n/a: ahora sí me estoy mamando con los extras, pero muchos querían la vida familiar de h&l así que... aquí tienen 4 momentos larry + hijos.
(para 8 extras mejor edito el libro y los meto como caps😭)
y para que se den una idea, aquí les dejo unas imágenes de cómo me imagino que son los hijos de harry y louis:
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ESCENA 1: UNA TIENDA DE ROPA EN CANCÚN.
Qué mierda.
QUÉ MIERDA.
Odia odia odia odia salir con su padre por esta misma razón.
Oliver lo nota, lo sabe porque levantó una ceja en su dirección y la ve como diciendo "¿ahora qué hacemos?". Pero su papá, como siempre es inmune a los encantos de cualquier omega que no sea su mamá. Lo agradece y aunque sabe que Louis jamás vería de ninguna forma a nadie, le hierve la sangre.
La chica en bikini es la gota que rebasa el vaso.
Amelia la ve dar vueltas y sonreírle a Louis, le pregunta cosas y el alfa contesta con un aire incomodo, buscando a sus hijos sutilmente.
—La voy a matar—dice entre dientes.
—Tenemos que pagar esto primero—le recuerda Oliver.— Pero yo te ayudo a enterrar el cuerpo.
Están en Cancún, pagando un traje de baño para su madre en una de las tiendas del hotel. Como están en la playa, Louis no siente la necesidad de usar playera, así que su pecho y abdomen trabajados y tatuados quedan a la vista. Es increíblemente guapo, con algunas canas tornando su cabello castaño claro a gris y haciendo ver sus ojos zafiro aún mas azules, siempre va peinado hacia atrás (porque a su madre le encanta) así que el peinado de principe solo aumenta el atractivo.
(—Tu papá es un DILF.
—Por favor, cállate—le dice a su mejor amiga con disgusto.
—¡Es que lo es!)
—¿Qué no ve la mordida?—murmura Oliver con los dientes apretados
—¿Sabes qué? Mamá puede bañarse en calzones, a la mierda el bañador.—se salen de la fila y caminan directo a su padre con la tarjeta negra en mano y la ropa en otra
—¡Papi!—Amelia corre a los brazos de Louis y le da un beso en la mejilla
—¿Que pasó?—pregunta extrañado
—Nos cansamos de hacer fila—Oliver hace un puchero y usa aquellos ojos verdes en contra de su padre.— Además había un alfa molestándonos.
Louis se levanta de inmediato, con un brillo asesino en sus ojos.
—¿Son tus hijos? Son adorables—la omega sinvergüenza— ¡Siempre quise tener hijos!
—Pues consíguete los tuyos—dice Amelia.
Louis suelta una carcajada.
—Chupe pelos señora—agrega Oliver.
Entonces el alfa se ríe con ganas. La omega se va de la escena dejando un aire de vergüenza y molestias detrás. Los mellizos chocan cinco y sonríen satisfechos.
ESCENA 2: OLIVER PIDIENDO PERMISO.
—Papá...
Louis levanta la vista de su celular y la fija en su hijo.
—Quería-quería preguntarte, bueno, en realidad, quería hablarte sobre algo.
Louis sigue sin decir nada pero está atento a su hijo, espera a que continúe.
—Un chico me invitó a salir...—comienza y eso llama totalmente la atención del mayor. Bloquea el móvil, deja todo lo que está haciendo y le indica a Oliver que se siente en uno de los sillones que están frente a su escritorio.— Es Angus... Hood—dice y espera paciente a la reacción de su padre.
—¿El hijo de Calum?—levanta una ceja, Oliver asiente
—Ajá... bueno, él... me invitó a salir.
El alfa arruga la nariz con disgusto.
—Es muy grande para ti ¿no?
—Son tres años de diferencia, papá...—bajó la mirada, porque no era igual que Amelia, si el alfa le decía que no, no lo refutaría.
—Tienes quince, en esta edad, tres años pueden ser una gran diferencia—se recargó en la silla y se cruzó de brazos.
—Conoces a Angus. Sabes que no es como los otros alfas.—juega nervioso con sus manos.— Me gusta, papá, en serio me gusta.
—¿Qué opina tu hermana al respecto?—parece ser un tema sensible porque Oliver se tensa
—No puedo controlar lo que siento. Es... es lo que es—Louis sonríe con la respuesta.
—Te quiero virgen hasta los 40. Y si alguna vez llegas a derramar una sola lágrima por el pendejo, lo castro—dice todo con una calma espeluznante.
El rostro de Oliver se ilumina y se levanta de la silla, rodea el escritorio de su padre y lo abraza.
—Te lo prometo que si me hace llorar, yo mismo se la corto.
ESCENA 3: HARRY QUIERE CLAVARLE UN TENEDOR AL NOVIO DE OLIVER.
—¿Podrías al menos disimular?
—No. Mira como toca a mi bebé—dice Harry con los ojos fijos en Angus y Oliver.
El más grande lo abraza con cariño y le susurra algo que arranca una sonrisa preciosa al omega.
