Capítulo 9

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Todas las personas que se encontraban en los pasillos los quedaban viendo, no era usual que el chico quizá más pervertido de la academia arrastrara de la mano a la única chica de ésta.

Claro que ella no estaba ni enterada, y su mirada estaba muy concentrada en cada detalle que pudiera guardar de él como para prestar atención a los demás

Llegaron a un espacio abierto en el patio, debajo de un árbol, parecía cómodo, así que la llevó hacia allá y se sentó

Ella lo miraba desde arriba, pero de un solo jalón, hizo que se sentara también

No decía nada, se limitaba a disfrutar su dulce y digerir el hecho de que estuvo a punto de saber sobre el tema que tanto le intrigaba, pero le fue negado, otra vez.

-¿Uh?

Lo miró cuando hizo ese sonido, sin embargo, él ya había sacado de la bolsa el suéter y lo puso por encima de ella, midiéndolo

-¿Hombre?- sabía que no era el de ella porque este era más grande y también, porque Kai estaba usando el propio

Comenzaba a acostumbrarse a que le hablara con pocas palabras, pero aún así, se distraía cada vez que escuchaba su voz, por lo que no le respondió.

Un olor llamó su atención

-¿Vainilla?- volvió a preguntar, acercándose descuidadamente a su rostro y causando que la otra esta vez sí reaccionara y solamente asintiera con un sonrojo

¿Por qué se sonroja? ¿Será del chico que le gusta?... Su propio pensamiento lo irritó

Tomó nuevamente el suéter con ambas manos y lo arrojó a una de las ramas lo suficientemente alta como para no alcanzarlo saltando

-¡¿Por qué hiciste eso?!- le gritó

Él por su parte se hizo el desentendido y la ignoró

¡¿Qué le pasa?!

En vista de que su acompañante no se dignaba a prestarle atención, y obviamente mucho menos bajaría el suéter, decidió que ella lo bajaría y después se iría

Se levantó, fue hacia el tronco y comenzó a trepar, importándole poco que llevara falda, después de todo, llevaba un short por debajo

Yuri miraba descaradamente hacia sus piernas, le divertía que pareciese un mono, pero su diversión duró poco al notar que la rama en que se había apoyado estaba próxima a romperse

-Ya...casi- estiraba su mano para poder alcanzar el suéter

Solo escuchó un tronido, y posteriormente se encontraba cayendo, esperaba el impacto contra el suelo, pero nunca llegó.

Y no, no fue porque el otro la ayudara, si no porque su pie había quedado atorado entre otras ramas, para su suerte.

Ahora estaba de cabeza, con la falda hasta arriba y la dignidad por el suelo, pero, con lo que había ido a buscar entre las manos.

Intentaba zafarse, pero por más que se sacudiera, seguía atorada

-Pídemelo- Yuri la veía con una mueca burlesca

No lo haría, quizá su dignidad estaba arruinada ahora, pero aún tenía su orgullo

-Yuri-senpai- fingió imitar la voz de la chica- ¿Me ayudas? - se burlaba de ella- 4 palabras y listo

Tenía razón, era simple y sencillo, 4 palabras que no le costaban nada y la ayudaban mucho

-Seguro que me dolerá- pensó en voz alta, borrando la sonrisa burlona y cambiándola por una mirada curiosa de su acompañante, maldito orgullo

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