lo cogió de las manos, le empujó contra la pared de la azotea besándole en los labios, rabioso, desesperado. Estaba muy húmedo, notaba su entrepierna dura y caliente empujando contra la tela de su boxer, pero por más que besara los labios de Kris, Chanyeol no era feliz besándole, simplemente disfrutaba follando al rubio. En verdad disfrutaba follando con cualquiera que atravesara su campo visual, ya ni le importaba nada, necesitaba calmar su mal humor y Kris siempre estaba dispuesto a un buen polvo.
Solo era sexo por sexo, no había una relación seria entre ellos. En verdad Kris era otro de los muchos a los que Chanyeol se follaba como sustitutos de Baekhyun, pero ninguno de ellos había hecho a Chanyeol feliz, ninguno había creado esa tibia sensación en su estómago. Ninguno de ellos era Baekhyun y eso ponía de mal humor a Chanyeol.
El gigante aprovechó para girar el cuerpo de Kris y bajarse la cremallera de su pantalón a la vez que bajaba el pantalón de Kris y le penetró con fuerza, embistiéndole con dureza, haciéndole gritar y gemir mientras le pedía que parase. Pero Chanyeol no podía escuchar nada mientras metía y sacaba con rudeza su pene de Kris, solo podía imaginarse como serían los gemidos de Baekhyun si le hiciera eso, como sería su cara sonrojada, su pelo revuelto, sus labios pronunciando su nombre... Todas las veces que Chanyeol tenía sexo pensaba en Baekhyun. Y de nuevo se volvía a culpar porque Baekhyun no estaba ahí para hacerle sentir todas aquellas emociones.
—Joder, me has hecho daño —se quejó Kris encendiendo un cigarrillo mientras se subía los calzoncillos y el pantalón, Chanyeol cerró su cremallera del uniforme y miró a Kris con dureza.
—Solo ha sido un polvo, nada más. No te hagas ideas equivocadas.
Chanyeol se dio la vuelta, alejándose de él y Kris arqueó una ceja, pero ignoró el comentario del moreno, después sonrió y dolorido del culo se sentó en el suelo, deseando encontrar a alguien que no fuera tan agresivo como Chanyeol y no le penetraran el culo hasta sangrar.
El gigante bajó por las escaleras hasta llegar al pasillo principal, ahora era el cambio de clase y todo estaba repleto de alumnos en sus taquillas sacando libros. Chanyeol se quedó parado en la esquina donde estaba la taquilla de Baek mirándola con nostalgia, de pronto vio a alguien caminar hacia él.
—Eh, Kai.
Kai elevó la mirada.
—Hola, Chanyeol —dijo Kai abriendo su taquilla al lado de la de Baek y dejando unos libros.
—¿Cuándo vas a ir a ver a Baekhyun? —Kai rió ante la pregunta de Chanyeol y eso le molestó al gigante.
—Pero si le ingresaron ayer mismo, no habrá visitas oficiales hasta igual meses si su recuperación es buena.
—¡Meses! —gruñó Chanyeol, Kai se asustó. Jamás había visto a Chanyeol gritar.
—Es lo mejor, Chanyeol, debe estar solo una temporada... Además ¿Tú estuviste hablando con el médico, no? —Chanyeol maldijo y empujó su hombro contra el de Kai adrede mientras dejaba el lugar.
—¡Pero qué le pasa ahora a este! —se quejó Kai.
Chanyeol pateaba todo lo que se interponía en su camino, e incluso varios estudiantes fueron empujados pero ninguno de ellos quería hacer frente al gigante y menos cuando sus ojos gritaban que tenía ganas de pelea. Chanyeol necesitaba reprimir esa ira, esas ansias de partirle la cara a alguien o se volvería loco y acabaría cometiendo alguna locura.
Chanyeol no podía quitarse de la cabeza que no podría ver a Baekhyun en meses y que todo eso era por su propia culpa, necesitaba ver a Baekhyun ya mismo o se volvería loco.
