Sugerido por: @ZZ7W7ZZ
Todo lo escrito aquí es por el puro propósito de entretener.
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Polonia, 1941.
Una coreana de baja estatura despertaba en una nueva mañana.
La coreana se pasó la palma de su mano por su rostro y luego cabello corto, gruñendo levemente.
Esta miró a su lado y vio una mujer desnuda, aún dormida sobre su cama.
La coreana rodó los ojos y tomó el hombro de la mujer para sacudirla y despertarla.
"Despierta." Esta dijo con un duro tono de voz. "Despierta, toma tus cosas y vete de aquí."
La coreana bajó de la cama y se encaminó al baño para tomarse una ducha rápida.
Después de unos 20 minutos, esta salió del baño y vio a la misma mujer de antes en la cocina.
La coreana chasqueó la lengua. "Qué parte de 'vete' no entendiste?" Esta preguntó con el mismo tono de voz que había usado antes.
"Chaeyoung-"
"Vete! Ahora!" Chaeyoung exclamó. "O a menos que quieres morir de un balazo en la cabeza?" Esta dijo, tomando su pistola y apuntando a la mujer.
Esta se sobresaltó y rápidamente negó con la cabeza.
"Qué esperas? Vete!" Chaeyoung exclamó, disparando el techo y asustando a la chica.
La mujer rápidamente se fue, dejando a la contraria sola en aquella casa.
Chaeyoung bufó, bajando la pistola para luego empezar a vestirse con su uniforme.
Después de haberse colocado el uniforme, esta guardó su pistola y caminó a la cocina para prepararse un café.
Esta miró a través de su ventana, la cual mostraba la vista de las vías del tren no muy lejos de ahí.
"Hoy tenemos nuevos prisioneros." Chaeyoung dijo en un murmullo antes de tomarse todo el café y salir de su casa.
Esta se acomodó la gorra que llevaba puesto y caminó hasta donde se encontraba los soldados de bajo rango.
"General Son." Todos saludaron a la coreana con un saludo respetuoso.
Esta solo les dio una mirada antes de buscar a alguien con la mirada.
"Dónde está Schäfer?" Chaeyoung preguntó, mirando a todos ellos.
"El sargento Schäfer está en la cabina esperando por los nuevos prisioneros, general." Un soldado respondió.
Chaeyoung asintió y caminó en dirección a la cabina, buscando a Schäfer.
"Schäfer." Chaeyoung llamó una vez que entró a la cabina.
"Chaeyoung!" Este exclamó con una sonrisa, queriendo ir a darle un abrazo a la nombrada, pero esta última lo empujó.
"Todavía no tienes el derecho a abrazarme." Chaeyoung dijo, y el contrario sólo rió.
"Tan seria como siempre." Este dijo, viendo a la contraria. "Mala noche?"
Chaeyoung rodó los ojos. "Dios, por qué siempre me das las mujeres que no entienden que son 'ligues de una noche'?" La coreana preguntó, mirándolo con una ceja alzada.
Este rió. "Habrá algún momento donde quieras tener una familia, Chaeyoung."
"No con prostitutas." Chaeyoung dijo, viendo cómo a lo lejos venía un tren. "No tengo tiempo para enredarme en eso del amor. Todavía tenemos que cumplir con las órdenes de Lord Hitler, y no pienso desviarme de aquello."
Schäfer sonrió de lado. "Muy bien." Este dijo, viendo cómo el tren llegó. "Me acompañarás a ver a los prisioneros?"
Chaeyoung asintió y salió de la cabina, justo detrás de Schäfer.
Todos los soldados se movilizaron y abrieron las puertas de los trenes, sacando a todos los judíos de los vagones.
"Vamos! Muévanse!" Los soldados gritaban agresivamente a todas esas personas.
Schäfer y Chaeyoung solo miraban como sacaban a todos esos judíos de una manera violenta.
"Vamos! Hombres y mujeres hagan dos filas diferentes!" Un soldado gritó.
Schäfer se veía disgustado. "No puedo creer que haya demasiadas personas asquerosas." Este dijo, refiriéndose a los judíos.
Chaeyoung solo se encogió de hombros. Esta no tenía nada en contra de ellos.
Esta solo seguía las órdenes de Hitler.
Mientras Chaeyoung observaba todo en silencio, hubo alguien que llamó su atención.
De entre todos los judíos que había en el lugar, esta logró ver a una chica con aspecto coreano, unos cachetes rellenos y unos dientes que la hacían parecer un conejo.
Chaeyoung frunció levemente el ceño, pero no dijo nada.
Los judíos fueron dividiéndose en dos grupos, hombres y mujeres.
Chaeyoung se acercaba a la sección de mujeres para supervisar el lugar mientras que Schäfer se encargaba de la sección de hombres.
