Emily iba casi todos los días a ver a Scott, para ayudarlo a preparar su vestido, la pequeña alfa posaba para que el beta pudiera ver cómo le quedaba, mientras su padre hablaba con su tía ella jugaba con los que consideraba sus primos. Woody y Junior, olvidaban sus diferencias cuando Emily estaba cerca, incluso se les podía ver jugando juntos cuando los pillaban desprevenidos.
-Oli solo acepto volver a trabajar porque me hacíais compañía. – comenzó a reír. – No quiere que me quede solo en casa con los dos monstruitos, así que siempre ponía excusas para volver.
-¿Cómo te sientes? Escuche que es una recuperación complicada, el doctor Corbin me lo explico por encima, aunque la mitad de cosas no las entendí. – rasco su nuca avergonzado. – Emily nos llamó la atención, así que él dejo de explicármelo, y no sé lo he vuelto a preguntar.
-Los primeros días apenas podía moverme, si o si necesitaba que alguien me ayudará. – suspiro. – Me dolía mover cualquier parte de mi cuerpo, Oli se encargaba de darme la comida, creo que está algo desilusionado ya que no necesito su ayuda para eso. – se burló. – Le gustaba, decía que así practicaba para el futuro bebé.
Nevan sabía lo que querían hacer cuando Scott se recuperará, fue él quien le dio el número de Joe a Oliver para que se hiciera las pruebas, algo que el beta no conocía. Oliver ha intentado ser sigiloso en ese aspecto, no veía necesario alterar más de lo necesario a Scott, así que prefiero ocultarse en cierta parte. Scott era demasiado perspicaz den ese aspecto, podía saber cuándo Oliver le ocultaba algo por su manera de actuar, cuando empezó a hacerlo de nuevo, temió que lo estuviera engañando con alguien más.
-Lily vendrá dentro de una hora, hoy tenia cosas que hacer, así que se atrasará un poco el paseo de los monstruitos. – no les importaba demasiado, por como actuaban. - ¿Crees que está cinta le quedará bien? Emily le ha pedido a Lily que le haga unas trenzas y quiere decorarlas con alguna cinta, para que no se vea la goma.
-Es parecida al vestido, creo que quedará bien. – la pequeña les estaba enseñado a rodar por el suelo. – Veo imposible preguntarle su opinión, está demasiado ocupada.
-Oli ha conseguido unas flores para hacerle una corona. – sonrió y se las enseño con cuidado. – Cerca de la comisaria hay una tienda de manualidades, le pedí que buscará algunas cosas.
Emily tomo a Woody y a Junior como sus alumnos personales, Oliver le dijo que les enseñara algunas órdenes para que se porten mejor, ella solo quería enseñarles a rodar para jugar con ellos en el parque. Nevan siempre le preguntaba de donde venía tanto barro cuando llegaban de nuevo a casa, y ella hacía como si no hubiera pasado nada.
-Woody me estás aplastando. – se quejó. – Junior deja de lamerme... - los canes habían decidido que era hora de terminar las clases. – No, no, no... - suspiro. – Aun no ha terminado, el tío Oli dice que tenéis que aprenderlo.
Le era imposible moverse, así que desistió, dejo que se divirtieran un poco antes de pedirle ayuda a Nevan. No quería volver a casa llena de babas, el omega logro llamarles la atención con algunos de sus juguetes para que pudiera escapar con cuidado.
-Tío Scott. – puso sus brazos sobre el reposabrazos del sofá. - ¿Puedo probármelo?
-Aún me queda hacer la parte de arriba. – Emily hizo una mueca. – Si quieres puedes ayudarme a elegir las cintas, están esa bolsa. – la pequeña alfa se sentó a su lado. – El tío Oliver compro algunas cintas para el vestido, no sabía cuál elegir, son para el tirante.
Movía sus piernas animada mientras observaba las cintas, quería que quedaran bien, si no recordaba mal las que llevaba su papá eran blancas, pero no encontraba ningunas con ese color. Oliver le había comprado cintas llamativas de diferentes colores, como le había pedido Scott, no le gustaba la idea de que Emily llevara colores tan claros, así que estaba adornando el vestido con un poco de colores fríos.
-¿No tienes el que uso papá? – el beta negó con la cabeza. – Papá ¿En el hostal hay cinta blanca?
