DRAGONES: LA AVENTURA DE SKY

EXPLORACIÓN

Sky despertó como siempre a las 6:00, el sol aún no había salido. En casa ella no podía dormir y ¿por qué lo haría en aquel lugar desconocido?, se puso algo cómodo y salió a correr. El desayuno se servía a las 7:00, llamarían lista y la clase comenzaría a las 8:00, tenía demasiado tiempo de sobra. Algo particularmente la inquietaba, sentía que su cuerpo le advertía de algo, pero no sabía que era. Desde los dedos de los pies hasta la punta de su cabello estaba en alerta.

Quería despejar su mente, sentirse libre y qué mejor forma que corriendo, no podía entrar al bosque porque aún no tenía la autorización para hacerlo, pero muy en el fondo quería verlo. Quería encontrarse de nuevo con aquel dragón. Habían pasado exactamente dos semanas desde la última vez que se vieron.

- Buenos días. - Una voz ajena a la suya le hablo.

- Buenos días – respondió Sky y luego el silencio.

Corrió hasta quedar sin aliento y luego al escuchar la primera sirena a las 6:45, se dirigió a las duchas y se alistó, la hora del desayuno ya estaba a punto de ser servida y hoy explorarían el terreno como parte del entrenamiento.

Al llegar, su hermano ya estaba allí. Al parecer él no tardó mucho en hacer amigos ya que estaba sentado, charlando con algunos chicos. Prefirió no molestarlo y se sentó sola en una de las mesas siendo presa de los comentarios de las chicas quienes al parecer no congeniaban con la forma de ser de Sky.

¨Odio ser mujer¨, pensó.

- Tal parece que no es fácil ser humana - una voz dentro su cabeza le habló.

- Ni te imaginas.

Comió tranquila y luego a las 7:45 un instructor les gritó.

- ¡Polillas!, en 10 minutos quiero verlos haciendo fila en la entrada del bosque, hoy explorarán el lugar y si tienen suerte, encontrarán un dragón - esbozo una sonrisa.

¨Definitivamente ellos no querían que estemos aquí¨, pensó Sky, por la forma en que los instructores se dirigían a ellos.

Al llegar, allí estaban varios instructores esperándolos, entre ellos su primo Jack quien al verlos se sorprendió, pero como no podía hacer algo fuera de lo que estaba ordenado no pudo saludarnos.

- Escuchen bien, estos son equipos de seguridad que los protegerán de cualquier peligro. En el cinturón tienen herramientas como cuerdas, arneses, un cuchillo en caso de tener que defenderse, un intercomunicador y una bengala. Úsenlos en caso de emergencia y acudiremos de inmediato. Dentro del bosque hay una llave colgada que deberán traer para completar la misión, lo demás dependerá de ustedes. El radio del terreno es de aproximadamente 5 km. Deberán correr con todas sus fuerzas, hay instructores escondidos que deben evitar y si los ven, deben de enfrentarse a ellos. - Hizo una pausa - Ahora, ¡corran cucarachas!

Todos corrieron en distintas direcciones, intentando comprender que debían hacer exactamente. Al final solo saldría victorioso quien encuentre una llave brillante que es llamativo para los dragones. Sky sabía dónde debía ir exactamente y ese lugar era con el dragón azul escondido en aquella cueva. No le interesaba conseguir la llave, solo quería saciar su ansiedad, deseaba verlo con todas sus fuerzas. Corrió tan rápido como pudo, perdiendo a los demás de vista, camino por quien sabe cuánto tiempo y finalmente llego donde su amigo que la esperaba. No sin antes ver algún rastro de peligro.

El dragón le sonreía. - ¡Viniste a verme!, ¿te quedarás un momento?

- Sí - Respondió Sky devolviéndole la sonrisa y sentándose a su lado. Acaricio al dragón, quien parecía amar esas caricias.