Mi Protector. {Matt Bomer}

Capitulo 23.

Hola guapuras hermosas, este capítulo se las dedico a todas ustedes y perdonen por demorar tanto.

¿Me extrañaron? yo se que no (7.7) 

Matt’s POV

 

Ya han pasado dos meses, dos meses desde que se fue Lodovica, ella ya debe de tener 8 meses de embarazo, la extraño y la perdí por mi culpa,  daría todo lo que fuera por recuperarla, dentro de un mes iré a Inglaterra, un amigo mío me dijo que está enamorado de una de sus nuevas administradoras, la empresa de llama Mikaelson, y mi amigo se llama Daniel Mikaelson. Le he contado lo que me paso y dice que me ayudar con  encontrar a mi Lodovica, mi pequeña morenita.

-Hijo, ya sal de tu habitación, pareces un niño de 8 años – dijo mi madre y era cierto, ya tenía una semana que no iba a la empresa, Clari se ocupaba de todo, pero estaba más estresada que un universitario en una competencia de matemáticas.

-Déjame – dije tapándome con las sabanas - ¿Qué quieres que haga? Mis hijos no me hablan por que Lodovica se fue, Mi hija nacerá dentro de un mes y tal vez no poder estar en su nacimiento – no pude continuar ya que comencé a llorar

-Hijo, te dije muchas veces que no la lastimaras, ¿tú crees que para mí fue lindo haberle guardado el secreto a Lodo de que tú la engañabas? Ninguna mujer se merece eso y tú lo estas pagando, perdóname por decírtelo así, pero asume las consecuencias de tus actos – dijo y salió de mi cuarto.

Ella tenía razón, yo el el único culpable y tenía que asumir las consecuencias, pero la recuperare, Lodovica volverá a mí.

Recibo una llamada de Clari y no dudo en contestar.

-¡Matt! – me grita y casi me deja sordo

-¿Qué pasa? – respondo sin ánimos

-Lodovica – inmediatamente me siento en la cama

-¿Qué pasa con ella? – pregunto emocionado

-Ella, me hablo hace unos minutos y platicamos de muchas cosas y después la convencí de que me dijera donde estaba, pero con la condición de que no te dijera a ti – dijo y callo

-¿Qué esperas? – dije desesperado

-¿Qué espero para qué? – me pregunto y sonaba algo confundida

-¡Para decirme donde está! – grite

-No te diré – se escuchó seria

-¿Por qué no? – pregunte enojado

-Porque lo juré – dijo con voz de niña chiquita

-Si no me dices donde está, le diré a mama que fuiste tú la que incendio en árbol de navidad cuando estábamos pequeños – no se escucho nada

-No te atreverías – me retó

-¡Mamá! – grité

-¿Ma… mamá está ahí? – pregunto nerviosa

-Ya voy hijo – se escuchó decir a mi madre

-Está bien, está bien, ella se encuentra en Inglaterra ¡No le digas a mamá! – colgó

-¿Qué pasa hijo? – preguntó mi madre llegando a mi cuarto

-Dile a María que prepare mis maletas, mientras me doy una ducha – dije mientras salía de la cama como rayo

-¿A dónde vas? – pregunto confundida

-Iré  Inglaterra, ahí se encuentra Lodovica – creo que después de todo mi viaje se adelantará

Lodovica’s POV

Ya han pasado dos meses y tengo 8 meses de embarazo, me entere de que Rebeca es una Mikaelson y esta de recepcionista por un castigo que le puso su hermano Daniel, ellos son tan divertidos, pero ella es una rebelde, y él es tan sabio, además es muy responsable, sin olvidar que es muy atento conmigo por lo del embarazo, me lleva a mis ultrasonidos y me cuida, me dijo que me llevaría a cenar hoy, acepte después de unas cuantas suplicas.

-¿A quién llamaste? – me preguntó Rebeca

-A una vieja amiga – le sonreí

-¿Estas lista? – me sonrió  

-¿Para qué? – me confundía, hace poco estábamos hablando que pasaría si me tiñera el pelo a rubio

-Para la cena con mi hermano boba – rio

-Ah, pues creo que sí – sonreí nerviosa

-Lodovica, solo te pido una cosa, mi hermano enserio te quiere, dale una oportunidad – suspire

-Yo también le llegue a tomar mucho cariño, es muy atento conmigo y se lo tendré siempre agradecida, tomaré en cuenta lo que me dices – sonreí tímida

-Gracias, además, me encantaría ser la sensual y guapa tía de la pequeña Leigh-Anne – reí a su comentario

-¿Lista? – preguntó Daniel entrando a mi oficina

-Ella está más que lista – dijo Rebeca contestando por mí – Anda Lodovica, ve, yo me encargare de recoger todo aquí

-Gracias – susurré y tomé mi bolso

Daniel me llevo a un restaurante hermoso, pero solo estábamos nosotros.

-¿Por qué no hay nadie? – pregunte

-Porque rente todo el restaurante para nosotros – besó mi mejilla

-Pero te debió costar mucho – le dije regañándolo

-No me importa el dinero si estoy contigo – solté una risa tímida

Después de esa pequeña e incómoda plática comenzamos a comer y después el tomo mi mano, me miró y dijo:

-Señorita Lodovica Comello, sé que hace solo dos meses la conozco, pero desde el primer momento que la vi supe que me gustaría conocerla más y no dejarla ir nunca, así que… ¿aceptaría usted ser la novia de este hombre llamado Daniel Mikaelson?

-Yo… Daniel, has sido muy atento conmigo y te he logrado tener un gran cariño, así que sí, Acepto ser tu novia – él se puso de pie, se acercó a mí y junto sus labio con los míos, formando un hermoso beso – pero estoy embarazada y…

-No me importa, ¿sabes porque?, porque amaré mucho a esta pequeña que tienes aquí – toco mi vientre

-Gracias – me besó.

Solo espero no estar cometiendo ningún error.