Alrededor de las dos de la mañana, Lin Feng fue despertado por una llamada telefónica. Cuando respondió aturdido, vio que era de su asistente. Su voz era tan nerviosa que casi cambió su tono: —Joven maestro Lin , el señor Fang está en problemas, ha sido capturado por la pandilla de la familia Luo.
Lin Feng quedó atónito: —¿Cómo es eso?
—El funeral del anciano de la familia Luo transcurrió sin problemas durante el día. Cuando salió del lugar, la familia Luo estaba celebrando un banquete e invitando a los invitados a la mesa y parecía que eran bastante amigables.
El asistente dijo: —Tampoco conocemos la situación específica. Fue el conductor quien vio que el banquete de la familia Luo había terminado por la noche y todos los demás habían salido. El Señor ang no había salido de la puerta de la familia Luo durante mucho tiempo. El conductor no pudo evitar hacer una llamada y preguntó: ¿Quién sabía que un sirviente de la familia Luo respondió a la llamada? Cortésmente le pidió al señor Fang que viniera a tomar el té y le dijo que el nuevo líder tiene una deuda sangrienta que debe saldar con nosotros. ¿No cree que esto es un engaño flagrante?
—Estaré allí de inmediato, que no entren pánico todavía—Lin Feng colgó el teléfono después de decir eso, condujo su auto y corrió a la casa de la familia Luo.
El jefe de la familia Luo era muy conocido en el hampa de Hong Kong y falleció hace unos días. Este anciano ha estado intimidando a un partido durante décadas. Cuando debutó actuó con fuerza y con un estilo muy despiadado. Ha gobernado con mano de hierro durante décadas y ha hecho culpables a muchas personas. Es lógico pensar que las personas que salen a ganar dinero siempre tendrán que pagar, sin embargo, este anciano inesperadamente tuvo una rara buena muerte: Tomó una siesta un día a mediados del mes pasado y nunca más se despertó. Falleció en paz y sin ningún dolor.
El anciano dejó dos hijos. La madre del hijo mayor, Luo Ji, era una amante y provenía de una familia de clase baja. Fue un regalo que le dieron en su cumpleaños en sus primeros años. Más tarde, cuando tenía treinta años, el anciano se casó con su esposa oficial, que era sobrina del entonces gobernador de Hong Kong, y dio a luz a su segundo hijo, Luo Shuohan. El día que nació el segundo joven maestro, el hijo mayor, Luo Ji, que nació en una casa lateral, fue enviado a estudiar al extranjero, donde permaneció más de veinte años.
La gente de Hong Kong rara vez ve noticias sobre Luo Ji. Este joven solo regresará a casa durante el Festival Qingming para adorar a sus antepasados, el Festival de Primavera y el cumpleaños del anciano. Se quedará una noche y se irá al día siguiente. Se dice que a la esposa oficial no le agradaba y seguía pensando en matarlo.
En comparación, al anciano de la familia Luo le agradaba mucho este hijo de su amante. Se dice que el anciano una vez señaló a Luo Ji frente a los demás y dijo: "Este hijo es como yo", también señaló al segundo joven maestro, Luo Shuohan, quien ha sido mimado desde que nació y dijo: "¡Después de cien años, este hijo no podrá hacerse cargo del negocio de mi familia!"
Debido a estas palabras, la esposa principal le guardó rencor a Luo Ji durante varios años, temiendo que esta enorme fortuna familiar cayera en sus manos. Esta vez, tan pronto como el anciano falleció, la Señora Luo bloqueó la entrada de la casa a Luo Ji, que había regresado a Hong Kong para el funeral, y en secreto encargó una empresa asesina y ofreció un millón por la vida de Luo Ji.
Esta empresa asesina es en la que trabaja Lin Feng por ahora.
