Blah blah dioses blah blah semidioses blah blah sin hogar fue lo único que Rhea escuchó de toda la conservación que estaban teniendo con el centauro mientras caminaban por valle sagrado.
Pero, ¿Tenía la culpa de no prestar atención? Absolutamente no porque las personas que se detenían a mirarla y a devolverle el saludo mientras la veían la distraían.
En el caso de Percy era totalmente distinto, había escuchado cada palabra del señor Q en todo el camino porque prefería eso a reconocer que su amiga llamaba la atención de todos allí.
Era su mejor amiga, ya peleo con Nancy por ella ¿Ahora debía hacer lo mismo con todos ellos? Bueno, si eso le aseguraba que Rhea no se iría de su lado, pues lo haría.
Aunque seguía ganando porque en todo el trayecto ella lo sostenía del brazo, eso le gustaba, ella jamás sería de su propiedad pero si alguien se lo preguntara, él fácilmente diría que le pertenecía a su mejor amiga.
¿Era demasiado pensar así
Bueno, muchas cosas lo eran; además se trataba de Rhea.
—¿Si?—Dijo el hombre mirando a la niña de ojos azules que había levantado su mano para preguntarle alto
—Si PJ y yo no hemos sido reclamados ¿A donde viviremos? ¿Seremos vagabundos en el bosque?—Preguntó asustada, ¿Acaso viviría en los árboles como una ardilla? Amaba al pájaro carpintero pero, no estaba lista para el campo, era alguien de ciudad, solo hacía falta ver su cabello que ahora recordaba que necesitaba ser lavado con urgencia.
¿Acaso podía ir a la cabaña de Afrodita? ¡Oh, nada le gustaría más que eso!
—Si, ¿Cuando nos reclaman?—Apoyó Percy con las manos en los bolsillos de su chaqueta gris, le gustaba más esa idea de no saber aún quienes eran sus padres a que Rhea y él fuesen hermanos.
Quirón los miró con pena.
—Bueno, los dioses revelan su diseño a su debido tiempo, no antes—Rhea frunció el ceño "¿diseño?" esa palabra sonaba simplemente despectiva, ¿Acaso no eran personas?—Sus padres podrían reclamarlos mañana, la semana proxima o...
—Nunca—Hablaron al mismo tiempo los oji azules, en ese instante el centauro levantó una ceja, quizás por eso Dionisio pensó que eran hermosas, terrorífico—Incluso ahora no quieren saber nada de nosotros—Siseo el de ojos azules, se lo esperaba.
Rhea miró a su mejor amigo con tristeza, esa era la realidad, si sus padres no aparecieron como el señor D lo hizo... tal vez no querían saber de ellos.
Sus mamás estarían muy decepcionadas de ellos.
—Bueno, mira el lado bueno PJ, quizás podamos vivir en el árbol juntos—Dijo la niña emocionada para abrazar a su amigo por los hombros que sonrió un poco ante el contacto de su mejor amiga, allí estaba, apesar de saber que pasaban lo mismo emocionalmente, ella estaba siendo optimista por él
—Si, tienes razón ¿Qué tan difícil puede ser escalar un árbol? Vi uno al entrar, un pino creo y...
—No, no, no ¿árbol?—Interrumpió Quirón asustado por las ideas de los niños, ¿Arbol? Conocía a algunos semidioses que apoyaban la idea pero, no eran ellos—Hay un lugar para ustedes... allí—Apuntó el hombre al frente y suspiró cuando la de ojos azules miró el letrero con los nombres de las cabañas confundida—Detrás del letrero... Hermes, el dios de los viajeros.
Percy levantó una ceja ¿Dios de los viajeros? Si allí iban los no reclamados, ¿Cuantos más habrían en ese lugar?
La pregunta se respondió por si sola cuando los tres caminaron hacia la entrada de la cabaña café, habían demasiados niños y adolescentes allí.
—¡No, espere un momento!—trató de detener el joven Jackson cuando el centauro comenzó a aplaudir para llamar la atención de los campistas allí.
Nunca le había gustada ser el centro de atención, al menos no como Rhea que ya estaba sonriendo emocionada mientras ladeaba su mano de un lado a otro amigablemente.
Percy sintió algo enojo, no hacía ella, si no hacia las personas y más que nada chicos que le sonreían de regreso; definitivamente lo primero que haría sería encargarse de mencionar que ella era su mejor amiga.
Después de superar el pánico a hablarles.
