Ángelus
—Te traje esto — La abuela entra a mí habitación con una bolsa de sangre, se acerca a mí cama y me la entrega —.Necesitas comer.
—Gracias — La recibí, la abrí y cuándo estaba por comenzar a beber el olor de la sangre me desagradó demasiado y la aleje de mí —.El olor, es horrible.
—¿Por qué dices eso?
—¿No puedes oler?, es horrible me da ganas de vomitar.
—No huelo nada raro, es sangre humana no tiene nada fuera de lo normal.
—Aleja eso por favor de mí.
Sí tenía hambre pero no me iba a comer esa sangre, algo le debieron de haber puesto los humanos, huele asqueroso nunca me había pasado antes.
—¿Te sientes bien?
—No me siento extraño, simplemente no puedo comer esa sangre.
Mí celular comenzó a sonar, desvié mí mirada hacia la mesita de noche qué se encontraba a mí derecha, me acerqué a ella y revise de quién era la llamada entrante.
—¿Quién es?
—Mí mamá, tengo qué actuar normal cómo sí nunca me hubiera convertido en un asesino.
Contestó la llamada.
—Hola.
—Ángel, ¿Estás bien?
—C-claro, mamá ¿Por qué no lo estaría?
—No podía dormir, soñaba contigo y tenía una presión muy fuerte en el pecho, pensé qué algo te había pasado.
—Mamá, habíamos quedado en algo cuándo te fuiste a Japón, no te preocupes por mí ahora lo importante eres tú.
—¿Cómo me pides eso?
—Así cómo lo oyes, no te preocupes por mí ahora yo no importó, estoy bien los abuelos me han cuidado perfectamente, ¿Cómo te sientes?
—Extraña, últimamente no me siento yo.
—Eso quiere decir qué está funcionando, mamá las células cancerígenas están muriendo gracias al don del príncipe heredero.
—Sí, ¿Seguro qué te encuentras bien?
—Seguro, ahora quiero qué vayas a dormir tranquila.
—Ángel, jurame qué no me estás mintiendo.
—Lo juro, lo juro con mí vida no tendría por qué engañarte.
—Estoy confiando en ti, amor.
—Lo sé, ahora por favor ve a dormir.
—Ok, después hablamos.
—Ok, esperaré tus llamadas.
Colgué la llamada y después mire a mí abuela.
—Sabes qué pronto ella lo sabrá, ¿Verdad?
—Lo sé, pero qué se entere cuando se haya librado del cáncer terminal — Respondí dejando mí celular en la mesa —.¿Mí abuelo regreso?
Ella asintió.
—Toda la noche estuvo buscando a Tepes pero no lo encontró en la montaña.
—Qué bien, por qué él no lo tiene qué matar yo soy él qué lo va a asesinar.
—Ángel...
—No me digas nada, por favor.
Ahora recordé el sueño, reviví a Van Helsing de verdad lo hice por qué estoy débil, espero haber hecho lo correcto y no haya puesto a otro enemigo más aquí.
—Por cierto, Ángel tú abuelo quiere verte en el estudio en cuánto despertarás.
—Ya sé para qué — Salgo de la cama —.Para regañarme por todo el desastre qué hice y bien merecido lo tengo.
Camine hacia mí puerta, la abrí, salí de la habitación, camine por todo el pasillo hasta qué llegué a la puerta del estudio, toqué la puerta pero no obtuve respuesta del otro lado, abrí la puerta y entre a la habitación del estudio notando qué se encontraba vacía.
Me acerqué al escritorio, mire el periódico qué se encontraba sobre el y lo tome.
¿Dragones?, Ayer durante la media noche la tranquilidad de Brasov se vio interrumpida por lo qué la gente asegura qué eran dragones, todos los testigos aseguran qué un dragón de color dorado inició el caos tras esté empezar una pelea con unas extrañas criaturas llameantes.
Todos dicen qué fue verdad lo qué vieron ya qué cuándo las criaturas llameantes desaparecieron por el dragón y su compañero qué apareció tiempo después, las dos gigantes bestias comenzaron una pelea en la qué se vieron afectados varios edificios de la zona, varias personas murieron por el colapso de las casas, familias enteras, también en ese mismo día ocurrieron unos asesinatos a sangre fría alrededor de cinco cuerpos fueron encontrados en la misma plaza central en dónde se llevó acabó la pelea de los dos titanes alados.
Hasta ahora las autoridades creen qué la gente qué presenció todo lo imaginaron por lo cansadas y por lo asustadas qué estaban por haber descubierto los cuerpos, la policía ya se está encargando de encontrar al responsable de los terribles asesinatos y hasta ahora han informado qué el derrumbe de las casas ocurrió por las terribles construcciones qué presentaban, las autoridades no creen la historia de los dragones de Brasov y creen qué se solamente se trata de un derrumbe y de un asesino serial muy peligroso.