Nadie se atrevió a ignorar la comisión de la señora Luo. La Compañía Asesina envió sus tropas más poderosas y de élite durante la noche para tender una emboscada a Luo Ji en tres grupos en su camino de regreso a Hong Kong. ¿Quién sabía que Luo Ji, un hombre que no había regresado a Hong Kong durante más de 20 años, en realidad tenía un grupo de guardaespaldas para protegerlo? La primera emboscada lo obligó a evacuar. La segunda vez el asesino falló un solo golpe y solo hirió una de las manos de Luo Ji.
La tercera vez hizo estallar el auto en el que viajaba Luo Ji, pero cuando se limpiaron los escombros, quedó claro que debían haber cuatro restos humanos incluido el conductor, pero la compañía asesina solo logró reconstruir los esqueletos de tres personas. . El jefe de la empresa asesina no se atrevió a regresar y decirle a la Señora Luo que la misión no se había completado, solo se atrevió a decir que Luo Ji había sido emboscado.
Afortunadamente, el funeral se celebró según lo previsto. El segundo joven maestro, Luo Shuohan, también heredó con éxito el negocio familiar sin ningún problema. En el funeral, cuando Luo Shuohan fue anunciado como el próximo jefe de la familia, todos se sintieron aliviados durante mucho tiempo.
¿Quién iba a imaginar que en una sola cena el mundo se pondría patas arriba y cambiaría de dueño?
Luo Ji se paró frente al salón de luto con las manos a la espalda. Durante el día, el lugar estaba lleno de gente yendo y viniendo, tenía miedo de ser descubierto, por lo que se escondió lejos entre la multitud afuera y no se atrevió a acercarse y mirar más de cerca.
Ahora que la situación general se ha resuelto y el humo se ha disipado, finalmente puede acercarse erguido y pararse en el salón de luto desierto.
Miro bien el último rostro de su padre.
El mayordomo de la casa del anciano dijo suavemente desde atrás: —Después de todo, el joven maestro ha vuelto. En los últimos días de su vida siempre sintió que no le quedaba mucho tiempo, me dijo que quería traerte de regreso para que vivas con el por un tiempo, pero no esperaba que se fuera así de repente. Ahora que el joven maestro puede pararse abiertamente frente a este salón de luto para llorar, creo que el espíritu del maestro en el cielo estará muy feliz.
Luo Ji suspiró.
Lo enviaron al extranjero cuando era niño y decir que no se arrepentía del favoritismo de su padre, eso era mentira
Pero a medida que crecía, comprendió más o menos la situación en casa. El anciano lo echó de casa sin pagar un centavo. . De hecho, no era que no lo quisiera, sino que tenía demasiadas altas las expectativas en él.
Solía pensar que como hijo de una amante solo podría quedarse en el extranjero y administrar su propio negocio. ¿Quién sabía que el anciano encontró en secreto un abogado para reescribir su testamento unos días antes de su muerte? Le entregaron toda la fortuna familiar y temía que su madrastra lo obstaculizara cuando regresara a Hong Kong para heredarla, por lo que organizó especialmente a un grupo de amigos cercanos para que actuaran como guardaespaldas para él.
Afortunadamente, el anciano tenía buenas intenciones.
Esta vez fue emboscado por tres grupos cuando regresaba a Hong Kong para el funeral. A la tercera vez casi muere en el auto, si no hubiera sido rescatado por una persona misteriosa en el último momento, ya podría haber muerto.
El hombre que lo rescató del auto que estaba a punto de explotar llevaba una máscara a prueba de explosiones. Desafortunadamente, era tarde en la noche y acababa de escapar del auto. Antes de que pudiera preguntarle su nombre, el hombre, ya se había ido.
Se escondió afuera de la casa de la familia Luo y solo entró furtivamente cuando comenzó el funeral esta mañana. No apareció frente a todos hasta la cena. El anciano le había dejado una fortuna en casa por adelantado, y el abogado emitió un certificado de testamento, tuvo éxito tanto interna como externamente y detuvo con éxito al segundo joven maestro Luo Shuohan y a su primera esposa.
Luo Ji se fue de casa cuando era joven y luchó por sobrevivir por sí mismo. Ahora, más de veinte años después, finalmente puede volver a dominar el país de manera íntegra.
