¡Estúpido Jeon Jungkook! #2 (Jungkook & Tn) ||+18||

18.

-¿De estos?--preguntó la chica señalando los pastelitos

-Si--respondí

-¿Algo más?--preguntó

-Un batido de fresa por favor

-¿Eso sería todo?

-Si, muchas gracias

Ella empacó todo y yo le pagué para luego tomar la bolsa, salí del la cafetería y caminé hacía la oficina de Jungkook que queda por aquí cerca, ahora que salí de clase aproveché para ir de sorpesa a visitarlo.

No hemos estado bien estos días así que haré todo lo posible por salvar mi relación con mi lindo chico.

Entré al edificio y caminé por la recepción llegando hacía dónde unas chicas que estaban en unos computadores, me acerqué a una y ella me miró atentamente.

-Buen día ¿en que puedo ayudarla?

-Buen día, vine a ver a Jeon Jungkook--respondí sonriendo levemente

-¿Tiene cita?

-No, de hecho no sabía que tengo que tener algún tipo de cita

-Entonces no se puede, lo lamento

-Bueno es que usted no entiende, yo soy su novia...--dije rascando mi nuca

-¡¿El hijo del CEO tiene una novia?!--preguntó otra de las chicas sorprendida

-Ehh si--dije y saqué mi teléfono para enseñarles mi fondo de pantalla en dónde estábamos ambos

-No puede ser--dijo la chica--creí que era soltero

-Piso tres--dijo y señaló el elevador

-Uhm gracias

Caminé hacía el elevador y oprimí el botón que tenía el número tres marcado. Las puertas del elevador se abrieron y salí de este para caminar por el pasillo. 

De repente observé al padre de Jungkook salir de una oficina y me coloqué demasiado nerviosa puesto que me da mucho miedo, además la última vez en su casa eso fue bastante incómodo.

-Tn--dijo al verme

-Señor Jeon--lo saludé y le hice una reverencia

-Supongo que has venido a ver a mi hijo--dijo y asentí

-Ahí--señaló la puerta por la que había salido segundos antes

-Gracias señor

El hombre pasó a mi lado sin decir más nada y yo pude respirar, vaya enserio que me da miedo. Seguí con mi camino llegando a la puerta de dónde había salido su padre y observé a mi Jungkook de espaldas mirando por el gran ventanal que tiene atrás de su escritorio dónde puede tener la vista de toda la ciudad.

Yo toqué la puerta un par de veces intentando captar su atención y el se giró.

-Si vas a joderme otra vez mejor...--se detuvo al ver que era yo

-Peque--dijo y se acercó a mi mientras secaba sus mejillas

-¿Por qué estás llorando?--pregunté dejando las cosas que compré sobre una mesita

-No, no estoy llorando--dijo una vez me acerqué a él

-Pero mira tus ojitos--dije acariciando su mejilla mojada

-Solo abrázame...por favor--pidió

Atrapé su cuerpo en mis brazos y el escondió su rostro en mi cuello, lo escuché llorar en mi hombro y acaricie su espalda.