Camila G!P.
Nota: Originalmente esta fue idea de otra escritora la cual ya no tengo su user, yo solo termine de escribirlo😈😏🔥
Créditos a esa persona.
LAUREN.
Desde que estaba en el colegio, había tenido un crush con Camila Cabello.
Mi casi mejor amiga.
No sé si es demasiado despistada y no se da cuenta o simplemente hace caso omiso porque no siente lo mismo. Siempre trato de coquetear con ella, no lo hago tan obvio pero, tampoco es tan difícil de notarlo inclusive su madre se ha dado cuenta. Reconozco que a veces puedo ser tímida y se me hace difícil coquetear con alguien que me gusta pero, con Camila de verdad hago el intento. Una vez, estaba completamente borracha y mi hermano me retó a hacerle un Lap Dance a Camila para su regalo de cumpleaños y lo hice, fue bastante sensual según mis recuerdos To say the least. Al final, ella sólo sonrió, me dio una palmada en el trasero y se fue.
Mis escenas de celos y berrinches siempre estaban a la orden del día en nuestra amistad. Oh, ¿Que Camila saldría con Juliet porque tenían una tarea que hacer? Lauren, activaba el mood malcriada:
"Camila, en serio tienes que ir?" Le pregunté por milésima vez mientras Camila recogía sus cosas.
"Sí, Laur, sabes como es el proyecto, Juliet es mi pareja y así funciona" Me respondió mientras caminaba por la habitación
"Por favor, no digas que es tu pareja" Reproché incómoda.
"¿Hay alguna otra manera?" Me miraba tratando de no reírse.
"¿Compañera de clases tal vez? Suena más específico y mucho mejor" Contesté simple y me acerqué un poco para abrazarla, no quería que se fuera.
"Ya, tranquila. Mañana seguiremos con nuestro maratón de películas" Me dijo para animarme.
"No, quiero que sea hoy" Me alejé de sus brazos y Camila alzó una ceja.
"No seas chiflada Lo, te prometo que mañana pasaremos el día juntas" Se acercó un poco y besó mi frente.
"Solo ¿tú y yo?" Pregunté, haciéndole pucheros.
"Tú y yo siempre" Me sonrió "Ya me tengo que ir pero, te llamaré más tarde".
Mis amigas de alguna manera trataban de ayudarme a que Camila se diera cuenta de cuánto me gustaba no, de cuánto la quería. De algún modo al principio fue como un flechazo pero con el paso del tiempo me fui enamorando de ella y su actitud tan problemática lo que la hacía ver sexy, amaba en secreto ver cómo todas las chicas me miraban como la mierda simplemente por que compartía mucho tiempo con ella, sabía que aquellas perras morían de la envidia.
Una ocasión había llegado a mi la idea de ignorarla y tal vez así se daría cuenta de lo que mi ausencia significaba y para ser honesta creo que solo le afectó por el lado de nuestra amistad.
—Creo que tienes que pararte en frente de ella desnuda y decirle, "Hey me gustas" - Comentaba Normani mientras tomaba su té. Camila y yo siempre era un tema del que hablar para mis amigas cuando nos reuníamos los domingos en una cafetería cerca de casa de Dinah.
—Creo que es la mejor idea que he escuchado - Dinah volteó los ojos.
— ¡Absolutamente no!
—Tu plan de evadirla ha estado funcionando, tienes ese punto a favor - Decía Ally, tratando de animarme.
—Yo no lo sé chicas - Hablé un poco desanimada — He llegado a pensar que tal vez lo evade porque simplemente no le gusto de esa forma ya saben, romántica.
Ally, Normani y Dinah soltaron una carcajada mientras negaban.
—Lo, ¿En verdad piensas que no le gustas a Camila? - Me preguntó Ally, en una mezcla de risas y miedo.
Asentí.
—Si no le gustaras a Camila, no entiendo por que estaría en este momento caminando a nuestra mesa con esa cara de culo, ¿Simplemente porque no has contestado sus llamadas? Si, claro - Apenas termino de hablar Dinah cuando volteé para ver a Camila caminando hacia nuestra mesa, con un outfit tan sexy como acostumbraba a vestirse, tan despreocupada.
—Hey, chicas - Saludó simple y tomó el asiento vacío que estaba junto a mi —Lauren, ¿Podemos hablar? - Yo sólo la ignoré lo que la hizo gruñir más.
—¡Mila! ¿Serás nuestra nueva acompañante los domingos?" Preguntó Ally.
