// UNDÉCIMO CAPÍTULO REESCRITO//
Haganezuka Youko, fue encontrada en la cima de la montaña más cercana al sol, su vida fue tranquila, hasta que por azares de la vida; entra en contacto con una katana negra, que despertó en ella unos recuerdos de su...
Como era de costumbre, Youko y Kyojuro entrenaban todo el día en los descansos que tenía la pilar.
Pero la idea de kyojuro hoy, era distinta.
Kyojuro se asoma por el shoji del jardín y ve como la pilar está meditando.
-buenos días Youko. - saluda el rubio animadamente.
-buenos días Kyo~Chin porque no tienes tu ropa de entretenimiento? - pregunta la chica poniéndose de pie y caminando hasta el.
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El rubio le sonríe con un tinte rojizo en las mejillas.
-hoy hay un festival en la región de La flama y yo me preguntaba si la pilar del la flama solar estaba disponible hoy en la tarde para invitarla a ese festival. - le dice a la chica tomándola por sorpresa.
La pilar sonríe al ver como kyojuro todavía se avergüenza por preguntar cosas así.
-estaría encantada de ir contigo kyo~Chin, a Sen~Chin le encantará. -
-eh... Bueno realmente era para que fuéramos juntos... Como...-kyojuro pasa saliva y se sonrojar aun más- pareja. -
La chica se sorprende por unos segundos y se sonroja al caer en cuenta de lo que significaba lo que acababa de decir el ex Pilar de la flama.
-ahora debo irme, pedí hablar con Oyakata~Sama. - le comenta kyojuro.
-Claro, que te vaya bien; nos vemos por la tarde. - la chica se despide meneandole la mano.
Youko al ver salir al rubio, se tira al piso y chilla al ver que por fin tendrá tiempo a solas con kyojuro.
Senjuro entra preocupado a la habitación.
-estas bien? -
-Kyo~Chin me invitó a salir. - confía avergonzada.
Senjuro se sonrojar de igual manera y sonríe alegre por la chica y por su hermano.
-entonces debes vestir de una forma diferente, no creo que sea correcto vestir de pilar en una cita. - sugiere el menor.
-tienes razón, debo buscar algo que ponerme.-
-creo que te puedo ayudar. - Senjuro sale de la habitación y vuelve al cabo de unos minutos.
El rubio menor le muestra una yukata ligera de color caqui con un obi negro y rojo, que combinaba a la perfección.
-esta precioso. - admira lo traído por senjuro con brillo en los ojos.
-era de mi madre. - responde el chico medio triste.
-Sen~Chin no debes hacer esto. - youko se acerca a él y lo abraza.
-te verás hermosa y además a mi hermano le gustara mucho. - responde mientras se apega al pecho de la mujer.
-muchas gracias, espero verme igual de linda que tu madre como cuando lo llevaba. -
La chica se alista y se mira detenidamente al espejo.
-te ves hermosa. - comenta Kyojuro a un lado, la chica da un salto de miedo y suspira de alivio al ver a su pareja.
-casi me matas de un susto y muchas gracias, Sen~Chin me dijo que podría usarlo, dijo que te iba a gustar, pero entiendo si te molesta que use la ropa de tu madre... -dice la chica nerviosamente rápido, dejando casi mareado a kyojuro, por lo que este decide acercarse a ella y darle un pequeño beso en los labios; acción que afectiva mente, hacer callar a la pilar.
-nos vamos ya?- el rubio le tiende la mano y está la recibe para irse caminando juntos, no sin antes despedirse de los demás.
El camino lo disfrutaron en silencio, ambos disfrutando de la compañía del otro, algo dentro de ellos les decía que debían disfrutar este momento a concho, porque el futuro que vendría podría ser tormentoso.
Llegando al lugar, todo estaba animado lleno de gente paseando por los roten, tomados de la mano el ex pilar y la pilar actual, pasearon viendo entretenidos los souvenirs que ofrecían los pequeños puestos.
-adelantate, debo hacer algo; te alcanzo en un momento. - le dice el rubio soltando su mano.
La chica asiente y comienza a caminar mirando el cielo oscuro.
La luna llena brillaba en el firmamento, por lo que Youko comenzó a buscar un lugar tranquilo para ver los fuegos artificiales con kyojuro, en su mente pasaban mil ideas por minutos de lo que podría estar tramando kyojuro.
-te ves extraña, tan vulnerable. - una voz conocida para ella la saca de sus pensamientos.
-Akaza... - Youko lo mira con miedo.
-no se porque, me llaman la atención los fuegos artificiales. - confiesa el demonio poniéndose a su lado.
-debes irte, no estoy sola... Kyojuro esta conmigo. -le comenta la chica alejándose un poco del demonio.
-Kyojuro... Aquel necio que se negó a ser un demonio. -
Akaza se acerca y extiende su mano, posandola en la mejilla de la chica.
De manera coordinada, los fuegos artificiales comenzaron cuando la mano de Akaza toca su mejilla.
Ambos se mira como si vieran más allá de lo que a simple vista se logra ver.
Akaza quita su tacto y desapare del lugar dejando a Youko desconcertada.
-Youko? Por qué te apartaste tanto... Te estuve buscando. - Kyojuro llega corriendo donde ella.
-yo, yo solo me aparte para que pudiéramos ver los fuegos artificiales.- la chica lo abraza por sorpresa y nuevamente una nueva ronda de fuegos artificiales son disparando alumbrando aquella noche.
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El espectáculo había terminado, Youko sonreía felizmente; cosa que distrajo al rubio.
-que tienes en la mano? - pregunta curiosa al notar como el rubio está tratando de ocultar una caja.
-esto... Toma, cuando pasamos por un puesto vi como lo mirabas y sentí que te gustaba y que se te vería hermoso en ti.
La chica abre la caja y ve una horquilla con una flama en un extremo.
-muchas gracias Kyo~Chin... Puedes... - la chica le tiende la horquilla.
Rengoku la recibe y la acomoda en su cabello.
-se te ve hermosa. - alaga el chico.
La chica sonríe y abraza a su pareja, la cual responde de manera cariñosa.
