16.

116 4 2
                                    

Abrí mis ojos lentamente.
Ya era de día.
¿Por qué aún tenía la ropa de ayer? Nunca me dormía vestida.

Tomé mi celular, eran las ocho de la mañana.
Me levanté perezosa y salí de la habitación de huéspedes.

Oía a lo lejos un ¿Piano?
Me acerqué a las escaleras que daban al sótano, la música provenía desde abajo.
Quería intentar bajar las escaleras. Estaba caminando mejor cada vez, por lo que tomé fuerzas y bajé, tomándome mi tiempo.
Oía la voz de papá, estaba cantando.
Me acerqué a una puerta blanca. ¿Sería su estudio?

Pensé en golpear, pero no quería interrumpirlo, por lo que me atreví a abrir la puerta sin hacer ruido.

Papá estaba de espaldas a mí, sentado ante un gran piano, estaba cantando una canción triste.

Me apoyé en el marco de la puerta... El estudio era gigantesco y tenía todo tipo de instrumentos, consolas y micrófonos.

No sabía que papá podía lograr esos falsettos.
Tenía una voz preciosa.

The water is wide
I can't get over
Neither have I, the wings to fly

So, go and get me to a boat to carry both
My love and I
Must I be bound
And she go free?
Am I to love
While she don't love me?
Why should I act the childish part
And love a girl that breaks my heart?

There is a ship
Out on the sea
And loaded deep
As it can be
But not as deep
As love am I
Don't care if I
Should live or die

The water is wide
I can't get over
Neither have I, the wings to fly

So, go and get me to a boat to carry both
My love and I

To carry both
My love and I

Papá estaba cantando una canción de desamor.
¿Estaba triste?

Sigilosamente me fui de allí y subí a la cocina a preparar algo de café para él. Aún seguía en pijama y apostaba a que no había desayunado.

Luego de preparar dos tazas volví abajo y me paré detrás de él, esperando a que termine de tocar.
Cuando acabó, ví una lágrima bajar por su mejilla.

- Papá... - se sobresaltó al verme ahí -¿Estás bien?

- Dios, Vanya, me asustaste. - dijo secándose disimuladamente las lágrimas. - Sí, cariño, estoy bien ¿Cómo bajaste sin ayuda?

- Lamento haberme metido sin preguntar, es que no quería interrumpir. Te traje un café. Y bajé, como pude. - dije dándole la taza humeante.

- Gracias, cariño. Y si querías bajar al sótano me hubieras llamado, pudiste hacerte daño en las escaleras.

- No es nada, lo siento. Oye, disculpa que me entrometa, pero... ¿Por qué estás triste? - dije sentándome en un pequeño sofá que había en el estudio.

- Oh, no es nada, no te preocupes.

- ¿Entonces por qué lloras?

- La música me pone emocional... Es una canción que escribí hace muchos años. Ahora, ¿Vamos a desayunar arriba?

Asentí y papá dejó su taza para ayudarme a subir.
Me tomó en brazos para que yo no forzara mis piernas de nuevo, ya que había hecho el recorrido en escaleras tres veces y mis piernas se habían cansado.

Famous Last Words 1 • Gerard WayWhere stories live. Discover now