-No lo sé, Celia no suele tener estás cosas. – Emily suspiro. – No te gustan esos colores, son muy bonitos.
-El vestido de papá era blanco, y su cinta también. – le recordó. – La foto que le enseñe a mi profesora lo mostraba, papá ¿también te pondrás el vestido? – el omega se sonrojo. – Los papás también tienen que ir vestidos para el desfile, lo ha dicho uno de los profesores, se darán premios a los papás que vengas disfrazados, el tío Scott puede dejarte el vestido ¿verdad?
-No creo que me venga bien. – mintió, había recuperado su peso habitual gracias a las comidas de Silver y a la insistencia de Celia para que comiera. – Podríamos romperlo, mi vida. El vestido que hizo el tío Scott es importante para él.
-No veo ningún problema. – las mejillas de Nevan se volvieron más rojas. – Lo tengo guardado, puedo pedirle a Oliver que baje la caja, se pueden hacer algunas modificaciones, no hay problema.
Emily miró cómplice a Scott, aunque era verdad que hubiera los padres y madres podían ir disfrazados para el desfile, lo del concurso era mentira. Solo les iban a dar premios a los niños, pero Nevan no lo sabía, Emily fue convenciendo poco a poco a su papá con la ayuda de Celia para que se disfrace con ella, quería ver con sus propios ojos como le quedaba el vestido. Además, había explicado a sus compañeros que Nevan era un modelo famoso – Lily le contó que gano bastante fama durante unos meses debido a las fotos, así que debía ser verdad. -, les prometió a sus compañeros que iban a llevar el mismo vestido, así que no podía negarse. Nevan debía llevarlo de nuevo.
-El tío Scott lo arreglara. – sonrió traviesa. – Papá puede ir con el vestido al desfile, como los otros papás.
-Emily, ese vestido es muy valioso, papá se pondrá muy triste si se rompe o se ensucia. – la pequeña lo miró con tristeza. – Además, ya tenía pensado mi disfraz.
-Por favor, papá... - Scott ayudo a convencer al omega. – Seguro que mi papá del cielo quiere verlo. – el corazón de Nevan se encogió. – Solo habrán papás y mamás, no hay personas malas.
-Me lo probaré, pero no prometo nada... - Emily sonrió de medio lado. – Scott, lo siento.
-¿Por qué? La ropa está para usarla. – se quejó. – ¿Qué tiene de bueno tenerlo guardado en una caja? Además, princesa, te aseguro que tu papá se ve hermoso con ese vestido.
Nevan se escondió tras la almohada avergonzado, seguramente su hija le pediría también que se maquillará igual que en el desfile. Ya venía venir como convencía a Lily para que la ayude, para ella era fácil hacer que los demás aceptaran sus tratos, sobre todo si era con Scott. El beta hacía cualquier cosa por la pequeña.
-Creo que Nevan podrá probarse el vestido antes de lo previsto, princesa. – sonrió, y le enseño su móvil. – El tío Oliver está viniendo a casa. – Emily comenzó a reír.
-Todos son cómplices suyos. – les culpo el omega. - ¿A quién más has convencido?
-A Tania, Orión y la señora que me regala chocolatinas cuando vamos a comprar la arena para los gatitos. – Nevan se sintió atacado. – Al tío Oliver también, y a la tía Celia, Silver quiere verte con el vestido ya que él no pudo ver el desfile. – rasco su mentón. – La tía Lily no sabe nada, pero seguro que me ayudará. – inflo su pecho. – El señor que ayuda a la tía Celia a cargar las cajas también lo sabe, y el doctor, se lo dije cuando fuimos a la revisión.
-¿Cuántas personas lo saben? – Emily contó con los dedos concentrada. – ¡Emily!
-¿Tío Scott cuanto son muchas personas? – el beta comenzó a reírse. – Mis compañeros también lo saben, Hugo está enfadado conmigo así que dice que mi papá nunca fue modelo y además es feo. – suspiro resignada. – Hugo es tonto, así que no le hagas caso, papá. – lo halago. – Mis profesores también lo saben, y creo que alguien más, no sé.
