Lunarcita

La Profesora de Arte (Parte 4)

Fátima: Luna ¿Estás segura que harás lo que sea con tal de que estemos en la exposición para evitar tu expulsión?

Luna: Por supuesto que sí Miss, haré lo que sea... Solo dígame qué hacer.

Fátima: Me parece bien, entonces el ayudar a reponer el daño que causaste será parte de tu castigo.

Luna: Sí, Miss, ¡me parece justo...! Haré todo lo necesario para reponer el daño.

Fátima: Se me ocurrió una idea para una gran obra de arte en la que se podrán realizar las ocho obras de cada alumno al mismo tiempo y si nos apuramos talvez podamos terminarla antes del viernes.
Aunque tendríamos que empezar desde yá... Pues estamos Lunes y solo tenemos hasta el viernes en la mañana que será la exposición.

Luna: Pero no entiendo ¿cómo puedo yo ayudar?

Fátima: Espérame un momento, iré por unas cosas y luego te lo explico.

Luna: Está bien Miss Fátima... ¡Cuente conmigo para lo que sea!

Fátima salió de la dirección a recojer algunas cosas que necesitaba.

Primero busco una corona de flores muy bonita que había hecho una alumna para una obra de teatro, luego escogió tres  libros de una enciclopedia que tenía con sus pastas de diferentes colores que decían con letras doradas en uno Matemáticas, el otro ciencias y el otro historia del Arte.

Fátima: Siento que me falta algo... No sé qué es...

Luego recorrió con su mirada como buscando algo hasta que vió una bufanda blanca de tela muy suave casi transparente.

Fátima: Sí...! Es justo lo que necesito, le dará un toque especial...

Luego tomó la bufanda blanca y lo guardó en una caja junto con todo lo que había recolectado. Pero antes de salir tomó un cepillo de cabello pensando que le sería muy útil.

Luego se dirigió a la dirección donde Luna estaba esperándola.

Fátima: Bien Luna, tengo todo lo necesario, sígueme.

Luna: Pero... ¿Adónde vamos?

Fátima: Al salón de arte, debemos empezar lo antes posible.

Al salir de dirección Fátima se dirigió a la secretaria que se encontraba en recepción

Fátima: Marcela, por favor, necesito que los ocho alumnos de último año que van a exponer sus artes en la exposición del viernes estén en una hora en el salón de arte, explicarles a sus maestros y que los ayuden para que luego se pongan al día en las clases que pierdan.

Marcela: Enseguida hablaré con los maestros y me aseguraré que los ocho alumnos estén en una hora en el salón de arte.

Fátima: Gracias Marcela.

Fátima y Luna caminaron hacia el salón de arte aunque al caminar Luna sentía algo de incomodidad en su trasero pues el castigo que había recibido fue muy fuerte.

Mientras que Fátima sacó su celular y llamó a Gerardo un amigo fotógrafo, hablando algo de que necesitaba sus servicios de fotografía para hacer un nuevo book de los chicos trabajando en sus pinturas para la exposición, pues las pinturas anteriores no podrían ser presentadas debido a un incidente.

Fátima: Bien, entonces te espero en una hora.
Gracias, nos vemos.

Ya en el salón Fátima sin decir ni una sola palabra preparó los ocho caballetes para pintura que usarían junto con las brochas y todo lo necesario y los ubicó formando un círculo con ellos y dejando un gran espacio en el centro en el cual puso una pequeña alfombra hecha de césped cintético que se encontraba en el salón enrollada en un armario. Luego ubicó un biombo en el centro.