-Afriel, ¿No crees que llama mucho la atención?-Le pregunté a Afriel que cargaba con un montón de bolsas cargadas de ropa-.

-Lo sé, pero se rehusaba a usar ropa que no fuera elegante- Respondió exhausta Afriel- Lo que me sorprende, es la gran cantidad de dinero humano que posee Lysander...-.

Lyssander se acercó a nosotros, cargado con mas bolsas de ropa.

-Ahora si, vamos a Australia. Allí podemos establecernos e investigar sobre el paradero de la hija 178 de Kyousuke- Dijo Lysander alegre-.

-El avión parte a las 11:00pm. Compré los boletos mientras ustedes hacían compras de ropa- Informé-.

Nos dirigimos al aeropuerto, pero las miradas se posaban en nosotros con frecuencia, pues Lysander parecía un famoso, Afriel atraía mucho con su físico y yo parecía ser un guardaespaldas. Aquellas miradas incomodaban, pero Lysander no parecía ser afectado por ello.

-El mundo ha cambiado bastante desde la ultima vez que bajé...-Dijo Lysander- Pero los humanos aun los aborrezco-.

-Bueno, su Majestad, tendrás que convivir con ellos por un tiempo, te guste o no- Le respondí sarcásticamente-.

-Lysander, ¿Cómo es que tienes tanto dinero humano?- Preguntó finalmente Afriel que había estado en silencio-.

-Solía servir a un señor millonario, tocaba el violín para él. No tenia hijos, y su esposa había fallecido. Un día enfermó gravemente y en su lecho de muerte, dejó todas sus posesiones a mi nombre- Explicó sencillamente Lysander- El señor tenía propiedades por todo el mundo, pero la principal esta en Australia-.

-¡Wow! Si que fuiste afortunado...-Dijo asombrada Afriel-.

-Si, aquel señor era el único humano al cual no aborrecía- Dijo Lysander pensativo-.

Llegamos al aeropuerto, pero hasta ahora eran las 9:00pm. Había que esperar dos horas mas para partir, lo cual disgustó mucho a Lysander. Esperamos sentados en las salas de espera. Lysander leía un libro intrigado, pues no levantaba ni un segundo la vista de aquel libro. Un artista que se encontraba allí, encontró exuberante la belleza de Afriel y le pidió permiso para pintarla, los cual Afriel aceptó. Y yo, bueno, no dejaba de mirar el reloj. Hasta que una voz conocida me llamó  por el nombre que utilizaba en la tierra.

-¡Lothaire!- Exclamó la voz femenina con exagerado acento francés- Pensé que jamas te volvería a ver-.

Una joven francesa, de cabello mono claro que caía como una cascada a sus desnudos hombros, sus ojos azules claros, labios finos y sonrisa perfecta. Tardé en reconocerla, pero era Jacqueline. Ella había sido estudiante mía, yo le había enseñado a tocar el chelo desde que era muy pequeña. Vivía en Francia. Nunca pensé que fuera a encontrarme con ella en este tipo de circunstancia. Jacqueline me abrazó instantáneamente, lo cual me sorprendió.

-Jacqueline...-Dije para que apartara- A pasado mucho el tiempo, ¿Cuántos años tienes ya?- Pregunté sintiéndome viejo-.

-Tengo 21 años- Respondió contenta- A ti. Lothaire, parecen que no te pasan los años- Lo cual era cierto-.

Afriel al ver escándalo de Jacqueline, me miró fríamente. El artista ya había acabado con su trabajo y se había retirado. Afriel se acercó a nosotros.

-¿Quién es ella?-Preguntó enfadada-.

-¡Oh! Pero si ya haz conseguido una novia muy linda- Respondió Jacqueline contenta- Mi nombre es Jacqueline. Lothaire fue mi profesor de chelo desde que era pequeña. Me alegro de que Lothaire tenga una novia tan bonita como usted- Se presentó respetuosamente Jacqueline-.

-Mi nombre es Sophie- Se presentó Afriel- Y este idiota no es mi novio- Aclaró-.

-Lo siento- Se disculpó Jacqueline por su error- Enserio pensé que era novios...-.

-¿Qué te trae por aquí?- Pregunté, rompiendo la tensión-.

