15: -mi amor será tuyo, hoy es mío-

1.2K 147 52
                                    

Chan logró dormir un poco más, solo un poco, después de todo había estado solo desde que llegó a su casa la noche anterior. La rosa reposaba sobre un vaso lleno de agua. No acostumbraba recibir flores, de hecho el le había regalado una a Seungmin  cuando recién comenzaron con su noviazgo. No era un detalle del cual le desagrade, no se sentía mal al recibirlas, sin embargo, era una anomalía.

Tendido en la cama recordaba como se había sentido al verlas ahí en el suelo frente de su casa. Se había decidido comprar un recipiente para dejarla, uno que se viera mucho más presentable y haga relucir su belleza única.

Su corazón latía por la idea de que fuera Seungmin quien dejó la rosa ahí. Presentía que fue el aún si no había nota alguna que acompañará a esta, solo una cinta roja que tenía entrelazada entre las pocas espinas que poseía y unos pocos detalles más.

Sonrió, porque de alguna manera se sentía feliz.

Con la llegada de Jiyeon pudo soltarse mucho más al respecto de sus sentimientos. Fue capaz de expresarles las emociones como las tenía. Ella es una de las personas que llegaban a la vida para sanarte, para arreglarte.

Y así, con la aparición de los rayos de sol a través de su ventana y el reloj cambiando la hora a las siete en punto de la mañana, sonrió antes de levantarse y comenzar el día como corresponde.

Se dirigió al baño, quitándose la ropa con lentitud, dándose el tiempo para hacerlo, y entrar a la ducha y abrir la llave, dejando su cuerpo bajo la lluvia falsa para así mojarse con totalidad, su cabello totalmente húmedo, tanto que llevo su mano hacia estos para acomodarlos hacia atrás.

Solía perder el tiempo durante las mañanas, en otras cosas con o sin importancia, menos en si mismo. Su cuerpo estaba sano, algo sencible a infecciones o enfermedades por tener su sistema inmune debilitado debido a la falta en las horas de sueño, pero por ejemplo, el maquillaje era algo que había dejado atrás. Su única rutina era aplicarse crema y era más que suficiente. Esta vez, cuando ya estuvo vestido, con sus típicas prendas de color negro, regreso al baño y saco del escondite todos los cosméticos que tenía guardado.

Se dijo a si mismo que estaba más que bien, el poco a poco se volvía a dar una oportunidad a quien debería ser, a quien fue algún tiempo y a quien volverá a ser en el futuro.

Tomando una taza de café, se sintió diferente, más liviano, siendo el mismo. Tales retoques lo hacían sentir mejor. No era algo que exageraba en su piel, era lo justo, le quedaba perfecto en el.

Cuando ya había tomado más de media taza, su celular sonó haciéndolo sobresaltar por el susto. No tardó en responder, aún cuando era Seungmin quien lo llamaba.

-Hola hyung. ¿Cómo estás?- habló el menor con tono suave, indicando que se encontraba relajado.

-Hola Seung, todo va bien, ¿Cómo estás tú? ¿Sucedió algo?

-No, nada de eso, yo estoy bien, solo te llamé porque quería saber si seguías en casa- y sin importar cuantas estaciones fueran pasando, como cada año sumaba uno más a la vida, literalmente podría pasar mil cosas, pero Bang Chan no le hacía falta mucho para saber y asegurar que conocía el tono en el que el menor le hablo, sabía que en pocos minutos lo iba a ver, lo estaría esperando.

-¿En casa?- contestó fingiendo duda por lo escuchado, cosa que pareció funcionar cuando Seungmin volvió a hablar.

-Quería pasarte a buscar, lo siento por no informarte antes. ¿Ya estás listo? Te puedo esperar si es que no lo estás- le dijo.

-Oh, sí, claro. Déjame unos minutos y salgo.

-Bien, gracias.

Las sonrisas que reflejaban felicidad parecían ser mucho más brillantes ese día. Olvidamos la belleza de las cosas cuando nos alejamos en pensamientos de nuestra realidad, de nuestro ahora.

Lo Que Significa Estar Sin Ti [ ChanMin ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora