𝐅𝐔𝐂𝐊 𝐘𝐎𝐔 𝐉𝐄𝐎𝐍 | ❝Dije que estaría para ti, no detrás de ti.❞
Crecer es doloroso, enfrentarte a tí mismo y aprender a controlarte puede llegar a ser muy difícil en ocasiones, pero no imposible. La adolescencia no es del todo linda, y JeWei...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
No fue difícil convencer a Hoseok para que me ayudara, y al final terminé inscribiéndome al concurso que estaba organizando la escuela. Estaban pensando en meter clubes, suena mal pero quizás no sea tan aburrido, además, quizás ni si quiera me toque a mí, es mi último año después de todo.
— No será está semana, Hanhi. —informé desde ya para que no empezara a insistir.
— ¡Ay, ¿por qué?! —cuestionó arrugando su frente.
Puse mis ojos en blanco ante su exclamación que de alguna forma me irritó. Las mañanas no son de lo mejor para mí, y aunque nadie tiene la culpa de eso no puedo evitar expresarlo con mi cara de pocos amigos.
— No lo sé, ve a preguntárselo a los docentes. —contesté con pereza, acomodando mi cabello detrás de mi orejas.
— Es una perdida de tiempo, dímelo tú.
— El lunes empezamos, tengo hasta el Jueves para terminar... el viernes debo de entregarlo. —expliqué sin más.
— ¡Estoy tan emocionada! —chilló con una amplia sonrisa plasmada en su rostro.
— ¿Ah sí? Ni siquiera se te nota. —musité sarcástica.
— No necesito tu sarcasmo ahora, no puedes romper mis ilusiones. —señaló, cruzándose de brazos con firmeza en sus palabras.
— ¿Dónde está Hobi? —inquerí mirando a mi alrededor en busca de susodicho.
— ¿Estás enferma? —interrogó de repente, poniendo su mano en mi frente—. No tienes temperatura. —me miró con rareza—. Entonces, ¿por qué llamaste Hobi a Hobi? Tú no lo llamas así, siempre es Hoseok o Jung.
— Me siento rara llamándolo así, y esto lo confirma. Tranquila, no le diré así.
— No es eso, sólo que suena raro viniendo de ti. —me miró con rareza y una mueca extraña.
— El lunes después de clases vendrás a mi casa, después iremos a la de Hoseok. —ordené—. Yo seré quien le dirá que llevar puesto, ¿estás de acuerdo?
— Sí, aunque tengo miedo.
— ¿De qué? —pregunté alzando mis cejas.
— Tu armario tiene muy pocas cosas de colores pastel. —comentó con una mueca.
— ¿Y?
— ¡Agh, olvídalo! —carraspeó con un puchero—. Está bien, yo le diré a Hobi.
— Bien, ahora.-
— ¿¡De verdad él habló contigo!?
Hanhi y yo nos miramos como si estuviéramos pensando lo mismo, mirando a la misma dirección de donde provino aquel animado casi grito. OhYeon estaba con su grupo de amigas, lo normal en ella. Platicando de no sé qué cosa, un chico, seguramente.