—¿podemos hablarlo a fuera? —su tono cambia de ser grosero a ser más tranquilo
—no quiero hacer esto ahora —admito porque estoy cansada
—por favor —implora y acepto porque sigue siendo una de las personas que más quiero
el aire frío de la noche me llena las fosas nasales y mi cabello revolotea por todos lados, sigo cubriendo mi cuerpo con la manta que Nate me a dado y la presiono con tanta fuerza que me lastimo.
Una banca a fuera del hospital nos da la vista de un parque vacío, las luces tenues de la calle no hacen más que hacer de esto más triste.
—sé que es mi culpa —admito cuando nos sentamos y ambos miramos al vacío
—sabes que no es cierto
—¿entonces que fue? solías quererme, pensé que estabas enamorado de mi
—ya no sé quién eres Olivia —sube su tono de voz para que logre oírlo
—ni siquiera yo lo sé, pero tampoco es que me debas algo
—te quiero Liv, sabes que lo hago, más que a cualquier cosa en el mundo y sé que lo arruine es solo que no sabía que hacer contigo, no sé qué es lo que realmente necesitas
—¿y por eso vas con Harriet? incluso Nate tenía límites y sabía con quien engañarme o lo que sea que hiciera, él nunca lo haría con mi mejor amiga —chillo
—no me compares con él, yo jamás te lastimaría de la manera en la que Nate lo hacía
—no lo digas...—entonces me debilito y creo que comenzaré a llorar —me estás lastimando más de lo que nunca me lastimo Nate
—Liv, vamos fue un error, uno estupido, sé que puedes perdonarme
—no lo creo, Kit
—¿cuantas veces has perdonado a Nate? Incluso sigues aquí con él —se pone de pie y comienza a caminar de un lado
—nunca voy a perdonar a Nate —admito y lo sé por todo lo que me hizo
—¿por qué no puedes ignorar todo y seguir conmigo como cuando estabas con él? —cuestiona y no sé si está furioso o apunto de ponerse a llorar
—él no me prometió nada, sabía que él no me quería de verdad, pero tú si, yo pensé que si. Entonces me hablaste de todo el amor que merecía y de cómo tú siempre estuviste buscando a alguien como yo y cuando finalmente me tienes, cuando estoy enfrente de ti, no supiste qué hacer y esta bien, entiendo lo qué pasó —hago una pausa para limpiar las lagrimas —te gusté, me idealizaste y creías que era todo lo que tú querías, después me conociste y ahora no te gusto mas
—te quiero Olivia y lo siento mucho de verdad
—no lo sientes, ¿cuantas veces paso? te creería si solo paso una vez, que fue un accidente, te perdonaría, pero sé que no es así ¿cuantas veces? ¿Desde cuando? Vamos —insisto a que responda y él niega
—no sabía lo que hacía
—¿y por qué ella? tenías más opciones, muchas chicas fuera de mi círculo querrían estar contigo, pero fuiste con mi amiga
—ella no es tu amiga Olivia, nunca lo fue, ella habla mal de ti cada vez que puede, no tienes amigas de verdad, solo están contigo porque no tienen a nadie más
—crees que eres una buena persona diciéndome esto y no lo eres, Kit
—Liv, te quiero demasiado, no me hagas esto —ahora implora
—¡tú amas la idea que tienes de mi! ¡Amas tener a alguien que puedes arreglar! pero yo no necesito ser arreglada, esto es lo que soy Kit —grito de frustración —me quieres para hacerte sentir mejor
—sé lo que tratas de hacer y no es verdad —me toma de ambos brazos para que pueda mirarlo a la cara
—Es todo Kit, no puedo seguir con esto. Acepto que fue mi culpa, todo es mi culpa, está bien, pero ya no puedo seguir engañándome a mi misma y creer que cada chico con el que estoy va a cambiar, porque no es así y tal vez te estuve hundiendo a ti para que pudieras salvarme y no quiero hacerlo más. — entonces busco en su mirada algún sentimiento que me haga sentir que sigue siendo Kit Connor, el chico que me dedico cada canción de Taylor que habla de amor y solo quiero que me diga que esto no se termino, quiero que me suplique que no termine con él, quiero que ponga alguna mierda de canción en su teléfono y me diga a gritos que me sigue queriendo, que con Harriet no significo nada, que yo soy todo lo que alguna vez soñó y que mis problemas no le impiden amarme tal y como soy.
Pero no lo hace y tal vez nunca lo hará.