Me estaba duchando en su casa, resultó que estaba sólo, ya que su madre fue de vacaciones con sus tías y no sabría cuando volvería así que estaba viviendo sólo por un tiempo, eso me ponía más nervioso, una vez terminé y me seque noté un cambio de ropa en el mueble junto a la puerta, me lo puse pero me avergoncé de inmediato al terminar.
- Oye Tsukishima - lo miré sonrojado por estar sin camiseta tirado en la cama - se caen - le mostré los pantalones desviando la mirada.
El bajó su playera terminando de cambiarse y se rió un poco dándose la vuelta.
- ¿Qué quieres que haga? Es lo más chico que tengo - lo miró de pies a cabeza sin que el otro lo notará, estaba seguro que no tenía nada puesto más que su playera, debía contenerse mucho está noche - puedes quedarte así no pasa nada, vamos a cenar.
- Bien - susurró sonrojado.
"No seas tan lindo" pensó desviando la mirada el rubio.
Bajamos y la cena ya estaba lista, así que la terminamos rápido porque ya estábamos con mucho sueño.
Al llegar a su habitación de nuevo nos lavamos los dientes, yo con un cepillo nuevo que tenía, para después ir a la cama, era algo estrecha pero como era pequeño no había problema y me acomodaba fácilmente, hubiera pensado mucho de no ser por el cansancio y caí dormido de inmediato dándole la espalda.
Al despertar miré mi reloj marcando las seis, iba a llegar tarde, pero recordé que no dormí en casa, la escuela quedaba a diez minutos, podía dormir hasta las 7.30, era un sueño, me volví a dormir acurrucando mi espalda contra la calidez y escuché un pequeño gruñido para después sentir su mano en mi cintura.
- Deja de empujar idiota - escuché su voz adormilada y áspera haciéndome sonrojar demasiado.
Estaba acurrucandome contra su pecho mientras usaba su brazo como almohada y con su otra mano sujetaba mi cintura, lo peor/mejor es que sentía su miembro no erecto claro contra mi trasero, deslizó su mano abrazándome pero levantó mi playera, agradecía que las sábanas cubrieran mi miembro y parte de mis piernas pues me enrede en las sábanas por la noche.
Pov Tsukishima.
Si resistirme anoche fue difícil ahora era imposible, al abrir mis ojos lo miré no sólo apegado a mi, sentía su trasero sobre mi pene y tenía mi mano dentro de la playera levantandola dejando a la vista su cintura y muslos, por suerte para el su miembro estaba cubierto por las sábanas, empezó a temblar así que estaba despierto, algo nervioso me hice el dormido sin parar de mirarlo, intentó moverse pero se quedó quieto y tomó mi mano que estaba en su abdomen con las dos suyas colocándola frente a el, obviamente no le iba a gustar que lo tocara, eso me molestaba un poco, pero me sonrojé cuando se despegó de mi mostrando su trasero al colocarse boca abajo y abrazar mi brazo que lo rodeaba, cerré los ojos tratando de no reaccionar pero no pude, el volvió a dormir pues aún quedaba tiempo pero yo sin poder moverme sólo intentaba no atacarlo, ¿por qué no lo notas de una vez idiota?.