Todavía más loco.
—¡¿Qué?! ¡De verdad!
Un grito llamó la atención de Chanyeol, este se paró cerca de la puerta de la sala del director asomó un poco la cabeza y vio a Oh Sehun en el despacho con una sonrisa enorme.
—Sí, la petición del centro ha sido aceptada. Podrás hacer tu trabajo de ciudadanía ayudando a tu hermano en el centro —dijo el director, Chanyeol escuchaba atentamente.
—¡Es genial! Podré ir al internado psicológico de Seúl —gritó Sehun, Chanyeol abrió los ojos al escuchar esa nueva información.
Sehun nunca era efusivo, más bien era un tío serio y borde, verle así de animado hizo que Chanyeol sospechara. Pero había algo que le interesaba más, en Seúl solo había un internado psicológico de adolescentes y ese era en el que estaba Baekhyun ingresado.
Cuando Sehun salió caminando demasiado alegre por el pasillo Chanyeol aprovechó su fuerza para cogerlo por el cuello y estamparle contra la pared y su cuerpo para que no escapara.
—No hagas ningún ruido por tu bien —dijo cubriéndole la boca con su mano. El pecho de Sehun subía y bajaba a toda velocidad.
—¡Acaso te has drogado! ¿A qué viene todo esto?
Chanyeol no se inmutó por los gritos de Sehun, se aclaró la garganta y dio un paso hacia atrás.
—Puede que me haya drogado pero eso a ti no te importa... Ahora contéstame. ¿Qué es eso de lo que hablabas con el director?
—No tengo por qué decirte nada, mamón.
—Espero que alguna vez te hayan roto las napias... porque si es tu primera vez te va a doler bastante.
Chanyeol sonrió de perfil, justo necesitaba desprenderse de toda su ira y gracias a Sehun iba a conseguirlo, le dio un golpe certero en la zona labial y parte de la nariz. Sehun salió desprendido golpeando su cabeza contra la pared, se llevó la mano a la zona golpeada, su nariz estaba chorreando sangre como un grifo y se sentía mareado, pero a pesar de tener ganas de venganza sabía que sería inútil, Chanyeol estaba incontrolable.
—Es para el trabajo de ciudadanía, tenemos que ayudar a estudiantes con problemas psicológicos y a mí me aceptaron en el internado de mi hermano.
—Quiero ir a ese internado.
—Pero solo aceptan a dos personas y la otra plaza ya la tiene otro chico de clase. —Los ojos de Chanyeol se cerraron levemente.
—Consígueme la plaza en ese centro —le susurró en tono amenazador al oído antes de irse, Sehun recuperó la compostura, era una de las pocas veces que había sentido miedo.
***
Baekhyun no había pegado ojo en toda la noche, aquel internado médico era una jodida locura. En vez de ayudarle con sus problemas en menos de un día había vuelto a Baek más paranoico e irracional de lo que ya era. Las palabras de su compañero de cuarto aún rebotaban en su cabeza "Nadie sale virgen de este sitio, nadie se va sin mojar así que por tu bien si no quieres ponerle los cuernos a tu novio, novia o lo que sea que tengas ya pueden meterte un tapón por el culo porque aquí todo es sexo salvaje".
"SEXO SALVAJE, SEXO SALVAJE, SEXO SALVAJE"
Aquellas dos palabras retumbaban en la cabeza de Baekhyun con la fría y ronca voz de Chanyeol.
Por más que el bajo intentara olvidar a su gigante, este siempre inundaba su mente de pensamientos y no eran precisamente pensamientos tiernos eran pensamientos guarros, sucios y lascivos. Baekhyun no podía olvidar aquella sensación de cuando Chanyeol le tocó en su propio cuarto, cuando le folló duro contra los lavabos de aquella fiesta e incluso deseó que aquella noche en la cabaña del lago cuando durmieron juntos le hiciera el amor, pero no estaba previsto que Chanyeol intentara asesinarle ahogándole.
