Un mundo donde todo se fue a la mierda por culpa de criaturas sangrientas. Un mundo donde la paz que conocían los humanos se fue a la verga. Un mundo donde tú matas, o eres asesinado.
Ese era el mundo en el que vivía Minatozaki Sana.
"Sana, no salgas de noche. No es seguro." Su menor, Jihyo, le había dicho. "Esas cosas pueden salir en cualquier momento, y aquello podía ser peligroso."
"No te preocupes, Jihyo-yah." Sana tranquilizó a la menor. "Solo iré a recoger algo de la casa del árbol y vuelvo."
"Puedes ir mañana en la mañana." Esta vez fue la japonesa mayor quien habló. "No es nada importante, no?"
Sana solo jugó con sus dedos, viéndose algo avergonzada. "Es solo algo importante que tengo que agarrar." Esta comentó. "Es algo que mi madre me dio desde pequeña."
Las demás suspiraron con derrota. "Bien, ve rápido y vuelve. Estaremos esperando en la puerta."
Sana asintió con una sonrisa y salió de la casa para ir rápidamente a donde estaba la casa del árbol.
Esta subió y miró a todas partes, pareciendo como si estuviera tratando de localizar a alguien.
"T/N?" La japonesa susurró.
La japonesa sintió algo moverse rápidamente a un lado de ella, y luego como un brazo pasaba por su cintura.
"Pasarás la noche conmigo?" La japonesa escuchó a alguien susurrar en su oído.
La japonesa negó. "Solo te traje un poco de sangre para que puedas pasar la noche." Sana dijo, separándose un poco para mirar a T/N.
La peli-negra frunció el ceño e hizo un puchero.
"Por qué?" Esta preguntó, acercando a Sana por la cintura para tenerla peligrosamente cerca.
"Las chicas están en casa y están preocupadas de que esté mucho tiempo afuera." Sana respondió, sintiendo un cosquilleo cuando sentía T/N oler su cuello. "Deja de olerme."
T/N rió, besando la clavícula de la menor. "Hueles muy dulce. No puedo evitarlo." Esta comentó, subiendo al oído de Sana y dejando un beso en esta. "Todavía no me has dejado morderte."
"Sabes que no." Sana dijo con algo de seriedad. "No quiero convertirme en un vampiro."
"Pero solo hay baja probabilidad de que te conviertas en uno." T/N dijo, tratando de convencer a la menor de dejarla morderla.
"Un no es un no, T/N." Sana dijo, haciendo que T/N se quedara callada.
"Desprecias tanto a mi raza?" T/N preguntó, haciendo que Sana la mirara.
"Ellos mataron a mis padres." Esta dijo. "Cómo rayos quieres que no les tenga desprecio?"
"Entonces por qué no me desprecias a mí?" Preguntó T/N, acercando a Sana por la cintura.
"Quieres que te desprecie y te clave una estaca en el corazón?" Preguntó Sana en un susurro, colocando un dedo sobre donde se encontraba el corazón de T/N.
T/N lentamente tomó la mano de Sana y lo presionó contra su pecho, donde se encontraba su corazón. "Ya clavaste mi corazón con tu flecha, Sana." Esta susurró, causando que la japonesa se sonrojara.
"Dios, sí que eres melosa." Sana dijo, empujando el rostro de T/N, esta última riéndose debido a que Sana se había colocado nerviosa debido a lo que la mayor había susurrado.
"Solo estaba tomándote el pelo, cariño." La peli-negra comentó, abriendo la bolsa de sangre que Sana le había traído para tomar un sorbo.
Sana se le había quedado observando, viendo cómo la contraria se tragaba la sangre.
"Por qué bebes sangre?" Preguntó Sana con curiosidad. "No le veo lo delicioso a eso."
T/N dejó de tomar para relamerse los colmillos. "Es como preguntarte de por qué bebes agua." Esta comentó. "Los vampiros bebemos sangre porque es lo único que tenemos para sobrevivir."
Sana se sentó en el suelo, cruzando las piernas para sentarse en forma de indio.
"Y no han intentado comer algo más a parte de la sangre?" Sana preguntó. "No lo sé, tal vez tonkatsu? Tonkatsu es delicioso." La japonesa comentó, causando que la mayor riera.