—Sí tan solo supieran...— Susurré dejando el periódico en su lugar —.Sí supieran qué el qué provocó todas esas muertes soy yo, yo soy su asesino.
—Ángelus, aléjate del periódico ahora — Escucho a mí abuelo a mis espaldas.
Doy media vuelta y lo veo acompañado por Caín y... mí padre.
—¿Qué?, ¿Ahora planeas esconder a un asesino? — Solté sin tenerme piedad al decir esa palabra —.Sabes qué no va a funcionar, no quieres qué sepa a cuántas personas mate, ¿Pues qué crees?, ya lo sé todo, familias enteras murieron por mí culpa.
—Sabes qué no fue por tú culpa.
—¡Ya me cansé! — Grite mientras mis colmillos emergian por la irá —.Deja de justificarme, eso solo lo hace peor para mí, ¿Qué no lo entiendes?
Camine hacia el sofá y me senté mientras cubría mí rostro con mis manos.
—Yo no tengo perdón...— Dije carizbajo —.Mate humanos sin piedad y expuse a toda la raza vampiro, merezco qué me encierren.
—¿Eso es lo qué crees qué mereces? — Escuché la voz de Draco Blackwood, quite mis manos de mí rostro y lo miré.
—Los dejamos solos, tienen mucho de qué hablar — Dice el abuelo.
Él y Caín salen del estudio y cierran la puerta.
—¿Qué tú nunca mataste? — Pregunté mientras lo miraba sentarse a mí izquierda en el sofá.
—Vampiros y seres sobrenaturales nada más.
—Entonces no sabes lo qué siento.
—Es lo mismo, Ángelus yo también mate ya sea seres sobrenaturales o humanos es la misma actividad, les quite la vida.
—Cada vez qué cierro mis ojos los rostros de esas personas aparecen, no me dejan tranquilo.
—Lo harán pronto, solo no tienes qué desesperar.
Solté una risa por sus palabras, de verdad de aquí nadie me comprende.
—¿Encontraron a Vlad? — Cambie de tema.
—Cuándo llegamos ellos se habían ido.
—Lo tenía todo planeado, pero antes de qué me use cómo arma yo lo planeo matar.
—Tú no te vas a acercar ni a un solo milímetro a él.
—Creo qué tú no tomas las decisiones.
—En ti sí, sé qué eres mí hijo — Voltea a verme —.Y creo qué eso me da derecho a decirte qué hacer y qué no.
Genial acabo de encontrarme con mí papá después de años y lo primero qué hace es prohibirme cosas, pensé.
—Tú no estuviste en mí vida no puedes llegar así nada más y prohibirme cosas.
—Tienes razón no estuve cuándo naciste, no estuve en tus cumpleaños pero ahora quiero hacerlo, Ángelus, cuándo me enteré qué eras mí hijo e hijo de Fanny sentí felicidad infinita pero a la vez irá conmigo mismo.
—¿Eso por qué? — Me levanto del sofá y lo miró cruzado de brazos.
Él también se pone de pié y quedamos frente a frente.
—Por qué por mí culpa tú estás pasando esto, mí misión principal era asesinar a Vlad Tepes una vez qué él regresará pero no pude hacerlo, y ahora esa responsabilidad cayo sobre ti cuándo nunca debió de haber sido así.
—Papá...— Esas palabras salieron de mí boca, se sintió bien honestamente por fin usarla para algo qué no sean recuerdos del pasado —.Sí tú no pudiste, es por qué el destino tenía otra cosa planeada, a mí, al vampiro abominación mejorado, tú hiciste tú trabajo ahora creo qué me toca a mí hacerlo también.
—Ángel no sabes lo qué estás diciendo, eso no es lo qué quieres hacer, tú sabes el peligro.
—Tal vez sí o tal vez no pero hay una cosa qué sí quiero hacer — Tome aire —.Quiero abrazarte...
Él sonríe, asiente, camino hacia él y lo abrazó fuertemente, apesar de lo qué pasó esto es lo qué necesitaba en esté preciso momento, verificar qué no se trataba de ninguna ilusión.
No lo era...
Era él, mí papá de verdad estaba aquí vivo, era real.
—No sabes cuánta falta me has hecho — Le digo con la voz cortada —.Papá...
—Aquí estoy, Ángel — Me dice —.No voy a ir a ningún lado, ya he estado suficiente tiempo fuera de tú vida, hijo...