Había notado algo, más bien varias personas si no es que todas lo habían hecho con respecto a Hinata, primero hay que señalar tres cosas: número uno, Tsukishima es un chico reservado e inteligente, muy bueno para analizar y actuar casual cuando en realidad tiene un plan desde un inicio que le da un margen de error casi nulo, número dos, siempre ha existido algo así como un sexto sentido masculino, en el que sabemos cuando no acercarnos a la pareja de alguien porque sentimos que ya la quiere alguien más, no como un objeto claro, sino que no debes meterte con la de alguien más, es simple, el que no cumple no puede considerarse hombre, y tercera...
- ¿Dices que puedo ser como Bokuto-san sin me pongo sus protectores? - susurró conspirando con Lev.
- Eso me dijo Kenma - afirmó.
- Hay que hacerlo - dijeron decididos mirándolo parado unos metros más lejos.
- Lo voy a distraer Hinata, tu tienes que bajarselas, entonces yo voy a jalar sus manos al mismo tiempo, lo hacemos caer, se las quitamos y huimos - explicó su brillante plan.
- Eres un genio Lev - sonrió.
- ¿Son idiotas? - suspiró Tsukishima.
- ¿Qué dijiste? - empezaron a quejarse pero sólo los miró unos segundos y desvió la mirada sin interés.
Creo que con eso la tercera se explicaba sola.
- Akaashi hazme pases - me llamó Bokuto-san.
- Tenemos toda la noche tranquilo - dejó su termo en el suelo dirigiéndose a la red tranquilo.
- Lev ya deja de perder el tiempo y ven a bloquear - le gritó Kuroo.
Empezamos a jugar y como siempre el se burlaba cada vez que lo bloqueaba o viceversa cuando el lo esquivaba.
- Te estas haciendo bueno Chibi - sonrió Kuroo.
- ¿En serio? - se emocionó - me seguiré esforzando.
- Buen niño - lo abrazó Bokuto.
- ¿Niño? - sonrió Tsukishima - bueno, si parece uno.
- Repitelo si te atreves - se puso en "posición de pelea".
- Niño - le dijo con simpleza haciendo que se crispe molesto.
- Maldito ya verás - trató de alcanzarlo pero el lo sujetaba de la frente, por la obvia diferencia de tamaño ni siquiera se acercaba a tocarlo.
- No vayas a caerte - lo soltó de golpe haciéndolo perder el equilibrio.
El pequeño sólo gruñó cruzandose de brazos sentado en el suelo sonrojado.
- Ya es hora de irnos, andando - le dio la mano y este la tomó desviando la mirada refunfuñando - nos vamos ya - aviso y todos se despidieron asintiendo o con la mano.
Segundos después la animada voz de Hinata se escuchaba explicándole con sonidos a Tsukishima como fue su día mientras el de lentes sólo caminaba tranquilo como si no le prestará atención.
- Ese Tsuki no sabe admitir muchas cosas - sonrió Kuroo.
- Supongo que en cierto punto es bueno que no lo presione, apenas y se da cuenta de como se siente inconscientemente - suspiré.
- Yo creo que sólo hace falta tiempo, un poco de celos también podrían funcionar - sonrió Bokuto.
- ¿Y por eso lo abrazaste? - me crucé de brazos.
- No seas celoso Akaashi - lo abrazó.
- Quiero a mi Kenma - suspiró Kuroo mirandolos.
- Yaku-san - dijo Lev sentándose de pronto pues había estado tirado en el suelo agotado.
Sólo espero que salgan bien las cosas.