—No lo creo, sólo vine hoy porque Lauren me ha estado ignorando - Me miró —Quiero saber la razón y por que carajo sigue haciéndolo - Las chicas no emitían ni un sólo ruido. Camila me miraba con decepción y ya no pude seguir fingiendo, solo les di una mirada a mis amigas para que nos dejaran a solas.
—¿Cómo has estado? - Ok, era pésima para sacar temas de conversación.
—¡Deja esa mierda! ¿Que carajo te hice? ¿Por qué maldita sea me ignoras desde hace dos semanas? - Bueno no pensaba que llegáramos a este punto —Mírame cuando te hablo joder - Golpeó la mesa haciéndome sobresaltar.
—Lo siento, Camz... no quise ignorarte solo he estado un poco ocupada - Sí, claro.
—¡¿Ocupada?! Ocupada saliendo con el idiota de Jaden - No sabía que Camila pudiese gruñir tanto hasta ese día.
Aquel día descubrí que Camila estaba celosa, muy celosa y eso me hizo mantener mis esperanzas. Hace ya varios meses de aquello y sigo colgándome de esa esperanza.
Hoy, como todos los fines de semana teníamos planes, iríamos a una fiesta en casa de una amiga por su cumpleaños.
"Bebé, ¿Ya vienes por mi?" Le pregunté a Camila apenas contestó mi llamada.
"Llego en 15 minutos" Respondió simple.
Cuando llegó por mi estaba nerviosa pues tenía un plan, un plan que haría a Camila estar conmigo o mandar a la mierda todo y en eso incluía nuestra amistad.
Hoy jodidamente haría que Camila me notase si o si. Ya no habría marcha atrás.
—Te ves como una puta, Lauren - Susurró Verónica en mi oído a lo que yo sonreí.
—Esa es la idea, cariño - Acaricie su mandíbula con mi dedo índice —¿Lista?
—Por supuesto - Medio sonrió mordiendo su labio inferior mientras sentía como sus manos estrujaban mi trasero —Que sepas Laur que esto no es ningún sacrificio... si no estuviera tan enamorada no descansaría hasta follarte.
Continué jugando con Verónica Iglesias una chica mayor que nosotras, novia de una de mis amigas de mi vecindario pero eso nadie tenía que saberlo solo Lucy claro, su novia. Mi amiga.
Sentía una mirada perforarme y no tenía que ser adivina para saber que era Camila quien me veía pues ya había pillado un par de veces la mirada amarga que le dedicaba a Vero, Camila solo estaba parada cerca de nosotras bebiendo y fumando como si de mi guardaespaldas se tratara o mi acosadora personal.
Un rato después Pour It Up comenzó a sonar y yo ya estaba un poco pasada de copas y muy decepcionada, con el corazón hecho mierda, llevábamos mucho tiempo en aquella fiesta y Camila no hacía malditamente nada incluso vi a Sam cerca de ella, la muy zorra tocaba su entrepierna como si fuese de su propiedad.
A la mierda.
Arrastre a Vero junto a unos chicos que no sabía quienes mierda eran solo nos acercamos y comencé a restregarme en Verónica o uno de los chicos la verdad ya no importaba nada, nos movíamos al ritmo de la canción, el mundo desaparecía a mi alrededor mantenía mis ojos cerrados dejándome llevar. Sentía como alguien me tomaba de la cintura pegándome con fuerza a su cuerpo sonreí mientras refregaba mi trasero en la entrepierna de aquella persona, lleve una mano hacia atrás acariciando su nuca.
Al menos follaría con alguien esta noche.
De pronto alguien me jaló violentamente sacándome de mi trance de excitación.
Era Camila.
—Ven acá - Camila me tomó por el brazo llevándome escaleras arriba y nos metió a un baño.
—¡Ay! Bestia - Me queje —Cálmate ¿Qué te pasa? - Pregunté enfadada, no tenía derecho a dejarme en ridículo.
—Ponte de rodillas - La miré extraña —Ponte de rodillas, Lauren - Obedecí y me puse de rodillas, mirándola expectante. Camila desabrochó sus jeans y los deslizó por sus piernas al igual que su ropa interior —Esto es lo que quieres ¿No? - Tomó su pene entre sus manos. Estaba anonadada.
¡Mierda! Estaba tan dura.