"Sana, si pudiéramos haber hecho aquello desde el principio, no hubiera habido una pelea entre vampiros y humanos en primer lugar, no crees?" T/N comentó, aún bebiendo de la bolsa de sangre.
"Entonces por qué no beben sangre de animales?" Sana preguntó.
"Porque la sangre de humano es más dulce y apetecible." T/N comentó. "Pero, claro. Hay unos que tienen la sangre más dulce que otros."
"Es por eso que dices que huelo dulce?" Sana preguntó curiosa.
"Tu hueles muy diferente a los demás." T/N comentó, acercándose a la menor para olerla. "Es una especie de dulce adictivo." T/N susurró, acercándose un poco más y causándole cosquillas a la menor.
"Será que otra vampiros también piensen que huelo dulce?" Sana preguntó, a lo que T/N la miró con sus ojos marrones.
"No lo sé, pero tampoco me permitiré averiguarlo." T/N dijo, atrayendo a Sana por la cintura para tenerla recostada en el suelo y estar encima de ella. "Tú eres mía, Sana."
Sana estaba hipnotizada por las palabras y el tono bastante bajo de la mayor, sintiéndose atraída y con ganas de besarla.
La mirada de T/N se desvió hasta cierto lugar y luego miró a Sana.
"Alguien viene." Esta susurró. "Te veo mañana, cariño." Esta susurró, y dejó un dulce beso en los labios de Sana antes de desaparecer rápidamente.
"Sana?" La nombrada escuchó, y miró en dirección a la entrada de la casa del árbol.
Jeongyeon la miraba con una ceja alzada. "Qué haces recostada ahí? Ya encontraste lo que tenías que encontrar?"
"A-Ah, si." Sana asintió, mostrando el anillo que su madre le había dado cuando ella era pequeña.
"La próxima vez deberías llevarlo en un collar. Ya haz dejado el anillo aquí en muchas ocaciones." Jeongyeon comentó, y Sana asintió.
"Siempre ando despistada." Sana rió nerviosamente, levantándose del suelo para salir de la casa del árbol, justo detrás de Jeongyeon.
• • • •
"Cuidado." Dahyun advirtió, escuchando pasos por todas partes. "Esos chupa sangres se acercan."
Las chicas se habían detenido, mirando a sus alrededores mientras preparaban sus armas.
"Chicas, al corazón." Jihyo indicó, teniendo la mira preparada para quien sea que viniera a ellos.
"Aquí vienen!" Nayeon exclamó, lanzando su primera flecha la cual atravesó el corazón de un vampiro y lo convirtió en cenizas.
"Manténganse juntas y no se separen!" La líder exclamó, matando a otro vampiros.
"Jihyo, esto no es normal!" Jeongyeon informó, viendo mucho más vampiros venir hacia ellas.
Sana, Momo y Mina estaban cubriéndose las espaldas mientras mataban a cada vampiro que venían hacia ellas.
Mina había perdido el agarre del arma y esta salió volando fuera de su alcance.
Un vampiro la iba a morder cuando Momo la salvó, bloqueando el ataque de aquel vampiro y dejando su defensa baja.
Sana vio que su mayor iba a ser atacada, por lo que rápidamente se metió y bloqueó el ataque.
"Momo! Agarra a Mina y busca su arma!" Sana exclamó, bloqueando y matando a cada vampiro que venía.
Momo asintió, y tomó a Mina para rápidamente ir a buscar el arma de esta.
Sana trataba todo lo posible para ganar tiempo mientras sus compañeras estaban fuera. Sin embargo, los vampiros aumentaban en número.
La espada de Sana se rompió, dejándola completamente indefensa.
El vampiro tomó a Sana del cuello, y apretó levemente.
"Hueles dulce." Este dijo con una sonrisa traviesa mientras Sana intentaba soltarse de su agarre.
"Sana!" Las chicas gritaron, tratando de abrirse paso hacia ella.
Sana podía ver al vampiro mostrar sus colmillos y acercarse a su cuello.
La japonesa cerró los ojos con fuerza.
"T/N..." Esta susurró.
Sana sintió como el agarre en su cuello se aflojaba, y como alguien la abrazaba con fuerza.
Esta lentamente abrió los ojos y vio los ojos marrones llenos de ira de T/N.
