Secretos... había tantos de ellos.
¿Y como decirlos? En una sociedad, machista, xenofoba, racista y homofobica es
o era imposible de hacer.
Una historia dada en el contexto de 1960, una historia de amor.
⇝100% original.
⇝Prohibida copias y adap...
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― ¡Por dios Nayeon, no cierres lo malditos ojos! ― tomaste el volante tratando de estabilizar el auto.
La calle estaba mas transitada de lo normal lo cual hizo que la coreana entrara en pánico.
El auto se dirigía hacía el señor Chae quien siempre se sentaba en la orilla de la acera para ver a las jovencitas pasar, un degenerado.
Si lo mataba no perdía nada la sociedad, pero no dejaría que su novia se ensucie las manos con un viejo decrépito como él.
― ¡No me grites! ― soltó el volante y llevo sus manos a las cabezas.
______ había manejado desde los dieciséis años, lo cual hacía que tuviera seis años mas de experiencia que su novia.
El auto se estabilizó y con las instrucciones que la chica le daba Nayeon pudo detener el vehículo.
― Deberían dejarle eso a alguien mas. ― el desagradable hombre se levantó de su silla y camino para acercarce mas a donde estaban. ― En mis épocas las mujeres no pensarían tocar un auto.
― Ya lo dijo, señor, en sus épocas. ― espetó Nayeon cuando se bajo del asiento del conductor para pasarse al de copiloto un tanto frustrada por fallar en su primer intento.
― Mhmm....
― Mhmm ¿Qué? ― levantó la ceja ______. ― mire señor Chae, somos vecinos y le ruego que mantengamos la paz entre nosotros.
― Lo siento, niña. Estaba hablando con la coreana no contigo.
― Y yo pensaba que estaba hablando con un hombre no un estúpido niño de once años. ― _____ paso a su lado pateando el bastón que sostenía "sin querer".
Una vez que cambiaron de asiento y el viejo estaba casi en el suelo se marcharon de allí.
[...]
______ manejó hasta una zona apartada, quería pasar la tarde con su novia en un lugar a solas.
En casa estaban Morgan y Sam, no quiere decir que la molestaban porque no lo hacían, pero ellas si tomaban un poco de tiempo que a las jóvenes mujeres le gustaría pasar en pareja.
― Pensaba que esta semana podríamos pasar en mi casa. ― comenzó a hablar Nayeon mientras miraba las oleadas.
La casa de Nayeon era el lugar perfecto para pasar juntas, Sam y Morgan se quedaban en la casa de la empresaría mientras ellas disfrutaban de la compañía de cada una.