Estos estaban siendo obligados a quitarse la ropa y toda pertenencia que tenía valor.
Chaeyoung miraba todo, pero de vez en cuando miraba a la chica que había llamado su atención.
"Qué esperas? Quítate ese maldito anillo!" Un soldado gritó a la chica que Chaeyoung estaba observando.
"P-Por favor, no me quiten este anillo." La mujer dijo entrecortadamente. "Este anillo me lo entregó mi madre."
Chaeyoung alzó una ceja. 'Tiene un alemán fluido.' Esta pensó.
"A mí me vale una mierda quien te dio ese anillo." El soldado dijo con un tono agresivo. "Quítate el anillo ahora antes de que te haga quitártelo."
Chaeyoung observaba a la contraria, esperando a por su siguiente movimiento.
"No, por favor..." La mujer siguió insistiendo.
'Interesante.' Chaeyoung pensó.
El soldado se irritó y le pegó una cachetada a la mujer, tirándola al suelo.
La mujer rápidamente se tomó el cachete con su palma, y miró al soldado quien se estaba acercando a ella.
La mujer trató de luchar, pero el soldado ya le había quitado el anillo y tirado en la caja donde estaban las demás cosas de valor.
El soldado miró a la mujer que seguía en el suelo con una mirada fría. "Qué esperas?! Levántate ahora o te vuelo los sesos!"
Chaeyoung vio a la mujer levantarse como pudo e ir a donde los demás para tomar su ropa.
Esta no quiso pensar más sobre lo sucedido, pero había visto como una pequeña lágrima se deslizaba por la mejilla de la contraria.
La coreana siguió observando por un rato más hasta que se aburrió y caminó hasta la caja donde se encontraba todas aquellas joyas de valor.
Esta buscó con la mirada el anillo de la contraria. Al encontrarlo, lo tomó y lo miró por unos segundos.
'Im Nayeon, huh?' Esta pensó, viendo el nombre coreano grabado en el anillo.
Un soldado se acercó a la de baja estatura. "General Son?"
Chaeyoung volteó a mirarlo con una mirada interrogante. "Sucede algo, soldado?"
"Solo me preguntaba que estaba haciendo ahí, general." El soldado comentó, bajando la mirada para ver el anillo en la mano de Chaeyoung. "Algo que le interesó de aquel anillo?"
Chaeyoung desvió su mirada del soldado para posarlo en el anillo que tenía en manos. "Solo me preguntaba por qué esa prisionera estaba tan enganchada en este anillo." Esta dijo, volviendo a tirar el anillo en la caja. "Si no tienes más nada que decir, vuelve a tu trabajo."
"Si, general." Este hizo un saludo y se dio media vuelta.
Chaeyoung lo miró de reojo, y al ver que no estaba, esta volvió a tomar el anillo y lo guardó en su bolsillo.
'Vamos, Chaeyoung. Es hora de seguir trabajando.' Esta dijo.
• • • •
La coreana dormía pacíficamente hasta que escuchó unos toques en su puerta.
La coreana frunció el ceño y gruñó con irritación antes de levantarse de la cama y caminar hasta la puerta para abrirla.
"Sueño pesado?" Schäfer preguntó, a lo que Chaeyoung rodó los ojos antes de cerrarle la puerta en la cara.
Chaeyoung volvió a escuchar los toques en la puerta además de los gritos de Schäfer.
"Oh, vamos, Chaeyoung. Sabes que solo estoy bromeando. Vamos, ábreme la puerta!" Schäfer dijo, y esta lo ignoró para irse a tomar una ducha.
Después de 30 minutos, Chaeyoung abrió la puerta.
"Pensé que no me ibas a abrir la puerta." El contrario comentó, viendo a la coreana ya vestida con su uniforme.
"Qué quieres, Schäfer?" Chaeyoung preguntó con un tono aburrido.
Schäfer dio un pequeño vistazo adentro de la casa de Chaeyoung para ver que este estaba completamente sucio y desordenado.
El contrario hizo una mueca de asco. "Deberías arreglar un poco tu casa." Este dijo, y Chaeyoung rodó los ojos.
"Para eso me llamaste?" Chaeyoung preguntó con una ceja alzada.
Este negó con la cabeza. "Quería que me acompañarás hoy a supervisar los prisioneros pero, ya que estamos en eso, también busquemos a una sirvienta para ti."
Chaeyoung no dijo nada y solo dejó que Schäfer la guiara hasta la zona de los prisioneros.
Todos los judíos estaban formados en una fila mientras soldados los vigilaban con una mirada asesina.
"Quién de todos ustedes se robó esta gallina?" El soldado preguntó, mirando a cada uno de ellos. Ninguno de los judíos se movía, por lo que el soldado se irritó. "Quién fue?!"
