El Camino De Un Padre

Capitulo 8: "Shinsou"

Gracias por leer 😣✨
Ahora disfruten xd

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Shinsou estaba asustado.

Eso fue un eufemismo.

Estaba oscuro por todas partes. No había un indicio de luz en ningún lugar que pudiera ver.

Recordaba que su cuerpo se negaba a escucharlo. Recordó que Midoriya lo vio con el extraño hombre. Recordó a su hermano mayor gritándole su nombre, mientras se lanzaba sobre ellos.

Recordó que su visión se estaba volviendo negra.

Se movió incómodo. Podía sentir las cadenas frías alrededor de su muñeca, chocando entre sí con cada movimiento que hacía. El espeluznante sonido metálico resonó por toda la habitación, haciendo eco a su alrededor.

¿Por qué estaba tan oscuro?

Shinsou agarró la pequeña y fría pluma de metal que colgaba de una cadena alrededor de su cuello. Midoriya se lo había regalado cuando celebraron sus cumpleaños el día justo entre ambos, unos días después de que lo encerraron en el armario. Recordaba a Midoriya encorvado sobre su escritorio, tranquilamente diciéndole que durmiera mientras sostenía un pequeño cuchillo en una mano y un encendedor de cocina en la otra.

"Las plumas provienen de las aves. No están abrumadas por las leyes de la gravedad. Encontraremos nuestro lugar, nuestra libertad en este mundo lleno de discriminación algún día. Se te permite volar más alto que otras personas. No lo hagas alguna vez dejes que otras personas te pesen, y nunca pierdas la esperanza, Toshi. Dije que te salvaré cuando ocurra algo. Si no vengo de inmediato, llegaré allí eventualmente. Siempre estaré contigo, Toshi, no importa dónde estés ".

Midoriya había dicho, cuando abrochó cuidadosamente la cadena de metal alrededor del cuello de Shinsou. Fue luz. A Shinsou le gustó cómo brillaba a la luz. Siempre lo mantenía escondido debajo de la camisa cuando iba a la escuela, temeroso de que los otros niños pudieran tomarlo. Siempre le gustó la sensación del frío metal presionando contra su pecho cuando intenta acurrucarse en una pelota en una esquina de la sala de preescolar para mantenerse lo más alejado posible de los otros niños. Fue reconfortante.

Esta vez, no fue diferente. El frío metal de la pluma y el collar se sentía diferente de las cadenas de restricción que le rodeaban las muñecas. Intentó relajar su respiración.

Izu vendrá por mí. Solo tengo que esperar.

Pero sabía que no sería tan simple. Sabía que Midoriya era solo un adolescente. Un niño obligado a crecer demasiado rápido. Sabía que no estaba lidiando con matones o maestros sesgados. Estas personas sabían lo que estaban haciendo. Mataron personas. Lo vio matar a alguien. Eran villanos.

Sabía que no sería tan simple como el momento en que estaba encerrado en el oscuro y premonitorio armario de metal.

El quería salir. Quería ir a casa, a la única persona en todo el planeta que se preocupaba por él y lo amaba.

Recordó la expresión de Midoriya mientras se abalanzaba sobre ellos. Sus ojos estaban llenos de ira, desesperación, culpa, tristeza, preocupación.