En la oscuridad, el mayordomo no podía ver claramente la expresión de Luo Ji y solo podía escucharlo decir con calma:—La señora Luo y el segundo hermano han estado con mi padre en sus últimos años. Por el bien de la cara de mi padre, no los trates demasiado a la ligera.
El mayordomo dijo:—Sí. La persona de la compañía asesina ahora está encarcelada por nosotros. Me pregunto qué planea hacer el joven maestro con ella.
Luo Ji se dio vuelta y vio la fría curva de su boca:—Bueno, me recibieron tres veces. ¿No sería un poco grosero si no los visitara en persona?
Fang Tianhe, el jefe de la compañía asesina, trabajó en los Tigres Voladores en sus primeros años, luego, por diversas razones, como la reorganización de la fuerza policial, enojó a sus superiores y fue enviado a un nivel inferior para vigilar la vida de otras personas. Se enojó y renunció a su trabajo para abrir una empresa de guardaespaldas. Más tarde, por alguna razón desconocida, poco a poco se volvió negro y se convirtió en una base asesina.
Fang Tianhe tenía un estilo muy duro. Estaba atado a la silla con tanta fuerza que ni siquiera podía mover sus dedos. Estaba rodeado por los hombres de la familia Luo, pero su rostro permanecía tranquilo y su comportamiento era tranquilo. Excepto por su ropa que estaba un poco desordenada, no había rastro de vergüenza.
Luo Ji se sentó en el sofá frente a Fang Tianhe, encendió un cigarrillo y dijo:—Jefe Fang, no crea lo que digo. Nunca he visto sangre desde que nací.
Si una persona común dijera esto, no sería nada, pero ¿Quién es Luo Ji? ¿Quién es la familia Luo?
La mitad del negocio clandestino de este pais está en sus manos. Cada día se toman decisiones sobre asesinatos y grandes sumas de dinero van y vienen. El nuevo y digno jefe de su familia no ha visto sangre con un cuchillo o una pistola en más de 20 años. Al igual que los dueños de los burdeles en la antigüedad, la avutarda vieja es casi igual que la joven.
La expresión de Fang Tianhe no cambió:—El Señor Luo probablemente no dijo esto porque quería dejarme ir, ¿verdad?
—No—, Luo Ji exhaló una larga bocanada de humo y dijo con calma:—Quiero decir que seras la primera persona que maté en mi vida. Después de ti, puedo matar a muchas personas... Un día, es posible que también me maten.
El inframundo de Hong Kong se ha desarrollado durante cientos de años y ha sido así de generación en generación. : Matar gente hoy y ser asesinado mañana. Se repite todos los días.
—Así que no hay necesidad de que se sienta agraviado por su propia muerte. Jefe Fang, simplemente váyase en paz.
Luo Ji levantó su arma y Fang Tianhe sintió que un sudor frío le brotaba de la espalda.
El plan original todavía tomó al menos diez minutos. Originalmente pensaron que Luo Ji no tomaría medidas tan pronto. ¿Quién sabía que este nuevo jefe de la familia Luo, que sostenía un arma por primera vez, podría matar tan claramente?
—Espere!— Gritó de repente Fang Tianhe, —¡Señor Luo, tengo algo que preguntarle!
Luo Ji no movió su arma: —¿De qué estás hablando?
Fang Tianhe tragó nerviosamente: —... Quiero preguntar, el asesino es solo un cuchillo en manos del asesino. Desde que acepté la comisión de un millón de dólares de la Señora Luo, debo ser leal a los demás.
—No tengo quejas contigo. En lugar de acudir a la señora Luo, vienes a discutir conmigo. ¿Te equivocaste de persona?
La gente de afuera aún no ha tomado medidas y el plan original no se ha completado, en este momento, si dice más palabras, lo retrasará un poco más.
Fang Tianhe miró nerviosamente el arma frente a él. Después de unos segundos, Luo Ji se rió y dejó el arma.
—Sé quién quiere matarme, pero si el nuevo jefe de la familia mata a su propia tía, será una broma si se corre la voz al respecto.