El omega no podía creer la facilidad que tenía su hija para hablar con todo el mundo, creía que Emily era tímida, ya que le costó mucho adaptarse a sus compañeros cuando paso a primaria. Ella estuvo los primeros años de su vida estudiando en el hostal, los huéspedes siempre le enseñaban algo, así que tenía facilidad para comunicarse con los adultos, aunque siempre se escondía detrás de él.
-¿Hice mal, papi? – Nevan no dijo nada, estaba procesando la información. – Lo siento. – no era cierto. – Quería que todos vieran que mi papá es hermoso... - hizo una pequeña mueca y apoyo su cabeza sobre el brazo de Scott. – Papá parece enfadado.
Emily quería parecer una buena niña, no quería dar pie a que su padre descubriera lo que estaba escondiendo y cuál era su plan para conseguir que Nevan accediera a formar parte del desfile. No tan solo le había dicho que su papá era el ángel que hubo en el desfile, si no que él se iba a presentar en el desfile con ese mismo vestido. Las profesoras conocían a Nevan, siempre era el primero que se presentaba a recoger a Emily y hablaba con ellas cuando había algún problema, le tenía bastante apreció. Así que fue bastante fácil convencerlas para que él desfilara con ella, dándoles la idea de que otros padres y madres podían participar. Nevan empezaba a sospechar que estaba dejando a Emily demasiado tiempo a solas con Scott.
Cuando Oliver llego a la casa, Emily se emocionó, no pudo ocultarlo. Antes de que Scott le dijera nada le pidió al beta que buscará la caja donde estaba el vestido de Nevan.
-¿El tío Scott lo sabe? – asintió con una gran sonrisa. – Puedes preguntarle en que caja está, voy a cambiarme de ropa.
Emily correteaba detrás del beta para ver el vestido, Scott les había dicho que estaba en una caja azul, casi al final del armario, debían buscar la que tuviera una pequeña estrella pegada en la tapa. Oliver cargo a la pequeña en sus hombros para que pudiera ayudarlo, él ya la había encontrado, pero quería que Emily se lo dijera.
-Tío Oli, está ahí, ahí... - le señalo eufórica. – El vestido de papá ¿lo ves? Tiene una estrellita en caja y es azul, es está.
Nevan sintió un nudo el pecho cuando abrió la caja, hacía tiempo que no pensaba en lo que había pasado en aquella época, ese día se enfadó demasiado con Nash porque lo había besado. No era un recuerdo bonito, a decir verdad, en aquel momento se sintió desnudo delante de demasiada gente. Nash se disculpó, pero no sirvió de mucho. Nevan seguía sintiendo que había traicionado a alguien, como instinto toco su vientre, le calmaba hacerlo, aunque no hubiera un bebé en él. Podía sentir los movimientos de Emily.
-¿Papá? – el omega sonrió con los ojos lloroso. - ¿Había mucho polvo? Sé que los ojos de papá se ponen tristes cuando hay polvo ¿Estás bien?
-No lo recordaba así... - confesó. – Scott ¿hiciste algo después del desfile?
-Se lo probó otro modelo. – respondió con desgana. – Los jueces quería ver como quedaba en el cuerpo de una mujer, así que eligieron a una de las chicas que se encontraba allí. Lily se ofreció a probárselo, pero no la dejaron, querían que fuera del mismo tamaño que tú.
-No pude ayudarte, tal y como te prometí. – el beta sonrió. – El desfile era importante para ti, y yo lo estropee.
-Te ganaste el apodo de pequeño ángel. – respondió con sinceridad. – Me pidieron que hiciera algunos más para venderlos, pero me negué no quería que otra persona fuera llamada pequeño ángel.
Emily insistió en que se lo probará, Scott debía ver que debía arreglar para que le fuera como antes. Nevan sintió mariposas en el estómago al quedarse solo en la habitación, estuvo sentado varios minutos antes de empezar a desvestirse, miraba el vestido de reojo, con cierto miedo. No quería que Scott se sintiera infravalorado, así que se lo puso con cuidado. Su ropa interior no era adecuada, se veía ridículo con aquellos calcetines de flores, que no combinaban con sus calzoncillos de ositos.
-Él ya no está aquí. – se recordó al verse en el espejo. – Nevan, él no está aquí.
