Zeszk me contó que él me encontró por aquí, inconsciente en el suelo, mientras otros sancti trataban de volverse mi sombra, al parecer, se puede hacer éso, pero sería algo muy devastador para el ser humano, ya que eramos algo débiles para cosas así.
No dudé en pararme de allí e irte a recoger, me dolió verte así, estabas tan expuesta, y tuve que pelear con ellos, no fue nada, son fuertes,no tanto como yo, soy mayor que ellos, así que no pueden hacerme mucho, que digamos .- Me explicaba Zeszk, mientras estaba sentada en su cama, y él limpiaba mis heridas abiertas.
¿Cuántos años tienes? .- Lo miré mientras él me sonreía con ironía.
No tenemos edad, cielito .- Continuó limpiando mis heridas y tomando un nuevo algodón, mientras abría su boca para explicarme.
Somos sombras, sí, se supone que nuestra persona indicada nace, ése es el momento en el que nosotros aparecemos también, pero en realidad, desde que tus padres se conoces, yo existo, por que todo está ya escrito, así que, he de tener unos 30 años .- Me dijo riendo mientras terminaba, y botaba los algodones con sangre en un cesto de basura que quedaba en la esquina de su habitación.
Así que, Zeszk y yo estabamos destinados a estar juntos, era algo demasiado extraño y ni siquiera le veía algún sentido, y tampoco era que lo creía de ha mucho, él dice que me ha salvado muchas veces, y mi mente no va a recordar eso jamás, por que yo no tenía aún la edad para saber de él, a menos de que vaya al mundo Sancti, sólo ahí yo sabría de todo de él, hay cosas que aún no me explico, pero supongo que lo sabré después.
Vamos, te llevaré a casa .- Me tomó de la mano mientras me sujetaba de la cintura, ya que tenía la rodilla doblaba por el dolor que sentía.
Caminamos fuera de su casa, que quedaba en el bosque, cerca de un lago, era una casa muy tierna, y pequeña, su habitación era con unos ventanales enormes, era genial, justo eran como las nueve o diez de la noche, así que pronto cerrarían las puertas del orfanato.
Llegamos después de un buen camino, molestábamos y me besó la mejilla en repetidos momentos, era muy tierno, pero algo en mi aún me decía que no podía confiar plenamente en él.
Vale, kitten, buenas noches .- Me sonrió mientras me miraba hacia abajo, ya que él era mucho más alto.
Buenas noches, Zeszk .- Le dediqué una pequeña sonrisa y él besó mi mejilla, desapareciendo en medio de la noche, y quedándose mi sombra conmigo.
¡MADISSON! .- Escuché el grito al unisono de Alice y David, se miraron, sonrieron y volvieron a fruncir el ceño hacia a mí, sabía que ésos dos tenían algo más especial.
¿Qué son éstas horas de llegar? Joder, estábamos muy asustados .- David me dio un abrazo, y besó mi frente.
Anda, ve a tu habitación .- Me dijeron y caminé mientras pasaba por la cafetería tomando unas galletas, y me dí cuenta que no tenía mi celular, tendría que reclamarlo el día de mañana.
Oh por Dios .- Mark me abrazó fuertemente mientras temblaba y me miraba tomando mis mejillas con sus manos
¿Estás bien? Iba a ir a buscarte, pero no pude por mi ojo .- Me miró triste y le sonreí besando su mejilla.
Estoy bien, tonto .- Él se rió y apagó la luz del cuarto, mientras caminaba a mi lado hasta llegar a las camas, subí a la mía, mientras botaba mis zapatos en el camino, evitando que le caigan a Mark en la cara.
Buenas noches .- Colgué mi cabeza en la cama mirándolo y formando un pico con mis labios, mientras él reía.
Buenas noches a ti también, Mad .- Me sonrió y me miró mientas yo volvía a mi posición inicial, y me cobijé, tomando mi manta de panda, que me dieron por navidad el año pasado, y poniendo mi cabeza en la almohada.
Cerré mis ojos recordando todo que había pasado