La expresión de Luo Ji podría incluso llamarse feliz.
—Si lo piensas, cuando una persona muere, una vez que la tapa del ataúd se cierra y se entierra en el suelo, todo se acaba. Qué barato es. Si realmente odias a alguien, no debes dejarlo morir. Debes dejarlo vivir todos los días para poder ajustar las cuentas poco a poco.
Fang Tianhe casi se quedó paralizado y luego suspiró después de un rato:—Realmente no puedo entender su pensamiento, Señor Luo.
—Es por eso que sólo puedes ganar dinero con los muertos, pero yo puedo ganar dinero con los vivos.—Luo Ji volvió a levantar su arma, se puso de pie y se mantuvo en alto—Lo siento, Señor Fang, realmente disfruto hablar con usted. Si no fuera el actual jefe de la familia Luo, tal vez nos haríamos amigos.
Justo cuando estaba a punto de apretar el gatillo, el viejo mayordomo abrió la puerta:—¡Maestro! Hay un joven que quiere verte. Dice que es el amante de Fang Tianhe. ¡Ahora está bloqueando la puerta y no se puede ahuyentar por mucho que lo intente!
Fang Tianhe quedó atónito y Luo Ji arqueó las cejas:—¿Oh? Jefe Fang, tu amado está muy enamorado.
Fang Tianhe no sabía qué escena se estaba reproduciendo, por lo que se quedó allí por un momento sin saber cómo responder.
Sin embargo, Luo Ji estaba de un humor particularmente feliz esta noche y dijo con una sonrisa:—La casa de la familia Luo no es algo al que puedan entrar y salir con facilidad. Este hombre está arriesgando su vida por el Jefe Fang. Olvídalo, tráelo aquí y déjame echar un vistazo.
El viejo mayordomo hizo una reverencia y se fue rápidamente, poco después vio a varios guardaespaldas sujetando a un joven cuando entró.
Cuando Fang Tianhe lo vio, inmediatamente se quedó paralizado en su lugar: — ¿Lin Feng?
Las luces de la habitación eran tenues, Luo Ji la miró con indiferencia al principio y volteó la cabeza. Luego sus movimientos se detuvieron y lentamente se giró para mirar al joven que fue reprimido por todos. Si su mirada pudiera condensarse en sustancia, probablemente habría empujado a este hombre hacia abajo y lo habría arrastrado innumerables veces.
Este hombre es muy joven, parecía tener menos de veinte años, este fue el primer pensamiento de Luo Ji.
Llevaba una camisa blanca, probablemente porque tenía prisa. El cuello estaba levantado y el suave cabello negro caía sobre el , dejando al descubierto un poco de su cuello blanco. El blanco y el negro eran extremadamente armoniosos y simples, y había cierta ligereza en ello.
También llevaba un par de jeans debajo. No sabia si fue por luchar o por tener prisa. Pero solo tenía un zapato en un pie, el zapato del otro pie no se encontraba por ningún lado, por lo que solo podía pisar el frío suelo descalzo.
Era muy débil, delicado y frágil, pero bajo la represión brutal y restrictiva de unas pocas personas, revela una especie de delicadeza que la gente no se atreve a tocar.
La voz de Luo Ji era un poco extraña y ni siquiera lo notó.
—Mira hacia arriba y déjame verte.
Lin Feng miró hacia arriba con un poco de miedo.
Mucho tiempo después, Luo Ji recordó cada detalle de esa época, incluida la curvatura del cabello de Lin Feng esparcido en su frente y sus ojos cautelosos como los de un animalito asustado.
Todos los presentes reconocieron de inmediato que se trataba de un estudiante que había nacido en una torre de marfil, intocable por los demás, dócil, suave, delicado, débil y que se asustaba fácilmente.
Luo Ji dio unos pasos hacia adelante y bajó la cabeza para mirar a Lin Feng a los ojos.
Cejas rectas y esbeltas, ojos claros y claros, en un instante recordó los ojos bajo la máscara a prueba de explosiones que había visto por casualidad ese día.