Se sentía extraño, por una parte no veía gran cambió en su cuerpo. Si se ponía un vientre falso podría parecerse al antiguo Nevan, pero pensaba que era una idea demasiado macabra. Se puso de lado y fingió estar embarazado, inflando un poco su vientre. Se había probado ese vestido tantas veces que parecía que era solo para él, Emily lo acompaño en cada una de esas pruebas, y ahora estaba a punto de cumplir siete años. El tiempo pasaba demasiado rápido.
-¡Papá! – estaba preocupada. - ¿Estás bien? El tío Scott dice que había una aguja ¿te has hecho daño? Papá, ten cuidado.
-Espera, princesa. Ahora salgo. – pudo escuchar cómo se apartaba de la puerta.
Sonrió al encontrar las pulseras que se había puesto aquel día. Se quitó los calcetines y los apoyó sobre la cama. Su idea era mostrarle como quedaba a Emily. Con cuidado se hizo el nudo que llevaba en el pecho, como su vientre estaba plano caía de manera extraña, pero no sabía cómo arreglarlo, tal vez le pediría a Scott prescindir el lazó, no le gustaba como le quedaba. El vestido el fresco y cómodo, no tenía problemas en moverse.
-Princesa cierra los ojos. – le dijo emocionado. – Cuenta hasta diez y ábrelos, papá te enseñara el vestido.
Escucho como Emily gritaba los números acompañada de Woody y Junior, ellos la ayudaban para que no sé perdiera en las cuentas. Oliver se sentía un poco nervioso, tan solo lo había visto en fotos y una vez que Scott saco el vestido para arreglar sus bajos. Scott confiaba en Nevan, así que sus nervios iban a como le sentiría el vestido y cuantos retoques tendría que hacerle, uno de los que veía necesario era el del pecho, quedaba más bonito si se veía ceñido en esa parte.
-¡Diez! – Nevan se puso delante de su hija. - ¡¡WOAH!! Papá... - el omega aparto la vista, le daba demasiada vergüenza que su hija lo mirada de esa forma. – Tío Oli, mira a papá... - le suplico. – Tío Scott, Woody, Junior... - quería esconderse.
Nevan dio un pequeño paseo alrededor de los sofás para que pudieran ver cómo le quedaba en su totalidad, se acercó con cautela a Scott, para que lo viera de cerca. Sentía calentura en ese momento, ellos lo habían visto muchas veces en bañador, pero le deba vergüenza que lo vieran con el vestido. Emily hablaba con emoción detrás de él, mientras le pedía a Oliver unas pulseras como las de su papá.
-Creo que el lazo no es necesario. – se aventuró a hablar. – Recuerdo que lo pusiste para que se marcara más mi pecho y se notara más mi tripa.
-Fue un invento de última hora. – rio. – El vestido abultaba demasiado esa parte y quedaba extraño, ya no necesita el lazo.
-Tío ¿puede hacerme las trenzas con el lazó? – el beta asintió. – Papá, me gusta mucho, brillas tanto como el sol. – Nevan sonrió. – O como las estrella que vemos en casa del tío Corbin, papá eres como una estrella.
-Le tendremos que decir a Lily que vuelva a hacerte el cabello esponjoso. – Emily asintió. – Queda purpurina de la última vez, creo que será suficiente para los dos.
Emily abrazo a Nevan con amor, quería verse con su propio vestido, no podía esperar más, necesitaba que el desfile se llegará.
Y así fue...
Unas semanas después, Nevan se volvió a vestir con el vestido acompañado de Emily, estuvieron varias horas preparándolos, tuvieron que comer deprisa para terminar. Lily lavo y recreo el cabello de Nevan con mucha facilidad, le agradeció al omega que no tuviera la idea de cortárselo. Emily espero pacientemente a que le hicieran sus trenzas, quería que le pusieran rápido el lazo, así que lo guardaba en sus manos para que no se le olvide a su tía.
-Celia y Silver irán directamente al colegio. – le avisó el omega. – Nosotros iremos con los tíos, cuando terminen.
Emily dijo que quería llevar purpurina también en los hombros, al igual que en sus mejillas. Lily le hizo un maquillaje sencillo e infantil. A Nevan le marco los ojos y la nariz, pintando sus labios de un color neutro, no quería llamar demasiado la atención. Ya se imaginaba las miradas cuándo llegará al colegio con Emily, se había preparado para asumirlas.
