𝓶𝓲𝓭𝓷𝓲𝓰𝓱𝓽 ;;

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Las estrellas ya llenaban completamente el ahora oscuro cielo, el viento comenzaba soplar suavemente, acariciando las verdes hojas de los árboles, su dulce silbido llenaba las avenidas de aquel lugar. La poco visible luz de los faros alumbraba delicadamente los patios traseros de la comunidad.

Y ahí estaba el, Zach Dempsey, el popular jugador de baloncesto de la preparatoria Liberty, a punto de hacer algo que nunca había hecho antes, ser honesto, sincerarse con la persona de la que estaba enamorado, sincerarse consigo mismo.

《♡》

Del otro lado estaba Alex Standall, el chico roto que había intentado suicidarse hace algunos meses; miraba al techo con las manos sobre su pecho tratando de sacar a esa persona de su cabeza para poder dormir.

De pronto, algo pequeño golpeó su ventana, interrumpiendo sus fallidos intentos de quedarse dormido, luego de nuevo, ese golpe. No quería ir hacía su ventana para recibir a quien quiera que estuviera ahí buscándolo esas horas.

¿Quién podría ser?

Caminó a su ventana sólo para verlo ahí, de pie, con flores en mano, invitándolo a bajar ¿qué demonios estaba pasando? estaba alucinando porque de lo contrario eso sería tan jodidamente extraño.

El rubio estaba en pijama, estaba casi desnudo, se vistió lo más rápido que pudo con un hoodie violeta y al notar lo despeinado que su cabello estaba tomó un beanie blanco para luego bajar casi corriendo al frente de su casa.

Hola

Uh... hola

─Ten, son para ti ─le extendió el ramo de flores, el rubio lo aceptó extrañado ─Sé que probablemente no me quieres cerca pero no quiero perder lo que sea que tengo contigo, eres importante para mi y si quieres rechazarme bien, sólo por favor permíteme seguir siendo tu amigo

─No.

─¿No? ─Alex juraba que en su mirada se veía como su corazón comenzaba a romperse, claro, lo había malentendido todo.

No... quiero decir, mierda...

No iba a esperar más, no quería desperdiciar esa noche, no cuando la persona a la que amaba había hecho todo por ir a su casa en medio de la noche, con un ramo de flores y con toda esa presencia. Acarició suavemente su mejilla y su cuello, fue acercándose con lentitud hasta que ambos se fundieron en ese dulce beso, sus labios se movieron con ritmo mientras las manos del mayor jugaron con la cintura del rubio, su cariño llenaba el ambiente, sus labios comenzando a danzar con desespero, el sabor cereza que llenaba la cavidad del menor era tan suave, tan dulce y la menta de el mayor regalaba una intensidad que el rubio amaba. Sonrieron justo como la primera vez y luego se separaron.

─¿Vamos adentro?

... Está bien.

Al llegar a la cocina el menor tomó un jarro y lo llenó de agua para colocar el ramo ahí, era tierno, sabía que el moreno era "dulce" en una relación pero no esperaba flores, no esperaba nada y mentiría si dijese que no le gustaba lo que estaba pasando, le encantaba.

¿Te gustan?

─Me gustan

─No sabía si te iban a gustar, después de todo jamás te pregunté que tipo de flores preferirías porque bueno, tal vez eso sería ¿raro? así que elegí estas porque me recordaron a ti... quiero decir, son lindas como tú ─Alex definitivamente amaba a Zach ─Eso fue muy cursi lo sie...

Shh... vas a despertar a mis padres, y sí fue cursi pero me gustan, me gustas, de verdad me gustas.

─¿Hablas en serio?

¿Crees que jugaría con algo así? ¿de verdad crees que te hubiera besado si no me gustaras? ─El más alto se quedó mirándolo como esperando a que dijera algo, claro que creía que el mejor era capaz de jugar con algo así ─Maldita sea, por supuesto que me gustas.

Y volvió a besarlo, con el mismo cariño que antes pero ahora algo fue diferente, esta vez sus manos no querían quedarse quietas. Alex tomó del cuello al mayor con delicadeza, sólo para sentirlo aún más cerca, sus manos comenzaban a viajar por su espalda, el moreno tomó al chico de las piernas con suavidad, cargándolo para luego sentarlo en la barra y acomodarse entre ellas dulcemente.

Sus bocas se movían con fervor tratando de encontrar más y más el uno del otro, se habían necesitado por tanto tiempo sin siquiera saberlo y ahora no se sentía suficiente. Los labios del mayor se movieron hacía su mandíbula con delicadeza, el rubio dejó salir un pequeño suspiro causado por las caricias de el contrario.

Za-Zach se sentía volar con cada toque de el más alto ─N-no podemos hacer esto aquí...

Oh... lo siento estaba a punto de separarse cuando el rubio envolvió sus piernas al rededor de su cintura.

Nunca dije que dejaras de hacerlo.

Zach no podía creer que todo eso estuviera sucediendo, sus pupilas estaban tan dilatadas que sus ojos se veían negros y la voz del menor salía de una manera tan sensual que podía jurar que se perdería en sus sonidos si los seguía haciendo. De repente recordó que estaba en medio de algo cuando sintió sus brazos alrededor de su cuello y entonces apretó el agarre en sus piernas, cargándolo para llevarlo a su cuarto.

Rió ante la repentina acción del mayor, era increíble como lograba borrar todo lo malo, el dolor siempre desaparecía cuando estaba junto a él y en ese momento sólo se sentía cómodo, no había estado tan cómodo en mucho tiempo pero ahora en sus brazos sí lo hacía, se sentía feliz y también se sentía tan encendido, se sentía perdido en las sensaciones que el más alto hacía aparecer, en sus manos, en sus besos; estaba tan perdido en el toque que ni siquiera se dió cuenta cuando fue acostado sobre su propia cama.

¿Qué vas a hacerme? el menor volvió a reír levantando ambas cejas y acariciando la nuca de su acompañante.

─¿Uh?... oh dios no uses eso conmigo sonrieron ─¿Qué es lo que tú quieres?

Quiero que me ayudes con esto, quiero ayudarte con eso y quiero que te quedes a dormir conmigo. Quiero que despiertes a mi lado dijo mientras acariciaba su mejilla tiernamente.

Mgh... creo que podemos cumplirte ese deseo.

Así que sí, cumplió su deseo, aquella madrugada se llenó de sus besos, de sus suspiros, de sus esencia, aquella madrugada Zach de verdad pensó que el menor se veía justo como un ángel bajo la luz de luna que se colaba por la ventana. La vida de Alex se vió como una hermosa postal, realmente se entregaron el uno al otro. Se sintieron tan amados, se sintieron como nunca antes y, es que de verdad se amaban.

























Heehee, ¡hola! por fin actualicé, publicar la nota anterior realmente me hizo darme cuenta de que mucha lee este fic aaaa y les agradezco demasiado, los quiero muchísimo 🦋
—Sunset xx 🌈


Hurry up and save me ♡ Zalex Donde viven las historias. Descúbrelo ahora