-Vine a buscar a alguien llamado Lysander- Respondió Jacqueline- Mi familia y la familia de esa persona están muy ligadas...¡Oh! Miren, es aquel- Jacqueline señalaba a Lysander-.

Nada tenia sentido. ¿La familia de Jacqueline tenia relación con Lysander? Imposible.

-¿Y por qué le viniste a ver?- Pregunté desesperado, pues Lysander ni siquiera utilizaba un nombre distinto aquí-.

-Mi familia ha estado agradecida con su familia desde siglos. Mi tatarabuelo tenia un hermano, y ese hermano murió enfermo, dejándole todas las pertenencias a su violinista preferido. Durante siglos hemos buscado a la familia de aquel violinista, y ahora apareció uno de sus descendientes. Mi papa esta muy emocionado en conocerle, pues ha sido una leyenda en nuestra familia- Jacqueline se veía muy exaltada por aquello-.

Así que el señor para el que trabajaba Lysander era el tatarabuelo de Jacqueline. 

Jacqueline se despidió rapìdamente y se acerco a Lysander. Lysander seguía en su libro y no prestaba atención a las palabras de Jacqueline.

-Su majestad-Le llamé, haciendo que levantará la vista de su libro-.

-¿Ahora que quieres?- Preguntó molesto-.

-Tenemos compañía- Respondió Afriel-.

Jacqueline le explicó a Lysander la situación y Lysander se veía confundido. Jacqueline le pidió que fuera a Francia con ella, pero lo rechazó.

-Tengo que hacer algo en Australia antes- Rechazó amablemente Lysander- Iré en otra oportunidad-.

Jacqueline estaba decepcionada. Llamó a su padre  informándole la noticia de Lysander, y luego se volvió hacia nosotros.

-Los acompañaré hasta Australia- Dijo, pues ya le habíamos contado nuestros planes de viajara hacia Australia. Se sorprendió mucho al saber que Lysander y yo nos conocíamos-.

Afriel estaba molesta.

-Es mejor que vuelvas a Francia- Dijo- Lysander irá algún día. No nos tienes que acompañar-.

-No. Tengo que acompañarlos- Dijo Jacqueline seria- Tengo las llaves de las mansiones que le pertenecen a Lysander. Si van sin  mí, no podrán entrar a la mansión-.

-Esta bien. Pero no harás ningún estorbo- Advirtió duramente Afriel-.

-No lo seré- Respondió- Pero necesitaran mi ayuda buscando lo que necesitan-.

-¿Cómo sabes que buscamos algo?- Pregunté fríamente-.

-Mi familia ha sido guardianes de los secretos del cielo desde siglos. Mi tatarabuelo lo era y por eso acogió a Lysander. Para haber venido a la tierra en tiempos de confusión, deben estar buscando algo. Por eso vine aquí-.

Nunca imagine que los guardianes de secretos humanos existieran. Y menos que Jacqueline fuera una de ellos.

Layla:

Los entrenamientos con Celine se habían vuelto divertidos y duros. Pero disfrutaba aquellas horas. Pero cuando llegaba la hora de ensayo de violín con el señor Paganini, pensaba mucho y la intriga me llenaba. Mitsuki ahora pasaba mucho tiempo con Lauviah y Oraculum, y le veía muy pocas veces. Hoy me acompañó hacia el palacio central y allí le expuse mi gran duda:

-Mitsuki, el señor Paganini no es el real, ¿Verdad?-.

-¿Por qué lo preguntas?- Preguntó nervioso Mitsuki-.

-Vamos Mitsuki, Paganini en el mundo fue considerado ''El violinista del diablo''. Este seria el ultimo lugar en el que estaría-.

-Tienes razón. El señor Paganini con el cual tu ensayas no es el verdadero, es solo una ilusión que creó el señor Ludwig-,.

-¿Por qué Ludwig haría eso?- Pregunté extrañado-.

-Paganini se convirtió en uno de los demonios mas poderosos del inframundo. El señor Ludwig quiere que estés a la altura de Paganini y así poderlo vencer-.

-¿Qué? ¿Está loco? ¡Jamas lograré vencerlo, pues Paganini es considerado uno de los mejores violinistas que hayan existido!-.

-Tienes razón, pero el señor Ludwig quiere entrenarte lo mejor posible-.


Ángeles de la música ©Where stories live. Discover now