Kumamon Girl [Suga&Tú]

KG: 15 (leer el anuncio debajo)

De milagro y llegó al trabajo en hora con un poco de sudor en la frente, y a lo lejos divisó a Yoongi llegar allí con un cubrebocas para pasar desapercibido, por lo cual se apresuró a ponerse el traje por encima de la ropa lo más rápido que le fue posible.

 Se dedicó a entregar folletos del restaurante que era su tarea del día por mandato del jefe y oyó unos pasos acercándose a ella más no pudo ver nada, a pesar de saber de quién se trataba. 

— Hey, Kuma — vociferó Yoongi en modo de broma — ¿Desde cuando tu cara está para el mismo lado que tu trasero? 

La cara de _____ palideció para que luego sus mejillas tomaran un tono color carmesí que, por suerte se ocultó bajo la cabeza de aquel gran oso, pero cuando fue a levantar sus brazos para darla vuelta, las manos de Yoongi fueron más rápidas y, a pesar de que estuviera curioso por saber quien estaba bajo ese traje y sabía tanto de él como sí mismo, solo dio vuelta la cabeza dejándola en el modo correcto.

_____ suspiró aliviada, siguió repartiendo folletos, pero pocas personas se lo aceptaban. 

Las calles estaban tan repletas de gente, pero como siempre en Corea todos estaban sumamente apurados y metidos en sus propios asuntos que como lo único que podían verla eran como un obstáculo para llegar al lugar de trabajo o para volver a su rutina diaria. 

Yoongi observó como la cabeza de su Kumamon favorito se inclinaba ligeramente hacia abajo y el cuerpo del oso se sentó en un banco que se encontraba por allí cerca. 

Yoongi tomó lugar a un costado de este mirando sus manos las cuales temblaban sin razón alguna, mientras que _____ se encontraba decepcionada.

Al paso que iba no podría llegar a su meta y si no alcanzaba su meta no podría ir al concierto como quería, en primera fila, porque, a pesar de ver a Yoongi seguido —que amaba hacerlo— quería ser capaz se vivir la experiencia que toda/o army anhela experimentar. 

— Sabes... — comenzó Min — no eres de muchas palabras — siguió bromeando — justo de mi estilo, sabes, podrías decirme aunque sea si eres chico o chica, quiero saber de que me estoy enamorando, aunque si eres chico no me importa — aportó rápidamente. 

Kumamon lo miró y por dentro río, se veía tan jodidamente tierno.

Se podía divisar perfectamente que en su piel blanquecina se encontraba un color carmesí que se hacía más visible, Suga estaba nervioso.

Min lamió sus labios y luego recordó para que había ido allí, comenzó a mirar para todos lados pero como no vio indicios de esa saesang volvió su vista a Kumamon quien aún lo miraba atento con miles de folletos a su lado en el banco. 

— Oh, por favor, no me mires como si te estuviera engañando, Kuma — rió acariciando la cabeza al anteriormente nombrado — bueno, en sí, es la misma cara que tienes todos los días pero que me enamora aún más — soltó una risita para arreglarlo, haciendo que sus encías se noten y mojó sus labios para seguir conversando — He venido no solo para verte, sino porque cité a una Saesang, bueno, en realidad fue Jeon, pero... la cosa es que le dije claramente de vernos aquí pero no ha venido, y, sabiendo como son las saesangs no creo que sea una, sino hubiera llegado aquí con grandes cámaras y en el estado que estuviese cubierta de pies a cabezas para no ser reconocida. 

_____ sonrió, inconscientemente la estaba esperando a ella, le gustaría haber llegado en ese papel pero... ¿Qué le diría? No podía... no podía llegar simplemente y confesarse a él. ¿O si? 

Fue tanto el tiempo que estuvo en sus pensamientos que pensó que Yoongi se había marchado, pero allí se encontraba él, mirando el cielo ya algo oscuro y estrellado. 

— Sabes Kuma... ahora que lo pienso, te pareces a la "saesang", digo, si lo hubieras querido ya hubieras publicado lo que te he contado sobre mi para ganar dinero, o sobre que vengo aquí todos los días para ganar reconocimiento, pero sin embargo... no lo has hecho, al igual que esa "saesang", no le ha pasado mi número a nadie, ni lo ha subido a las redes para ganar dinero. 

Lo último lo dijo ya parándose, acto seguido que le palmeaba la cabeza. 

_____ lo vio irse, a pasos lentos y decididos se alejó de ella y un suspiro salió de su boca, amaba a ese hombre, pero que comenzara a sospechar no era algo de lo que debería estar agradecida. En fin, quería terminar de entregar los folletos para ir a conversar con su mejor amiga sobre todo lo que había pasado, más cuando volteó a donde deberían encontrarse ya no había rastro de ello, pensó que se habían regado por alguna parte del suelo y que por los pequeños agujeritos de los ojos del oso y la noche que se hacía cada vez más presente no podía visualizarlos de manera adecuada, por lo cual retiro la cabeza del oso y respiró el aire puro secándose el sudor del rostro.

_____ no vio ningún folleto. 

Pero alguien si la vió a ella. 

Al día siguiente se extrañó al recibir un mensaje de su jefe diciendo que se tomará el día libre ya que muchas personas habían ido al restaurante al recibir todos los folletos. 

Y, entrando a Twitter y al perfil de los chicos, halló una publicación en la cual se hallaba una foto de uno de sus folletos del restaurante y estaba firmada únicamente con un "#SUGA".

Bebecines, son 925 palabras o más, todo un récord para mi, espero les haya gustado, la próxima en actualizar será Pinki Boy (a pedido de una seguidora). 

También quería invitarles a hacerme pedidos por privado para poder seguir con mis Reaccionas de Bangtan (los cuales pueden encontrar en mi perfil) 

GRACIAS POR LEERME Y LLEGAR HASTA AQUÍ.