Todos ellos temblaron, y uno lentamente salió de la fila.
"Fuiste tú?" El soldado se acercó al hombre que se había salido de la fila.
El hombre no respondió, por lo que el soldado le pegó una fuerte cachetada antes de volver a preguntar. "Volveré a preguntar." Este dijo entre dientes. "Fuiste tú?"
"S-Si-"
El hombre cayó al suelo de rodillas antes de caer frente al piso debido a que el soldado le metió un tiro en la cabeza.
Todos los judíos dieron un pequeño grito ahogado antes de retroceder.
"Ya saben lo que pasará si se atreven a robar algo." El soldado dijo, mirando a todos y cada uno de ellos. "Entendieron?!"
Los judíos asintieron rápidamente, bajando la mirada para no ver al soldado directamente a los ojos.
Los soldados iban a devolver a los judíos de vuelta a sus trabajos, pero Schäfer los detuvo.
"Soldados." Schäfer llamó, llamando la atención de todos ellos.
"Sargento Schäfer." Los soldados saludaron. "Qué hace por aquí?"
"Venía a supervisar." Este dijo, mirando a todos los judíos con unos ojos filosos. "Y también porque la general Son necesita a uno de los prisioneros para que trabaje para ella."
Los soldados miraron a Chaeyoung, y esta última solo rodó los ojos.
"Quieres elegir de aquí o quieres ver más?" Schäfer preguntó.
Chaeyoung caminó en frente de los judíos, observando a cada uno en silencio.
Ninguno se atrevía a alzar la mirada, por lo que Chaeyoung no desperdiciaba ni un segundo más en ellos.
Esta paró en frente de la chica que había llamado su atención.
"Alza la mirada." Chaeyoung ordenó, y la contraria lentamente la alzó para conectarla con el de la más baja.
Cuando la contraria lo alzó completamente, Chaeyoung la tomó del mentón y empezó a observarla.
"Me llevo esta." Esta dijo, soltando el mentón de la contraria.
Un soldado se acercó y apuntó su pistola a la chica de antes. "Vamos! Levántate!"
"Yah." Chaeyoung lo miró con una mirada seria, apuntando su pistola a él. "No toques cosas de mi propiedad, entendido?"
El soldado bajó el arma y dio un saludo. "Si, general. Disculpe mi insolencia."
"Que no se vuelva a repetir." Chaeyoung dijo, y luego miró a la contraria. "Qué esperas? Muévete."
La chica rápidamente empezó a moverse rápidamente, siguiendo a Chaeyoung por detrás y con la mirada en el suelo.
Chaeyoung miró a Schäfer. "Volveré a mi casa primero. Necesito ponerla a trabajar ahora."
Schäfer asintió y Chaeyoung se fue de aquel lugar con la chica detrás de ella.
"Ni se te ocurra escapar ya que terminarás muerta en el suelo." Chaeyoung dijo sin mirar a la contraria.
Al llegar a la casa de la menor, esta abrió la puerta y entró seguida de la contraria.
"Q-Qué tengo que hacer?" Preguntó la contraria.
"No ves? Limpia este lugar. Quiero que todo esté limpio." Esta dijo, sentándose en una mesa y observando a la contraria. "Estaré observando."
La contraria rápidamente asintió, y tomó la escoba para empezar a barrer.
Chaeyoung observaba a la contraria por un rato. 'Tiene que ser coreana. No puedo confundirme.' Esta pensó. "Eres coreana?"
La chica se detuvo en su lugar, lentamente moviendo su mirada hasta posarla sobre Chaeyoung.
"U-Usted habla coreano?" La contraria preguntó.
"No me respondas con una pregunta." Chaeyoung la miró con una mirada asesina.
"L-Lo siento." La más alta bajó la mirada rápidamente.
"Eres judía?" Chaeyoung preguntó, a lo que la contraria rápidamente negó con la cabeza. "Entonces cómo terminaste aquí?"
"Estaba de visita con mi familia." La contraria respondió. "Todos ellos murieron y yo quedé atrapada aquí."
Chaeyoung solo escuchaba en silencio mientras la contraria seguía limpiando.
Esta se metió una mano dentro del bolsillo y sacó el anillo que había agarrado el día anterior.
"Confío en que esto es tuyo." Esta dijo, dejando el anillo sobre la mesa.
La mayor vio el anillo y rápidamente lo tomó, dando reverencias a la menor.
"G-Gracias, muchas gracias." Esta agradeció repetidamente.
"Procura ocultarlo bien." Chaeyoung dijo, levantándose de su asiento para ir a prepararse un café.
"Gracias, muchas gracias." La mayor siguió agradeciendo.
"Deja de agradecer, Nayeon." Chaeyoung dijo, aún preparando su café. "Es molesto."