"No toques lo que es mío." Esta dijo entre dientes, mostrando sus colmillos filosos.
El vampiro de antes miró a T/N con una mirada asesina. "Yo la encontré primero, Park." Este dijo, tronándose los huesos del cuello. "Búscate a otra presa que esa japonesa es mía."
T/N lo miraba con unos ojos asesinos, y luego se acercó a Sana a para susurrarle en el oído. "Te veo en la casa del árbol. Llévate a tus amigas de vuelta casa y no salgan." T/N susurró, y empujó levemente a Sana hacia donde se encontraban las demás.
"Sana!" Las chicas exclamaron, agarrando a la japonesa del brazo para ver si la habían lastimado.
Sana no desviaba la vista de donde estaba T/N.
"Váyanse!" T/N exclamó, apretando sus dientes mientras sus pupilas se volvían rojos como la sangre.
Sana se había tensado con aquel grito, pero esta sabía que si no hacía lo que T/N había dicho, esta podría salir muerta.
Esta miró a sus demás compañeras. "Volvamos rápido a casa."
"Qué? No podemos confiar en esa vampira." Jihyo negó con la cabeza.
"Solo hagamos lo que ella diga! Luego les explico!" Sana exclamó, haciendo que las chicas la miraran con algo de duda antes de asentir.
Jihyo miró a las demás. "Chicas, de vuelta a casa."
• • • •
Sana caminaba de un lado a otro, mordiéndose levemente la uña mientras esperaba que T/N apareciera.
Las chicas tenían sus armas preparadas y listas para disparar si veían que aquella tal T/N no era de fiar.
"Sana," La japonesa miró a su líder, quien la estaba mirando con una mirada muy seria. "Cuál es tu explicación sobre esto?"
"Bueno-" La japonesa iba a explicar, pero el sonido de un golpe fuerte la interrumpió.
Esta miró en dirección a la ventana donde usualmente entraba T/N para ver a la peli-negra sobre el suelo.
"T/N!" Sana exclamó, acercándose a la mayor. Sin embargo, la mayor alzó una mano, señalándole que no se acercara más.
"D-Dame la bolsa de sangre." Esta dijo con la respiración pesada. "N-No te acerques. T-Tu olor me hará perder la poca cordura que me queda."
Sana rápidamente le tiró la bolsa de sangre que siempre traía para T/N, y esta última rápidamente bebió de la bolsa.
Esta vació la bolsa en segundos, y luego se subió un poco la camisa para ver que su herida se estaba cerrando lentamente.
T/N bajó la camisa y trató de calmar su respiración.
Sana la miraba con preocupación, dejando una distancia prudente para que su olor no fuera a desatar la sed de sangre de la mayor.
"T/N...?" La menor llamó en voz baja, haciendo que la nombrada la mirara.
Los ojos de la mayor lentamente volvieron a sus colores cafés, y esta extendió una mano hacia la japonesa. "Ven acá." Esta susurró suavemente.
Sana corrió y se tiró sobre T/N, abrazándola con fuerza.
T/N le había quitado el cabello del cuello, dejándolo libre mientras esta acariciaba delicadamente su cuello.
"No te hicieron daño, cierto?" La mayor preguntó, colocando una mano sobre la mejilla de Sana.
La japonesa negó con la cabeza y escondió su rostro en el cuello de la mayor. "Gracias por salvarme..." Esta susurró, sintiendo las leves caricias de T/N sobre su cabello.
T/N cerró los ojos, percibiendo el dulce aroma de Sana. "Me alegro que estés a salvo." T/N susurró, besando levemente la cabeza de la menor.
Ambas chicas estaban en su propia burbuja cuando alguien aclaró su garganta, reventando la burbuja de ambas chicas.
T/N alzó un poco la mirada y se encontró con la mirada seria de 8 chicas.
"Quién eres y qué eres de Sana?" Momo preguntó con un tono serio.
Sana se levantó para que T/N pudiera levantarse, y volteó a encarar a las chicas.
"Chicas," Sana jugó con sus dedos nerviosamente. "Ella es mi novia."
Las chicas se quedaron calladas por un momento, tratando de procesar lo que la japonesa de cabello marrón les confesó.
