En tus manos

Capítulo 12

Vino va vino viene, terminamos pasados de copas, Miguel me contaba cosas graciosas, es una persona muy buena, amorosa, considerada, me preparó un volcán de chocolate, era bueno en la cocina, seguro era todo lo que toda chica soñaba, pero evidentemente yo no servía para las relaciones, tenía un estilo de vida fuera de lo normal.
-Estuvo genial, gracias-le sonreí después de terminar de comer lo poco que quedaba.
Él acarició la comisura de mis labios y lamió su dedo.
-Nunca hay que desperdiciar el chocolate...-él se encogió de hombros y me abrazó hacia su cuerpo, me quedé ahí y suspiré-¿pasa algo?
-Muchas cosas pasan..-fui sincera- hace bastante no me asustaba tanto algo, el tener tanto por hacer, las cosas que se me aparecen por la cabeza...
-A veces hay que desconectar el cable que te tiene encendida las 24 hs del día-Miguel elevó sus cejas-lo veo complicado en vos Lali preciosa pero se que podes hacerlo
-La cuarentena obligatoria me obligó bastante-esbocé una pequeña sonrisa- a lo que me refiero...-me puse seria y suspiré- a que no quiero lastimarte, no se que quiero en este momento de mi vida, ya lastimé a Santi, yo..
Iba a seguir pero Miguel me dio un beso dulce en los labios.
-Lo se... Que tu cabeza da vueltas y vueltas, yo sí estoy seguro de lo que quiero, siento que vos podrías también estarlo, no ahora, ahora no es un buen momento, pero voy a estar para vos-me acarició la cara-sos una persona fabulosa, de esas que no se encuentran todos los días, buena, linda compañera, humilde.. Creativa, talentosa... Toda tu persona me encanta, me tenes encantado
Elevé mis cejas.
-No me digas esas cosas-le pedí.
-Es la verdad, y Lali cariño percibo como te sentís, solo quiero que sepas que voy a esperarte-él besó mi frente y me abrazó, me sentí rara, ¿si yo nunca me decidía?
El "encuentro" con Peter me resultó fuerte, era como si tuviésemos una fuerza magnética que siempre se encargaba de pegarnos, juntarnos, contra viento y marea.
Me separé de Miguel y me lo quedé mirando a los ojos buscando sentir algo, pero lo único que me venía a la mente era tensión sexual, que también tenía con Peter pero de una manera distinta, Peter y yo nos entendíamos y leíamos la mente, Miguel y yo.. Todavía éramos desconocidos.
Suspiré y volví a abrazarlo, me acarició la cintura y cerré mis ojos, supe que iba a pasar, el vino no estaba ayudando, últimamente no hacía cosas cuerdas.
Resignada me entregué a otra noche, otro momento en el que no sentí nada, lo rutinario me estaba matando.

