Primera vez (Song Lan x Xiao XingChen parte 3)

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Advertencia.
Este capítulo contiene violencia y situaciones adultas (érotico).
Se recomienda discreción.
La letra en cursiva son pensamientos.
Dicho esto, disfrute la lectura.
*Editado.


Llegó la noche al templo, la luna estaba en cuarto menguante esta vez no daba suficiente luz para pintar de azul la superficie podría decirse que la noche era ligeramente oscura.

Los grillos cantaban y algunas lechuzas susurraban mientras se posaban de árbol en árbol.

La cama de Xiao XingChen ya estaba preparada en la habitación de Song Lan.

La gran mayoría de alumnos y monjes ya estaban dormidos a excepción de aquellos que querían mejorar sus estudios y algunos monjes que estaban leyendo "libros Budistas" y/o libros prohibidos, de esos que contienen personas desnudas haciendo cosas incidentes.

Xiao XingChen no era tonto, sabía que durante todo el viaje Song Lan se había estado conteniendo, sabía que esa noche no iban a hablar sobre el incendio o el asesinato del clan.

Desde hace mucho tiempo había pensado que esto pasaría tarde o temprano incluso le sorprendió que estaba pasando "tarde". Pensó en irse, huir, pero, al recordar como Song Lan lo cuidó, limpió y curó durante el incidente del devorador selectivo, Xiao sentía que le debía algo, así que, ¿por qué no pagarlo ahora?

Mientras Xiao XingChen esperaba a Song Lan, le dio un vistazo a la habitación.

Esta habitación era digna de un monje o un erudito, era insípida, el suelo tenía algunos tapetes pero no estaban hechos de fino bambú como los de la casa de aquella doncella, muy a penas llegaban a la misma calidad que los tapetes de las posadas.

La cama no tenía nada de especial, las sábanas eran negras, la única ventaja es que estaba colocada justo al lado de un amplio ventanal circular sin cortinas lo que permitía observar el cielo nocturno cuando uno se acostaba.

Había una mesa en medio de la habitación con un juego de pinceles para practicar caligrafía y un bloque de tinta.

Detrás de la mesa, pegado a la pared se encontraba un librero lleno de pergaminos hasta el tope, algunas velas gastadas estaban colocadas alrededor del cuarto para iluminarlo y una que otra lámpara de aceite por ahí sin ningún tipo de adorno, no solo se veía más como el cuarto de un estudioso.

Pese a lo insípido que era a Xiao le transmitía un aire acogedor, incluso pacífico.

La cama de Xiao consistía en un futón colocado justo al lado de la cama de Song Lan con unas sábanas blancas

¿Qué no podían dejar de usar blanco y negro respectivamente ni cuando dormían?

Xiao estaba muy nervioso, sus manos sudaban, quería desaparecer, pero no podía hacer nada. Él había aceptado las condiciones que Song Lan le impuso para viajar y Xiao contestó que aceptaría las consecuencias, no resistiría y permitiría que Song Lan hiciera lo que quisiera con él.

Muy en su interior esperaba que el plan de Song Lan esa noche fuera desvelare compartiendo poemas o técnicas de cultivo o compartiendo recetas de cocina, ¡lo que fuera!

Después de un rato, Xiao escuchó cómo la puerta detrás de él se abría y se cerraba, era Song Lan, pero Xiao estaba tan nervioso que siguió de espaldas.

De pronto Xiao sintió como lo abrazaron por la espalda.

Song Lan -Xiao, ¿tienes miedo de que pueda hacerte algo?- preguntó mientras apoyaba su barbilla sobre el hombro de Xiao, permitiendo que su aliento rozara ligeramente su cuello.

Más allá de la novelaWhere stories live. Discover now