—Ilusionó a tu hija y luego se fue detrás de tu otro hijo. ¿No le quieres clavar un tenedor en el ojo?—pregunta con los dientes apretados
Louis bufa divertido y le echa una mirada de reojo a su hija.
—Amelia se ilusionó sola, por lo que Oliver me contó, siempre lo quiso a él desde un principio.
Eso llama la atención de Harry y con un destello celoso en sus ojos se giró hacia él.
—¿Oliver te contó sobre Angus?—suena casi herido— A mí nunca me contó nada.
—Es porque siempre reaccionas así—lo señala.— Además estaba muy confundido porque Angus siempre lo molestaba y no sabía por qué.
—Sigo pensando que es la forma más estúpida de llamar la atención de alguien, ni si quiera funciona y solo ocasionó que Oliver lo odiara al principio—refunfuñó.
—Hey, funcionó contigo.
—Bueno, también te odie al principio.
—Ahora estamos casados con tres hijos... dime si funciona—Harry rueda los ojos.
—Somos un caso especial, no nos incluyas—y vuelve a fijar su mirada en la pareja.— Aún lo odio por ilusionar a Amelia.
—Amelia se dejó ir como gorda en tobogán—el omega le da un manotazo en el pecho.— ¡Ay!
—Cállate, porque Amelia es igual a ti. Nada más pasé a tu lado en un supermercado y te enamoraste de mí, eres realmente estúpido.
—Tu eres más estúpido porque te enamoraste regreso—dijo burlón.
—Cállate, imbécil, así no es el juego—se cruza de brazos.
—Como sea, bonito—le da un beso en la mejilla.— Pero el juego lo gané yo, porque Amelia ya está saliendo con otro chico y no te dijo—le saca la lengua.
—¿Qué mierda?—abre los ojos indignado— ¿Con quién carajos?
—No lo vas a creer—se muerde el labio con emoción.— Thomas Pattinson—se tapa la boca con emoción.
—¡Vete a la...! ¡No!—abre la boca— ¿¡El hijo de Robert Pattinson?!—grita-susurra con incredulidad
—La lleve al club un día, después de que Angus y Oliver empezarán a salir y nos encontramos a Rob, jugué golf con él y me contó todo lo del divorcio con Kristen.
—¿Por qué no me habías contado, Alfa idiota?
—No lo sé, lo olvidé. Bueno, hablamos, nos hicimos amigos y me llevó a conocer su colección de autos en su casa. Amelia iba conmigo y Thomas estaba ahí, así que en lo que Rob me enseñaba los carros, ellos se hicieron amigos.
—Me debiste de haber contado.
—Eres demasiado celoso, seguro ibas y lo interrogabas al pobre niño—Harry le dio otro manotazo.
—No soy celoso, ustedes son demasiado llamativos y tengo que protegerlos—se excusa.
—Celoso, cuidadoso... ¿qué más da? Así te amo.
—Tendrás que compensármelo en casa—dice con un tono ronco.
—Lo que quieras, bonito.
ESCENA 4: LOS NIÑOS HACEN UN DESASTRE.
Iban a morir.
Esos eran sus últimos momentos juntos.
—Estamos muertos—dijo Matteo observando la escultura rota.
—Tal vez si le ponemos pegamento, mamá no lo nota—dice Amelia.
—Estamos muertos—repite Oliver.
—Yo les echaré la culpa a ustedes—Louis los señala.
—¡Papá!—dicen los tres al mismo tiempo
—No puedo seguir comprándole peces a su madre, a este paso tendré que conseguir un puto acuario—señala la obra en el piso.
—¡Tú lanzaste el balón!
—¡Ustedes no lo atraparon!—replica— Honestamente, me da un poco de pena que sean tan malos en el fútbol.
—¡Papá!
—¿Qué? Es cierto, los tres son malísimos en todos los deportes—se encoge de hombros.
—No deberías de decirnos esas cosas, podrías afectar nuestra salud mental y dañarnos emocionalmente—le dice Oliver.
—El bullying refuerza el carácter, pregúntele a su tío Liam. Zayn y yo lo molestábamos en secundaria.
—Al tío Li le dan miedo las cucharas, él no es un buen ejemplo—comenta Amelia.
—Bah, eso no les quita lo malos en deportes—hace un movimiento con la mano restándole importancia al asunto.— ¿Entonces? ¿Qué le decimos a su madre?
—¿Decirme qué?
Los cuatro abren los ojos como platos y se posicionan frente a la escultura rota, tratando de taparla.
—Nada—contesta rápidamente Louis.
—¿Que rompieron?—pregunta cansado, apretándose el puente de la nariz
—Mami no te enojes—pide Matteo.
—Mi amor, te prometo que no me voy a enojar—su mirada se suaviza cuando su hijo menor se acerca a abrazarlo.— Muévanse.
Los tres se apartan y el rizado aprieta los ojos por unos segundos.
—Harry-
—Están castigados—dice inmediatamente.
—¿Los tres?—pregunta cautelosamente Louis
—Los tres—responde entre dientes.
—Mierda—susurra el mayor.