|Narra Ashley|
-¿Qué fuco plan? - Preguntó Newt, arqueando las cejas.
- Te lo diré cuando saquemos a Teresa.- Respondió Thomas cabreado. Le miré a la cara. Estaba rojo de furia, ansioso por ver a Teresa, y triste por no estar con ella. Demasiados sentimientos en tan poco tiempo. Pero supongo que así estábamos todos. Newt estaba perdido sin Alby, desorientado, estaba confuso por intentar saber nuestro plan y agotado por queres salir de esta cárcel.
Yo, quizás mis sentimientos eran amor, por Minho. Compasión por Thomas. Sentía que Teresa me había abandonado. Aunque no fuese así. Y sobretodo, entusiasmada por los mapas. ¿Cómo no lo iba a estar? Íbamos a salir de aquí. Era nuestra oportunidad.
El único que parecía no tener ni una pizca de tristeza compasión, terror o algo por el estilo era Minho. Tenía la capacidad sentimental de un ladrillo.
Nos dirigimos hacia el Trullo donde se encontraba una aburrida Teresa. Que había llegado al punto de darse cabezazos contra la pared, como yo cuando estuve allí.
Abrieron la puerta y ella y yo nos fundimos en un fuerte abrazo. Después de que terminara. Se giró para poder ver más fácilmente a Thomas. Se acercó a él y se quedaron un instante - que para los demás se nos hizo eterno - mirándose a los ojos.
Cuando ya empezábamos a cansarnos, Thomas la estrechó entre sus brazos y mi amiga dijo algo entre lágrimas que no se llegó a entender, pero sería una ñoñeria como "te quiero" o "casi muero sin ti".
Nunca he sido - eso creo, porque no me acuerdo - ni seré una chica que demuestre sus sentimientos a los demás. Exceptuando el enfado.
Fuimos a la zona donde Newt y Minho habían escondido los mapas y los llevamos todos a la Sala de Mapas, para poder estudiarlos.
Nos sentamos los cinco alrededor de la mesa y les explicamos que creíamos que los mapas formaban palabras.
- ¿Estáis seguros?- Preguntó Minho.
- Casi seguros- Dijo Teresa, sin separar la mano del brazo de su "novio", si es que lo eran.
-Bueno, dejemos de perder el fuco tiempo y manos a la obra -Dije ya sacando los mapas de la Sección 1 de sus respectivas cajas.
Estuvimos durante horas con los mapas y logramos formar dos palabras: Emerge y Atrapa. Lamentablemente, Thomas, Minho y yo teníamos que volver al Laberinto, esta vez a pasar la noche. Después de muchas quejas nos pusimos en camino. Minho iba en cabeza y yo más atrás, hablando telepática mente con Teresa y él.
-*¿Qué tal vais?* -Pregunté.
-*Bien, estamos consiguiendo muchas más letras. Pero aún no lo tenemos al completo* -Respondió la chica- *¿Y vosotros?*
-*Esto es inútil* -Añadió Thomas y por mucho que me doliese, sabía que tenía razón- *No hay nada*
-¡Eh! Vosotros -Nos llamó Minho y casi me tropiezo de la sorpresa. Parecía un poco enfadado- Vamos a descansar.
-Aleluya... -Susurró Thomas y no pude reír ante su comentario.
Estuve comiendo en silencio mientras los dos chicos hablaban. Estaba metida en mis pensamientos, tenía la extraña sensación de que aun que escapásemos del Laberinto, jamás seríamos libres. Notaba la mirada constante de Minho sobre mí, pero no tenía muchas ganas de prestar atención a nadie.
-Estas muy callada, Ashley -Me dijo Thomas con tono de preocupación.
-Si soy sincera, preferiría estar con ese fuco código a correr un minuto más por estas paredes -Me encogí de hombros, acabé el bocadillo y me levanté- Mover el culo, cara fucos. No tengo todo el día.
Ambos chicos me miraron sorprendidos y comencé a correr sin esperar una reacción de ellos. Quería volver con Teresa y Newt, conseguir el código y largarnos de este encantador lugar, no sin antes cargarme a los creadores.
Al fin, después de veinticuatro horas volvimos al Claro. Estaba echa polvo, lo único que quería era dormir hasta el día de mi muerte. Newt se acercó a nosotros, y al verle con una sonrisa llena de entusiasmo se me rompió el corazón.