—Estos son...Percy Jackson y Rhea Deschamps, estoy seguro que los ayudaran en lo que necesiten
Silencio.
—¡Oh mira PJ, nuestras mochilas!—Apuntó la castaña hacia una esquina en el suelo y sin esperar más salió corriendo en dirección a estas.
—Creo que alguien comienza a adaptarse muy rápido—Dijo Quirón aguantando una carcajada al ver como Rhea ya estaba hablando con un grupo de niños que se encontraba cerca de sus maletas.
Percy suspiró, siempre había sido fácil para ella, tal vez por eso eran tan buenos amigos.
—Se que te sientes indefenso pero no lo estás... todo se revelará con el tiempo—Susurró el hombre hacia el rubio que se mantuvo quieto—Además, no estás solo en todo esto... y nunca lo estarás
El de cabello rizado levantó la mirada hacia su amiga que apuntaba hacia él emocionada para que se acercara, así lo hizo, justo después que su antiguo profesor abandonara la cabaña.
—PJ, he hablado con Joan—Susurró hacia una pelinegra de ojos chocolates que se fue justo cuando él llegó a hablar con su mejor amiga—Me ha dicho que hacen muchas actividades aquí, quizás podamos ver el itinerario luego
Percy trató de sonreír pero lo cierto era que estaba cansado, no podía esconder o canalizar lo que sentía de esa manera tan emocionada como Rhea lo hacía, pero no por eso la haría sentir mal, no cuando ella trataba de hacer que se concentrara en otra cosa que no fuese lo que pasó ayer.
Después de todo, ambos habían perdido a sus madres.
—Seguro, Dedee, eso me encantaría—murmuró agachándose hacia su mochila para abrirla y su corazón se aceleró al ver los dulces azules que su madre le dio cuando llegó despues de ser expulsada.
Rhea bajó la mirada con pena y solo se acuclilló frente a su mejor amigo para extender su mano y colocarla en el hombro derecho de este haciendo que Percy volviese a mirarla fijamente.
—¿Sabes que te animará?—Preguntó por lo bajo como si de un secreto se tratara—¡Mis estrellas! Hicimos a la vaca carne, PJ... ¡Nos merecemos unas!
Percy ladeo una sonrisa graciosa cuando su castaña mejor amiga comenzó a buscar en el bolsillo externo de su rosada mochila unos paquetes de stickers que nunca dejaba atrás.
Cada vez que alguien hacía algo bien, Rhea tenía la costumbre de darle una estrella o cualquier calcomanía de recompensa para estimular a las personas, o simplemente para hacerlos sentir mejor.
Por eso la amaba... su mejor amiga era la mejor, si su padre no lo reclama a él, se aseguraría que el padre de Rhea lo hiciera primero, nadie merecía ser ignorado por alguien y mucho menos ella.
—Gracias, Rihanna—Bromeó el chico cuando la de ojos azules le colocó una estrella azul en la mejilla, allí estaba, mirando otra vez más esos hermosos ojos que lo hacían sentir en el cielo, que lo tranquilizaban y le daban esperanza de creer que las cosas mejoraría eventualmente.
Con ella a su lado, sabía que tendrían las respuestas que necesitaban.
—Bueno, Peter... es un placer—Dijo bajando la mirada al sentir sus mejillas totalmente calientes, no era la primera vez que le pasaba cuando Percy la miraba durante mucho tiempo y de esa forma que la hacía sentir como la única niña en la habitación.
Estaba confundiéndola porque sabía que él jamás podría verla de otra forma que no fuese como su mejor amiga, podría soportarlo... porque prefería eso antes que no ser nada de él.
Ahora Percy era su todo, lo único que tenía para soportar el hecho que su madre desapareció, que su padre no la quería y que era muy probable que su abuelo no supiese donde estaba porque ni ella misma lo sabía.
Sin embargo, con Percy con ella era suficiente para mantenerse optimista.
—Son ellos...—Escuchó Percy observando a su distraída amiga seguir viendo sus calcomanías—Creo que son los que mataron al Minotauro
El rubio frunció el ceño al comprender que se trataba de ellos, nuevos bravucones fue lo primero que pensó para levantarse y girarse al intentar encarar a quienes dijeron eso.
—Escuchen, si quieren hacernos pasar un mal rato, solo haganlo mañana...—Dijo cansando mirando a un grupo de adolescentes con el suéter del campamento—Pero solo a mi ¿si? a ella déjenla tranquila—Apuntó con su cabeza cuando sintio a su mejor amiga colocarse a su lado.