"Está bien." Nayeon asintió antes de guardar el anillo en uno de sus bolsillos y seguir limpiando.
Chaeyoung tomó su café y tomó un sorbo antes de mirar de reojo a la contraria.
Esta sonrió de lado cuando vio a la coreana mayor sonreír mientras limpiaba.
• • • •
5 Meses Después...
Nayeon estaba preparando la cena para la coreana que había salvado su vida cuando escuchó la puerta ser abierta.
La coreana caminó en dirección a la puerta para ver a la menor tambalearse levemente.
"Señorita Chaeyoung." Nayeon se acercó a la contraria, sosteniéndola del brazo para evitar que esta se cayera. "Señorita Chaeyoung, está usted bien?" Esta preguntó.
Chaeyoung se le quedó observando a la contraria por un rato antes de apoyarla contra la puerta, cerrándola con seguro.
Nayeon se había exaltado un poco. "Señorita Chaeyoung~" La mayor no pudo evitar jadear al sentir los labios de Chaeyoung sobre su cuello. "E-Espera... usted e-está borracha." La coreana mayor trató de decir, sintiendo el olor del alcohol sobre la contraria.
"Hozas detenerme?" Chaeyoung preguntó, metiendo su mano por debajo de la falda de la contraria y colocando un pulgar sobre su centro, presionando levemente.
Nayeon tembló, dejando ir otro jadeo.
"S-Señorita Chaeyoung..." Esta dijo en un suspiro, cerrando los ojos con fuerza cuando sintió a la menor presionar un poco más.
Chaeyoung tomó a la coreana mayor y la tiró contra su cama. "Desvístete." Esta dijo, mirando a la contraria mientras se quitaba el uniforme y desabrochaba su cinturón.
Nayeon rápidamente hizo lo que la menor pidió, y quedó desnuda en frente de la persona que la había salvado, la cual estaba en solo una camisa blanca desabrochada, su brasier deportivo y los bóxers.
Chaeyoung la recostó en la cama y abrió las piernas de la coreana, dejando ver su intimidad ya húmeda por sus fluidos.
La coreana menor alzó una ceja, mirando a Nayeon quien estaba sonrojada completamente.
"Con qué ya estás húmeda, huh?" Chaeyoung comentó, acercándose a la intimidad de Nayeon, sin separar su mirada de la de ella.
Nayeon miraba a Chaeyoung acercarse lentamente, y cerró los ojos con fuerza para dejar ir un gemido cuando sintió la lengua caliente de la menor sobre sus pliegues.
El miembro de Chaeyoung se retorció un poco por aquel sonido.
El sabor también era algo intoxicante para la coreana menor, quien enterró su lengua dentro de ella sin titubear.
Nayeon arqueó la espalda, queriendo separarse de la menor debido a la extraña sensación y cosquilleo que la menor le daba.
Chaeyoung tomó con fuerza los muslos de Nayeon y la mantuvo en posición, moviendo con más rapidez su lengua.
Nayeon gimió en alto, apretando las sábanas de la cama.
"C-Chaeyoung... m-más~" Nayeon pidió, pasando el dorso de su mano por su boca para evitar que sus gemidos se volvieran más ruidosos.
Chaeyoung rió, mirando a Nayeon con una mirada divertida. "Cómo te atreves a llamarme 'Chaeyoung' sin honoríficos?" Esta preguntó, haciendo que Nayeon se pusiera nerviosa. "Deberíamos darte un castigo."
Chaeyoung se bajó los pantalones, dejando ver a la bestia que iba a destrozar a Nayeon.
La mayor estaba nerviosa, pero el fuerte agarre de Chaeyoung la tenía puesta en su sitio.
"Quiero ver que tanto gimes mi nombre, Nayeon." Esta dijo con un tono de voz rasposo antes de enterrarse dentro de ella.
"A-Ah!" Nayeon gimió en alto, sintiendo a Chaeyoung estamparse contra ella rápidamente.
La coreana mayor apretó las sábanas con un poco de más fuerza mientras con una mano trataba de ahogar sus gemidos.
Chaeyoung tomó ambas manos y las colocó sobre su cabeza. "No gemirás mi nombre?" Esta preguntó, yendo aún más rápido y con aún más fuerza. "Estoy esperando a que me llames descaradamente por mi nombre."
Nayeon se mordió el labio con fuerza, sintiendo lágrimas de placer salir de sus ojos.
"Te gusta?" Chaeyoung preguntó cerca del oído de Nayeon. Esta última asintió rápidamente, enrollando sus piernas en la cintura de Chaeyoung para que esta tuviera más acceso.
Chaeyoung soltó una risa y fue aún más rápido.
"A-Ah~ C-Chaeyoung~!" Nayeon no logró mantener aquel gemido dentro de ella.