-Decidme que habéis encontrado algo -Sonaba impaciente, como un niño esperando el postre- Por favor.
-¡No hemos encontrado nada! -Gritó Minho- El Laberinto es una fuca broma. Nunca hubo una salida y nunca la habrá. Estoy harto de toda esta clonc. ¿Sabéis qué? ¡Me rindo! -Golpeó a suelo y lanzó su mochila contra el suelo. Después se marchó apretando los puños.
-¿Qué le pasa? -Preguntó Newt.
-Solo está desanimado -Respondí- No hemos visto nada nuevo.
Suspiré y agarré la mochila del chico. Me despedí de mis amigos con una sonrisa y corrí en la misma dirección en la que había ido el corredor. Acabé dentro de la Hacienda, buscándolo. Estaba en su habitación, sentado sobre la cama con los pies en el suelo y los codos apoyados en sus rodillas. Me dolió al verle con el rostro entre sus manos, se veía tan... desilusionado.
-Aún tenemos una esperanza -Comenté sentándome a su lado y llamando la atención del chico.
-No creo que funcione, Ash -Tenía la mirada perdida.
-Bueno, eso no lo sabemos -Me encogí de hombros- No podemos quedarnos aquí para siempre, este no es nuestro hogar. Quien quiera que nos haya enviado aquí, quiere que nos larguemos de una santa vez y, eso haremos. Enfadarse no servirá de nada y rendirse será darle un festín a los laceradores. Minho, habéis estado aquí durante más de dos años, ¿no quieres salir de una fuca vez? -Dirigí mi mirada a Minho, quien me miraba con una expresión que no sabía diferenciar- Hemos llegado demasiado lejos como para rendirnos y echarnos a llorar. No pienso morir aquí, quiero antes patear con mi bonito pie el culo de los creadores.
Sonreí de satisfacción, me había quedado bastante a gusto con ese discurso. Salgamos o no de este lugar, no soporto ver a Minho de esa manera. El chico me miraba embobado, sinceramente no sabía muy bien que hacer. Entonces, cogiéndome por sorpresa, estampó sus labios contra los míos. Me encantaba su forma de besar, sin permiso y sin cortarse un pelo. Le seguí el acto, moviendo mis labios al compás de los suyos. Enredé mis dedos en su pelo y sus manos se dirigieron a mis caderas.
-*Tenemos todas las palabras* -Me dijo Teresa en mi cabeza, provocando que me sobresaltara y separara- *Baja aquí*
-¿Te ocurre algo? -Preguntó con preocupación.
Me levanté y tiré de sus muñecas, obligan dolo a levantarse. Me dirigí a la sala donde se encontraban los mapas. Estaban Newt, Thomas y Teresa, al ver al segundo con una expresión de desilusión, se me heló la sangre.
-¿Y bien? -Pregunté con nerviosismo- ¿Cuales son las palabras?
-Emerge, Atrapa, Sangra, Muerte, Difícil, Pulsa -Leyó en voz alta mi amigo.
-¿Qué se supone que significa eso? -Espetó Minho.
-Ni idea -Contestó Newt.
Yo estaba petrificada y creo que Thomas lo notó. Miles de recuerdos me invadieron la mente, recordaba esas palabras, recordaba haber sido yo quien las propuso. El agujero de los laceradores, una sala con ordenadores, el Precipicio... Ya sé donde esta la salida. Lo recuerdo.
-¿Ash? -Me preguntó Teresa con un tono dulce- ¿Estás bien?
-Precipicio... Agujero... Sala... -Por un momento se me había olvidado hablar.
-¿Qué? -Dijeron todos al unisono.
-*¡Thomas!* -Le grité y vi su reacción de dolor- *A ti o a mi, nos tiene que picar un lacerador. Adrede. Necesito recuperar algunos recuerdos, creo que conozco la salida*
-*Estaba pensando lo mismo* -Le vi sonreír- *Me picaran a mi*
-¡Ashley! -Me gritó Newt y desconecté de mi cabeza- ¿Llamo a los mediqueros?
-No, gracias -Dicho esto me marché.
Era la hora de salir de aquí.
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¡Nuevo capítulo! ¡Yey!
Lamentamos haber tardado tanto en subir :( Esperamos que las haya gustado. ¿Qué tal las notas? Esperamos que os hayan ido bien y si no es el caso, todo se puede recuperar ;) Intentaremos subir lo más seguido que se pueda.
Un beso enorme
Mire y Julia