—Eh, tío, hay que ir a desayunar. —Baekhyun reprimió un gemido cuando vio a Luhan bajar desnudo de la litera de arriba mirándole.
—Vale, pero ponte ropa encima, por favor —dijo tapándose, evitando mirarle. Luhan sonrió y empezó a ponerse el uniforme.
Los dos salieron al pasillo, el cual estaba lleno de chicos todos vistiendo aquel horrible uniforme mientras caminaban bostezando hacia la sala del comedor. Antes de entrar a la dicha sala varios guardias registraron los bolsillos del uniforme de todos los internos.
—Que asco, odio que me toquen el culo esos guardias de mierda. —Baek parpadeó al ver como aquel chico moreno le hablaba con total confianza.
—Él es Suho —dijo Luhan, el tal Suho bajó la mirada hacia Baek.
—Holis. —Baek intentando sonreír amistosamente pero el mismo se dio cuenta que sonrió con una mierda de sonrisa falsa.
—Holis. —Suho le imitó con sarcasmo.
Baek dio un pequeño suspiro, hacer amistades nunca había sido su punto fuerte.
—¿Te has enterado de la última noticia? —empezó Suho mientras echaba comida a la bandeja.
—No, ¿tiene algo que ver con esta mierda de comida? —pregunto Luhan mientras miraba con asco la comida del catering.
—Dejando la mierda a un lado... al parecer vamos a tener a chicos trabajando con nosotros —contó Suho bajando el tono de voz, Baek movía su bandeja detrás de la de Luhan cogiendo los mismos alimentos que él.
—Vaya novedad, más tíos en un internado de tíos —se burló Luhan.
—Al parecer son de un instituto y vienen a hacer no sé qué trabajo de ciudadanía, ya sabes "ayudar a una buena convivencia es ayudar a los locos del internado" esas mierdas de colaborar, amistad, ayudar y esas pijotadas, ¿entiendes?
—Bueno si miramos el lado positivo estará bien, hace tiempo que no mojo y estoy harto de todos vosotros comiéndome el culo —sonrió Luhan, Baek empezó a toser atragantándose con las palabras de Luhan.
—Lo dices como si no te gustara, luego bien que gimes, marica —dijo riendo Suho, Baek parpadeó varias veces y tragó grueso con la mirada perdida en la comida.
—Estás asustando al nuevo, mejor cállate. —Luhan pasó su mano por los hombros de Baek que estaba pálido como si hubiera visto a un muerto.
—Lo siento. Puedes pasarte por mi cuarto cuando quieras, te daré algo bueno —sonrió perversamente Suho a Baek, este sonrió de perfil mientras uno de sus ojos tenía un tic incómodo y parpadeaba, quedando como un gilipollas. De nuevo.
"Puede que después de todo consiga olvidarme a Chanyeol... puede que hasta consiga un nuevo novio o quizás que solo me revienten el culo"
Los tres chicos se sentaron en la larga mesa con sus bandejas y empezaron a comer intentando no vomitar aquella papilla de color grisáceo.
—¿Sois ninfómanos? —preguntó de pronto Baek, Luhan escupió el agua que estaba bebiendo contra la cara de Suho.
—Mierda... lo siento, pero es que su comentario me hizo gracia —se disculpó Luhan entre carcajadas, Baekhyun abrió los ojos sorprendido cuando Suho se limpió la cara y cogió de la camisa a Luhan elevando su delgado cuerpo.
—Eh, piojosos, las peleas están prohibidas.
Baek elevó la mirada para ver a alguien que reconocía muy bien. Kyungsoo iba de nuevo vestido con su uniforme y balanceando una porra que parecía tener una batería eléctrica, mientras fumaba de nuevo aquellos cigarrillos oscuros.