Chaeyoung sonrió de lado, y dio una embestida más, haciendo que Nayeon se viniera.
Nayeon respiraba profundamente, tratando de calmar su respiración.
Chaeyoung se salió de Nayeon, viendo su miembro estar llena de los fluidos de la mayor.
"Date la vuelta. Ahora." Chaeyoung ordenó.
Nayeon todavía estaba algo perdida, por lo que tuvo que tomar un pequeño rato antes de entender lo que Chaeyoung le había pedido.
La menor, por estar un poco impaciente, chasqueó la lengua y tomó a Nayeon por la cintura para voltearla y dejarla en cuatro.
Chaeyoung tomó su miembro y lo colocó en el ano de Nayeon antes de adentrarse dentro de ella de una estocada.
"Tan apretada." Chaeyoung gruñó, recibiendo un gemido de Nayeon.
Esta tembló y dejó caer su cabeza sobre la cama, sintiendo a Chaeyoung abrirse paso dentro de ella.
"Te gusta que te penetre de esta manera?" Chaeyoung preguntó, yendo rápido con sus penetraciones.
Nayeon asintió, soltando gemidos y jadeos por cada embestida fuerte que recibía de Chaeyoung. "M-Más, Chaeyoung~" la mayor pidió.
Chaeyoung rió e hizo que Nayeon se levantara, apoyándola contra el espaldar de la cama.
"Todavía tenemos mucho que probar." Esta susurró en el oído de Nayeon antes de pellizcar uno de sus pezones y causando que la mayor gimiera. "Quiero hacerte venir de todas las maneras posible." Esta dijo, mordiendo con algo de fuerza el cuello de la mayor para dejar marca.
• • • •
Chaeyoung gruñó levemente, abriendo los ojos para luego percibir el olor de algo delicioso.
Esta se levantó de la cama y vio a Nayeon en la cocina, preparándole el desayuno.
Chaeyoung frunció el ceño, y se miró a sí misma, viendo que estaba vestida en sus bóxers.
"Fue un sueño?" Chaeyoung preguntó, saliendo de su cama y caminando directamente hasta Nayeon.
"Señorita Chaeyoung, ya despertó..." Nayeon se sonrojó completamente cuando vio a Chaeyoung salir desnuda de la cintura para arriba.
Chaeyoung notó la reacción de la contraria y sonrió. 'Entonces no fue un sueño.'
Nayeon tragó en seco y rápidamente desvió la mirada. "El desayuno ya está listo, señorita Chaeyoung." Esta dijo, y miró a la nombrada a los ojos, aún con las mejillas rojas. "Q-Quiere que le prepare el uniforme?"
Chaeyoung solo observaba a Nayeon caminar de manera avergonzada. Cuando esta pasó a un lado de ella, Chaeyoung la tomó por la cintura y la empujó contra la mesa, dejándola a espalda contra Chaeyoung.
"No hay necesidad de traerme mi uniforme." Esta susurró. "Hoy es mi día libre." Esta dijo, levantando la falda de Nayeon y causando que unos escalofríos corrieran por la espina dorsal de esta. "Sigamos con lo que empezamos ayer."
Chaeyoung levantó la falda de la contraria y bajó sus bragas, dejándola indefensa. Esta luego bajó sus propios bóxers.
El miembro ya erecto de la menor se introdujo con facilidad dentro de la mayor, ocasionando que esta última soltara un jadeo y agarrará con fuerza la mesa.
Chaeyoung la tenía sujeta del cabello mientras la embestía con fuerza contra la mesa. "Creo que me gustará hacer esto todos los días ahora que despierte." Esta dijo, pegándole una nalgada a la contraria.
"A-Ah!" Nayeon gimió por el golpe.
"Quieres que vaya más rápido?" Chaeyoung preguntó en un susurro, recibiendo un asentimiento de parte de la mayor.
La menor dejó ir una pequeña risa antes de ahorcar levemente a la contraria e ir con un poco más de fuerza.
El miembro de Chaeyoung golpeaba el punto sensible de la mayor una y otra vez, provocando que Nayeon jadeara más y más.
Las paredes de Nayeon empezaron a apretar el miembro de la menor, dando a entender que se iba a venir en cualquier momento.
Chaeyoung dio una embestida más y Nayeon gimió, bañando el miembro de Chaeyoung con sus fluidos.
"Tienes sed?" Esta preguntó en el oído de Nayeon. "Quieres un poco de leche?"
La mayor sabía a lo que la menor se refería por lo que asintió.
Chaeyoung sonrió en grande y salió de Nayeon. Esta última se arrodilló en frente de ella y tomó el miembro de Chaeyoung para lamerlo rápidamente.
