Baboo!

Capítulo 36

-Kai- el profesor colocó una mano en su hombro y la sacudió ligeramente

La vista de la chica iba desde Yuri, hasta el chico y después a la mochila, repitió este recorrido por lo menos dos veces seguidas.

-Oh~, ya veo- se acercó a la mochila de la chica y la quiso tomar

Yuri llegó de inmediato y con su brazo puso distancia entre él y Kai

-¿Qué haces aquí?- preguntó en un tono que heló la sangre de la pelinegra, haciendo que retrocediera y se apartara incluso de él

-¡Yuri! Oh, lo siento, seguro que no me conoces por algo más que su ex tutor o un chico más de tu curso- su sonrisa desapareció y fue reemplazada por una mirada filosa- deja que me presente, soy el más devoto amor de Kai

-¿¡Qué mierda estás diciendo!?

-Yasu vino a mi oficina después de clases- aclaró el profesor-, es el acosador de Kai

-¿Acosador?- se llevó una mano al pecho y fingió sentirse afligido- yo preferiría llamarme su guardián

Kai aún no terminaba de procesar el hecho de que él fuese quien le enviaba los mensajes, después de todo, nunca se había mostrado empático hacia ella cuando la ayudó a estudiar, por el contrario, estaba muy segura de que lo desesperaba.

El rostro de Yuri se volvió pálido, como si fuese una hoja de papel. Sintió como si hubiesen vaciado un balde de agua helada en su cabeza y las manos comenzaban a hormiguearle. ¿No era Tooru el acosador de Kai? ¿No había hecho lo que hizo para evitar precisamente esto?

-Mi dulce Kai ha vivido engañada todo este tiempo- rodeó a la chica y con cuidado tomó la mochila nuevamente- te lo dije, no soy como ellos- abrió el cierre y sacó el sobre- yo cumplo mis promesas

El profesor no tenía idea de que Kai había mantenido contacto con su acosador, así que también era una sorpresa para él todo esto, sin embargo, llegados a estas alturas, decidió no interrumpir, pero sí mantenerse alerta por si debía intervenir.

Kai miró a Yuri, los labios del chico se habían secado de golpe y el borde estaba blanquecino, ella puso la mano en el antebrazo del chico para llamar su atención, pero consiguió un efecto adverso, ya que este se sobresaltó y la miró, sin embargo, sentía cómo si sus pupilas no llegaran hasta ella, como si hubiese un muro que no le permitía verla en su totalidad.

-No quería llegar hasta esto- soltó el otro chico- creo que les di mucho tiempo para decirle, pero...- miró a Kai, sus dedos temblaban y también sus dilatadas pupilas, tenía miedo- última oportunidad- suspiró pesado, pues no quería ser otra causa de sufrimiento para ella- Yuri... ¿Qué es el Yaribu?

Tanto Kai como el pelirrosa dirigieron inmediatamente su mirada hasta el sobre en las manos del chico.

¿Esa era la verdad que le contaría? No podía ser tan mala, después de todo, era un club escolar, o algo así. Sin embargo, cuando buscó apoyo en su profesor, este había desviado la mirada y sus ojos expresaban algo que no supo cómo descifrar. El pelirrojo miraba fieramente a Yuri, esperando su respuesta y Yuri... parecía que el alma del chico hubiese desaparecido, no hablaba, ni siquiera parpadeaba, era como si Kai pudiese escuchar desde donde estaba el sonido que hacía su mano al apretar fuertemente el puño.

-Yuri- se acercó a él preocupada por su estado- No te preocup...

-Kai- cortó- no puedo estar aquí, lo siento

-Pero...

-Tienes razón, no debí venir- retiró la mano de Kai con dos dedos y se dio media vuelta