Cuando estas lograron procesar lo dicho por Sana, la miraron con seriedad. "Sana, ella es una vampira."
"Una vampira que no bebe sangre humana." Sana defendió, frunciendo levemente el ceño.
"Tú nunca sabes cuando beberá tu sangre." Chaeyoung advirtió. "Unnie, no puedes confiar en monstruos que chupan sangre." Esta dijo, fulminando a la vampira con la mirada.
T/N frunció el ceño. "Yo no pedí nacer así." Esta dijo, mostrando sus colmillos.
"Ves?" Chaeyoung exclamó, apuntando a T/N en el corazón con su arma. "Ella es un peligro."
Los ojos de T/N se volvieron rojos, sintiendo el peligro en el que estaba.
"Dejen de pelear ya!" Sana dijo, metiéndose en medio de ambas para que estas no pudieran atacarse.
T/N lentamente se calmó, pero aún llevaba el ceño fruncido.
Sana miró a la coreana menor con una mirada seria. "Chaeng, a ella no la vas a atacar."
"Pero!"
"Pero nada!" Sana dijo, mirando a Chaeyoung con una mirada fulminante. "Baja el arma."
Chaeyoung chasqueó la lengua y bajó su arma, no quitándole una mirada filosa de T/N.
Sana volteó para mirar a T/N y ver que esta estaba levantándose lentamente para ir en dirección a la ventana.
"A dónde vas?" Sana preguntó con un tono suave.
T/N solo sonrió de lado. "Tus amigas no me quieren aquí, cariño." T/N respondió, sacando medio cuerpo por la ventana. "Creo que será mejor que me vaya."
"N-No, espera." Sana le tomó la mano, no queriendo dejar ir a la mayor. "P-Podrías quedarte conmigo?"
T/N frunció los labios. "Me gustaría hacerlo, Sana." T/N susurró, dejando un pequeño beso en la mejilla de la menor. "Pero no puedo arriesgarme a estar aquí y ser asesinada por una de ellas."
"Por favor..." Sana la miró con unos ojos de cachorro. "Te prometo que ellas no te lastimarán." Sana dijo con un tono suplicante.
T/N suspiró y asintió. "Bien. Solo lo hago por ti." Esta dijo en voz baja, volviendo dentro de la casa del árbol.
"Por qué no mejor vamos a la casa para que podamos hablar mejor?" Jihyo preguntó, mirando a la vampira con una mirada sospechosa.
T/N se sentía amenazada de alguna manera.
Sana sabía lo tensa que estaba T/N, por lo que le dio un leve apretón en la mano y la acarició con el pulgar.
"No te preocupes. Estarás conmigo." Esta dijo, tratando de calmar a T/N para que esta pudiera ganarse la confianza de las chicas.
T/N no dijo nada. Esta solo asintió.
Sana sonrió levemente, y jaló a T/N de la mano para seguir a las demás hasta la casa.
Cuando las 10 entraron, Sana le pidió a T/N que se sentara en el sofá, diciéndole que todo estaría bien, y que nada le iba a pasar.
"Así que Sana y tú están saliendo, huh?" Nayeon preguntó, mirando a la vampira de pies a cabeza, como si estuviera examinándola. "Cómo se conocieron?"
"Qué es esto ahora? Interrogatorio?" T/N preguntó, bufando levemente y cruzándose de brazos.
Nayeon la fulminó con la mirada, y Jihyo colocó una mano sobre su hombro, señalándole que no debería hacer nada.
Jihyo miró a la peli-negra. "Solo queremos saber por cuánto tiempo llevaba Sana escondiendo esto de nosotras." La líder dijo, haciendo que Sana se rascara la nuca con nerviosismo.
T/N desvió la mirada. "La conocí hace 3 años." T/N respondió, bajando la mirada para ver la mano de Sana. "Ella me salvó de morir de hambre."
"3 años...?" Mina dijo en voz baja para luego alzar la mirada. "Conociste a Sana unnie cuando sus padres seguían vivos?"
"Podría decir que conocí a sus padres." T/N respondió, acariciando la mano de Sana con su pulgar. "Personas muy dulces y cariñosas."
"Dijiste que Sana unnie te salvó de morir de hambre, no?" Tzuyu dijo, a lo que la vampira asintió. "Ella te dio su sangre?"