Chaeyoung tomó el cabello de Nayeon y empezó a mover su pelvis, penetrando la boca de Nayeon con algo de rapidez.
Nayeon soltaba ruidos ahogados, por lo que Chaeyoung aceleró un poco más.
Una última embestida y Chaeyoung se descargó en la boca de la mayor, llenándola con sus fluidos.
Nayeon tomó todo el fluido y trató lo más que pudo para mantenerlo dentro de su boca.
Chaeyoung sacó su miembro de la boca de Nayeon, y esta rápidamente tragó.
"Buena chica." Chaeyoung dijo, tomando el pan que Nayeon tostó para el desayuno y dio una mordida. "Acompáñame para el desayuno."
Nayeon asintió y se levantó. Esta iba a ponerse de vuelta sus bragas cuando Chaeyoung la detuvo.
"No." Chaeyoung negó con la cabeza. "A partir de ahora, quiero que no tengas las bragas puestas. Entendido?" Esta dijo, haciendo que Nayeon la mirara con algo de sorpresa.
"P-Pero, Señorita Chaeyoung-"
"Quiero que estés preparada todo el tiempo cuando quiera tomarte." Esta dijo, sentándose sobre la silla. "Ven acá, y siéntate a comer." Esta dijo, señalando su miembro erecto.
Nayeon respiró profundamente y caminó hasta la menor, sentándose sobre el gran miembro de Chaeyoung e introduciéndose todo su largo dentro de ella.
Ambas soltaron un suspiro.
"Vamos, come." Chaeyoung dijo, tomando la cintura de Nayeon y elevándola levemente para dar embestidas lentas.
"S-señorita C-Chaeyoung... n-no creo poder comer de e-esta manera." Esta dijo, cerrando los ojos con algo de fuerza.
"Come." Chaeyoung ordenó, jugando con el clitoris de la mayor.
Nayeon tembló y lentamente empezó a comer.
Chaeyoung sonrió de lado y prefirió dejarla quieta, viendo cómo esta comía rápidamente.
Cuando Nayeon terminó de comer, Chaeyoung dejó que esta tomara un reposo de 10 minutos antes de acelerar sus movimientos.
"C-Chaeyoung!" Nayeon exclamó, sintiendo los repentinos movimientos de la menor.
"Te dije que quiero probar de todo." Esta dijo, sintiendo los fluidos de Nayeon bañar su miembro una vez más.
• • • •
Polonia, 1945.
"C-Chaeyoung!" Nayeon exclamó, sintiendo como la nombrada la agarraba de la muñeca y corrían en dirección a un río.
"General Son está huyendo con una prisionera! Atrapen a la traidora!" Un soldado exclamó, haciendo que Chaeyoung frunciera los labios y sacara su pistola.
Los Estados Unidos, Rusia y el Reino Unido estaba haciendo retroceder a las fuerzas Nazis de Alemania, provocando que Alemania empezara a eliminar a todos los judíos y así borrar toda evidencia de los campos de concentración que ellos poseían.
"Hay que sacarte de aquí." Chaeyoung dijo, adentrándose dentro de un bosque con Nayeon. "Si te quedas, te quemarán como todos los demás."
"Y qué hay de ti?!" Nayeon gritó, viendo a la menor con los ojos cristalizados. "Huye conmigo."
"Soy una Nazi, Nayeon." Chaeyoung sonrió de lado. "No hay lugar para mí si Alemania cae."
Ambas escucharon ladridos de perros y gritos de soldados.
Chaeyoung apretó un poco los dientes y rápidamente se quitó el collar que siempre llevaba puesto para entregárselo a Nayeon.
"Toma esto y huye lo más lejos de aquí." Chaeyoung dijo. "Yo trataré de ganarte tiempo."
"No!" Nayeon negó con la cabeza. "No me iré sin ti!"
Chaeyoung chasqueó la lengua y tomó el rostro de Nayeon para hacerla mirarla. "Obedéceme!" Chaeyoung exclamó y besó los labios de Nayeon con pasión.
Nayeon correspondió el beso, pero este no había durado mucho ya que Chaeyoung se había separado.
"Obedéceme y corre lejos de aquí." Chaeyoung dijo en un susurro. "Por favor. Te amo, Nayeon."
Nayeon sintió un dolor en su corazón, y tomó el collar de Chaeyoung entre sus manos.
Chaeyoung sonrió levemente. "Corre y no mires atrás."
Nayeon se mordió el labio inferior y corrió lejos de Chaeyoung.
"General Son." Schäfer apareció, mirando a la nombrada con una mirada seria. "Jamás pensé que llegaría este momento." Este dijo, apuntando a Chaeyoung con su pistola.
Chaeyoung sonrió de lado. "Yo tampoco me esperaba este día, Schäfer."
