Mi adorable lector - [Larry]

By nicolesininspiracion

7.5K 1.1K 2.2K

Louis adoraba profundamente las palabras, se dió cuenta de ello a sus trece años mediante audiolibros. Sí, au... More

¡Hola!
Capítulo uno.
Capítulo dos.
Capítulo tres.
Capítulo cuatro.
Capítulo cinco.
Capítulo seis.
Capítulo siete.
Capítulo ocho.
Capítulo nueve.
Capítulo diez.
Capítulo once.
Capítulo doce.
Capítulo trece.
Capítulo catorce.
Capítulo dieciséis.
Capítulo diecisiete.
Capítulo dieciocho.
Capítulo diecinueve.
Capítulo veinte.
Capítulo veintiuno.
Capítulo veintidós.
Capítulo veintitrés.
Capítulo veinticuatro.
Capítulo veinticinco.
Capítulo veintiséis.
Capítulo veintisiete.
Capítulo veintiocho.
Capítulo veintinueve.
Capítulo treinta.
Capítulo treinta y uno.
Capítulo treinta y dos.
Capítulo treinta y trés.
Capítulo treinta y cuatro.
Capítulo treinta y cinco.
Capítulo treinta y séis.
Capítulo treinta y siete. (Capítulo final)
Epílogo.

Capítulo quince.

178 30 92
By nicolesininspiracion

—Me gustas, Louis —dijo Harry—. Me gustaste desde el primer momento en que te ví y...

—No, de nuevo.

—¡¿Qué carajos estoy haciendo mal, Niall?! —preguntó, totalmente frustrado. Hace media hora practicaban la declaración de Harry, Niall se hacía pasar por Louis pero cada vez que Harry encontraba algo nuevo por lo cuál empezar, Niall decía lo mismo. "No, de nuevo". Ya parecía un disco rayado.

—¡Todo!

—¡¿Cómo que todo?!

—Sólo dí lo que sientes. No digas lo mismo que dicen todos —dijo Sidney, sentada al costado de ellos en la cama, comiendo una manzana—. Habla con tu corazón.

—¡No puedo!

—¡Piensa en Louis!

—¡No puedo pensar en Louis si tengo tu asquerosa cara frente a mí, Niall! —gritó, cruzándose de brazos. Estaba enfadado. Más que enfadado. Quería llorar de la frustración. Nunca llegó a imaginar lo difícil que era decirle a una persona lo que sentía.

—¿Qué quieres que haga? ¿Que imprima una foto de él y me la imprima en la cara?

—¡Por Dios! Dejen de gritar —Sidney puso las palmas de sus manos en la boca de ambos, y los miró con la mandíbula tensa. Oh no, la habían hecho enfadar—. ¿Por qué se esfuerzan tanto si al final del día Harry se va a arrepentir de todo?

—Buen punto —dijeron ambos al unísono, lanzándose una mirada fulminante.

—Harry, no debes preocuparte tanto por eso, ¿sí? —Sidney quitó sus dos manos y se cruzó de brazos—. Dirás lo que salga de tu corazón, y no importa si es ridículo o tierno, o ambos, porque al fin y al cabo es lo que sientes. Mira a Niall, casi pierde la poca dignidad que le quedaba.

—¡Oye!

—El punto es que deja de pensar tanto en eso. Seguro te sale bien. Y evita hacerlo en público, incluso aunque lo de Niall haya sido precioso, evita hacerlo. Pensemos en la posibilidad de que no te corresponde... Sólo haría todo más incómodo que otras personas precencien eso.

—Está bien...

—Puedes comprarle su golosina favorita o algo que sepas que le encantará. Puedes... cantarle una canción, o algo parecido. ¡No sé! Usa tu imaginación.

—Ya.

Sidney comprendió y casi al instante, de forma forzada, cambiaron de conversación. Harry estaba horriblemente nervioso, pero ya no podía soportarlo más, era una molestia constante en todo su cuerpo cada que estaba con Louis y quería librarse de ello de una vez.
¿Podría perder su amistad? Sí. ¿Podría ser correspondido? También. ¿Lo haría? Probablemente no.

[. . .]

Días después, aún seguía con la misma idea en su cabeza. Declarársele.
Pero era curioso como en su mente era una persona valiente y lo decía simple, sin temor a lo que pasase. Y en la vida real no pueda ni siquiera abrir la boca para articular la primera palabra.
La realidad es que era un cobarde, y que quizá jamás tendría el valor para declararse. Pero quería hacerlo.

Se congelaba cuando Louis estaba frente a él y se le olvidaban las palabras ya memorizadas. Era como una especie de tortura. Y llegó hasta un punto dónde no podía actuar normalmente o disimular sus sentimientos frente a Louis. Se veía como un idiota.

