•Nota Seis•

1.6K 275 117
                                    

"Di que si"


EUM había llegado más tarde de lo habitual a la junta mundial de ese día, con auriculares puestos se dispuso a ignorar a todo aquel que le hablara apenas entró. Sus ojeras delataban que no había dormido en lo que parecían ser días, sus ojos grises mas apagados de lo usual y sus cejas bloqueadas en un entrecejo fruncido.

La razón por la que EUM se veía tan...demacrado era simple. Por fin había empezado su trabajo oficial como nación. Revisar millones de papeles y quejas de los ciudadanos, tener mas de dos entrevistas al día de como pensaba manejar el país la economía y cosas así, conferencias de largas horas sobre como eran cada uno de los tratados con los países y como debía hablar con los ciudadanos. Ya que EUM no era una representación del gobierno, era una representación del país y su papel era ese, hablar por el pueblo mexicano.

En ese momento se reproducía «I'm not the only one» y de sus labios salían pequeñas oraciones de vez en cuando. Se dejó caer en la silla, cubriendo su cabeza con los brazos y soltando un silencioso lloriqueo cuando su espalda hizo "¡crarck!". EUM se quería matar o que lo mataran, era la misma de todas maneras.

—Empezemos con la Junta de hoy—. ONU sonrió a las Naciones y suspirando comenzo a hablar sobre los temas comunes.

Tal y como que la corrupción en USA se estaba elevando, o como que los feminicidios crecían en México, o como la situación en Venezuela estaba mejorando. Tocaron temas serios como los homicidios, la contaminación, la corrupción y las amenazas contra la paz. Señalando principalmente a USA/Rusia/Corea del Norte. Todo eso duro una hora, aunque si sumamos todas las interrupciones de los latinos, las peleas de USA, las quejas de Francia, los bullicioso de Australia y las múltiples distracciones del continente asiático, la cuanta total de tiempo sería de 2 horas con 23 minutos.

—Muy bien, ¿Alguien se ofrece para hacer la Junta en su país? —. Si bien la sede de la ONU estaba en Estados Unidos, de vez en cuando para ONU era buenl cambiar de locación ya que le favorecía en saber cómo estaban los paises de las zonas cercanas más a fondo.

USA que había fallado en todos sus intentos de molestar a EUM (solo porque estaba aburrido y molestar al pequeño mexicano era divertido) sonrió con gloria y diversión elevando la mano. —EUM quiere—. La atención fue dirigida al inmóvil cuerpo del mexicano menor, mientras este parecía estar muerto.

—¿EUM, es cierto? —. ONU elevó una ceja, pensar que el latino introvertido y antisocial quería a los demás en su país de cierta manera le lleno de orgullo. ONU se sentía como una madre pajaro orgullosa de ver a su pequeño polluelo volar con éxito por primera ver.

EUM no respondió, ni siquiera se movió, se quedó en esa posición en silencio. Mientras sus audífonos reproducían a todo lo que daba «Perdón» de las Ha-Ash. El mexicano estaba dormido tan profundo que no había escuchado nada, aunque tampoco es como si pudiera escuchar algo.

Canadá que estaba a su lado, le pellizco fuertemente el costados, llevaba rato tratando de levantarlo con suaves zarandeandas disimuladas, pero nada lo levantaba.

—¡Eh pu-—. Se quedó corto cuando lo primero que vio fue la cara confundida de ONU. Se giro rápido a su derecha, Canadá le miraba nervioso tratando e señalar con la cabeza a la Organización. EUM entendió y en corto se quito los audífonos de un Jalón. —No escuche, ¿Puede repetirlo señor ONU? —. ONU no iba a admitir que le gustaba como EUM si le tenía respetó, no como los demás que ahora se pasaban el hecho de que era una autoridad por los huevos.

—USA comentó que querías que la siguiente Junta se realizará en tu territorio. Creo que ningún país estaría en contra de eso—. Le sonríe y eso hace que EUM se sienta culpable y no pueda decir "no".

EUMWhere stories live. Discover now