"Me decepcionas." Schäfer dijo, preparado para disparar a Chaeyoung.
Esta solo sonrió. "Fue un placer ser tu amiga, Schäfer."
El contrario solo apretó los dientes y cerró los ojos.
BANG
"No!" Nayeon gritó, viendo desde lejos como Chaeyoung caía al suelo.
Las lágrimas de Nayeon caían en cascada al ver a la persona que amaba caer al suelo.
"Corran! El prisionero no debe andar lejos." Schäfer gritó.
Nayeon empezó a correr lejos de ahí, escuchando los ladridos de los perros y los soldados gritar.
Nayeon siguió corriendo aun cuando sus piernas pedían descansar, aún cuando su corazón pedía volver al lado de Chaeyoung.
Nayeon siguió corriendo, con lágrimas en sus ojos pero siguió corriendo.
• • • •
Corea del Sur, 1950.
Ya habían pasado 5 años desde que Nayeon había sido salvada por los soldados de los Estados Unidos.
Esta fue salvada por dichos soldados y luego llevada a Corea del Sur donde ahora tenía una especie de vida estable.
Sin embargo, algo le faltaba.
Y ese algo era Chaeyoung.
Nayeon vivía su vida con solo el recuerdo de aquella soldado que la sacó de aquella zona de concentración, que aunque no la trató bien al principio, le dio un techo, comida y una sensación de amor y protección durante esos duros años.
La coreana suspiró y siguió su camino a casa.
Mientras caminaba en dirección a casa, esta chocó contra alguien.
"Oh, lo siento." Nayeon se disculpó, dando una leve reverencia. "No veía por donde caminaba."
"No te preocupes, solo quería saber donde vivía la chica que amo."
Nayeon rápidamente alzó la cabeza al escuchar aquella voz, y sintió sus ojos humedecerse cuando vio a Chaeyoung sonreírle, mostrando sus hoyuelos.
"C-Chaeyoung?" Nayeon tartamudeó.
Chaeyoung sonrió de lado, mirando a la contraria de pies a cabeza. "Sigues siendo igual de hermosa que antes."
Nayeon sintió su cuerpo temblar y retrocedió lentamente. "P-Pensé que estabas muerta..."
"Y eso es lo que deseas?" Chaeyoung preguntó con una ceja alzada.
Nayeon negó rápidamente y se acercó a abrazarla con fuerza.
"P-Pensé que te perdí..." Nayeon dijo con una voz ahogada, tratando de no llorar.
Chaeyoung suspiró y sonrió levemente, devolviendo el abrazo.
"Mi chica ha esperado mucho, no es así?" Esta preguntó, y Nayeon asintió rápidamente. "Recompensemos a esta chica entonces." Chaeyoung dijo, separándose un poco para dejarle un beso en los labios. "Vamos a mi casa?"
• • • •
"Cómo sobreviviste?" Nayeon preguntó una vez que llegó a la casa de Chaeyoung. "Vi con mis propios ojos como ese soldado que se hacía llamar tu 'amigo' te disparó."
"Hm. No me disparó." Chaeyoung comentó, llegando con dos tazas de café. "Simuló hacerlo." Esta respondió y extendió la taza de café a la contraria. "Toma."
Nayeon tomó la taza de café y se le quedó mirando a esta. "Las cosas son tan diferentes ahora."
"Hm." Chaeyoung asintió, tomando un sorbo del café.
Nayeon dejó la taza sobre la mesa y empezó a jugar con sus dedos, sintiéndose un poco emocionada.
Chaeyoung notó el comportamiento de Nayeon y sonrió de lado, dejando la taza en la mesa para luego tomar a la contraria por la cintura.
"Estás esperando algo?" Chaeyoung susurró, haciendo que Nayeon temblara levemente y apretara las piernas.
Chaeyoung volvió a sonreír, y acercó sus labios a la piel de Nayeon, causando que esta tuviera ciertos escalofríos.
"Tu cuerpo todavía me recuerda muy bien." Chaeyoung susurró, lentamente quitando el cabello de Nayeon para dejar la clavícula de esta descubierta.
"C-Chaeyoung..." Nayeon suspiró.
"Hm?" Chaeyoung preguntó, pasando su mano por el muslo interior de la mayor y lentamente llegando a la intimidad de Nayeon. "Sucede algo?"
La respiración de Nayeon estaba acelerándose, haciendo que Chaeyoung se divirtiera por las reacciones de esta.
"Recuerdas cómo te hago sentir?" Chaeyoung susurró, viendo el rostro de Nayeon por una reacción.
Nayeon asintió lentamente, soltando un jadeo.
Chaeyoung metió su mano dentro de la falda de la mayor y metió su mano dentro de las bragas de Nayeon.
