Jay me mando un mensaje de que ya estaba en la ciudad, yo estaba desayunando para irme a la universidad, Sam no ha llegado, así que tuve que hacerme mi propia comida.
Pasó por mi mente lo de anoche en el pasillo, cada día me mata mas la curiosidad de saber que hay detrás de esa puerta, ¿Por que tendrá tanta seguridad? a lo mejor es una habitación del pánico, pero si es así, ¿por que nunca me dieron la clave?, voy a parar en loco si sigo pensando de mas.
Mas tarde luego de la universidad me junté con Jay para firmar unos papeles de unas compras que hizo una de las empresas de mi tía, es mucho dinero el que se maneja en esas compras, quisiera saber a donde se va todo el dinero ese que se perdió y que al parecer se sigue perdiendo, y lo peor es que no dejan rastros de transacciones ni nada, tiene que ser un experto, si mi tía estuviera viva de seguro se vuelve a morir al saber las cantidades absurdas de dinero que se están perdiendo.
―Mi amor, mi vida, Dereck― dice Jay con voz fuerte sacándome de mi nube
―Perdón, estaba divagando― me disculpé y le sonreí por mi torpeza
―Tranquilo, ya se en que estas pensando y no te preocupes, pronto daremos con el culpable― aclara Jay dándome ánimos.
―Llegamos a la casa después de firmar los papeles y estaba Sam en a cocina haciendo el almuerzo, que bueno, porque muero de hambre, aunque no es noticia nueva.
―Oye Sam, respóndeme algo― comenté curioso―
―Si joven― dice ella mirando extrañada
―¿Cuanto tiempo tienes trabajando en esta casa?― pregunté intrigado
―Tengo 9 años trabajando aquí joven― respondió sonriente
―Entonces deberías saber que hay detrás de la puerta de pasillo― Sam abrió los ojos sorprendida
―No se nada joven― aclaró con rapidez― su tía no dejaba entrar a nadie a ese lugar, siempre lo mantuvo cerrada
―O sea, que nunca llegaste a ver nada de lo que hay en esa habitación― seguí indagando, quiero saber mas
―No, nunca― anunció seria, algo sabes que no me quieres decir, pero no te voy a presionar mas― aquí esta su comida joven, voy a regar las plantas― la mujer se perdió y yo me dispuse a comer.
Mas tarde estaba en mi habitación y me llegó una llamada de Jay.
―Hola amor― contesté efusivo
―Mi vida, tenemos otro problema― ¿Cuándo se acabaran?
―¿Ahora que pasó?― cuestioné con fastidio
―Me llego la demanda de impugnación de testamento de los hijos de tu tía y esta vez van con todo, tenemos que proceder o puedes perder la herencia― genial, ahora me están demandando, extraño ser pobre
―¿Y no podemos dejar las cosas así? no tengo ánimos de pelear por algo que no es mío― dictaminé agobiado por tanto problema, nunca se acaban
―Recuerdas que si pierdes lo que te dejo tu tía, tu familia puede quedar en la calle― ¿Por que todo tiene que ser tan complicado?
―Ay Dios, ¿Qué haremos entonces?― pregunté sin mas remedio
―Por lo pronto deja todo en mis manos, voy a hablar con mi padre para que me aconseje sobre como debo empezar a lidiar con la demanda, no te estreses, vamos a solucionar esto también, hablamos luego, te amo
Colgué la llamada y me lance en mi cama a lamentarme por ser rico y millonario, me gusta tener dinero, pero no a costa de mi tranquilidad y estabilidad emocional, tanto problema me van a volver loco, no coy a poder con todo.
¿En que estabas pensando Michell Mazzeratti, cuando decidiste dejarme con tu heredero? por que no creo que haya sido nada bueno, mírame como estoy, mi novio casi se me casa, me están robando dinero de las empresas, tus hijos me odian, no se nada de negocios y de paso ahora me demandan, ¿Falta algo mas? porque si es así me interno en un manicomio de una vez.