—Solo me estaba enseñando su fuerza —dijo Luhan sonriendo, Suho le bajó al suelo.
—Ya, claro... —bufó Kyungsoo, después bajó la mirada hacia Baek con sus enormes ojos analizándole, de nuevo—. Nuevo, ¿qué tal tu primer día?
—Digamos que no era lo que me esperaba —dijo asintiéndose a sí mismo, Kyungsoo elevó una ceja.
—A las doce ven a mi despacho —dijo con tono brusco, Baek le miró directo a los ojos y simplemente asintió, Kyungsoo sonrió y se fue observando a más internos, controlándoles.
—¿A qué ha venido todo eso? ¿Le conoces? —preguntó Suho mirando a Baek, este le miró confuso.
—Claro, él me enseñó esta mierda de lugar ayer.
—Pero su expresión era... —continuó Suho.
—Le pones —dijo Luhan cruzándose de piernas.
—¡¿Qué?! —gritaron Suho y Baek.
—Kyungsoo es la zorra más maricona de todo este antro de locos, me han dicho que folla como un Dios. —Suho tragó saliva mientras se mordía el labio.
—¿Y qué tiene eso que ver conmigo?
—Acaso eres idiota. ¡Le has visto! Kyungsoo es como un adonis. Todos, absolutamente todos, están deseando meterle el pene o que se la chupe —explicó Luhan.
—Pero yo no quiero que nadie me chupe la entrepierna, yo quiero irme de aquí y a poder ser con un certificado de "persona normal".
—Un poco de sexo nunca viene mal —rió Luhan.
Baek empezaba a creer que se habían confundido de internado al llevarle.
—El sexo siempre es bien recibido —dijo Suho llevándose las manos a la nuca.
Después de ingerir los alimentos, Baek fue pitando al baño y no pudo aguantar sus ganas de sacar esa horrible mierda que había comido de su cuerpo, empezó a vomitar sobre el váter apoyando sus manos que temblaban sobre este y cuando por fin pudo expulsar todo aquel veneno, Baek se mojó la cara varias veces. Ni él mismo se reconocía en el espejo, se veía delgado, con ojeras de no dormir y con el pelo como un nido de pájaros, daba asco. Pero solo de pensar que tenía que ducharse desnudo junto a todos esos chicos más salidos que una esquina su culo temblaba.
De nuevo se empezó a sentir solo, como cuando espiaba a Chanyeol desde la ventana, Dios, cuanto extrañaba verle caminar con sus largas piernas, verle estirando su pelo hacia atrás revuelto... El simple hecho de que sus ojos parpadeasen ya creaba cosquillas en la barriga de Baek.
—Joder... como te odio, Chanyeol —escupió Baek mirándose al espejo.
Otra mala jugada de su mente retorcida hizo que Baek empezara a ver a Chanyeol reflejado en el espejo, con su pelo negro sus grandes ojos y sus pequeños labios rosados. Baekhyun reprimió un gemido dando temblorosos pasos hacia atrás.
"Extrañas que te coma la polla"
—¡No! ¡Sal de mi cabeza! —gritó Baek mirando a Chanyeol en el espejo.
"No mientas, Baek. Adoras que te folle, adoras que te trate como si fueras una zorra"
—Eres un gilipollas.
Pero Baekhyun se sentía más gilipollas por hablarle al espejo, pero todo lo que sus ojos veían era tan real que por mucho que su cabeza le dijera que era una ilusión, su corazón estaba palpitante de ver a Chanyeol y su pene estaba forcejeando contra la tela de su ropa interior después de escuchar aquellas guarradas de Chanyeol.
"¿Cuántas pajas te has hecho pensando en mí? Yo muchas pensando en ti"
Baek abrió los ojos como platos mientras una tibia sonrisa se cruzó por su cara, le dolía demasiado la polla. Sí, estaba duro y caliente, tanto que la tela de su mierda calzoncillo le hacía daño, sin pensárselo dos veces introdujo su mano entre su pantalón hasta llegar a su destino.
