×Capítulo Veintitrés×

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£TalktoMe£

  Rubius

Sentí una presión en los pulmones que me hizo abrir los ojos de repente y respirar de manera desesperada. Apreté las sábanas en las que estoy recostado, por alguna razón me siento asustado...

  Algo se movió en la oscuridad delante de mi. Rápidamente coloqué mis espalda en la cabezera de la cama.

  –Soy yo –dijo el hombre de brillantes ojos violetas y rostro extrañamente perfecto –. Despertaste.

  –Vegetta –dije con nerviosismo –. ¿Qué sucedió?

  El rodeo la cama y el colchón se hundió cuando se recostó a mí lado. Tomó mi mano y se la llevó a sus labios.

  –No lo sé. Llegaste inconsciente aquí, ¿no lo recuerdas?

  –¿Llegué?, ¿a dónde fui? –dije bastante confundido.

  «Rayos, hoy me tenía que ver con Mangel»

  –¿Qué hora es? –dije exaltado –. Seguro me quedé dormido y olvidé la cita con Mangel.

  Solté su mano y comencé a arrimar mi cuerpo fuera de la cama. Era un encuentro muy especial, ¿como pude haberlo olvidado? Aunque, en realidad no recuerdo en qué momento llegué a esta habitación, además dormí bien no entiendo como pasó ésto.

  –Mis zapatos –dije buscando en el piso del lugar.

  –Rubius... –dijo Vegetta que me está mirado con una expresion preocupada desde la cama.

  –Deben estar por aquí –dije mirando debajo de la cama.

  Sentí unos brazos rodeando mi cintura desde atrás.

  –¿Qué haces?

  –¿En serio no recuerdas nada? –dijo sobre mi cuello.

  –¿Recordar que?

  Hizo que quedáramos frente a frente y coloco sus manos a los costados de mi rostro.

  –¿Te sientes mal o te duele algo?

  –Vegetta, me estás asustando. Por qué me miras así –dije quitando con delicadeza apartando sus manos.

  –Ese maldito... –susurro para sí mismo –. Escuchame, antes de hacer cualquier cosa quiero que mantengas la calma –yo asentí confundido–. Ésta mañana saliste a la cita con Mangel. Los hombres del Controlador trataron de llevarte pero no lo lograron, unos minutos después llegaste aquí inconsciente.

  Me quede en silencio, procesando cada palabra que salió de su boca. Aunque no quiera creo en todo lo que me dice, después de todo esta enamorado de mi y no sería capaz de mentirme.

  «Así que por eso estoy tan agitado. ¿Pero por que no puedo recordar nada? ». De repente la imagen de Mangel vino a mi cabeza, me levante del suelo y camine hacia la puerta pero me sentí mareado y un poco sin fuerzas.

  –Hey, espera...

  –Mangel. Necesito verlo y saber que está bien –dije tratando de abrir la cerradura de la puerta mientras que Vegetta me trata de impedirlo –. Necesito que este bien.

  –Rubius –dijo sujetando mi cuerpo con sus brazos –. Mírame. Mangel está aquí, también llegó inconsciente pero está estable, está a salvo.

  –Pues entonces quiero ir a verlo –dije.

  –No, necesitas recuperarte un poco más. Después te llevaré con él –dijo impidiendo mi huida.

  –Pero...

  –Él estará bien. Lo prometo, está siendo atendido por uno de los mejores doctores de la ciudad –me dirigió de nuevo a la cama y me recostó, después él hizo lo mismo –. Descansa un poco más.

  Sin ningún tipo de lucha hice lo que me pidió.

  –Confío en que lo cuidaras como lo haces conmigo –dije en voz baja cubriendo nuestros cuerpos con una manta.

  Sentí como sonrió y me dio un cariñoso beso la mejilla. Se acercó más a mí y pasó un brazo en mi nuca en forma de almohada.

  Sólo con él puedo estar tranquilo, puedo confiar en que soy lo más importante para él y en que haría cualquier cosa para mantenerme a salvo y feliz.

  –Te quiero...




  Mini capítulo Rubegetta🦄
 

DarkAngelsWhere stories live. Discover now