-Yo os llevaré. – les propuso Lily. – Así iremos más rápido, espero que no haya muchos coches.
La tela del vestido era un poco más oscura que antes, Nevan no quería que se notará tanto la silueta de su cuerpo, habría bastantes alfas allí, así que era mejor no llamar demasiado la atención. Aunque creía que eso ya era imposible.
-Papá, tenemos que hacernos una foto para enseñársela al doctor Corbin. – le recordó. – Él no puede venir. – también quería llevársela a Jaxon, aunque no iba a decirlo en voz alta. – Hugo tendrá que dejar de ser un tonto, y ver que mi papá es hermoso.
Al llegar vieron a Tania y Orión, sospechaba que Emily les había dicho cuál era su colegio, porque la pequeña reía con ganas.
-Pequeño ángel... - el alfa se apartó para verlo mejor. – No has cambiado, mira Tania, el pequeño ángel está de vuelta.
-No he podido disuadirlo. – no estaba arrepentida. – Iba a venir yo sola...
-La muy traidora me había escondido las llaves, decía que no podía verte. – se quejó. – Se piensa que es la única que puede disfrutar del pequeño ángel, princesa, Tania fue malvada con tu tío favorito.
-¿Con el tío Scott? – Orión puso su mano en el pecho de forma dramática. – El tío Scott está viniendo con el tío Oli, dicen que los esperemos en la entrada. Woody y Junior no ha podido venir, se quejó.
Nevan llamó la atención de algunas alfas antes de entrar en el colegio. Como iban con sus parejas no se acercaron a él, se escondió detrás de Orión para que no los viera de aquella manera, el alfa se lo tomo con algo personal.
-¿Qué miráis? – les gruño. – Depravados, vais con vuestros hijos, dejad de babear. – Tania golpeo su nuca. - ¿Qué haces? Tengo que ayudar al pequeño ángel.
-Recuerda de lo que hablamos, nada de insultar a nadie. – el alfa asintió. – Llamarlos perra es un insulto, así que no puedes decirlo. – Orión se quejó. – Tampoco puedes decirles idiotas, depravados, imbéciles, ect...
-¿Ni siquiera tontos? – la omega asintió. - ¿Por qué?
-Orión, estás en un colegio, he accedido a traerte porque prometiste que te ibas a portar bien, no hagas que me arrepienta.
Orión hizo una gran mueca antes de aceptar las palabras de Tania, no quería enfadarla, le preocupaba su estado.
-¿El bebé está bien? – asintió. - ¿Sientes alguna molestia? Busco un lugar donde puedas sentarte. – negó con la cabeza.
El primer desfile fue de los pequeños de infantil, muchos de ellos iban acompañados de sus padres o maestros, otros se escondían para que no los vieran o se ponían a llorar. Tuvieron que terminar rápido para que se arme un gran escándalo.
-Mi papá del cielo nos está mirando. – Nevan asintió. – Podrá ver como brilla mi papá.
El desfile fue entren tenido, algunas clases tenían actividades preparadas, donde los invitados tenían que participar. Emily llevó a Scott con ella cuando dijeron que tenían que llevar a una persona importante y hablar sobre él o ella.
-Mi tío Scott hizo el vestido de mi papá y el mío. – sonrió de oreja a oreja. – Él juega mucho conmigo aunque ahora este un poco malito, tiene dos perros llamados Woody y Junior, a Junior le falta un ojo, pero no importa. – rio. – Mi tío Scott es muy importante para mí, ya que es mi tío Scott, papá dice que él lo ayudo mucho, por eso lo quiero mucho. Mi tío Scott es como mi tercer papá. – el beta apretó los labios. – Mi papá Nevan cuida de mi todos los días, mi papá Jaxon está en el cielo, y mi tío Scott es mi tercer papá ya que me quiere mucho. – no sabía que decir. – También quiero a mis otros tíos y tías, pero el tío Scott es mi favorito. – dijo mirando a Orión. – No quiero que estén tristes por eso, aunque él sea mi tío favorito.
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Emily quería dejar en claro quien era su tío favorito, así que lo repitió diez veces, para que Orión los supiera, no podía permitirse que el alfa le quitará el sitio.
Espero que os haya gustado :)
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