T/N negó con la cabeza. "No he bebido sangre humana desde que tengo memoria." T/N comentó, sorprendiendo a las contrarias.
"Nunca?" Jeongyeon comentó. "Eso debe ser una mentira." Esta dijo, y T/N solo se encogió de hombros.
"Es tu decisión creerme o no." T/N volvió a encogerse de hombros.
Las chicas suspiraron.
"Al menos puedes contarnos la historia de cómo se conocieron?" Dahyun preguntó, haciendo que T/N la mirara.
"No creo que sea necesario algo así." T/N comentó, y Sana se quejó como una niña pequeña.
"Aww, por qué?" Sana preguntó, haciendo que T/N la mirara con una ceja alzada.
"Por qué quieres que lo cuente cuando ya lo sabes?" T/N preguntó, tomando a Sana de las mejillas para pellizcarlas levemente.
"Es que me gusta como tú lo cuentas." La menor dijo, formando una cara graciosa debido a que T/N le pellizcaba las mejillas. "Porfa~ Cuéntalo."
T/N suspiró. "Espero obtener algo a cambio." La mayor dijo y luego miró a las demás chicas, quienes miraban a la vampira con una sonrisa burlona.
"Governada por una humana?" Las chicas se burlaron.
T/N bufó e ignoró sus opiniones.
"Sana me encontró cerca de su patio." T/N empezó el relato.
Flashback
T/N estaba caminando débilmente, sintiendo cómo la sed de sangre la estaba consumiendo poco a poco.
La vampira buscaba cualquier animal que podría proveerle sangre, pero no encontraba nada cerca de su alcance.
Esta vio una casa con un patio lleno de animales de granja, y esta pensó que podía robarse un animal y beber de su sangre.
Esta trató de forzarse un poco más, caminando hasta dicha casa para poder saciar su hambre de una vez por todas.
A tan solo 3 pasos de la casa, la vampira no logró aguantar más y cayó de rodillas al suelo, sintiendo que iba a morir en cualquier momento.
T/N pensó que iba a ser su último momento de vida hasta que escuchó una voz dulce.
"Quién eres...?" T/N alzó un poco la mirada, y vio a una japonesa con cabello marrón.
T/N trató de responder, pero el hambre no la dejaba.
La contraria iba a preguntar si la peli-negra estaba bien, pero vio que los ojos de la contraria estaban rojos como la sangre.
"Eres una vampira..." Sana tenía los ojos abiertos, alejándose de la mayor lo más rápido posible.
La japonesa quería llamar a sus padres y así poder eliminar a la vampira, pero verla sufrir y no intentar ni siquiera atacarla la hacía sentir pena.
La japonesa se mordió levemente el labio y caminó hasta una de las jaulas que tenía en su patio para sacar una gallina de esta.
"Lo siento, Amarillo." Sana se disculpó con la gallina, y luego caminó hasta T/N.
La japonesa extendió la gallina, esperando a que T/N lo tomara.
"Tómalo." T/N escuchó a la contraria decir.
Esta rápidamente tomó la gallina y clavó sus dientes sobre el pobre animal, succionando su sangre.
Sana estaba sorprendida por la rapidez que T/N ingirió la sangre de la ave. T/N separó la boca del animal y se relamió los colmillos.
"T-Tienes más?" T/N preguntó en voz baja, y Sana asintió antes de buscar otra gallina y entregársela a la mayor.
La japonesa estaba algo asombrada por el hambre de la peli-negra.
Cuando T/N terminó su tercera gallina, esta se relamió los colmillos para limpiarlos. "Gracias." T/N dijo, dando un leve asentimiento.
"Pensé que los vampiros bebían sangre humana." Sana dijo con un tono curioso.
"Los vampiros si lo hacen." T/N dijo, mirando las gallinas muertas a un lado de ella. "Qué puedo hacer ahora con estas gallinas?"
Sana se sujetó el mentón, pensando en una manera de esconder esas gallinas.
"Bueno, les puedo decir a mis padres que unos vampiros vinieron y robaron nuestros pollos." Sana comentó, haciendo que T/N riera levemente.
"Eres extraña." Esta dijo, mirando a la contraria con una media sonrisa.