Empezó a masajearla fuera del pantalón subiéndola y bajándola, subiéndola y bajándola tantas veces como su cuerpo le pedía, marcó un ritmo lento pero excitante. Sus manos estaban frías por el agua y al contacto con la piel caliente hacía que su vello se erizase. Sentía toda la base de su ingle húmeda y viscosa, y la temperatura de su cuerpo no hacía más que elevarse cada vez que graves gemidos y alientos forzados salían de la boca de Baekhyun cada vez que pronunciaba el nombre de Chanyeol cuando se masturbaba.
—Ojalá estuvieras aquí, Chanyeol —susurró Baek entre berridos mientras se tocaba la punta.
"No tardaré mucho en verte"
Aquella frase, aquellas simples palabras hicieron que Baekhyun llegara a su clímax, y vertiera su propio líquido seminal sobre su cuerpo y parte del suelo del baño.
Baek subió la mirada para encontrarse de nuevo en el espejo, vio su reflejo, vio su cara sonrojada, su boca entreabierta con saliva colgando de una comisura, chorreando por la ingle de su propio semen.
Verse en aquella situación ahí él solo pensando en Chanyeol mientras se tocaba el pene, le hizo darse cuenta de que no estaba enamorado de Chanyeol, estaba obsesionado.
Baek sintió lastima, pena de sí mismo, pensar que estaba tan pillado por un gilipollas como Chanyeol, pero él era su gilipollas y quería que fuera solo de él, aunque le maltratase psicológicamente con sus sonrisas, aunque le dejará plantado un millón de veces y aunque le volviera a tirar sobre aguas profundas... Baek volvería a enamorarse de nuevo de ese imbécil.
Era un amor bastante injusto pero ese era su amor.
—Vaya el que nos llama ninfómanos es un pajero alegre. —Baek se metió el pene en el pantalón velozmente cuando vio a Luhan entrar en el baño—. Lo siento, no pude evitar ver tu escena de loco hablando con un cristal mientras te pajeabas... A decir verdad solo me fije en tu pene.
—Ahh... eso... yo —tartamudeó Baek al rojo vivo, se sentía avergonzado. Seseaba que todo fuera un maldito sueño y que Luhan no le hubiese visto tocarse el pene pensando en un tío, pero desgraciadamente eso era la pura verdad.
—No tienes que explicarme nada, todos venimos aquí por alguna situación de "loco", todos tenemos nuestra historia. La locura nunca viene a nuestra cabeza así solita —rió Luhan mirando a Baek.
—Ah, mm... siento la pregunta de antes. Estaba un poco fuera de lugar.
Baek se disculpó recobrando el aliento.
—No te preocupes, es lo que todos somos aquí. Somos como perros en celo, pero es lo único que nos hace sentirnos vivos, fuera de estas paredes solo somos los "chicos trastornados", "los chicos que no tienen padres", "los locos" o "los delincuentes drogadictos".
—No quería ofender.
—Tranquilo, pequeño. Ah, por cierto se me olvido decirte. —Luhan se situó al lado de Baek y se inclinó para que sus labios rozaran el lóbulo de la oreja de este.
—Si follas usa condones, quién sabe si alguno tiene SIDA. —Baek se alejó con brusquedad, alterado y subiéndose el pantalón lo más que pudo.
—¡No pienso pillar una enfermedad sexual, bastante tengo ya con la mía! —gritó cerrando la puerta de un portazo.
Baekhyun salió disparado del baño caminando por el pasillo abanicándose con las manos, aún sentía todo su cuerpo caliente. Ni él mismo sabía ya si era por la vergüenza o por el calentón pensando en Chanyeol.
—Identifícate. —Al girar en una esquina uno de los seguratas agarró a Baek de un brazo, el labio inferior de Baek empezó a temblar.
