Más allá de la novela

Realmente estás en Yunmeng...(Lan SiZhui x Jin Ling. Parte 2. Explícito)

Advertencia:
Como el título lo indica, este capítulo es muy explícito, se recomienda discreción.
Es la continuación de "Realmente estás en Yunmeng", es necesario que lea este capítulo para entender cómo llegaron hasta aquí.
Créditos de la portada a quien corresponda.
Dicho esto, disfrute la lectura.

Jin Ling tomó un suspiro y condujo a A-Yuan a sus aposentos.

La habitación de Jin Ling en el muelle de loto, pese a no estar en la torre carpa, era bastante ostentosa; el tapete de bambú era fino y suave al tacto, las paredes estaban adornadas con lotos hechos de jade blanco y pinturas en pergamino de hermosos paisajes de las cuatro sectas, tal vez la única pintura que podía considerarse anti-estética es la correspondiente a la secta Nie; la madera del cuarto desprendía un suave olor a caoba; el quemador de incienso tenía la forma de una peonia dorada, propia de la secta Lanling Jin; las túnicas que colgaban de un armario con tallado de peonias parecían estar hechas de la tela más fina que pudiera existir; sumado a eso había varias estatuillas adornadas con jade y laminas de oro; para terminar, la cama era amplia, suave y las cortinas combinaban a la perfección el color violeta que terminaba en un degradado dorado.

-Esta es mi habitación en Yunmeng...- comentó A-Ling, estaba muy nervioso. A forma de "escape" se dirigió a encender la pequeña linterna sobre la mesa central.

Lan SiZhui entró a la habitación y quedó sorprendido por tantos detalles, no pudo evitar dar una vuelta para observar las delicadas piezas y los bellos adornos.

-Es pequeña comparada a mis aposentos de la torre carpa- comentó A-Ling que mantenía una distancia "segura" de Lan SiZhui.

¿Pequeña?, vaya...aquí cabían perfectamente diez manzanitas y tal vez cinco hadas.

Lan SiZhui solo sonrió. Sin perder tiempo caminó hacia Jin Ling pero este no pudo evitar dar un pequeño paso hacia atrás, su rostro estaba lleno de vergüenza y adornado por un ligero rubor.

SiZhui se detuvo en seco –A-Ling...entiendo si no quieres...no quiero obligarte a...- no terminó, lo interrumpieron.

-¡NO ES ESO!- gritó Jin Ling con su rostro completamente ruborizado.

Claro que no era eso, él también había estado esperando estar a solas con Lan SiZhui de esta manera, pero...¿miedo?, no no no, el gran heredero de la secta Lanling Jin no podía tener miedo. El miedo es para los débiles, si señor.

-¡UGH!- Jin Ling dio un pisotón y caminó molesto hacia Lan SiZhui. Lo tomó de forma impetuosa del dobladillo de su cuello y lo jaló hacia abajo besarlo.

El beso fue torpe, dolió. Jin Ling chocó sus dientes contra los labios de SiZhui por osado, mostrando su gran habilidad de seducción. (sarcasmo)

Lan SiZhui fue aturdido por el ligero golpe cuando de pronto sintió como esos labios melocotón se abrían, buscando profundizar el beso.

Perdido en la sensación, Lan SiZhui tomó a Jin Ling de la cintura y de la nuca para cooperar con su beso, abriendo sus labios, succionando y mordisqueando, como si se tratara de una fruta confitada.

-Mmm- Jin Ling protestó, SiZhui siempre lo besaba de forma agresiva y dominante, siempre lo dejaba sin aliento y siempre lo estimulaba hasta que sus rodillas se debilitaban –ah, ¡A-Yuan!- tomó una bocana de aire –despacio...- exigió. Su rostro mostraba vergüenza por sus súplicas , además la debilidad de sus rodillas, era humillante. Lan SIZhui era el único que podía hacerle esto.

Lan SiZhui no pudo evitar soltar una pequeña risa, empezó a besar las mejillas de A-Ling, su nariz, su frente –A-Ling, eres demasiado adorable...- mordió el lóbulo de esa fina oreja. Sintió como la persona en sus brazos temblaba y como su peso caía y se apoyaba en el brazo que rodeaba su cintura.