Pero ahí estaba, caminando directo a su casa con una bolsa llena de chocolates para pasar la noche. Normalmente no solía sentirse tan nervioso, pero ahora si lo estaba. Mordía su labio inferior inconscientemente y sobrepensaba demasiado en lo que diría, en cómo lo diría y su reacción a todas las posibles reacciones que Louis tendría.

Esta era su oportunidad y definitivamente no lo arruinaría de nuevo. ¿Qué es lo peor que podría pasar? ¡Vamos! Lo peor sería que lo rechazaría, quizá se alejaría y... perdería su amistad. No, no debía comerse la cabeza con pensamientos negativos. Pero también debía considerar todas las posibilidades...
¡Carajo! Era tan confuso sentirse así. Sí, le habían gustado personas anteriormente, pero hay bastantes pasos de gustar a enamorarse, algo que no había experimentado... no hasta que llegó Louis a su vida.

Llegó cómo una luz en la espesa oscuridad para alegrarle el mundo y darle sentido a las palabras cursis. Llegó cómo un adorable adolescente, dueño de todas esas tontas sonrisas que provoca con su más simple y ordinaria existencia. Llegó y se quedó, convirtiéndose así en lo más importante, en su lugar seguro.

¿Cómo no quererlo? Louis era todo lo que estaba bien en su vida.

Tocó la puerta y una malhumorada Lottie le abrió. Llevaba una mascarilla verde limón y una toalla cubriendo su cabello.

—Está en su cuarto.

—Hola y... gracias —pasó tímido y subió las escaleras, directo a la habitación de Louis. Oyó que no estaba sólo en su cuarto, así que tocó antes de entrar.

—Pasa.

Harry asomó su cabeza, esbozando una amplia sonrisa involuntariamente.

—Hola —miró a la madre de Louis. Era la primera vez que la veía tan de cerca, en persona, y se sorprendió por los rasgos idénticos que ambos tenían.

—Hola Harry, ¿cómo estás? —ella revolvió sus rizos cariñosamente y él se sonrojó ligeramente.

—Bien, gracias —Jay dejó la habitación y Harry cerró la puerta trás él—. Hola idiota.

—Hola asqueroso.

Harry dió un mini salto y se acostó en la cama. Louis estaba sentado como indio, y Harry se acercó hasta recostar su cabeza en sus piernas.

—Compré dulces.

—Y yo tengo tres botellas de gaseosa. Genial, día de arruinar nuestro cuerpo —apretó una de las mejillas de Harry y dejó su mano sobre su cabello. Enredó y desenredó su índice con un rulo varias veces, mientras disfrutaban del cálido silencio junto al otro—. Te extrañé.

—Nos juntamos ayer.

—¿Significa que no pueda extrañarte? —empezó a rascar su cabeza suavemente, sonriendo atontado. Solo la presencia de Harry lo transportaba a otro mundo, a uno más cálido y lleno de paz—. Te extraño siempre.

—Admito que yo también...

—¿En serio?

—¿En serio qué?

—¿En serio me extrañaste?

—Sí, Lou. Te extrañaba mucho —suspiró—. Verte me tranquiliza. Fuera de eso, nunca me siento cómodo en ningún otro sitio.

—¿Ah no? ¿Y cuándo estás con Niall y no conmigo?

—Es diferente.

—¿Qué es lo diferente? —insistió.

Todo es diferente. Los sentimientos son diferentes.

—Nada. Olvídalo —mordió su lengua con nerviosismo—. ¿Quieres que lea algo?

—¿Algo que te sepas de memoria? Alguna frase o...

"Aquellos ojos azules que alguna vez me miraron con amor sólo expresaban odio puro. Aquellas manos que alguna vez acunaron mi rostro sólo querían ahorcarme. Aquella sonrisa que alegraba las mañanas de invierno desaparecía con la llegada de mi presencia. Tus labios le pertenecen a otra persona. El más fino rayo de Sol se escondía de mí. Oh amada, ¿qué te habré hecho para perder tu amor? ¿Qué habré dicho para perder tu cariño? ¿En qué momento tomé aquél atajo que me desvió de nuestro camino? Ahora sólo queda detrás mío la estela de luz que poco a poco voy perdiendo por tu ausencia. Ahora mi canto desafina en las mañanas. Ahora respiro, duermo, parpadeo, camino, como, despierto, miro, escucho, toco, huelo. Pero no siento. Oh no, jamás volveré a sentir."

Vaya... ¿De qué libro es?

—¿Te soy sincero?

—¿Por qué no lo serías? —ladeó levemente la cabeza.

—Lo escribí yo —susurró—. Hace unos días. Estaba triste, demasiado triste, y Niall me contó que la mejor forma de descargarse (al menos la que le funciona a él) es escribir exactamente lo que siento. Y lo hice.