Se acercó más a mi —Abre la boca - Obedecí gustosa y metió su verga poco a poco, todavía no entendía lo que pasaba pero mierda no me quejaría estaba feliz por lograr mi cometido. Pensaba que iba a ser una noche-fracaso más a la lista, donde intentaría coquetearle a Camila y por supuesto, ella no me pondría atención.
Pero hoy sí. Hoy tenía su gran polla en mi boca y no me importaría chupársela todo lo que ella quisiera.
Me tomó por el cabello con fuerza mientras intentaba meter todo su miembro en mi boca. Siempre había sabido que era grande y que hacerle sexo oral a Camila sería un reto.
—En realidad quieres esto, ¿eh? - Buscaba mi aprobación a toda costa mientras metía su polla hasta el fondo de mi garganta, yo asentí. Era obvio que lo quería, estaba chupando su pene como si no existiera un mañana.
Camila tiró su cabeza hacia atrás, con una de sus manos mantenía mi cabeza firme en su polla mientras la otra mano tiraba de su franela hacia arriba dejando su torso descubierto, Camila quería tener una vista perfecta de su polla siendo succionada por mis labios, sus ruiditos me tenían chorreante.
La saqué un poquito de mi boca y pase mi lengua por toda su longitud, saboreando y sonriendo mentalmente por haber obtenido por lo menos esto, su rica polla. Tenía que disfrutar cada segundo. Seguía lamiendo y chupando mientras que con mi mano libre acariciaba y arañaba su abdomen y nalgas. Camila tenía un trasero precioso.
Ella me miraba fijamente desde arriba y eso no hacía más que mojarme más, siempre tenía esa cara de de chica mala y sin sentimientos que me volvía loca.
Empezó a gemir y a follar mi boca con vehemencia, estaba a punto de correrse quería sentirla en todas partes, quería que se viniera en mi cara, ayudaba al cutis o eso decían. Camila comenzó a sacudirse un poco, su semen estaba a punto de salir así que metí sus bolas a mi boca chupándolas como si fuera mi dulce favorito, se vino en mi después de unos segundos. Chorros de su dulce crema caían sobre mi cara, gemí cuando su sabor almizclado llego a mi lengua, con mis dedos lleve lo que podía de su leche a mi boca dejándola asombrada por mi acto, si bien yo era "tímida" jamás me mostré tan zorra hasta hoy. De saberlo antes lo habría hecho hace mucho.
Me levanté, caminé lentamente hacia el inodoro bajo su mirada mientras quitaba mi falda junto a mis braguitas, baje la tapa y entonces empujé a Camila hasta sentarla para después subirme en su regazo, su miembro rozaba mi centro torturándolo.
—Hace mucho que había querido hacer esto - Confesó —Siempre había fantaseado contigo chupando mi verga - Rozó sus dedos en mis labios mayores —Cada vez que comías una paleta o simplemente tenías tu lápiz en la boca... me daban ganas de tomarte así a la fuerza y metertela, obligarte a que te comieras mi pedazo de carne - Gemí.
—Hubiese aceptado gustosa, como hoy - Hablé inocentemente. Pasé mis manos por su cuello — Nunca he dejado de coquetearte Camila, cada vez que te veo me lanzo hacia ti, ¿No te dabas cuenta?
—Es imposible no notarlo cuando siempre me miras con esos ojitos que me piden que te coja pero, no quería joder nuestra amistad - Metió dos de sus dedos en mi vagina haciéndome temblar.
—¿Qué te dicen mis ojos hoy? - Le pregunté insinuante, re-moviéndome un poco en su regazo, follándome sola con sus dedos.
—Como siempre, me piden que te folle - Me sonrió de lado —Esta vez lo haré y lo sentirás por días, Lo.
Sacó sus dedos de mi interior solo para llevarlos a mi boca, me hizo chupar mi propio sabor para después tomarme en un beso salvaje, nuestro primer beso no podía ser mas perfecto. Metió su lengua en mi cavidad bucal dejándome sin aliento por lo rico que sentía aquel beso.
Tome su gran polla entre mis manos para alinearla en mi entrada, baje sobre su falo despacio, disfrutando de cada centímetro de su delicioso pedazo, ella comía mis tetas mientras me empalaba yo sola. Comencé a subir y a bajar con más velocidad. Escuchábamos como trataban de entrar al baño pero joder, yo no dejaría de coger con Camila cuando llevaba años deseándolo. Sentía la cabeza de su verga llegar a mi cérvix, aquella sensación me estaba haciendo gritar como zorra, seguro las personas afuera se daban una idea de lo que aquí sucedía, mis rebotes iban más rápido buscando mi liberación, estaba tan excitada que mis jugos llegaban hasta los pequeños vellos de Camila empapando todo a su paso. Su verga se hinchaba un poco más con cada estocada, no sabía que aquello fuese posible, me encontraba al borde de la locura, mi vista se nublaba, jamás había estado tan cachonda como hoy ni siquiera cuando me masturbaba pensando en Camila y su polla. Camila clavó sus dientes en mi cuello haciéndome llegar al éxtasis.