Nayeon se exaltó mientras que Chaeyoung alzó ambas cejas.
"Bastante húmeda." La coreana menor comentó, acariciando los pliegues de Nayeon. "Pero quiero más."
Chaeyoung empezó a mirar a Nayeon con una mirada fija mientras introducía sus dedos dentro de ella para más humedad.
"Abre un poco más las piernas, cariño." Chaeyoung dijo, y Nayeon obedeció.
Chaeyoung arqueó sus dedos con algo de fuerza, haciendo que Nayeon arqueara la espalda y abriera aún más las piernas.
"C-Chaeyoung!" La contraria exclamó.
"Te gustó?" Chaeyoung preguntó, deteniendo sus movimientos.
Nayeon se mordió el labio inferior y asintió varias veces, echando su cabeza para atrás.
Chaeyoung sonrió de lado y siguió sus movimientos, arqueando sus dedos cada vez que podía.
Las bragas de Nayeon ya estaban completamente húmedas, y esta estaba deseando más de Chaeyoung.
"C-Chaeyoung... p-por favor. Q-Quiero más..." Nayeon dijo, jalando el borde de la camisa de la menor mientras esta seguía penetrándola con sus dedos.
"Más?" Chaeyoung preguntó, mirando a la contraria con una ceja alzada. "Y si no quiero dártelo?"
Nayeon frunció el ceño y se quejó. "P-Por favor~" la mayor pidió, jalando levemente el pantalón de la contraria.
Chaeyoung rió y salió de Nayeon para desabrocharse el cinturón y dejar caer sus pantalones. "Esto es lo que quieres?"
Nayeon asintió repetidamente, quitándose las bragas con rapidez junto al vestido que tenía puesto.
Chaeyoung rió debido a lo necesitada que estaba la contraria.
"Abre más las piernas." Chaeyoung dijo, acercándose a la entrada de Nayeon.
Nayeon acató la orden y dejó salir un grito cuando Chaeyoung se estampó contra ella en una estocada.
"Tan apretada. Así no estabas antes." Chaeyoung comentó, gruñendo levemente. "No has dejado que nadie te tocara, huh?"
Nayeon negó con la cabeza, mordiéndose el labio con algo de fuerza.
"Entonces deberíamos hacerte recordar esa sensación, hm?" Chaeyoung comentó, empezando las embestidas rápidas.
"D-Dios... C-Chaeyoung!" Nayeon exclamó, respirando pesadamente mientras la menor le daba en su punto sensible.
"Se siente mejor de lo que recordaba." Chaeyoung comentó, colocando las piernas de la mayor sobre sus hombros. "Te sientes tan bien, Nayeon." Chaeyoung dijo, embistiendo a Nayeon con fuerza contra el sofá.
"C-Chaeyoung!" Nayeon se vino después de la fuerte estocada que la menor le dio.
Chaeyoung soltó una pequeña risa, mirando a la contraria con diversión. "Te viniste tan rápido?" Esta preguntó, volviendo a embestir con fuerza.
Nayeon gimió en alto, sintiendo lo sensible que estaba.
"No me he venido todavía." Chaeyoung dijo, yendo rápido para venirse. "Qué tal si lo hago dentro?" Esta preguntó, mirando a Nayeon tener los ojos cerrados. "Estarías lista de tener mis bebés?"
Nayeon asintió, gimiendo más alto. "C-Chaeyoung! Hazlo! Lléname!" Esta exclamó, teniendo la mente en blanco.
La mayor estaba tan perdida que ni siquiera sabía lo que estaba diciendo.
Chaeyoung sonrió y gruñó levemente antes de dar una última embestida y llenarla de sus fluidos.
Nayeon volvió a venirse, haciendo que sus fluidos se mezclaran con los de Chaeyoung.
"Bien hecho, cariño." Chaeyoung dijo, acercándose a la mayor para dejarle un beso en los labios.
"C-Chaeyoung." Nayeon llamó, esta vez logrando procesar todo lo que sucedió. "Acabas de venirte dentro de mí.."
"Hm. Si lo hice, por?" Esta preguntó con una sonrisa de lado.
"Me vas a embarazar." Nayeon respondió.
"No hay problemas porque serás mi esposa." Chaeyoung comentó.
"Pero ni siquiera me has pedido-" Nayeon se calló cuando vio el anillo que tenía en su dedo, la cual estaba entrelazada con los dedos de Chaeyoung.
"Quién dijo?" Chaeyoung sonrió, y Nayeon le golpeó el hombro varias veces.
"Yah! Desde cuando acepté??"
"No ibas a aceptar?" Chaeyoung preguntó, y Nayeon se calló. "Ya lo suponía." Esta rió, y cargó a Nayeon para colocarla contra la pared. "Vamos, todavía no he probado toda la casa."