Nuevamente no dejaría que nadie se atreviera a lastimar a Rhea, lo expulsaron cuando Nancy lo hizo, ahora le importaba poco el castigo que le dieran allí si alguien la tocaba, se burlaba o simplemente la miraban mal.
Incluso si eso era imposible, Percy estaba dispuesto a defenderla ante cualquier probabilidad.
El pelinegro que encabezaba el grupo negó para dar un paso adelante e intentar acercarse más a los niños de ojos azules, sin embargo algo en la castaña le llamó la atención, su penetrante mirada eléctrica lo hizo dudar en hablarles.
Percy, que se mantuvo a la defensiva miró con una ceja levantada al alto y pálido chico, ¿Por qué miraba a su amiga de esa forma? ¿Acaso se le había perdido algo?
Esperaba que lo encontrara pronto.
—Lindas estrellas... y lazo—Apuntó a la mejilla del chico, y la frente y cabeza de la niña para ser más empatico, estaba seguro que no lo estaba logrando.
Se iban a burlar de él luego.
Ahora se arrepentía.
¿Qué le diría Annabeth si lo supiese?
Percy frunció el ceño cuando de reojo vio a su amiga cubrirse la boca emocionada, oh no, mencionó su lazo... ¿otro más con quién debería pelearse?
—Yo... escuché—Murmuró antes de apartar sus locas ideas de la cabeza, solo se estaba imaginando algo que no era posible—Escuché lo que pasó en la colina. Yo solo...—Rhea jugó con su cabello aburrida cuando hubo una gran pausa, parecía como si verdaderamente le costara seguir al pelinegro—... quería decirles que lo siento. Se por lo que están pasando, créanme... soy Luke—se presentó extendiéndole la mano al rubio primero que lo miró con esperanza.
Al fin alguien estaba siendo amable con él desde el comienzo.
—Percy—Dijo aceptando el saludo para sonreír hacia su amiga y continuar—y ella...
—¡Rheaaa! Es un placer conocerlo—Canturrea emocionada haciendo sobresaltar un poco a Luke ante el grito ¿Acaso no perdieron a sus madres? ¿Por qué estaba tan feliz? ¿Se había golpeado la cabeza?—Me encanta Taylor Swift, espero que 1D regrese, amo el musical d...
—Luke—Interrumpió el pelinegro fingiendo que no comenzaba a fastidiarle la actitud de la hiperactiva castaña, simplemente era demasiado para él y no la conocía—Jefe de cabaña—la niña sonrió para tomarle la mano que le había extendido el chico, generalmente prefería los abrazos pero estaba segura que luego conseguiría que ese tosco de Luke se lo diera.
Siempre conseguía lo que quería.
Bueno, casi todo, hablaba específicamente de Percy, pero ya caería... tenía un plan a largo plazo.
—De acuerdo, debo irme porque debo reunirme con alguien pero los buscaré y les presentaré a todos en la cabaña, un gusto Percy y Rhea—Sonrio por última vez antes de comenzar a caminar hacia la salida la cabaña con prisa.
Extraño.
Pero encantador.
—Oh PJ ¿hace calor ahora o es por ese chico?—Susurró la pálida castaña abanicándose con sus manos esperando que su mejor amigo dijera algo pero Percy solo rodó sus ojos cuando el sequito desconocido de Luke dejó de verlos para hacer sus propias cosas.
¿De verdad? ¿Alguien que lucía como veinte veces mayor que ella?
Percy miró al suelo con el ceño ligeramente fruncído cuando la atención de Rhea estaba en el pelinegro que ya había salido por completo.
Luke parecía un tipo agradable, se había disculpado con ellos por sus madres y eso lo apreciaba pero también era alguien visualmente atractivo, era todo lo que imaginaba para alguien como su mejor amiga.
Eso le molesto.
Eso también le aterró.
Nunca había sido celoso, bueno, si cuando se trataba de las personas que amaba... pero cuando se trataba de Rhea, siempre creyó que era porque la consideraba su hermana, alguien a quien deseaba proteger siempre... sin embargo, al caer en la probabilidad de que Luke podría verla de otra forma luego, supo que los celosos no eran de hermanos.
¿Acaso él tenía un crush en su mejor amiga?
Imposible.
No era posible, aunque Rhea era la niña de sus ojos, uno de los seres más perfectos que había visto, no por eso estaba enamorado de ella ¿o si?
Oh no.
¿Era probable que fuese así?
Necesitaba a su mamá... y a la mamá de Rhea...necesitaba a las mamás.