DRAGONES: LA AVENTURA DE SKY

DRAGON BLANCO

Unos pequeños rayos despertaron a Sky quien estaba adolorida de todo el cuerpo y sentía que su cabeza iba a explotar. Descubrió que estaba demasiado caliente y cómoda en aquella nieve que subía y bajaba con un movimiento leve y cerró los ojos de nuevo.

¨Un momento. La nieve no sube y baja¨, pensó y dio un brinco descubriendo que aquel montón de nieve en el que estaba durmiendo plácidamente era un dragón de 9 m de altura, que al escuchar los movimientos de una Sky aterrada abrió los ojos mostrándole unos ojos amarillos idénticos a los de Sirion.

- Veo que la bella durmiente ya despertó de su profundo sueño. – dijo aquel dragón riendo.

De entre todas las cosas, que la llamen así era lo que más odiaba en el mundo. ¿Que acaso ese dragón se hacia la burla de ella?, sea lo que sea no se quedaría allí para averiguarlo. Camino en dirección opuesta por donde había entrado. Debía encontrar a Alduin y Patrick para completar la misión, lo más rápido posible.

- ¡Hey, aun no termino de jugar contigo, quédate un rato más! - el dragón pedía la atención de Sky pero ella no se lo daba, hasta que colmo su paciencia y llegaron a un acuerdo.

- Si me muestras la salida y me llevas donde mis amigos, prometo que jugare contigo todo lo que quieras, pero solo si me sacas.

El dragón se convirtió en un niño que le sonrió y tomo la mano de Sky quien quedo sorprendida ante la revelación. Aun no se acostumbraba a la idea de que los dragones podían ser humanos que caminaban cerca suyo sin que ella se dé cuenta y eso le aterraba. ¿Desde cuando vivía rodeada de dragones?, ¿acaso su padre también lo sabía o se lo estaba ocultando?

- Es por aquí. Mi hermana se alegrará de verte y tus amigos también deben estar con ella, sígueme.

Entraron por caminos angostos llenos de carámbanos que colgaban del techo dificultando el movimiento. A Sky le sorprendía cuán grande era la infraestructura que habían creado sin ayuda de los humanos.

A lo lejos, ellos escucharon unas voces de un pequeño espacio.

- Es increíble que un dragón de raza pura como tu haya renunciado a su linaje para mezclarse entre los humanos y ahora te haces llamar Patrick, que idiotez más grande, un dragón blanco como tu...

- ¡Hermana! - el extraño salvador de Sky llamo a quien estaba hablando con Patrick que estaba maniatado junto a su amigo que no hacía más que observar lo que sucedía alrededor.

- Loose cuantas veces te dije que no salgas a jugar solo.

- No estoy solo, traje a una amiga conmigo - señalando a Sky.

- Vaya, vaya que tenemos aquí- agarro el mentón de Sky y la obligo a verla con esos ojos amarillos que estaban llenos de rabia, frustración y odio lo que intimido a Sky. Alduin se dio cuenta intentando zafarse de las cuerdas que lo tenían atado.

Aquella extraña mujer, al notar como el chico trataba de escapar agarro a Sky por el cuello, imposibilitando que ella pueda respirar. - Debes estar sorprendida, el hombre en quien confiabas, te estuvo engañando todo este tiempo, oculto el hecho de ser un dragón. Tú enemigo mortal a quien tu familia por generaciones ha estado cazando.

- ¡Detente! - grito Patrick quien estaba preocupado.

La extraña mujer al notar miedo en los ojos de Patrick la soltó, pero su cara expresaba más odio y una sonrisa sarcástica y malévola.

- No es común en ti preocuparte por los humanos, ¿qué te hizo cambiar?, ¿está niña?

- Ya no soy un dragón - le dijo Patrick mirándola a los ojos amarillos que se oscurecían más.