Al día siguiente, yo me estaba estirando como era de costumbre todas las mañanas antes de que Kyojuro despertase, verlo dormir antes de irme de la habitación era una de las cosas más hermosas de este mundo, duerme como un bebé.
Mientras me estiraba, no podía sacarme de la cabeza verlo dormir tan plácidamente abrazando una almohada, arropado hasta el cuello y algo despeinado, aún así se veía muy hermoso.
En este día no había tenido pensamientos negativos hasta el momento, y trataba de no tenerlos, me parecía algo absurdo pero aquellos malos presentimientos eran tan reales, cosa que me preocupaba mucho y...
Joder __________, deja de pensar negativamente al menos un jodido día, disfruta de la vida que tienes junto a tu futuro esposo ahora. Si se presenta una batalla fuerte... debo protegerlo, es todo, nada saldrá mal, nos casaremos y estaremos bien
Me estiré una vez más y dejé escapar un suspiro, así relajándome un poco, tratando de expulsar pensamientos negativos de mi mente.
Luego de haber hecho mi rutina de cada mañana, cada mañana aveces, y no por que sea floja, aveces se me olvida. Fui a la cocina y bebí agua, luego sentí los brazos de Kyojuro rodearme desde atrás, poniendo sus manos sobre mi vientre
- Buenos días Kyojuro- puse mis manos sobre la suya, e incliné mi cabeza hacia atrás apoyandola en su pecho
Rengoku: Buenos días __________- el besó mi frente y luego volvió a mirar hacia la nada
- ¿Como dormiste?- me giré para abrazarlo mejor
Rengoku: Bien ¿Y tú?- correspondió a mi abrazo
Luego de nuestra charla y de haber desayunado, decidimos que unos diez minutos después iríamos a hacer un entrenamiento.
Luego de haber pasado esos diez minutos, me encontraba frente a el, era un entrenamiento cuerpo a cuerpo para ciertas ocasiones.
- ¿Listo?- lo miré
Rengoku: ¡Listo!- contestó con entusiasmo
Me acerqué a el, tratando de golpearlo pero claramente no muy fuerte, el solo frenaba mis golpes o me esquivaba, pero yo estaba tratando de crear una distracción
Si puedo hacerlo caer ahora que está enfocado en mis manos...
Moví una pierna tratando de tumbarlo pero el retrocedió inesperadamente
Rengoku: estoy viendo absolutamente todo lo que haces. No estaba enfocado solo en tus manos- me dio una sonrisa
- Bien... ahora seré un poco más brusca- dije inclinando mi cabeza
El solo se preparó, desde donde estaba y yo fui corriendo hacia el, estaba justamente al lado de la pared, o más bien la cerca que rodeaba esta finca, así que apoyé mi pie ahí luego de haber dado un salto, impulsandome y así podiendo ponerme sobre sus hombros sin dificultad
- Te recomendaría no mover tus manos, cielo~...- le susurre y al estar sentada sobre sus hombros, pude mover mis pies hasta sus manos donde las inmovilicé
Rengoku: ¡Ja! ¡Parece que me has ganado!- habló con el mismo ánimo de siempre
- Eso parece- afloje la presión de mis pies contra sus antebrazos
Lo cual fue un error
El tomó mis ambos pies, quitando solo una pierna de su hombro y luego me hizo quedar frente a el, en un solo movimiento
Rengoku: No puedes hacer eso. Sabes que tu enemigo no lo pensará dos veces para matarte. Tienes suerte de tener la Katana pero en caso de que la pierdas, puedes usar estas técnicas lo sabes. Pero debes fijarte bien en lo que haces- me puso en el suelo delicadas y se sentó frente a mi
- Está bien, error mío- susurré y me acosté en el césped
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Juntos Hasta El Final - Kyojuro Rengoku
Fanfiction《Historia basada en el manga de Kimetsu no Yaiba》