No quiero defraudarte tía, pero no me la estas poniendo fácil, dame una manita donde sea que te encuentres, si estas allá arriba, mándame un milagro y si estas allá abajo, llévate a tus hijos para que sea un problema menos por favor.
Me quedé dormido divagando y me desperté desorientado, tenia muchas llamadas de Jay y mensaje de mis amigos. ¿Qué esta pasando? ¿Por que tanta insistencia? llamé a Jay para saber lo que acontecía
―¿Que paso amor? tengo muchas llamadas perdidas tuyas― cuestioné preocupado
―Amor, el proceso se complicó, resulta que la demanda había sido impuesta hace algún tiempo y ya esta en revisión, si no hacemos algo pronto, puedes perder todo―
Creo que no me entendiste tía, dije un milagro no una maldición, creo que voy a morir del estrés
―¿Y ahora que se hace en este caso?― resoplé cansado
―Mi padre se va a hacer cargo del caso personalmente, el me dice que esta complicado pero que no es imposible, yo confío en el, nunca ha perdido un caso― comenta Jay esperanzado
―Me tocará confiar también, y ¿Cuál es el plan?― pregunte con interés
―Papa dice que el proceso lleva algo de tiempo, pero como la demanda esta en revisión ya seria menos tiempo, pero que el puede alargarla de nuevo máximo un mes mas hasta que se reúnan las pruebas para poder responder a la demanda, así que en ese mes hay que demostrar que los hijos de Michell no son aptos para manejar su fortuna.― aclara Jay
―¿Y si no se reúnen las pruebas? ¿Me quedo en la calle?― expresé con miedo
―Vamos a confiar en mi papa amor, el sabe lo que hace― dice Jay con seguridad, espero que tenga razón, prefiero tener mucho dinero a no tener nada
―¿Y como te enteraste de la demanda?― indagué intrigado
―Conozco a alguien en el tribunal y vió tu nombre en el archivo y como sabe que yo soy el abogado del heredero de la fortuna Mazzeratti, inmediatamente me llamó, porque son unos malditos, metieron la demanda y no avisaron nada, de seguro esperando que estuviera procesada para después quedarse con todo― hablo Jay molesto
―Que bueno que no les salió como pensaban, pero ahora tenemos que estar pendientes y hacer como si aun no supiéramos nada― insté calmado
―Exacto, cuando se den cuenta ya papá debería tener todo montado para la defensa―
―Bueno amor, hablamos luego, ya no me des malas noticias.
―――Cinco semanas después―――
―Aló― respondí a Jay que me llamaba
―MI vida, la audiencia comienza en una hora, ¿Dónde estas?― pregunta impaciente
―Estoy en la casa, ya voy saliendo― mencioné bajando las escaleras
―Apresúrate, te espero en el tribunal― anunció mi bello novio
―Esta bien― corte la llamada
Llegué a la planta baja y me entró un frio que me erizo la piel, la corriente de aire venia del pasillo misterioso, me dió curiosidad saber porque hacia tanto frio, cuando llegue al lugar vi la mejor oportunidad que me brinda la vida, la puerta con seguridad estaba abierta y de ella salía un frio aterrador, capaz de congelarte los hueso.
Aproveché y entré al lugar, es como una oficina, con muchos libros y papeles, estaba muy ordenada y limpia, quiere decir que alguien entra aquí seguido.
Estuve revisando por un rato y vi algo que me pareció extraño.
―¿Que es esto?― me dije a mi mismo― no se supone que...― sonó mi teléfono
―Falta media hora Dereck, ¿Qué tanto haces?― me regaño Jay
―Voy, voy, ya estoy en camino amor― salí apresurado
El chofer me llevó con rapidez al tribunal, ya faltaban menos de 10 minutos para que comenzara la audiencia de impugnación de testamento.
