Capítulo: 05.

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—“Al amor le excita el desenfreno; a la lujuria le excita la pureza”— mis dedos pasan a la siguiente página pero cierro de golpe el libro cuando siento un brazo rodear mi cuello.

El aroma al perfume de SeHun inunda mi nariz y sonrío, —No sabía que ya habías llegado.

—¿Que hay tan interesante en ese libro que a pesar de estar sentado mirándote no me volteaste a ver?— cuestiona molesto y quitándome el libro de la mano comienza a hojearlo.

SeHun rueda los ojos, —“Del amor y la lujuria”, ¿Que tonterías lees?

—No son tonterías, es interesante— le digo quitándole el libro y lo dejo en su lugar.

Él solo suspira pesadamente, —Vamos a buscar lo que necesitaré para mi examen, para eso te pedí que vinieras, no para leer tus libros absurdos.

Lo observo alejarse a otro estante y suspiro profundo antes de ir detrás suyo, la época de exámenes siempre ha sido difícil para él y por eso me encargo de ayudarle a que aprenda lo que vendrá ya que soy un año mayor se que cosas pueden venir en sus exámenes próximos; señalando le cada parte que debe leer me detengo a mirar hacia la entrada, allí, justo ahí está parado aquel muchacho peligris que fue a comprar a la florería, sin quererlo me quedo mirándolo mucho tiempo hasta que una chica de cabellos negros llega a su lado dándole un beso en los labios para luego entrar a la biblioteca, rápidamente bajo la mirada hacia los libros de nuevo, «así que asiste a la misma preparatoria que SeHun»

—Rayos— murmura SeHun mirando su celular, —Tengo que irme, te llamaré después, devuelve estos libros a su lugar, ¿si?

Asiento solo moviendo la cabeza y él toma su mochila para irse casi corriendo, es muy rara la ocasión que puedo venir a su escuela y no mucho por no querer venir más bien porque no quisiera incomodarlo, la primera vez vine por mi cuenta se puso totalmente furioso. Tomo todos los libros y con cuidado me encargo de devolverlos a su lugar pero me es imposible no mirar que a unas cuantas mesas se encuentra ese muchacho junto a su novia seguramente también estudiando.

«¿tal vez la flor era para ella?». Regalar flores a tu pareja es un detalle que poco a poco disminuye, muchas parejas hoy en día prefieren obsequios totalmente opuestos a las flores por eso pensar que esa flor fue para ese chica me hace decir que es una afortunada. Yo jamás he recibido ninguna de parte de SeHun.

—¿Debería llevarte unos días?— le pregunto al libro que me encontraba leyendo cuando SeHun llego. Así que lo tomo y me dirijo a la encargada,
—Disculpe, ¿podría rentar este libro?

Ella me mira confundida, —Lo siento, solo podemos rentarselo a los estudiantes.

—Oh ya veo— desanimado observo el pequeño libro y cuando estoy por darme la vuelta para llevarlo a su lugar, algo o mejor dicho alguien me detiene.

El muchacho peligris toma el libro en sus manos, —Yo lo rentare por él, es mi amigo, ¿Si se puede, verdad?

La chica sonríe asintiendo y hace una ficha tomando la credencial de estudiante del chico, nervioso observo ansioso la espalda ajena y volteo buscando con la mirada a la chica pelinegra pero ella ya no está.

—Aquí tienes.

Volteo con rapidez mirando con nerviosismo la bonita sonrisa que me está dedicando, —Muchas gracias, yo... vendré a devolverlo cuánto antes.

—No te preocupes, el plazo es de una semana— dado que no agarre el libro, él lo pone entre mis manos, —¿Puedes traerlo un día antes y esperar por mi en la entrada de la escuela?

—¡S-si!— respondo alterado.

Él vuelve a sonreír, —¡Hasta entonces chico flor!— exclama yéndose con rapidez.

«¿chico flor?. Con un sonrojo y sentimiento indescriptible me marcho de la escuela.

El chico del sweater amarillo| TAEJINWhere stories live. Discover now