Geek Charming - KookJin

Capítulo 03

—No, no aceptaré menos que el precio de lista. Pues excelente, le enviaré el papeleo de inmediato. Claro, hasta pronto.— ChanYeol se despidió y cortó su llamada. Luego se dirigió a su hijo, que se encontraba muy ocupado arreglándose, mientras veía su reflejo en las puertas de vidrio de uno de los locales en venta del centro comercial.

—Bien, bonito. ¿Qué te parece?— su hijo volteó a verlo— ¿Convertimos el sitio en "Pastelillos Chispa" o "El granero de accesorios"?

—Papá, ¿quién compra sus accesorios en un granero? Es très tragique. Voto por los pastelillos, tienen mucho más glamour.

—Sin duda por eso eres mi mejor asesor— el menor sonrió ante el halago. En ese momento sonó el teléfono de su padre y este leyó el mensaje.

—Ah, ¿sabés qué? Voy a tener que volver a la oficina, hay una junta más tarde— habló apenado.

—Ni hablar. ¡Oh! Préstame a tu equipo de marketing— pidió emocionado.

—¿A mi equipo? ¿Para qué?

—Para el Rey de las Flores, es esencial. Necesito anuncios, folletos, retratos— comenzó a enumerar cada una de sus necesidades.

—Ah, bueno. Por supuesto que no.

—Pero Kim YuGyeom tiene a los equipos de atletismo y al de fútbol haciendo los póster para su campaña — se quejó molesto, viendo como a lo lejos los susodichos repartían volantes a los clientes del centro comercial.

—Sí, y tú tienes ingenio —Jin bufó— Si quieres ganar tienes que ver cómo– su teléfono volvió a sonar.— Eres inteligente. Levántate tirando de las cintas de tus botas— besó a su hijo en la mejilla para después retirarse de ahí a contestar su llamada.

Jin se extrañó ante lo último dicho por su padre. ¿Cintas de las botas? ¿Qué significa? Eh, holaaa, las botas tienen cierres. Lo tiene claro porque él se probó diecisiete pares en una zapatería la otra semana y ninguno de los dieciséis que compró tiene cintas.

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—¿Mala recepción?— la pantalla del teléfono que JungKook tenía en su mano cayó despedazado sobre la vitrina.

—Sí, es que...— intentó explicar el cliente.

—Amigo, en serio. Esto no es reembolsable.

—Uhm, ah...

JungKook suspiró profundamente, miró a ambos lados asegurándose que nadie lo estuviera observando y luego sacó un cupón, extendiéndoselo al chico.

—Te haré un descuento, el 20% en otro teléfono.

El chico tomó el cupón, agradeció por él y salió del local muy contento. JungKook negó divertido con sus cabeza al verlo irse.

Iba a volver la vista a su trabajo cuando a lo lejos observó pasar a cierto pelirrojo cerca de las escaleras eléctricas, su bello rostro era decorado con su particular sonrisa en forma de corazón. JungKook volvió a quedar hipnotizado ante la presencia del omega.

Mientras aún seguía embelesado, vió entrar a su compañero de trabajo y se saludaron con un choque de manos. Sabiendo que su turno había acabado, tomó su chaqueta y se retiró de ahí, siempre viendo embobado en la dirección por la que el omega se había ido.

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Mientras tanto, cerca de la fuente del centro comercial, se encontraba conversando un grupo de amigos.

—Es piel importada— SeokJin sonrió y les mostró su nuevo bolso.

—¿Importada de dónde?