Cuando entramos al juzgado estaban los familiares de mi tía sentados aun lado del lugar, algunos me veían lascivos y otros con algo de vergüenza, aunque no creo que la tengan de verdad.
Estábamos sentados todos, los hijos de mi tía a un lado y sus abogados y del otro lado, Jay, su padre y yo.
Entro la jueza.
―Denle la bienvenida a su Señoría, la jueza Milca Braum― anunció un sujeto muy bien vestido
Todos nos pusimos de pie
―Pueden sentarse― dijo la jueza― Buen día, hoy estamos aquí para la sesión sobre la impugnación de testamento de la Señora Michell Mazzeratti, Tiene la palabra la parte demandante, adelante abogados.
―Buen día Señora jueza y a todos los presentes, efectivamente, hoy estamos aquí para impugnar el testamento de la Señora Michell Mazzeratti, pero mas que impugnar es devolver la dignidad que fue arrebatada a mis clientes por parte de su madre al no darles lo que por derecho es de ellos, no es solo una impugnación señora Jueza, es devolver a sus dueños lo que fue arrebatado y dado a la persona incorrecta.
―Objeción su señoría― dice Jay impaciente
―Denegada, Continúe abogado―dictaminó la jueza
―Cálmate Jay―Dijo su padre con extrema confianza
―Como decía, fue entregado a la persona incorrecta, porque cabe destacar que la señora Michell, ya era una mujer de mucha edad y cuando las personas son muy mayores tienden a cometer errores y entregar su herencia a otra persona que no fuera sus hijos fue uno de ellos― culminó el mentiroso ese
―Adelante, tiene el derecho de palabra la parte defensora― anunció la mujer
―Buen día su Señoría y a los que acompañan en el juzgado― hablo el Señor Helmant― primero que nada les voy a recordar que los demandantes iniciaron el proceso de impugnación sin anunciarlo a mi representado, cosa que es totalmente ilegal, porque por si no lo sabían, en un proceso judicial, las dos partes deben estar informadas sobre la causa de la demanda, fueron tres semanas después que se avisaron, cuando lo establecido en las leyes en una semana de atraso en la citación, por esa parte el proceso de impugnación ya tiene un error, segundo, mi cliente fue elegido por la señora Michell, debido a su conducta intachable y su buen corazón, rasgos que no vió en sus hijos, tercero, la Señora Michell, gozaba de una excelente salud mental cuando redacto el testamento, es su mesa están las notas de su psiquiatra y de algunos psicólogos como prueba, su edad no era limitante para no redactar el testamento, cuarto, así mismo, la difunta Michell Mazzeratti, se dió cuenta que sus hijos estaban derrochando su dinero de forma escandalosa, a uno de sus hijos fue entregada una empresa la cual llevó a la quiebra en poco tiempo, ahí esta las pruebas también.
―Eso es mentira― dijo el hijo de mi tía, no recuerdo su nombre
―Siéntese y espere su turno señor― hablo la jueza― Continúe abogado
―Gracias su señoría, Cabe destacar que yo fui el abogado de la Señora Michell por muchos años y fui testigo de la vida de despilfarro de dinero que vivían sus hijos, desde su juventud hasta la actualidad, es por esto que este proceso de impugnación no debe llevarse a cabo, el señor Dereck a demostrado que es lo suficientemente capaz y digno de ser el heredero, con esto finalizo mi introducción su señoría.― culminó el hombre, y Jay se veía mas calmado.