Estaba a punto de explotar en ese momento y con las prisas no podía ver con claridad, solo podía ver vagamente los ojos del hombre debajo de la venda. Inmediatamente, lo abofetearon con una máscara a prueba de explosiones y lo sacaron del auto.
El niño frente a el era muy débil, pero el sentimiento era muy similar.
Aunque sabía que podría no estar muy interesado, Luo Ji había estado en este camino durante más de diez años y había desarrollado una intuición aguda y bestial y rara vez cometía errores.
Luo Ji preguntó en voz baja:—El 15 de este mes, esa es la tarde en que Fang Tianhe envió gente a tenderme una emboscada por tercera vez antes de ayer. ¿Dónde estabas?
Lin Feng sacudió la cabeza temblorosamente y dio medio paso hacia atrás, pero el guardaespaldas lo sujetó.
Luo Ji volvió a preguntar:—¿Dónde estuviste anteayer por la tarde? ¿Has estado alguna vez en la Ruta 8?
—No no...
Luo Ji bajó la voz: —¿De verdad que no?
Fang Tianhe dijo en voz alta:—¡Esto no tiene nada que ver con él! Es solo un estudiante que patrociné antes. Ahora no puede encontrar familiares ni amigos, así que solo estoy cuidándolo. ¡Él no sabe nada sobre la Compañía de Asesinos! Si quieres tomar medidas, hazlo, pero no es asunto suyo.
Luo Ji hizo una pausa y sonrió levemente por un momento,—Olvídalo.
Se arrodilló a medias, pellizcó la barbilla de Lin Feng con los nudillos, lo obligó a levantar la cabeza y preguntó en voz baja:—¿Cómo te llamas?
Fang Tianhe dijo: —Él es ...
—Quiero que me lo digas tú mismo, vamos, sé bueno— Luo Ji miró fijamente a los ojos de Lin Feng, —dime ¿Cómo te llamas?
—...Lin Feng.
—Lin Feng... un buen nombre.
Luo Ji hizo una pausa por un momento y se inclinó hacia el oído de Lin Feng, su voz era cerca de su delgado oído, casi un susurro.
—Buen chico, deja de seguir a Fang Tianhe. Si me sigues, dejaré ir al jefe Fang y a esta compañía asesina. ¿Qué piensas?
Lin Feng se estremeció, pero Luo Ji presionó su barbilla, su mano era muy fuerte, impidiéndole retroceder. Después de un punto muerto durante más de diez segundos, Lin Feng dijo con torpeza y suavidad: —Señor Luo, no soy...
Luo Ji no escuchó en absoluto, levantó la mano y apretó el gatillo sin mirar atrás. Con un estallido, la bala alcanzó la oreja de Fang Tianhe y entró en la pared.
La expresión de Fang Tianhe cambió.
Lin Feng de repente se separó del guardaespaldas y abrazó la mano de Luo Ji. Su voz temblaba, como una especie de animal joven gimiendo:—Señor Luo, por favor! ¡No lo haga!...
Estaba tan asustado, como si un abrazo tan fuerte hubiera agotado todo su coraje.
Su cabello se frotó en las mejillas de Luo Ji, llevando la fragancia limpia de un joven después de bañarse. Era suave y ligeramente fresco, pero de repente hizo que la gente se sintiera impaciente y enojada.
Luo Ji levantó a Lin Feng, salió de la habitación y cerró la puerta.
En un Mercedes-Benz camuflado al costado de la carretera, el policía quitó la sonda del instrumento y susurró:—El señor Fang dijo que la situación ha cambiado y que la operación de esta noche está cancelada.
—Entonces, ¿evacuamos?
—Llegó la noticia de que el informante entró y sacó a Señor Fang, pero pasará un tiempo antes de que salga, por lo que nos pidieron que nos fuéramos primero.
—¿Qué pasa con el informante?
—No lo sé, ha sido detenido.,
Los miembros del equipo en la primera fila pusieron en marcha el auto y el Mercedes-Benz plateado rápidamente se incorporó al tráfico del otro lado de la calle...