—S-soy Baekhyun.
—¡Dónde está tu carnet! —gritó empezando a palpar el cuerpo de Baek.
"Oh, Dios. Oh, Dios, que no me toque, que no me toque en las partes de abajo que se me empalma de nuevo"
—Es nuevo, está conmigo.
Baekhyun jamás pensó que estaría tan feliz de ver a Kyungsoo, su buen médico Kyungsoo.
Un suspiro de alivio salió de los labios de Baek cuando el bajo cerró la puerta de su despacho detrás de él. La sala estaba poco amueblada pero demasiado ordenada, todo perfectamente clasificado, al parecer Kyungsoo también tenía manías, nadie en ese internado era normal.
—Veo que ya has hecho nuevos amigos —dijo Kyungsoo con voz grave.
"Joder, como se parece a la voz de Chanyeol"
Baekhyun bajó su mano hacia su entrepierna para que Kyungsoo no viera el bulto que formaba su pene rozando el pantalón de nuevo, hoy no era su día.
—Digamos... que sí —rió falsamente Baek, mirando hacia todas las direcciones.
—He hablado con la directora de tu centro, al parecer eres un buenísimo estudiante. —Baek se sonrojó al oír como Kyungsoo le halagaba.
—Eh, no es para tanto... Solo estudio un poco más que los demás —dijo modesto, Kyungsoo sonrió.
"Mierda sus labios"
—Al parecer ninguno de tus profesores quiere verte repetir este año, así que tendrás lecciones aquí en el internado. —Baek abrió la boca asombrado.
—¿Estudiaré aquí?
—¿No te gusta la idea?
—¡SÍ! Quiero... quiero graduarme.
—Esa es la respuesta que yo buscaba —rió bajo Kyungsoo—, además resulta que te va a dar clase un alumno de tu instituto. —Baek empezó a sudar frío.
—¿D-de mi instituto?
Solo la idea de que uno de sus compañeros viniera al internado le creaba nauseas, le verían ahí con esas pintas. Y más rumores acerca de él empezarían a esparcirse por el instituto, solo la imagen de personas de su colegio hablando de él le empezaba a crear mareos.
—Sí, además al parecer forma parte de un trabajo de ciudadanía, así que es como si os ayudarais mutuamente. —Baek tragó saliva, la idea no era muy motivadora.
—¿Y cuándo viene mi... "profesor"?
—En dos días. Disfruta de tu libertad hasta entonces.
"¿Qué libertad?"
—Ah, por cierto...
Kyungsoo empezó a acercarse hacia Baekhyun, el adolescente miró al médico esperando que le dijera algo. Pero sin aviso Kyungsoo agarró a Baek del pelo, tirando de su cabeza hacia la cara de él para que sus labios se unieran en un profundo y apasionado beso, Baek no pudo cerrar los ojos pero Kyungsoo tampoco los tenía cerrados. Le besaba mientras le miraba la cara, analizándole con esos grandes ojos mientras metía y sacaba su lengua de la boca del bajo imitando una penetración.
Baek gimió en la boca de Kyungsoo cuando este bajó la mano y le agarró el pene y se lo estrujó con fuerza. Sus alientos se juntaban casi formando vaho en la fría sala, cada movimiento que hacía Kyungsoo sobre Baekhyun lograba que cada uno de sus huesos se estremeciera. Baekhyun casi no podía respirar. Kyungsoo era casi tan agresivo como Chanyeol cuando le besaba, estampándole los labios en la boca como un animal, rozando y estrujando su entrepierna como lo harían las mismas putas.
Baek se sentía indefenso, violado, sucio, demasiado húmedo y era la primera vez que se sentía tan raro al besar a alguien, como si cada movimiento que hacia Kyungsoo sobre Baek fuera una especie de prueba, como si le estuviera investigando como a una rata de laboratorio.
"Chanyeol... ayú-ayúdame''