―¿La parte demandante tiene algo que decir?― cuestiona la jueza
―Si su señoría, en su mesa están unas carpetas de los avances y logros que han tenido mis clientes en las empresas de su madre en los últimos meses, eso demuestra sus capacidades y eficacia, pero hay un problema, mis clientes son profesionales en el área empresarial, y cabe destacar que no ocupan puestos de gran importancia en las empresas de su madres, sino que todas ellas son manejadas por un simple estudiante de arquitectura, que sin ofender, jamás había tenido nada que ver con las finanzas y con la administración, La pregunta que debemos hacernos ¿Esta el señor Dereck capacitado para manejar un conglomerado de miles de millones de euros? ¿o será cuestión de tiempo para que fracase? y así lleve las empresas a la quiebra y todo lo que construyó la señora Mazzeratti se vuelva nada, porque también tengo entendido que se han perdido millones de las cuentas empresariales y el Señor Dereck aun no ha dado con el culpable, ¿Qué es lo que esperamos?, ¿Qué la fortuna se acabe? ¿y que mis clientes pierdan los que le constó tanto a su madre levantar?, eso es lo que hay que reflexionar su señoría, muchas gracias― finalizó con una sonrisa cínica, que tramposos son los abogados.
―Tiene algo que agregar abogado Helmant― preguntó la jueza
― Por supuesto su señoría, en el caso de los millones que se han perdido como mencionó la parte demandante, mi cliente no estaba al tanto de lo que estaba pasando, sino hasta que asumió el control de la herencia, es decir, es un problema que ya tiene tiempo sucediendo y que no había sido investigado, pero desde que el señor Dereck esta a cargo se puso al tanto a las autoridades financieras de las empresas y se ha estado indagando el destino que tiene ese dinero, solo que el perpetrador es tan hábil que no ha dejado rastros de sus fechorías, pero la investigación esta en curso y no se descansará hasta que se consiga al culpable, el otro punto, es que, los demandantes tienen razón, el Señor Dereck no viene del mundo empresarial, y no estudia una carrera que tenga que ver con eso, pero al igual que el, la señora Michell no era profesional y aun así logró levantar las empresas de quien en su tiempo era su esposo cuando él murió, ella quedo a cargo y no sabia nada de números ni administración, pero tuvo buenos asesores y estos la ayudaron a ser lo que fue en vida, y así como ella, mi cliente tiene quien lo oriente en el manejo de las empresas, y lo ha hecho muy bien hasta ahora, las empresas han tenido muy buenas ganancias y excelentes resultados bajo la dirección de Dereck, en las pruebas están los balances de cada empresa, excepto la que el hijo de la señora Michell llevo a la ruina, esa se declaró en quiebra y se están vendiendo las acciones para recuperar algo de lo que se perdió― estaban que echaban humo, pero los abogados los calmaban― el dinero que falta es porque el ladrón anónimo lo ha desfalcado de las cuentas, pero aun así, no han sido cantidades tan grandes tomando en cuenta el tiempo desde que se han echo los retiros hasta la actualidad, Muchas gracias su señoría e culminado por ahora― anunció sentándose el señor
―Permiso su señoría― expreso el abogado de mis primos
―Adelante― permitió la señora
―Lo que no ha entendido el abogado de la defensa es que no es solo el hecho de aprender a manejar las empresas, si no que mis clientes están mejor capacitados para el trabajo, siempre trabajaron al lado de su madre, es decir, que conocen muy bien el negocio y les recuerdo que el Señor Dereck, ni siquiera es familiar directo de la Señora Michell, es simplemente un sobrino lejano que no tiene nada que ver con ella, ¿Qué es mejor? ¿Qué la herencia sea los hijos de la señora Michell que llevan su sangre? o ¿Qué la maneje un completo desconocido?, pues pienso que lo mas optimo es que sus hijos tengan lo que les pertenece.―agregó el abogado sucio ese
―¿Como responde a esto Abogado Helmant?―pregunto la jueza, creo que estamos perdiendo
―Puedo llamar a un testigo su señoría― cuestionó el abogado mayor
―Dígale que pase― acepto la jueza
―Llamo a declarar a la Señora Damira Casanova― ¿MI mamá?
―¿Que hace mi mama aquí?― pregunte a Jay
―No lo se, estoy tan sorprendido como tu― instó mi estúpido novio
Mi mama entró al lugar, me sonrió y se sentó en el estrado, no entiendo que esta pasando.