Sana sonrió de lado. "Y yo pensé que los vampiros iban a ser más terroríficos." Esta comentó. "Tú te ves bastante tierna."
"Hey! Yo no me veo igual de tierna que tú." Esta dijo, causando que Sana se sonrojara levemente.
"Hey... no te he preguntado tu nombre todavía." Sana comentó suavemente.
"Soy Park T/N." La peli-negra se presentó.
"Minatozaki Sana." Esta dijo con una sonrisa amable.
T/N sonrió levemente. "Me gusta tu nombre. Es muy bonito."
"Gracias." La menor dijo con un poco de vergüenza.
Empezando desde ese momento, la relación entre Sana y T/N creció.
• • • •
"Hey, hola T/N." Los padres de Sana saludaron al ver a la contraria al otro lado de la puerta.
"Hola, Sr. y Sra. Minatozaki." T/N saludó con una sonrisa.
"Si que te gusta nuestra pequeña hija, huh?" Los adultos rieron, causando que la mayor se sonrojara levemente.
Esta se rascó la cabeza con algo de pena y desvió la mirada. "Esta Sana en su habitación?"
Los padres rieron, y asintieron.
Los padres de Sana ya sabían que T/N era una vampira. Estos habían encontrado a Sana dándole una gallina a T/N para que esta última pudiera beber la sangre del animal.
Al principio los padres estaban asustados que su hija se acercara a un monstruo chupa sangre. Sin embargo, al ver que T/N no imponía un peligro a su hija, estos decidieron mantener un ojo sobre la vampira.
Luego de un tiempo, ellos aprendieron a querer a T/N a pesar de que esta fuera una vampira.
T/N caminó en dirección a la habitación de Sana y tocó suaves golpes antes de entrar.
"Sana?" La mayor se asomó por la puerta, encontrándose a la japonesa mirarla con una linda sonrisa.
"Ven acá." Sana dijo, extendiendo ambos brazos y abriéndolos para invitar a la vampira a un abrazo.
T/N sonrió y entró para cerrar la puerta con seguro y caminar hacia ella para corresponder el abrazo.
T/N escondió su cabeza en el cuello de Sana, aspirando el aroma adictivo de la menor.
"Por qué te vuelves cada vez más dulce?" La mayor preguntó en un susurro, besándola levemente en el cuello.
Sana rió por las pequeñas cosquillas.
Sana separó un poco a T/N para poder mirarla al rostro.
Sana apreciaba cada parte del rostro de T/N, tratando de mantenerlo dentro de su memoria.
"Quieres una foto, hermosa?" T/N rió, besando la oreja de la contraria.
Sana rió avergonzada, dejando que la mayor la mimara. "Para que necesito una foto cuando te tengo a ti?"
T/N negó con una risa, y se acercó a besar a Sana.
La japonesa aceptó el beso con gusto, y dejó que el adictivo beso de la mayor la gobernara.
T/N lentamente se colocó entre las piernas de Sana, agarrándola del muslo para acercarla más.
La japonesa soltó un leve jadeo, pasando su mano por el cuello de la mayor para profundizar el beso.
T/N mordía levemente el labio de la japonesa para que esta abriera la boca y pudiera introducir su lengua dentro.
Al sentir que el oxígeno faltaba, T/N se separó del beso pero aún mantenía una distancia bastante corta.
Sana recuperaba su respiración mientras observaba los ojos que amaba.
"Me encanta como me besas." Sana dijo en voz baja, mordiéndose levemente el labio.
T/N sonrió, y volvió a acercarse para besar a Sana.
T/N de repente escuchó ruidos, separándose de Sana para fruncir el ceño.
"Qué sucede-" T/N rápidamente tapó su boca, callándola.
"Shh." La mayor dijo, rápidamente moviéndose y acercándose a la puerta.
Sana se levantó de la cama, mirando con preocupación a la mayor.
T/N abrió la puerta y escuchó gritos.
Ambas chicas se miraron con los ojos abiertos y caminaron a paso rápido hacia donde se encontraba los padres de Sana.
Lo que Sana vio hizo que su mundo se detuviera por completo.
Sus padres estaban lentamente muriendo mientras dos vampiros bebían de su sangre.
T/N abrió los ojos en grande.
"T-T/N!" Los padres de Sana gritaron. "L-Llévate a Sana de aquí!"