—¿Alguien quiere ahorcarte? —sonrió.

—No. Realmente no sé por qué escribí esa parte, fue en lo primero que pensé.

—¿Qué querías expresar?

Los ojos de Harry se humedecieron y aclaró su garganta.

—La persona que narra habla de como la mujer que ama le abandonó e incluso llegó a odiarle. Mi caso más bien es el rechazo. El dolor al sentir tan fuertemente y no ser correspondido. A veces sólo quisiera que esa persona... Que esa persona me odiara. Que no me diera razones para estar enamorado —suspiró—. Me gustaría tener la capacidad de manejar mis sentimientos.

—Lamentablemente no se puede.

—Eso fue hace un tiempo. Yo... a veces lo recuerdo y eso que sentí vuelve y... Olvídalo, es estúpido.

—No es estúpido, Hazza. No puedes manejarte. El corazón hace lo que quiere y a veces toma decisiones equivocadas, eso es completamente inevitable.

—¿Pero entonces que puedo hacer?

—No lo sé, cariño —Harry sonrió debido al apodo, y supo que ahí, en aquél preciso momento, era el momento perfecto. Sólo debía armarse de valor—. Nunca supe que el amor te afectaba tanto.

—No es algo de lo que me guste hablar.

Aunque habló de eso todo el tiempo con Niall, pensó.

—Ya. Entiendo. ¿Te gusta Niall?

—¡No! —soltó una carcajada—. ¿Qué te hace pensar que él me gusta?

—¡No sé! —rio también—. Que yo sepa solo me conoces a mí, a Niall y Sidney. ¿Te gusta Sidney?

—No.

—¿Te gusto yo? Tampoco. Entonces... ¿quién te gusta? —preguntó y el corazón de Harry comenzó a acelerarse. Tú, tú, tú.

—No me dejaste responder...

—¿Eh?

—Dijiste "¿Te gusto yo? Tampoco". Respondiste tú, no me dejaste responder.

—Entonces responde. ¿Te gusto yo? —Louis mordió su mejilla interna. La posibilidad de que Harry sintiera algo por él lo ponía totalmente nervioso. Además de la emoción existía al miedo de enamorarse de nuevo y que termine como la primera vez. Sí sucedía esta vez, realmente no podría soportarlo. Lo que sentía hacia Harry era mucho más fuerte que lo que sentía hacia Sarah.

Harry mentalmente se estaba decidiendo. Sí. No. Sí. No. Tal vez. Quizá. Probablemente. ¡No tenía idea de lo que saldría por su boca! Pensar razonablemente ahora mismo era imposible.

Se incorporó y observó el rostro de Louis. Sus cejas, sus ojos azules, sus finos labios y sus pómulos tan lindos. Su cabello lacio hacia un costado y recordó esa forma tan linda de sonreír. Sus pestañas, sus manos, sus clavículas. Le gustaba todo de Louis.

—¿Estaría mal si me gustaras?

Un cosquilleo le recorrió el cuerpo y una vocecita en su mente le gritaba que corriera, que saliera de allí y se escondiese para siempre. Su corazón latía contento y liberado.
Intentaba descifrar lo que Louis sentía pero sólo veía sorpresa y confusión, no una respuesta concreta.

—Me gustas, Louis.

Carajo.

Mierda.

Lo había dicho, lo había dicho, lo había dicho.

Por otro lado, Louis apenas reaccionaba a lo que acababa de oír.

—Harry...

Maldita sea, pensó Louis.

[. . .]

Dejo esto y me voy.

Siendo sincera, me estoy muriendo de cringe con este cap, pero ok.

Espero que les guste

Continue Reading

You'll Also Like

563K 40.6K 74
Lara pensaba que Toni era el amor de su vida, pero dejó de serlo hace mucho, después del primer golpe que recibió por su parte cuando estaba embaraza...
1.2K 78 20
Emily Blake pensó que su vida era perfecta tal y como estaba y es que ¿Que más le podía pedir a la vida? novio perfecto, familia perfecta y carrera s...
9K 560 36
Autora: Always_nina Quiero aclarar que esta historia NO es mía, es de Always_nina así que todos los créditos son para ella. Me comuniqué con ella y m...
235K 23.1K 64
𝐄𝐋𝐄𝐂𝐓𝐑𝐈𝐂 𝐓𝐎𝐔𝐂𝐇 . . . !! 𖥻 ִ ۫ ּ ִ 𝖼𝗂𝗇𝖼𝗈 𝗁𝖺𝗋𝗀𝗋𝖾𝖾𝗏𝖾𝗌 𝒆𝒏 𝒅𝒐𝒏𝒅𝒆 . . . En donde el regreso de Cinco trae co...