Empezó el proyecto en el cual estaba involucrada, La voz argentina, eso me tenía bastante entusiasmada, estaban los chicos de Miranda, Montaner y Abel Pintos, ese área estaba genial en cuanto a lo sentimental pasó lo siguiente: Miguel se quedó en la argentina por una propuesta de trabajo, terminó conviviendo conmigo sin ser novios, sin ser nada, pero para los ojos de la prensa estamos saliendo, otra vez perdí la oportunidad de tener libertad y ver que me pasa, me encasillé yo sola, cavé mi fosa.
Me terminé de arreglar el pelo y agarré a Miguel del brazo antes de entrar a una fiesta, la fiesta de la revista Caras, estaban invitadas las personas más influyentes de la década, Miguel era mi acompañante, todo venía excelente hasta que me lo crucé a él, a Peter, él me miró por una milésima de segundo y desvió su mirada, él tenía abrazada de la cintura a Delfi, ambos se reían, ¿ellos estaban? Traté de alejar ese pensamiento.
Sentí que la cabeza me iba a estallar y me entraron ganas de llorar, por eso abracé más a Miguel.
Me indicaron donde pararme para la famosa foto grupal, Miguel me miró desde detrás de cámaras, de un momento a otro tenía a Peter al lado mío.
-Hola-lo saludé.
-Van a sacarnos la foto-cortante, más cortante que un cuchillo afilado.
-Hola, ¿no?-me molesté, ambos no nos estábamos mirando por si nos sacaban la foto.
-Hola-me saludó- no hables conmigo que está tu novio
Punto bajo.
-No es mi novio-fui sincera.
-Es tú acompañante, lo que sea-él suspiró, nos tomaron la foto y él se alejó de mí.
-Saliste hermosa-Miguel me sonrió-¿ese era tu ex? Quiero hablarle para felicitarlo por la película
Todo pasó muy rápido, Miguel se acercó a Peter y quise desaparecerme.
-Hola-Miguel lo saludó-soy Miguel Angel Silvestre, compañero de Sky rojo de Lali, nada, quería decirte que te vi en la película 4X4 y me fascino
Peter como buen actor puso una de sus mejores caras, después me fulminó con la mirada.
-Me alegra que les haya gustado-sonrió-Lali ya la había visto, pero me alegro que lo hayan hecho de nuevo
Peter me miraba con una mirada que me costaba descifrar.
-¿Tomamos algo? ¿Puedo preguntarte acerca de la industria actoral en Argentina? Escuché que está complicado todo por acá-Miguel quiso seguir y me desaparecí, no podía soportar tanta tensión, por parte mía y de Peter, Miguel no estaba ni enterado, ellos se quedaron hablando como si se conocieran de toda la vida.
Agarré una copa con champagne, me la terminé y me tomé dos más, al cabo de un rato abracé por atrás a Miguel en estado alegre.
-Que champagne más malo-dije y Peter se quedó mirándome- mala calidad
-A alguien se le subieron las burbujas a la cabeza-Miguel rió-¿mejor vamos, no?
Asentí con la cabeza.
-Pero antes paso por el baño...-anuncié-chau Pitt
Me fui algo mareada y subí unas escaleras, estábamos en uno de los mejores salones de Buenos Aires, en el Tattersall que quedaba en la Avenida del Libertador. Me encaminé al baño cuando una mano tiró de mí, terminé en otro salón, Peter me miraba sin expresión alguna, eso me estaba desesperando demasiado.
-¿Te sentís realmente bien?-se preocupó.
-Solo tomé un par de copas de champagne barato-suspiré-no puedo dejar de pensar en lo estúpida que soy
-La verdad que sí, lo sos, siempre te fui sincero, y sí, sos estúpida con toda esta situación-él me la tiró.
-No es una conversación para este momento, para una persona ebria-empecé y él me acarició una mejilla, se me erizó la piel.
-Nunca es un buen momento...-él suspiró y me miró a los ojos- me estás matando, de nuevo Lali... Ya no quiero estar detrás de lo que haces, de lo que no... Pero al mismo tiempo no puedo evitarlo, no puedo evitar sentir celos, no puedo..
-Shhh...-puse uno de mis dedos sobre sus labios- Peter no podemos conversar ahora, esta Miguel abajo, tengo que irme, tengo burbujas dándome vueltas en la cabeza...-me acerqué a él y besé sus labios con cuidado, cerré mis ojos disfrutando de ese pequeño momento- quería hacer eso desde que te vi
Cruzamos miradas y después de tanto tiempo lo vi, vi más allá, nuevamente se estaba mostrando vulnerable.
-Lali ya no quiero pensar en vos-él me miró y dijo eso como suplicando- yo si tengo mis ideas firmes, te juro que te quiero pero tengo que hacer un corte, cambiar de página como la vez en la que nos separamos, tuviste tus parejas, yo tuve las mías, pero siento que seguimos... Sintiendo algo.. Muy en el fondo se que los sentís..
Lo sostuve de las manos y me apoyé sobre él mareada.
-Pitt... ¿Podemos hablar otro día? No quiero seguir diciendo ni haciendo cosas tontas-le pedí y él me miró, le robé una sonrisa y asintió con la cabeza, me abrazó y nos separamos sin saber que hacer, terminó besándome la frente y se fue, me quedé sola y me entraron ganas de llorar.
Fui al baño y cuando bajé las escaleras estaba Miguel esperándome, todo lindo, vestido de gala, me sonrió.
-¿Vamos?-él me agarró del brazo y asentí con la cabeza.
Llegamos a mi casa después de que Miguel manejara por un buen tiempo, yo me había quedado dormida en mi auto, me desperté al llegar, me bajé de mis tacos y me tuve que sacar el maquillaje, me tiré en la cama y Miguel se acostó a mi lado, quiso abrazarme y terminó haciéndolo, mi cabeza daba mil vueltas, tenía varios pensamientos, por la madrugada terminé corriendo al baño para terminar vomitando, maldito champagne barato.

A la mañana siguiente se me partía la cabeza, me tomé una pastilla y Miguel no estaba, me dejó una nota diciéndome que tenía una reunión para la nueva propuesta actoral.
No cociné nada, me serví cereal con leche aunque tenía un nudo en la panza, me sentía muy mal, agarré mi teléfono y las redes sociales ardían, fotos mías en la tapa, con Miguel y junto a Peter, el trio más deseado de toda la noche.
Me acaricié la frente y recordé lo que le dije a Peter, ahora nos debíamos una charla, como adulto que éramos, sin caretas, una charla para desnudar sentimientos, para ser sinceros.
Me intimidé, yo, Lali Esposito, cuando le mandé un mensaje a Peter, me agarró ansiedad y apagué mi teléfono, a los minutos lo encendí y tenía su respuesta cortante.
"Por la tarde puedo" eso fue todo, cortante y directo.
Me metí nuevamente en la cama, sabiendo que tenía obligaciones, música que supervisar, pero me sentía muy mal, no solo del cuerpo, de la cabeza, del alma.
Llamé a mi amiga Cande y ella se tomó un tiempo para mí.
-Boluda, no se que hacer-fui sincera y ella suspiró.
-Peter tiene razón, estas siendo muy estúpida
Que alentadora.
-Lo se.. ¿Pero que queres? ¿Que el mundo arda todavía más? ¡Mi mundo! No terminé de borrar mi imagen después del "escándalo", estoy aunque no estoy oficialmente con Miguel que es re buen tipo y después esta Peter que me hace sentir tanto...
-Peter siempre te hizo sentir, siempre fuiste estúpida, lo dejaste ir demasiadas veces, y él va a dejar de estar tras de vos, si bien ambos se equivocaron el amor siempre estuvo... Y ahora crecieron, crecimos todos, La es un buen momento para jugártela por tus sentimientos-Candela me dijo lo que sabía pero no me atrevía a asumir, mis ojos se llenaron de lágrimas.
-No todo es fácil...-dije con la voz quebrada.
-Es sencillo La-ella me animó- no tengas miedo, no otra vez.. ¿Recordas cuando estando con Benjamín seguían pesándote cosas con Peter? Ambos jugaron a estar escondidos juntos un par de veces más porque no podían soltarse, es tiempo de mostrarse por fin juntos
Cande me dijo eso y se me erizó la piel.
-Tengo que hablar con él-fue todo lo que pude decir, asentí con la cabeza-tengo que hablar con él-repetí.