—¡AH! - Chillé. Cerré mis piernas tratando de saciar mi placer lo que fue en vano por que Camila continuaba metiéndome su verga hasta el fondo.
—Eres... una nena muy... caliente - Jadeó —Mira lo chorreada que estás - Hablaba entre dientes —Mira lo empapada que me has dejado la polla.
Sollocé cuando Camila sacó su pene de mi interior, me puso de pie logrando que flaqueara pues todo mi cuerpo estaba sensible y debilitado. Noté su polla cubierta por mi orgasmo, crema blanca la cubría.
—Lleva tus manitas a la mierda esa - Ladró apuntando el lavamanos —Para muy bien ese culito para mi, bebé - Hizo referencia a como la llamaba yo a veces.
Tomo mi coño de una sola.
Sus manos estaban aferradas a mi cintura, me follaba de manera ruda sin cuidado alguno como siempre lo había soñado, Camila era una amante entregada, apasionada y muy animal en el sexo, me encantaba, me fascinaba sentir su gran verga partiéndome en dos, adoraba sentir su verga martillearme en descontrol. No sabía que pasaría después de esta noche pero nunca me arrepentiría de esto.
Chillé cuando Camila abofeteó mis nalgas.
—Mira que delicia... deberías mirar como tu coñito chupa mi polla... - Me penetraba con fuerza, nuestras pieles chocaban salvaje-mente —¿Te gusta, Lo?
Alcé mi vista hasta el espejo.
Joder.
Mi coño se contrajo, mi coño se cerró sobre su polla.
Ella estaba grabándonos.
Que mierda... lejos de enfadarme me hizo humedecerme más.
Camila tenía su teléfono directo al espejo, filmando nuestros rostros excitados, yo tenía el cabello revuelto, las tetas fuera de mi top y mi boca estaba abierta gimiendo como perfecta puta, ella movió su teléfono hacia abajo acercándolo a nuestra unión. Con su mano libre acariciaba y amasaba mis nalgas con fuerza.
—Eso Lo... follate con mi polla ¿Te gusta mi verga?
—Si... ¡Dame más!
Camila echó todo su cuerpo encima del mío, colocó la cámara frontal y me pasó su teléfono. Ella besaba y mordía mi cuello y hombro mientras yo veía todo desde el teléfono. Nunca pensé hacer una mierda como esta lejos de ser ofensivo estaba siendo sucio y caliente para mi. Sus estocadas eran más lentas pero duras pues mis tetas rebotaban cuando me la metía. Ella volvió a colocarse de pie detrás de mi sin perder el ritmo que llevaba, marrón y verde estaban conectados por la cámara, nuestras miradas no se desviaban. Llevó sus dedos a mi clítoris jugando con él logrando que mis piernas temblaran, joder que me iba a correr nuevamente.
—Vamos Lo... llena mi polla de tu dulce crema... - Ella mordía su labio inferior mientras fruncía su ceño, sabía que se correría pronto. Acarició mi botón duro con más fuerza y rapidez para que mi orgasmo se adelantara.
Yo estaba tan excitada que no demoro mucho, volví a correrme gritando su nombre varias veces. Camila sacó su polla de mi interior con velocidad cuando sus chorros comenzaron a expulsarse de su punta enrojecida, su leche calló sobre mi coño que aun se contraía, su crema pintó mi culo, mis nalgas incluso cayo poco de su semen sobre mi espalda. Ella estiró su brazo solo para alcanzar su teléfono y grabar el desastre que había dejado sobre mi coño, culo y espalda, la cabeza de su polla se paseaba sobre mis nalgas embarrando su crema en ellas.
—Que rico ha estado Lo... - Ok. No sé cómo responder a eso cuando aún sigue filmando todo —Oye Lauren...
—¿Sí? - Pregunte ladeando un poco mi cara a ella completamente sonrojada.
—¿Quieres ser mi novia?
Sonreí.
Bueno, había conseguido más de lo que pretendía aquella noche.