Rechazada Por El Alpha

|CAPITULO 23|

Lo alcanzo en el pie de la escalera y se con tan solo ver los músculos de su espalda que esta tenso.

Entramos a su cuarto sin decirnos una palabra. Ya tengo familiaridad con la habitación ya que no es la primera vez que paso la noche aquí pero si es la primera vez que el ambiente esta a reventar de tensión.

Veo a Edrick entrar en su baño y al poco tiempo escucho caer el agua de la regadera, me siento en la cama y me quito los zapatos empapados.

- Puedes bañarte tu primero si quieres.- Dice a mis espaldas y me giro a verlo -.

Esta recargado en el marco de la puerta con los brazos cruzados pero lo que hace que el calor me invade es que no lleva camiseta, tan solo sus pantalones y tengo una vista perfecta de sus abdominales.

Aparto mi vista de sus glorioso cuerpo y me fuerzo a mirarlo a los ojos.

- Eso me gustaría.- Le sonrió levemente -. Gracias.

Me levanto de la cama y camino al baño. Él se hace a un lado para dejarme pasar y se aleja de la puerta. La cierro suavemente y me recargo en la puerta soltando un gran suspiro cubriendome la cara con las manos.

Me trato de tranquilizar y quito las manos de mi cara. Al entrar ni siquiera le había prestado atención al baño. Es de tonos negro y café con un enorme lavabo/tocador a un costado de la entrada y frente a este la regadera con márgenes transparentes y al fondo una bañera con un par de escalones.

Comienzo a despojarme de mi ropa mojada y siento como si me hubiera quitado cinco kilos de encima.

Entro a la regadera luego de asegurarme que el agua estaba a una buena temperatura.

Dejó que el agua recorra y relaje cada centímetro de mi cuerpo tratando de olvidarme que en unos momentos probablemente este discutiendo con mi mate.

No puedo creer que haya accedido a hablar sobre el tema. Sobre un tema tan privado para mi. Y lo peor es que no puedo creer que Edrick quiera que hablemos sobre cuando perdí mi virginidad.

Vaya. Cuando perdí mi virginidad. Tenia tanto que no pensaba en ese día. Que no dejaba que los detalles azotaran mi mente pero ahora están de vuelta.

Trato de concentrarme en enjabonar mi cabello pero los recuerdos no dejan de asaltarme. Quiera o no es algo que jamás olvidaré.

<< FLASHBACK >>

- ¿A donde se supone que me llevas?.- Le pregunto a este hombre tan loco mientras jala mi mano cuesta arriba -.
- Solo ten paciencia Issie, ya lo veras.- Contesta a mi pregunta y me sonríe -.

Seguimos caminando por unos cuantos minutos mas hasta que a lo lejos antes de llegar a la cima de la colina diviso una pequeña cabaña.

- ¿Por que me trajiste aquí?.- Pregunto con una sonrisa en mi rostro -.
- Es uno de mis lugares favoritos en el mundo y quería que lo vieras, linda.

Terminamos de subir la colina y lo que mis ojos ven es algo maravilloso. Estamos presenciando el mas bello atardecer. Los colores se mezclan en el horizonte y es algo fascinante.

- Es bellísimo.- Digo anonadada ante lo que mis ojos están presenciando y miro al maravilloso chico a mi lado quien ya me veía con una hermosa sonrisa de oreja a oreja -.
- Sabia que te gustaría.- Sus ojos verdes brillan mas que de costumbre-.

Nos sentamos en el césped a admirar el panorama mientras yo recargo mi cabeza en su hombro y el rodea mis cintura con su brazo.

Seguimos así hasta que el sol por fin desaparece del todo y nos quedamos en una oscuridad serena.