T/N reaccionó rápidamente y cargó a Sana para correr lejos de ahí.
"N-No! T/N! Suéltame!" Sana trataba de hacer que la peli-negra se detuviera. "M-Mis padres siguen ahí!"
T/N no se detuvo. Esta siguió corriendo hasta llevarla a un lugar donde ella podía estar segura.
"T/N! Detente!" Sana lloró, y T/N se detuvo rápidamente.
Esta bajó a la menor para luego recibir una cachetada de ella.
"Por qué huiste?! Podíamos haber salvado a mis padres!" Sana exclamó, cayendo de rodillas para llorar.
T/N frunció sus labios, agachándose en frente de Sana para acariciar su cabeza.
"Tus padres me pidieron que te llevara lejos de ahí." Esta dijo en voz baja. "Tenía que ponerte a salvo."
Sana se sonó la nariz, sollozando levemente.
T/N frunció sus labios nuevamente y abrazó a la menor. "Tienes algún lugar donde quedarte?" Esta susurró. "Puedo llevarte ahí."
Sana solo asintió y le dijo en voz baja a donde podía llevarla.
• • • •
Habían pasado algunos meses desde que los padres de Sana habían muerto y desde que había visto a T/N por última vez.
Desde aquel día, la japonesa se rehusaba a ver a T/N.
Verla a ella era recordar la muerte de sus padres.
Un día, la japonesa estaba recostada en el suelo de la casa del árbol.
Esta miraba el techo, pensando en el pasado.
Sana suspiró, pensando en todo lo que extrañaba del pasado.
"Ese suspiro fue algo largo." Sana rápidamente se levantó para ver a T/N sonriendo de lado, sentada sobre la ventana.
San frunció el ceño. "Vete."
La sonrisa de T/N se volvió una mueca. "Sana, por qué no quieres volver a verme?"
"No quiero verte." Sana negó con la cabeza. "Verte es recordar el día en que mis padres murieron."
T/N frunció el ceño y entró a la casa del árbol, caminando hacia la japonesa.
La japonesa retrocedía, pero la vampira seguía avanzando.
"Deja de acercarte. No te acerques más." La menor dijo, pero la contraria hizo caso omiso.
Sana siguió retrocediendo hasta que chocó su espalda contra la pared, dejando a la japonesa a su merced.
"Te dije que te alejes-"
"Entonces mátame." Sana se sorprendió por las palabras de T/N. "Mátame."
"Qué?"
"Mátame." T/N volvió a repetir. "No tiene sentido que siga en este mundo si la única persona que me importa no quiere verme." La mayor dijo, dándole una estaca a Sana y haciendo que esta apunte a su corazón. "Vamos, mátame ahora."
T/N miraba a Sana con tristeza.
Sana apretó la estaca, pesando en apuñalarla.
Sin embargo, esta no podía.
No importa cuanto lo intentaba, no podía hacerlo.
Sana soltó la estaca y escondió su cabeza en el cuello de T/N para sollozar en silencio.
T/N rápidamente abrazó a Sana, sintiendo como su ser se volvía completo nuevamente.
"Lo siento.." Sana dijo en voz baja, apretando el agarre en la camisa de T/N. "Te extrañé muchísimo..."
T/N negó con la cabeza. "No te preocupes. Sabes que siempre estaré esperándote..."
Fin del Flashback
"Aww~ que linda historia~" Nayeon comentó, ocasionando que Sana riera suavemente.
"Es por eso que me gusta cuando T/N cuenta la historia." Sana dijo con orgullo, causando esta vez que la mayor se riera.
Las chicas se miraron entre sí y luego a T/N.
"T/N, después de escuchar tu historia, llegamos a la conclusión de que puedes quedarte." Estas dijeron, e hicieron que Sana se emocionara. "Pero será en la casa del árbol."
Sana hizo un puchero mientras que T/N asentía con una risa.
"Puedo al menos tener a Sana esta noche?" T/N preguntó, a lo que las demás asintieron.
T/N sonrió mientras que Sana se sonrojaba levemente.
"Okay~ entonces me la llevo ahora!" T/N exclamó, cargando a Sana como si esta no pesara nada y saliendo de la casa en dirección a la casa del árbol.